“ -Como te calienta que él nos mire no? “ .
Antes de que Erica pronunciara esas palabras con una sensualidad abrumadora; yo ya tenia la tanga empapada.
También tenía su concha en la cara, y mi cuerpo inmóvil, sus jugos chorreándome por la comisura de mis labios, la sentía palpitar… la sentía tan caliente como yo.
Ella apenas alcanzaba a balbucear
- haceme acabar de vuelta, Barby…
Yo solo chupaba, quería lamer toda la concha de Erica, abarcarla toda… y al mismo tiempo, no podía alejarme de su clítoris. Hermoso clítoris. Nunca había visto otro mas que el Mio, pero no hizo falta para admirar su belleza; la plenitud sexual de alguien tan dominante como Erica, desesperada por placer.
No se que me calentó mas, chuparle, darle placer; o ser sometida, dominada, atada…
Erica comenzó a temblar; podía sentir como estaba por acabar, por estallar en un orgasmo hermoso.
La verdad que era una postal hermosa, yo atada de pies y manos con dos sogas, boca arriba en la alfombra, inmóvil sin control de mi cuerpo; solo de mi lengua.
Podía sentir como las cuerdas me lastimaban, como raspaban mi piel –no me importaba- eso me hacia mojar mas y mas…
sentirme así…
Tan puta como me gritaba ella; como saber que él estaba a un costado de la habitación y podía vernos, como podía masturbarse mirando.
“ -Como me haces acabar, hija de puta! “
Ella me gritaba desaforada, mientras su mano me ahorcaba fuertemente, mientras su otra mano comenzó a frotar mi tanguita por arriba de mi sexo.
Sentía que me moría, que perdía el conocimiento. Fue tan fuerte el orgasmo que perdí la noción del tiempo, del lugar.
No sabia hace cuanto tiempo que estaba acabando así como un animal, de manera tan brutal y primitiva. Mis gritos se ahogaban contra tu concha; nunca supe si me desmaye o no. Lo último que recuerdo son tus labios recorriendo los míos, saboreando los jugos de tu propio sexo, los jugos de mi placer.
Que ganas de repetir algo asi...
1 comentarios - Como te calienta que él nos mire...
Muy exitante!
Me encanto!
Gracias por compartir