Esta historia es real.
me paso en el verano pero no me decidia a contarla.
Todo comenzo una tarde de verano.
Fuimos a pasar el dia a la casa de fin de semana de mi novia.
Allí se juntaban su madre, la Señora S, y unas amigas de la madre, entre ellas la sobrina, o sea, la prima de mi novia, que llamaremos la Chica D.
Ella tiene treinta y pocos años, y es dueña de una figura envidiable.
Una cola grande q invita a que se la toquen, unas piernas armoniosas, un vientre chato, y es dueña de unos pechos que son un sueño, redondos, firmes, levantados, y del tamaño ideal.
El dia transcurria normal, hasta que llego el momento de entrar a la pileta.
Las chicas mostraron todas sus cuerpos en bikini, y cuando la chica D le toco el turno, dejo al descubierto una cola less diminuta que se perdia entre las nalgas.
Yo no queria dejar de mirarla, pero tampoco podia ser tan obvio estando mi novia al lado.
Todos disfrutaron del agua, al rato ya me había cansado y me sente en una reposera al borde de la pileta.
Cuando llego la hora del mate y las facturas las chicas salieron una a una del agua.
Se secaron y se sentaron en el sol mientras merendaban.
Comían, se reían, charlas de mujeres, etc.
Hasta que en un momento detecto una típica conversación, que era entablada por la chica D y una amiga.
- que bien te queda esa malla! - Dijo la amiga
- gracias! - respondió la chica D.
- te deja las tetas bien formadas, donde la compraste? Porque esta es armada pero son una porquería - amiga.
La chica D le comento y explico donde quedaba el local y le dijo:
- queres probartela?
A lo que la amiga acepto el intercambio de corpiño.
En ese momento me sorprendí porque la casa no cuenta con habitaciones.
Mi suegra, la señora D, en ese momento me pide si podía hacerle un pozo para plantar una planta que se había comprado.
Que decepcion! Las chicas se dirigían a la casa y yo como un boludo debía hacer un pozo.
Me resigne y manos a la obra.
Le pregunto a mi suegra donde estaba la pala y me dice
- adentro!
Wow! Era mi oportunidad, apurando el paso pero sin hacer ruido entro a la casa y allí estaban, en un costadito.
Ambas con las tetas al aire. Me hago el sorprendido, como quien no esperaba la cosa y me quedo congelado con la boca abierta, mirando directo a las chicas en tetas.
Que tetas por favor, la amiga tenia unas tetas divinas, pero las que me volvían loco eran las de las chica D.
Siempre había querido verlas, las imaginaba e incluso fantaseaba y le había dedicado mas de una.
Pero ahora las tenia allí, desnudas y era la felicidad plena, ambas chicas se quedaron congeladas también, no atinaron ni a taparse, no se esperaban ni en lo mas mínimo mi presencia.
Las tetas de la chica D eran mortales con una leve marca del corpiño sobre su cuerpo bien bronceado.
Lo que denotaba que en mas de una oportunidad habría practicado el topless.
Unas areolas medianas, normales, de un color cobrizo, era un punto medio entre el rosado y el marrón, y unos pezones redonditos y erectos que enseguida me pusieron al palo.
Me la comía con la mirada.
Unas balbuceadas mías como queriendo excusarme, las chicas colocándose el corpiño, yo tomando la pala y saliendo en silencio.
Pareció una eternidad.
Salí al patio y me dispuse a hacer el pozo, pero como me podía concentrar con ese par de tetas en mi cabeza.
Las chicas salieron de la casa y se dispusieron a tomar sol.
De a ratos miraba de reojo. Cuando termino el pozo, me acerco a la mesa y me sirvo jugo y me siento a reponer energías.
La chica D me miraba a los ojos con cara cómplice. Yo no sabia que hacer.
Ya cuando el dia llegaba a su fin, cada una se fue vistiendo, le di la ultima mirada al culo de la chica D mientras se ponía un short y guardaba esa imagen para acompañar a las tetas en lo que seria la mejor manuela que me iba a hacer.
Al ir despidiendonos para regresar cada uno a su casa en la ciudad, cuando la chica D me saluda con un beso en la mejilla me dice al oído.
- espero que esto no salga de aca, y la próxima me toca a mi.
Me quede mudo con los ojos fuera de orbita, parecía un poste.
No sabia que pensar, lo único que sabia era la paja que me esperaba que iba a ser aun mejor.
Cada uno en su casa, yo hice lo mío.
Pero no quedo todo ahí...
Continuara
me paso en el verano pero no me decidia a contarla.
Todo comenzo una tarde de verano.
Fuimos a pasar el dia a la casa de fin de semana de mi novia.
Allí se juntaban su madre, la Señora S, y unas amigas de la madre, entre ellas la sobrina, o sea, la prima de mi novia, que llamaremos la Chica D.
Ella tiene treinta y pocos años, y es dueña de una figura envidiable.
Una cola grande q invita a que se la toquen, unas piernas armoniosas, un vientre chato, y es dueña de unos pechos que son un sueño, redondos, firmes, levantados, y del tamaño ideal.
El dia transcurria normal, hasta que llego el momento de entrar a la pileta.
Las chicas mostraron todas sus cuerpos en bikini, y cuando la chica D le toco el turno, dejo al descubierto una cola less diminuta que se perdia entre las nalgas.
Yo no queria dejar de mirarla, pero tampoco podia ser tan obvio estando mi novia al lado.
Todos disfrutaron del agua, al rato ya me había cansado y me sente en una reposera al borde de la pileta.
Cuando llego la hora del mate y las facturas las chicas salieron una a una del agua.
Se secaron y se sentaron en el sol mientras merendaban.
Comían, se reían, charlas de mujeres, etc.
Hasta que en un momento detecto una típica conversación, que era entablada por la chica D y una amiga.
- que bien te queda esa malla! - Dijo la amiga
- gracias! - respondió la chica D.
- te deja las tetas bien formadas, donde la compraste? Porque esta es armada pero son una porquería - amiga.
La chica D le comento y explico donde quedaba el local y le dijo:
- queres probartela?
A lo que la amiga acepto el intercambio de corpiño.
En ese momento me sorprendí porque la casa no cuenta con habitaciones.
Mi suegra, la señora D, en ese momento me pide si podía hacerle un pozo para plantar una planta que se había comprado.
Que decepcion! Las chicas se dirigían a la casa y yo como un boludo debía hacer un pozo.
Me resigne y manos a la obra.
Le pregunto a mi suegra donde estaba la pala y me dice
- adentro!
Wow! Era mi oportunidad, apurando el paso pero sin hacer ruido entro a la casa y allí estaban, en un costadito.
Ambas con las tetas al aire. Me hago el sorprendido, como quien no esperaba la cosa y me quedo congelado con la boca abierta, mirando directo a las chicas en tetas.
Que tetas por favor, la amiga tenia unas tetas divinas, pero las que me volvían loco eran las de las chica D.
Siempre había querido verlas, las imaginaba e incluso fantaseaba y le había dedicado mas de una.
Pero ahora las tenia allí, desnudas y era la felicidad plena, ambas chicas se quedaron congeladas también, no atinaron ni a taparse, no se esperaban ni en lo mas mínimo mi presencia.
Las tetas de la chica D eran mortales con una leve marca del corpiño sobre su cuerpo bien bronceado.
Lo que denotaba que en mas de una oportunidad habría practicado el topless.
Unas areolas medianas, normales, de un color cobrizo, era un punto medio entre el rosado y el marrón, y unos pezones redonditos y erectos que enseguida me pusieron al palo.
Me la comía con la mirada.
Unas balbuceadas mías como queriendo excusarme, las chicas colocándose el corpiño, yo tomando la pala y saliendo en silencio.
Pareció una eternidad.
Salí al patio y me dispuse a hacer el pozo, pero como me podía concentrar con ese par de tetas en mi cabeza.
Las chicas salieron de la casa y se dispusieron a tomar sol.
De a ratos miraba de reojo. Cuando termino el pozo, me acerco a la mesa y me sirvo jugo y me siento a reponer energías.
La chica D me miraba a los ojos con cara cómplice. Yo no sabia que hacer.
Ya cuando el dia llegaba a su fin, cada una se fue vistiendo, le di la ultima mirada al culo de la chica D mientras se ponía un short y guardaba esa imagen para acompañar a las tetas en lo que seria la mejor manuela que me iba a hacer.
Al ir despidiendonos para regresar cada uno a su casa en la ciudad, cuando la chica D me saluda con un beso en la mejilla me dice al oído.
- espero que esto no salga de aca, y la próxima me toca a mi.
Me quede mudo con los ojos fuera de orbita, parecía un poste.
No sabia que pensar, lo único que sabia era la paja que me esperaba que iba a ser aun mejor.
Cada uno en su casa, yo hice lo mío.
Pero no quedo todo ahí...
Continuara
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