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Cristina, la madre de mi amigo

Tengo 19 años y tengo un amigo desde hace mucho tiempo cuya madre me pone a cien y es la mujer mas atractiva que he conocido nunca.
Hace unas semanas, mi madre salio del país por trabajo y yo me hice el enfermo, para que mi madre me enviase a casa de este amigo y que no estuviese solo.
Pues bien, Cristina, la madre de mi amigo vino a buscarme y me llevo a su casa. El mismo día no pasó nada, pero llevaba años soñando con lo que iba a suceder a la mañana siguiente...
Me desperté al día siguiente y estábamos solos Cristina y yo, porque mi amigo tenia clase.
Desde la habitación se podía oír el ruido de la ducha y yo me levante de un salto, porque quería ver a esta mujer desnuda.
Al principio solo quería espiarla, verla desnuda y así cumplir mi fantasía, pero conseguí mucho mas que verla desnuda...
Empecé a mirar por la mirilla de la puerta del baño, cuando Cristina salio de la ducha. Les aseguro que el cuerpo de esta mujer era lo mas excitante que había visto nunca.
Se empezó a secar, suavemente las piernas, después paso al torso, continuo por los pechos hasta secarse el pelo. No lo podía creer, pero estaba espiando a la madre de mi mejor amigo y no sentía ninguna vergüenza.
Cuando termino de secarse, se dirigió hacia la puerta y la abrió, a mi me dio el tiempo justo para entrar en su habitación, que esta al lado del cuarto de baño y esconderme debajo de su cama.
Estaba oculto, y mi corazón latía a cien por hora porque tenia miedo a que me descubriese y me preguntaba como reaccionaria si lo hacia.
Se empezó a vestir, se puso un tanga negro realmente sexy y un sujetador a juego de la manera más sensual posible.
Yo estaba en erección desde hace ya un rato, y encima solo tenia puestos unos calzones, y en lo único que pensaba era como iba a salir de esta.
Cristina salio de la habitación y volvió al baño, y yo aproveche para salir de debajo de la cama y volver a subir al piso de arriba. Pero Cristina volvió y me vio ahí, parado delante suyo con solo unos calzones puestos y el pene erecto de la excitación que me provocaba esa mujer.
Nos miramos a los ojos, sin saber que decir, cuando paso lo que nunca imagine que pasaría.
Cristina se arrodillo ante mi y empezó a bajarme suavemente el calzón, yo la deje, y seguíamos sin decir nada.
Empezó a chuparme el pene despacio al principio, y después continuo a un ritmo mas acelerado.
No sabia que decir, la madre de mi mejor amigo me la estaba chupando y solo pensaba en disfrutar de aquello el máximo tiempo posible.
La mujer se paro un momento, se levantó y me dijo al oído:
"Que te parece si pasamos a mi habitación?"
Sin mediar palabra me llevo y me tumbo en su cama, se sentó sobre mi y se desnudo del todo, y empezamos a follar.
Le metí mi pene una y otra vez, y Cristina gemía mientras yo le besaba los pechos. Cambiamos de posición una y otra vez, nunca he hecho el amor de una forma tan apasionada.
Cuando terminamos le dije que se acababa de cumplir mi mayor fantasía, y ella me respondió que lo había pensado varias veces, pero que nunca creyó que llegaría a hacerlo.
Nos dormimos. Estuvimos un par de horas sobre su cama, juntos, y yo no podía creer que mi sueño se había hecho realidad.
Ella se fue al trabajo y cuando volvió por la noche, nos comportamos como si nada hubiese ocurrido, pero a la mañana siguiente me desperté, entré en la ducha y le volví a hacer el amor, esta vez de una manera mas salvaje y viciosa, solo pensaba en follármela tantas veces como pudiera.
Al día siguiente, Cristina me levanto y me dijo que mi madre había llamado, que volvía a la ciudad y que me tenía que llevar de vuelta a mi casa.
Cogí mis cosas, nos montamos en su coche y me dejo en mi casa.
Nos despedimos con un beso en la mejilla, pero antes de irse me susurró al oído unas palabras que nunca olvidaré:
“Nunca nadie me ha hecho el amor con tanta pasión, pero no podremos volver a hacerlo nunca más”.
No me dio tiempo a preguntarle por qué, ella se fue y yo me quedé solo, pensando si algún día volvería a verla de nuevo.
Esa mujer no se me quita de la cabeza y en lo único que pienso es si algún día volveré a hacer el amor con la mujer más hermosa que había visto nunca, y que me cambió la vida, Cristina.

3 comentarios - Cristina, la madre de mi amigo

gerchu0
Buen relato...tenes fotos de ella para verla
kal-el33 +1
no te creo una mierda ahora todos cojen con madres de amigos tias..primas..son todos cuentos para boludos