Volviendo con mi ex (I)

Mi nombre es Juan Cruz, pero me dicen Juance. El relato que les contaré a continuación fue algo que me sucedió a mi, hace ya unos años, y que sería bueno contárselo a alguien.
Todo comenzó cuando llevaba un año y medio de relación con mi novia y las cosas empezaron a tornarse un tanto extrañas. Por su parte, por el lado de ella, decía que todo estaba bien, que siempre íbamos a mejorar, que podríamos salir adelante, pero la verdad es que ya no quedaban más palabras para decir. Mi novia es un tanto antisocial por así decirlo y pues, dejarla, no podría estar en mis planes.. así que intenté seguir mi vida hacia delante.

Dos meses luego, comencé a hablar de nuevo con mi ex novia, y creo que todos sabemos que ésto no lleva a ningún lado que sea bueno.. al menos para la relación 😉
Lo cierto es que ella siempre fue una mujer que me ha volado la cabeza pero que, lamentablemente, lo nuestro nunca había funcionado. No sé cómo expresarme, pero es de esas personas que crees que son perfectas para tu vida; que encajan un cien % con lo que tú estás buscando. Si me preguntan por qué le seguí hablando sabiendo que quizá ésto no llevaría a nada bueno, es fácil... ella se había puesto de novia y yo nunca creía que lo que les voy a contar, se podría hacer realidad.

Siempre creí en la amistad entre el hombre y la mujer, y cuando yo dejé de hablar con mi ex, sentí que había perdido a alguien más que una novia. Sentí que había perdido a una persona que si las cosas hubieran terminado mejor, podríamos incluso ser amigos. Por supuesto, que a todo esto... mi novia, vamos a llamarle “Pilar”, al tener pocos amigos no permitía que yo vea a mi ex, incluso sabiendo que ninguno de los dos tendría intención alguna por ser más que amigos.

Un mes más tarde, mi ex me comunica que su novio la ha dejado. Parece ser que él le metió los cuernos a ella y, para no lastimarla, la terminó dejando. A todo ésto, en menos de una semana me dice que sus padres se están por separar. En ese momento, fue cuando ella suplicó vernos y así poder estar contenida por alguien. Desde ya, tuvimos que hacer todo a escondidas, cosa que la verdad.. nunca me ha gustado. Pero vamos.. si a todos nos gusta lo prohibido, no es así? Picarones.

El día llegó y por fin nos reencontramos luego de 3 años. Sus 20 años le estaban sentando muy bien; digamos que mide aproximadamente 1.65, piel blanca, un cuerpo esbelto, sus pechos superaban los 95. Apenas me vió, vino rápidamente hacia mi y me abrazó. Mi cuerpo ya estaba sintiendo, con todas las ganas que tenía anteriormente, de que debía hacerla mía sin lugar a dudas.

Las cosas venían bien hasta que la conversación empezó a ser, un tanto diferente, el de azul seré yo y ella en negro.

- La verdad.. extraño estar con él. Sé que me metió los cuernos, pero nunca he sido tan feliz en mi vida. Han sido los mejores 4 meses que pude haber tenido y no quiero que se terminen.
- Pero, ponete a pensar que no fue tu culpa. Él es un pelotudo que se pierde de estar con alguien como vos.
- No digo que no sea su culpa, pero algo tuve que haber hecho. En vez de quedarse conmigo, prefirió irse con una mina que tiene pinta de trola. Encima, no voy a poder encontrar otra persona que me haga tan feliz como él supo hacerlo.
- No le des bola, él es el pelotudo que se pierde de estar con una mina como vos. Pensá que quizá te dejó porque se dio cuenta la clase de chica que sos y no quería seguir lastimándote. Y si vas a encontrar otras personas, cualquiera querría estar con vos... Vos sabes que si bien lo nuestro no funcionó yo quiero que por lo menos otro pueda hacerte feliz. Y dejame decirte, a mi me encantaría poder encontrar alguien como vos nuevamente. Hoy no puedo decir que soy feliz con la relación que llevo con mi novia, y vos fuiste sin dudas lo más lindo que me pasó en toda la vida.
- Por favor, no sigas con ésto mejor... lo hemos intentado cuatro veces.. no una, cuatro, y nunca hemos tenido buena conexión.
- Qué perdemos con intentarlo? Ni vos ni yo hemos encontrado personas que encajen tanto con nosotros. Está bien, no ha funcionado, pero eso no quiere decir que no estamos a tiempo de intentarlo. Tenemos 20 años y las cosas han cambiado mucho, quiero creer, desde la última vez que nos vimos.

En ese instante y, todavía con lágrimas en los ojos, froté mi puño por sus mejillas y la besé. Al principio se negó intentando empujarme un poco pero luego cedió recordando aquellos días en los que fuimos felices. No sé porqué, pero en ese ida y vuelta comenzó a meterme la lengua y, violentamente, bajé las manos agarrando un culo como nunca lo había agarrado en mi vida.

Sabía que ésto estaba mal.. ella también lo sabía. Ya a punto de despedirnos, fue un tanto incómodo y sólo nos saludamos con un beso en la mejilla. Lo cierto era que no podíamos vernos en la calle ya que habían muchas personas del colegio de mi novia rondando por allí.

Dos semanas más tarde, mis viejos decidieron hacer un viaje por Europa. Creí que era la mejor posibilidad que tenía para pasar un tiempo con ella. Nunca me había dispuesto a hacer lo que pasó durante estas dos semanas, pero lo cierto es que sucedió, y fueron las mejores dos semanas de mi vida.

Es la primera vez que escribo un relato de éste tipo. Por ende, no sé si les gustará o no, o si quieren saber la continuación de ésto. Háganme saber en la caja de comentarios.