Mitos Pajeros

Los adolescentes (y los ya no tanto) estamos de suerte, pues todo lo malo que se suele decir de la masturbación es falso. Aunque no es tan saludable como el sexo.

Durante siglos, la medicina con la ayuda de la iglesia difundió una serie de mentiras sobre las consecuencias nefastas que la masturbación acarreaba para la salud y el desarrollo físico y mental. Éstos son algunos de los mitos más difundidos y que aún persisten en algunos círculos sociales sobre el auto-erotismo.

Provoca debilidad en los huesos
No existe ningún peligro para la salud de los huesos asociado a la masturbación. Ésta tampoco influye en el crecimiento de los adolescentes.

Causa ceguera
Hasta la fecha nadie ha perdido la visión debido al placer solitario. Antiguamente se creía que con el semen se perdían las vitaminas, como la A, necesarias para la buena vista.

Salen granos
La aparición en la nariz u otro punto del rostro de los vulgarmente llamados granos pajilleros no tiene nada que ver con haberse masturbado la noche anterior. Más bien las espinillas tienen que ver con la revolución hormonal que sufre el cuerpo durante la adolescencia.

Salen pelos en las palmas de las manos
Salvo una mutación genética, nadie tiene pelos en la palma de las manos y aún menos por acariciarse los genitales. Sinó Chewbacca y los ewoks tenían que hacer unas manuelas de cuidado.

Uno se puede volver loco
La práctica habitual del placer solitario de ningún modo puede degenerar en una esquizofrenia u otra enfermedad psiquiátrica. Si es cierto, sin embargo, que algunos trastornos mentales están asociados a una conducta masturbatoria compulsiva. Vamos, que puedes acabar enganchado como un mono.

Hace que el pene se alargue
Aunque a muchos les gustaría que esto fuera verdad, lo cierto es que las dimensiones del miembro viril están determinadas genéticamente y sólo se pueden manipular mediante cirugía y alargadores mecánicos.