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Engaño otoñal

Hola a todos, les traigo una producción conjunta con @erebo1984, espero que la disfruten

Primera parte, lluvia y llanto



Ayer tuve una pelea con Mario, mi marido. Trabajo en un gimnasio, doy clases de aerobic por la mañana y de modeladora por la tarde. La pelea fue porque me quiero comprar un auto, aclaro que con mi plata, gano bastante bien y no gasto en pavadas. Según él para lo que quiero el auto es para salir a atorreantear con las "trolas del gimnasio". Sus celos son enfermizos, si bien con mi actividad tengo trato con muchos hombres y estoy bastante apetecible, eso no quiere decir que sea una atorranta.

En fin, quedamos bastante para la mierda y él se fue a trabajar en su auto, él si tiene. Trabaja en un hospital, es encargado de enfermería en terapia intensiva y tiene dos guardias nocturnas a la semana de las que reniega porque tiene que bancarse a las/los estudiantes que hacen guardia todas la noches y que según dice lo que menos les importa es aprender. "No se para que los dejan venir si lo único que hacen es joder" reniega siempre.

Hoy al despertarme tenía cargo de conciencia porque estuve bastante agria durante la discusión así que preparé mi bolso temprano y me fui para el hospital a invitarlo a desayunar antes de ir al gimnasio.
La mañana estaba horrible, esos días de otoño en los que no se sabe si va a lloviznar todo el día o a media mañana sale el sol y te hervís con tanta humedad pero allá fui, tome el tren y el colectivo que me deja justo en el hospital pero como de costumbre se atrasó todo y llegué justo a la hora en que Mario sale de su turno.

Por temor a no encontrarlo, encaré directo a la salida que da al estacionamiento y cuando me acerco lo veo salir... junto con una de esas, según él "pendejas de mierda que porque no se quedan en su casa"... Muy juntos compartiendo el paraguas y oh sorpresa mía van derecho al auto... lo que nunca hace conmigo le abre la puerta muy gentilmente y de pasada le da un chirlo en el traste. Da la vuelta al coche, sube, arranca el motor y... se estira sobre ella y le pega un beso (más que beso un chupón...) de aquellos.
Salí de ahí casi corriendo sin que viera, en realidad poco le importaba lo que pasaba fuera del auto. Corrí sin saber muy bien para donde hasta que llegué a una plaza y me senté a llorar... en eso suena el celular... un mensaje... de él: "No llegó el relevo vuelvo tarde".
Listo... nada más... Ese mismo mensaje lo debe tener grabado porque me ha llegado al menos dos veces al mes en el último año.
La llovizna era más persistente, ya molestaba así que me levante y comencé a correr por la plaza, primero trotando... cada vez más rápido... cuando llegué a una zona con aparatos de esos que hay en algunas plazas para hacer ejercicios, como una autómata, los usé todos, con todas mis fuerzas, casi como poseída. Entre la luvia que seguía, mi transpiración y mis lágrimas, estaba hecha sopa. Volví al banco donde dejé el bolso y para mi sorpresa todavía seguía ahí pero como una tarada lo había dejado abierto así que estaba todo tan empapado como yo. Me senté y me largué a llorar despacio, con la cabeza hacia atrás y las lágrimas saliendo despacio, sin escándalo.

-Perdón, hola, disculpá que me meta pero... yo tengo mi oficina justo ahí enfrente y te veo hace rato matándote a la carrera y con ejercicios y con esta lluvia y más que está refrescando, te vas a enfermar.
Se trataba de un hombre de unos treinta, bien vestido y debajo de un paraguas.

-Por otro lado al acercarme veo que llorás desconsoladamente, no se cual es el problema pero me parece que ya te castigaste bastante. No lo tomes a mal, pero porque no te cruzas a mi oficina, te secás y calentás un poco y llamamos a alguien para que venga a buscarte. Podemos preparar un café o lo que quieras.
Bueno, bueno, bueno, existe alguien tan amable o me está haciendo el verso y me quiere levantar... Mal no está y yo tengo una mezcla de odio, bronca y no se que más que mejor me cuido, donde me siga tratando con esta dulzura no aguanto y...

Y por la cabeza de nuestro héroe que pasaba?

Qué buena tiene que estar esta mina para que mojada y llorosa como está siga siendo un bombón!
O ha tenido una desgracia familiar o algún guacho la jodido bien jodida. La verdad es que en cualquiera de los dos casos me muero por servirle de consuelo...

-No tengas miedo, yo me llamo Jorge Bustos, en la entrada de la oficina está mi nombre y de la empresa, por otro lado en un rato viene mi socio. Vení, te secás, tomás algo caliente y esperás que termine de llover.
Y bueno, que peor puedo estar, aparte con la facha que debo tener no creo que se le ocurra ninguna idea perversa y la verdad es que estoy temblando de frío.

-Está bien, vamos, pero no te hagas el loco, me llamo Susana…

Link a la segunda parte:http://www.poringa.net/posts/relatos/2306182/Engano-otonal-final.html

9 comentarios - Engaño otoñal

danymaguna +2
👏 👏 👏 👏 👏 👏 👏 👏 👏 muy bueno 👏 👏 👏 👏 👏
masitasexxx +1
me encantó, vemos la otra parte
tiradoleon +1
muy bueno, interesante se ve interaesante gracias voy a la segunda parte.
tolkienlewis +1
me dejaste intrigadisimo ya sigo con la segunda parte 😊
Lady_GodivaII
gracias por pasar!