Cuando vi que mi novio estaba mirándonos no sabia que hacer, automáticamente mire a Hernan, que nose porque en vez de empezar a dar explicaciones a su hermano me agarro y me paro pegada a el, mi espalda pegada a su pecho.
Me pego fuerte en el culo y le dijo a Pablo
-Como le gusta que la cojan a tu mujer- yo no podía creer lo que estaba pasando
-Ah, si? – dijo el, -sabia que le gustaba coger, pero no asi…- y la mirada de su cara cambió de sorpresa a perversión, me miró por debajo de la cejas y sabia que se iba a aprovechar de mi falta.
Se acerco a mi, yo seguía con el culo pegado al miembro de mi cuñado, sentía como se iba endureciendo, me agarro la cara de la mandibula
-asique te gusta que cojan duro, vamos a ver de que sos capaz- esas palabras me dieron un poco de miedo pero a su vez me calentó la idea de tener tres vergas para mi sola, tres hombres con ganas de cojerme duro.
Me pusieron nuevamente en el sillon, arrodillada de forma que mi pecho apoyaba en el respaldo y mi culito quedaba al descubierto para que le hagan cualquier cosa. Mi novio de la metió en la boca sin preguntar, y por detrás alguien, nose cual de los dos, me lamia toda, pasaba la lengua por el clítoris, me estremecía de placer, subia hasta meter la meterla dentro de mi ano, estaba mojada a mas no poder.
Después de unos minutos de estar así Pablo se colocó debajo mio
-No sabia que te gustaba coger asi- me dijo mientras metia su pene erecto en mi vagina
-si, me gusta…- le dije casi en un gemido, Hernan, mi cuñado me la metió por el culo, pegué un gemido de placer, mis orificios ya estaban dilatados de la cogida que había tenido antes. Me pegaban chirlitos cada tanto para marcan su control, me decían como me estaban cogiendo y lo bien que me sentaba.
- Como me calienta que seas tan puta- me decía Pablo, no sabia como tomarlo, pero la verdad era que estaba siendo penetrada por mi novio y mi cuñado a la vez.
Mientras me estaban bombeando los dos, Francisco se pajeaba al costado del sillon mirando, cada tanto se paraba y la chupaba un rato, tenia un pene tan rico!
Los dos me terminaron el culo, uno y despues el otro, Francisco me terminó en la boca, estaba llena de leche, había olor a sexo en la casa, y yo extasiada de sexo, Pablo me la chupó unos minutos y le acabé en la cara también.
Solo nos quedaba un dia de vacaciones…. Y sabía que iba a ser bueno.
Me pego fuerte en el culo y le dijo a Pablo
-Como le gusta que la cojan a tu mujer- yo no podía creer lo que estaba pasando
-Ah, si? – dijo el, -sabia que le gustaba coger, pero no asi…- y la mirada de su cara cambió de sorpresa a perversión, me miró por debajo de la cejas y sabia que se iba a aprovechar de mi falta.
Se acerco a mi, yo seguía con el culo pegado al miembro de mi cuñado, sentía como se iba endureciendo, me agarro la cara de la mandibula
-asique te gusta que cojan duro, vamos a ver de que sos capaz- esas palabras me dieron un poco de miedo pero a su vez me calentó la idea de tener tres vergas para mi sola, tres hombres con ganas de cojerme duro.
Me pusieron nuevamente en el sillon, arrodillada de forma que mi pecho apoyaba en el respaldo y mi culito quedaba al descubierto para que le hagan cualquier cosa. Mi novio de la metió en la boca sin preguntar, y por detrás alguien, nose cual de los dos, me lamia toda, pasaba la lengua por el clítoris, me estremecía de placer, subia hasta meter la meterla dentro de mi ano, estaba mojada a mas no poder.
Después de unos minutos de estar así Pablo se colocó debajo mio
-No sabia que te gustaba coger asi- me dijo mientras metia su pene erecto en mi vagina
-si, me gusta…- le dije casi en un gemido, Hernan, mi cuñado me la metió por el culo, pegué un gemido de placer, mis orificios ya estaban dilatados de la cogida que había tenido antes. Me pegaban chirlitos cada tanto para marcan su control, me decían como me estaban cogiendo y lo bien que me sentaba.
- Como me calienta que seas tan puta- me decía Pablo, no sabia como tomarlo, pero la verdad era que estaba siendo penetrada por mi novio y mi cuñado a la vez.
Mientras me estaban bombeando los dos, Francisco se pajeaba al costado del sillon mirando, cada tanto se paraba y la chupaba un rato, tenia un pene tan rico!
Los dos me terminaron el culo, uno y despues el otro, Francisco me terminó en la boca, estaba llena de leche, había olor a sexo en la casa, y yo extasiada de sexo, Pablo me la chupó unos minutos y le acabé en la cara también.
Solo nos quedaba un dia de vacaciones…. Y sabía que iba a ser bueno.
4 comentarios - Fin de semana caliente -parte 2-