La mejor amiga de mi vieja (real) EP.1

Hace años que no sabía nada de Susana. Había pasado mucho tiempo de aquellos años compartidos en familia, y en el cual yo era un adolescente con todo por descubrir.

Mis padres se juntaban con Su y el marido, eran grandes amigos. En esa época ella bastante mas joven que mi madre, y era realmente hermosa. Yo estaba perdidamente enamorado de ella en silencio, y ella me trataba como a un niño, lo que era.

Con el tiempo la vida nos separó pero igual seguí teniendo noticias de Su... Supe que no era tan santa esposa como aparentaba y que aprovechaba el trabajo del infeliz de su marido para sus escarceos amorosos. Hasta llegué a enterarme que un amigo mío se la había volteado. No podía creer que Susana fuera al final una reverenda puta.

Ayer recibí un mensaje de ella. Tantos años después!

"Hola Poro, soy Su, te acordás?"

Me excité mucho al leer el mensaje...

" Te cuento que con mi marido decidimos invitarte a casa a pasar unos días, te extrañamos tanto"

Busqué en Face y encontré a una yegua madura hermosa, se mantenía espléndida mientras el marido era un gordo tremendamente desagradable...

" Hola Su!, qué alegría! Por mi encantado, pero ya no soy aquel niño...ajaja!"

" Ya sé..siempre te sigo, te convertiste en un hombre hecho y derecho"

" Me encantará ir, aunque tiene que ser en días de semana" argumenté esto sabiendo que el pobre diablo del esposo trabajaba como un condenado en la semana.

" Bueno, ya te preparo tu habitación... besitos"

A la semana siguiente llegué cansado del viaje y me recibieron como a un rey, con un asado de antología, buen vino y postres caseros que ella misma había preparado.

Charlamos hasta altas horas de la noche y nos acostamos.

A la mañana siguiente, Su me despertó con un mate riquísimo que llevó a mi cama... Estaba espléndida. Se sentó a un lado de la cama y conversamos un largo rato mientras mateábamos.

Sorpresivamente, mientras charlabamos le apoyé la palma de mi mano en su pierna y empecé a acariciarla suavemente. La puta hizo como si nada. Me comentó que Raúl no vendría hasta la tarde y que teníamos todo el día para disfrutar...Que pensara en la ducha qué tenía ganas de hacer.

Me fui al baño con la pija al palo, la idea de poder cojerme a esa yegua de mi infancia me enloquecía.

Al salir de la ducha me percaté de que no había toallas, con lo cual llamé a mi amor imposible.

Su entró sin dudarlo al baño y me alcanzó la toalla mirándome a los ojos, sin inmutarse ante mi cuerpo desnudo y mi verga venosa como una estaca.

- Poro... dale secate que te espero en la cocina- me susurró mientras me daba un beso en la mejilla, tan maternal...


En la cocina olía a torta recién horneada y a cigarrillo y café... Hermosos olores.

Con la misma toalla anudada en mi cintura, me senté frente a ella y nos dispusimos a desayunar como Dios manda.

-Su, estás hermosa...

-Gracias Poro...un poco más vieja

-No! te mantenés muy bien..me tenés que contar tu secreto...jajaa, porque tu marido está arruinado jajaja

-Ay! que malo..jajaja Sí, el no se cuida como yo...

- Realmente preciosa...- insistí

-Gracias Poro, vos también! te has convertido en un hombre de verdad- dijo mientras recorría mi cuerpo con sus ojos rasgados de puta mamona.

-Fumás?- le dije acercándole un cigarrillo encendido...

-Ajá..gracias

-Qué placer no? desayunar así con el amor de mi adolescencia...

-Poro!!! qué decis loco??

- Sí Su...! me volvías loco, nunca me animé a decírtelo

- Jajaja, me estás tomando a la chacota...

- No, te lo juro...- Dije mientras dejaba caer el toallón a mis pies y mostraba mi pija a punto de explotar- lo ves?

-Ufff...increíble bebé... cómo tenés eso tan grande! jajaja...

-Si, fue creciendo con los años hasta convertirse en esto...jajaja

-Dios mío! pero es muy grande no- preguntó mientras con la mano agarró el nabo por debajo de los huevos, observándolo con detenimiento

-Sí Su, estoy tan alzado...

-Habrá que hacer algo... Raúl no puede verte así.

-Qué se te ocurre Su?- pregunté mientras acercaba mi boca a sus labios y la besaba apasionadamente...

- Mmmmmah! No Poro...soy una mujer casada!

-Pero si sé que te convertiste en una puta infiel- afirmé mientras obligaba a arrodillarse sobre la toalla y con decisión le introducía mi pija en la boca, con fuerza...

-Mmmaaaaaaghhhh.... No....aghhhhh


(Continuará...)