Me hago el puto para garcharme a todas (Episodio 1)

Tengo 22 añitos y soy la única persona de este edificio que vive sola. Es un barrio de de clase media y sencilla, y por la mañana, quedo sólo rodeado de las vecinas...

Al principio me preguntaban cómo que un muchacho tan apuesto no tenía novia y de golpe se me ocurrió una idea sencilla pero no por eso menos buena. Puse voz de pito y dije: - Ay! porque me gustan los muchachoooos!

El chisme se difundió rápidamente y el camino estaba allanado, todos los maridos del barrio no tenían dudas de que yo era un terrible comilón.

Me hice llamar Alex, y era frecuente que mis "amigas", las vecinas se pasaran a tomar café y fumar por la mañana.

Siempre caía alguna visita.

La primera en visitarme y mi más cercana "amiga" fue Olga (ver: http://www.poringa.net/posts/relatos/1674922/Olga_-la-madre-de-mi-mejor-amigo-_Episodio-1_.html)


Le encantaba tomar café y fumar a la muy puta. Nos sentábamos en el sofá, y nos disponíamos a chusmear.

Era hermoso cómo se vestía la hija de puta, de entrecasa. Shorts bien apretados, suecos altos y remera de mangas cortas ajustadísima que resaltaba los hermosos globos que imaginaba morenos y sabrosos.

Yo habitualmente la esperaba con mi salida de cama de seda...como un verdadero puto.

Poco a poco íbamos ganando confianza y éramos como dos amigas de toda la vida. Hacíamos chistes, nos abrazábamos, etc.

Un día la recibí completamente desnudo explicándole que me iba a duchar. Se sorprendió sólo un poco al verme, pero enseguida me dijo: - Es tu casa, tenes que andar cómodo!

Al salir ya me quedé como dios me trajo al mundo...


A partir de ese día, cada mañana era normal que pasáramos largas horas en el sofá fumando y tomando café, yo desnudo y ella completamente habituada a mi costumbre.

Un día empezaron las confesiones de lo puta y calentona que era, y que necesitaba cojer todo el rato, que le encantaba la pija...etc

No pude disimular una erección monumental a lo que ella enseguida reaccionó: -Alex! se te está poniendo dura! ajaja

- Es que hablando de tanta pija Olguita, me calenté- dije disimulando...

- Jajajaa, y tienes una buena verga eh! mmmm qué desperdicio por favor!!!!- exclamó la puta.

- Si, no? Las dos calientes como putas!! cómo podríamos hacer?- pregunté pícaramente...

-Mmmmm, no sé..., me imagino que si cerramos los ojos, cada uno puede estar con quien quiera- propuso la yegua madura- querés que juguemos? Total, estamos aburriditas...jajaja

- Sí, podríamos probar, no sé- respondí dubitativo cerrando los ojos y reclinandome en el sofá

- Alex, imaginá que esta boca es de uno de tus noviecitos...- dijo mientras se arrodillaba a mis pies- Y yo, que esta hermosa pija es de un macho hijo de puta que me quiero voltear...

Sin más rodeos, introdujo mi pija venosa y húmeda en su boca y empezo a succionar lentamente, alternando con el cigarrillo que aún tenía encendido.

Olga era una gran devoradora de pijas, lo sabía y mi truco estaba funcionando a la perfección.

(Continuará...)