Prácticamente no he posteado aquí, pero en esta ocasión me animaré a mi primera experiencia con un hombre, la cual tuve hace algunos años:
Soy del Distrito Federal (México), tengo 24 años; soy delgado, mido 1.76, cabello castaño claro, no soy todo un modelo pero tampoco un adefesio, la verdad es que no me fue bien en la repartición de pija; es… digamos: discreta; en cambio creo que tengo buen y firme trasero
Me considero Heteroflexible… creo, pero la verdad es que siempre he sido morboso y curioso.
Lo que les quiero contar sucedió hace justo tres años y es 100% real, yo acababa de cumplir 21 años, y estaba en un receso de estudios, así que trabajaba en una tienda grande en un centro comercial del norte de la ciudad.
Tengo un amigo que se llama… digamos que Roberto, somos amigos desde la preparatoria, el es un poco mas alto que yo, hace ejercicio constantemente por lo que tiene buen cuerpo y desde que lo conozco ha sido muy noviero, siempre poniéndole el cuerno a sus novias, y con un don de gentes increíble, establecimos desde el inicio una buena amistad, salíamos a bares, o a bailar… el casi siempre se enchufaba con alguna chica y yo casi siempre acababa dejándolo en algún lugar y llevándome su carro.
Un día salimos a un bar y sorpresivamente Roberto no ligo, la noche fue mala por que casi no había chicas, y el ambiente estaba aburrido, así que le sugerí a Roberto que fuéramos a mi casa a Jugar Playstation; el accedió.
Vivo solo desde los 18 años, asi que al llegar a la casa, sacamos unas cervezas que habíamos comprado y pusimos música y nos pusimos a echar unas retas en el Fifa. Como a eso de las 12 de la noche nos hartamos y decidimos ver televisión, le pusimos en un canal en el que había una de esas películas de softporn que pasan a veces ya entrada la noche.
Realmente siempre había sentido la curiosidad de estar con un hombre, pero nunca había visto a mi amigo de esa manera, hasta esa noche…
No se si fueron las cervezas (3 cada uno) o la película pero el caso es que de pronto me sorprendí a mi mismo con una erección y mirando la entrepierna de Roberto con cierta lujuria, pero por supuesto, no dije nada.
Seguimos viendo la película, mientras bromeábamos sobre lo que sucedía en la pantalla pude notar que Roberto se acomodaba el pantalón en una clara muestra de que también estaba excitado; así que le dije:
-Wey, ¿Qué te pasa? No me digas que estas caliente.
-Pues la verdad si, así que mejor cámbiale por que si no vamos a empezar a hacer joterias.
-Jajajajaja No… mejor le cambio (Dije yo, un poco frustrado por dentro)
- No… déjale, (me dijo Roberto), esta buena…
Deje la televisión sin cambiarle, yo estaba ardiendo, con una erección enorme y solo imaginaba ser la chica de la película mientras era penetrada por el chico; después de un rato Roberto me dijo:
-Oye, la verdad es que si me calentó, mejor voy al baño a jalármela para descargar…
-¿Y me estas avisando? (le conteste en broma)
Roberto se levanto y justo cuando estaba por cerrar la puerta del baño, le grite un tanto en broma y un tanto en serio:
-¿Quieres que te ayude?
La verdad es que nunca imagine que Roberto lo tomaría en serio, por que así de pronto volvió a abrir la puerta y se asomo diciendo:
-¿Qué?
-Que si quieres que te ayude (repetí, en tono burlon)
Roberto se me quedo viendo fijamente como analizando si estaba bromeando o no, y yo le dije:
-Ya wey… vete a jalártela
Roberto se metio al baño y cerro la puerta, pero como a los 20 segundos volvió a salir y se acerco lentamente, deteniéndose de pie y frente a mi poniéndome su paquete enfrente (yo estaba aun sentado en el sofá mirando la peli)
-¿Qué? (Le pregunte extrañado)
-¿Quieres jalármela tu?
-No chingues… y ya siéntate…
-Vas… si quieres jalármela te dejo…
Yo me quede en silencio mirándolo hacia arriba, con su bulto frente a mi… Roberto noto mi indecisión y que seguramente me ruborice, por que me dijo:
-En serio… si quieres te doy permiso… tu sabes que quedaría entre nosotros.
A mi me temblaban las manos, y sentía un inmenso calor desde adentro, pero al mismo tiempo tenia un morbo que no podía con el, así que sin pensarlo mucho me enderecé sobre el sofá y lentamente puse la palma de mi mano sobre el pantalón de Roberto, sentía que la mano me temblaba.
Cuando posé mi mano sobre su pantalón pude sentir inmediatamente su miembro duro y grande (como les decía, la verdad es que yo la tengo muy chica, así que me sorprendí), lo acaricié unos momentos por encima del pantalón mientras Roberto cerraba los ojos.
Entonces empecé a buscar el zipper, se lo baje y meti mi mano en su pantalón buscando ese miembro duro, lo saque por la bragueta y empecé a tocarlo suavemente rodeándolo con la mano; levante la mirada y vi que Roberto seguía con los ojos cerrados. Yo estaba super nervioso, no podía creer que tenia un pene en mi mano, era un pene grande y grueso, bien circuncidado. Yo sentía que sudaba como nunca, entonces volví a mirar a Roberto y ahora si me veía fijamente mientras lo masturbaba muy despacio.
-¿Te gusta? (le dije)
-Si… ¿a ti?
-Si
Entonces sentí la mano de Roberto sobre mi cabello, claramente lo hacia con la intención de acercar mi cara a su pene.
-Wey… (le dije con la voz entrecortada) no quiero que pienses…
-No… (me interrumpió) no voy a decir nada.
-¿En serio?
-Si, en serio
Yo me sentía transformado, me sentía como una nenita rogándole un dulce a un adulto. Me volvi a acomodar para acecarme su pene a la boca y comencé por besar la cabeza con los labios cerrados; yo estaba como en un viaje ¡Tenia un pene en mis manos y a punto de metérmelo a la boca!. Lentemente fui abriendo un poco mas la boca e introduciéndome mas su pene, jugando un poco con la lengua. Roberto se desabrocho el pantalón y me pidió que me retirara mientras se quitaba la ropa
Volvió a colocarse frente a mi y yo lo tome por la cadera mientras chupaba esa hermosa verga. El me miraba y tocaba mi cabeza, como tratando que no la sacara de mi boca, la verdad es que en ningún momento me arquee como he visto en otros relatos.
Seguí mamandosela, yo escuchaba leves gemidos cuando usaba mi mano para jalársela al mismo tiempo que succionaba, cuando de pronto sentí como si se empezara a hinchar su pene, y sus gemidos empezaron a ser un poco mas fuerte, y me dijo: Me voy a venir!!!, yo empecé a chupar mas rápido y de pronto sentí una descarga caliente en mi boca, que me llego hasta la garganta… un poco de leche empezó a escurrir por la comisura de mis labios pero seguí chupando, entonces cuando sentí que ya había terminado de eyacular, me lo tragué sin sacarme su verga de mi boca.
Fue un sabor raro, no malo, solo… distinto.
Me retire mientras limpiaba con mis manos mis labios, y el se tendió en el sillón desnudo de la cintura para abajo.
Le pregunte que si estaba bien… me dijo -Si… muy bien,
Y nos quedamos así, sentados en el sillón sin decir nada un buen rato.
Ese día no paso nada mas con Roberto, pero por supuesto, esta historia continuará en otro relato.
Acabo de abrir mi cuenta de twitter asi que síganme: @Sexambidiestro
Soy del Distrito Federal (México), tengo 24 años; soy delgado, mido 1.76, cabello castaño claro, no soy todo un modelo pero tampoco un adefesio, la verdad es que no me fue bien en la repartición de pija; es… digamos: discreta; en cambio creo que tengo buen y firme trasero
Me considero Heteroflexible… creo, pero la verdad es que siempre he sido morboso y curioso.
Lo que les quiero contar sucedió hace justo tres años y es 100% real, yo acababa de cumplir 21 años, y estaba en un receso de estudios, así que trabajaba en una tienda grande en un centro comercial del norte de la ciudad.
Tengo un amigo que se llama… digamos que Roberto, somos amigos desde la preparatoria, el es un poco mas alto que yo, hace ejercicio constantemente por lo que tiene buen cuerpo y desde que lo conozco ha sido muy noviero, siempre poniéndole el cuerno a sus novias, y con un don de gentes increíble, establecimos desde el inicio una buena amistad, salíamos a bares, o a bailar… el casi siempre se enchufaba con alguna chica y yo casi siempre acababa dejándolo en algún lugar y llevándome su carro.
Un día salimos a un bar y sorpresivamente Roberto no ligo, la noche fue mala por que casi no había chicas, y el ambiente estaba aburrido, así que le sugerí a Roberto que fuéramos a mi casa a Jugar Playstation; el accedió.
Vivo solo desde los 18 años, asi que al llegar a la casa, sacamos unas cervezas que habíamos comprado y pusimos música y nos pusimos a echar unas retas en el Fifa. Como a eso de las 12 de la noche nos hartamos y decidimos ver televisión, le pusimos en un canal en el que había una de esas películas de softporn que pasan a veces ya entrada la noche.
Realmente siempre había sentido la curiosidad de estar con un hombre, pero nunca había visto a mi amigo de esa manera, hasta esa noche…
No se si fueron las cervezas (3 cada uno) o la película pero el caso es que de pronto me sorprendí a mi mismo con una erección y mirando la entrepierna de Roberto con cierta lujuria, pero por supuesto, no dije nada.
Seguimos viendo la película, mientras bromeábamos sobre lo que sucedía en la pantalla pude notar que Roberto se acomodaba el pantalón en una clara muestra de que también estaba excitado; así que le dije:
-Wey, ¿Qué te pasa? No me digas que estas caliente.
-Pues la verdad si, así que mejor cámbiale por que si no vamos a empezar a hacer joterias.
-Jajajajaja No… mejor le cambio (Dije yo, un poco frustrado por dentro)
- No… déjale, (me dijo Roberto), esta buena…
Deje la televisión sin cambiarle, yo estaba ardiendo, con una erección enorme y solo imaginaba ser la chica de la película mientras era penetrada por el chico; después de un rato Roberto me dijo:
-Oye, la verdad es que si me calentó, mejor voy al baño a jalármela para descargar…
-¿Y me estas avisando? (le conteste en broma)
Roberto se levanto y justo cuando estaba por cerrar la puerta del baño, le grite un tanto en broma y un tanto en serio:
-¿Quieres que te ayude?
La verdad es que nunca imagine que Roberto lo tomaría en serio, por que así de pronto volvió a abrir la puerta y se asomo diciendo:
-¿Qué?
-Que si quieres que te ayude (repetí, en tono burlon)
Roberto se me quedo viendo fijamente como analizando si estaba bromeando o no, y yo le dije:
-Ya wey… vete a jalártela
Roberto se metio al baño y cerro la puerta, pero como a los 20 segundos volvió a salir y se acerco lentamente, deteniéndose de pie y frente a mi poniéndome su paquete enfrente (yo estaba aun sentado en el sofá mirando la peli)
-¿Qué? (Le pregunte extrañado)
-¿Quieres jalármela tu?
-No chingues… y ya siéntate…
-Vas… si quieres jalármela te dejo…
Yo me quede en silencio mirándolo hacia arriba, con su bulto frente a mi… Roberto noto mi indecisión y que seguramente me ruborice, por que me dijo:
-En serio… si quieres te doy permiso… tu sabes que quedaría entre nosotros.
A mi me temblaban las manos, y sentía un inmenso calor desde adentro, pero al mismo tiempo tenia un morbo que no podía con el, así que sin pensarlo mucho me enderecé sobre el sofá y lentamente puse la palma de mi mano sobre el pantalón de Roberto, sentía que la mano me temblaba.
Cuando posé mi mano sobre su pantalón pude sentir inmediatamente su miembro duro y grande (como les decía, la verdad es que yo la tengo muy chica, así que me sorprendí), lo acaricié unos momentos por encima del pantalón mientras Roberto cerraba los ojos.
Entonces empecé a buscar el zipper, se lo baje y meti mi mano en su pantalón buscando ese miembro duro, lo saque por la bragueta y empecé a tocarlo suavemente rodeándolo con la mano; levante la mirada y vi que Roberto seguía con los ojos cerrados. Yo estaba super nervioso, no podía creer que tenia un pene en mi mano, era un pene grande y grueso, bien circuncidado. Yo sentía que sudaba como nunca, entonces volví a mirar a Roberto y ahora si me veía fijamente mientras lo masturbaba muy despacio.
-¿Te gusta? (le dije)
-Si… ¿a ti?
-Si
Entonces sentí la mano de Roberto sobre mi cabello, claramente lo hacia con la intención de acercar mi cara a su pene.
-Wey… (le dije con la voz entrecortada) no quiero que pienses…
-No… (me interrumpió) no voy a decir nada.
-¿En serio?
-Si, en serio
Yo me sentía transformado, me sentía como una nenita rogándole un dulce a un adulto. Me volvi a acomodar para acecarme su pene a la boca y comencé por besar la cabeza con los labios cerrados; yo estaba como en un viaje ¡Tenia un pene en mis manos y a punto de metérmelo a la boca!. Lentemente fui abriendo un poco mas la boca e introduciéndome mas su pene, jugando un poco con la lengua. Roberto se desabrocho el pantalón y me pidió que me retirara mientras se quitaba la ropa
Volvió a colocarse frente a mi y yo lo tome por la cadera mientras chupaba esa hermosa verga. El me miraba y tocaba mi cabeza, como tratando que no la sacara de mi boca, la verdad es que en ningún momento me arquee como he visto en otros relatos.
Seguí mamandosela, yo escuchaba leves gemidos cuando usaba mi mano para jalársela al mismo tiempo que succionaba, cuando de pronto sentí como si se empezara a hinchar su pene, y sus gemidos empezaron a ser un poco mas fuerte, y me dijo: Me voy a venir!!!, yo empecé a chupar mas rápido y de pronto sentí una descarga caliente en mi boca, que me llego hasta la garganta… un poco de leche empezó a escurrir por la comisura de mis labios pero seguí chupando, entonces cuando sentí que ya había terminado de eyacular, me lo tragué sin sacarme su verga de mi boca.
Fue un sabor raro, no malo, solo… distinto.
Me retire mientras limpiaba con mis manos mis labios, y el se tendió en el sillón desnudo de la cintura para abajo.
Le pregunte que si estaba bien… me dijo -Si… muy bien,
Y nos quedamos así, sentados en el sillón sin decir nada un buen rato.
Ese día no paso nada mas con Roberto, pero por supuesto, esta historia continuará en otro relato.
Acabo de abrir mi cuenta de twitter asi que síganme: @Sexambidiestro
8 comentarios - Primera experiencia con un hombre (Gay)
Ya te estoy recomendando a mis amigotas cross para que lean tus relatos y te llenen de puntos.
Cosa que haré cuando recargue 🙂