Esta historia comenzó hace un par de años, mi amigo siempre tuvo debilidad y consiguió estar con mujeres mayores a él, desde muy pendejo, alguna casada,la mayoría separadas. Su primera experiencia fue cuando tenía 20 años y trabajaba con una mujer que tenía 40, pero eso es para otro momento.
Todo comenzó alrededor de 3 años. Mi amigo se dedica a reparar computadoras, dar clases de computación, y todo lo relacionado con el tema, y por lo general lo hace a domicilio; porque lo sigue haciendo. Siempre trabajo por recomendaciones. Hasta que una de esas fue con una señora, en ese momento, de 59 años. La señora era casada o estaba en pareja con un señor que trabajaba y estaba poco y nada en su casa. Era del estilo de mujer que se consideraba "retirada".
Era invierno, el había combinado telefónicamente pasar por su casa a ver el problema que tenía. Por teléfono la voz de ella era agradable pero parecía mucho mayor. Tocó timbre y salió ella bien abrigada (era de noche y además llovía), pasaron y fueron a la habitación donde estaba la computadora. Durante la charla, el empezó a recorrerla y veía, aunque con arrugas una boca chiquita y una sonrisa hermosa. Siguió recorréndola y vio una cadera importante, no abultada, pero era de esas que podía agarrase bien. Y luego se detuvo en el sweater que llevaba puesto. Sugería unos pechos un poco más grandes de los normales. Su imaginación ya volaba y trataba de imaginarse como serían sin tanta ropa. Se llevó la computadora para repararla.
Llegó el momento de devolver el computador. Teléfono, combinaron y pasó. Esta vez de día. Esta vez vestía ropa un poco más liviana, ya que estaba con estufas dentro de su casa. Y ahí sí Jorge pudo confirmar las sospechas, de verdad tenía unos pechos hermosos y no eran de esos pechos caídos como podrían tener mujeres de su edad.
Ella lo invitó con un café mientras él armaba todo, siempre charlando de forma muy agradable, ella siempre una señora dulce. Nunca dejaron de mirarse los 2, ella también parecía comerlo con la mirada, pero con la distancia que ponía la edad y esas cosas. Fue el momento de la despedida y él tuvo el impulso de tocarle la boca, aparentemente ella también porque cuando los labios casi se rozaron inmediatamente se miraron y el beso fue intenso, como si se conocieran de toda la vida. El la recorrió con sus manos de punta a punta, ella tampoco se quedaba atrás y hacía lo mismo, como reconociendo el terreno. Hasta que llegó a su miembro y vno tó la dureza del mismo entonces de a poco bajó el cierre de la bragueta, lo siguió acariciando sobre el sleep y casi inmediatamente se lo corrió y sacó la verga dura que además estaba mojada por la calentura de Jorge.
De a poco ella sin desenlazarce lo fue llevando paso a paso hacia la habitación. Una vez ahí ella se sentó en la cama y con la pija delante de los ojos, agarrándola del tronco, se la fue besando poco a poco hasta que empezó a metérsela toda en la boca. Empezó a cogérselo con la boca como hacía rato que a Jorge no se lo hacían. El estaba que bola y con sus manos tocaba esas tetas enormes y hermosas, que ya había dejado al descubierto.
Ella de abajo lo miraba y cada tanto preguntaba el clásico "te gusta", con media pija adrentro de la boca, pero con esa voz y todo ese entorno era imposible decirle otra cosa que sí. Luego de un rato ella se tiró para atrás y dejó que jorge subiera arriba suyo en un clásico misionero. Luego de un lento y suave bombeo, él seguia dura como un tronco y ella lo sacó y se acomodó para subirse arriba de él y montarlo. Que soberana cogida le pegó, no paraba de menearse y quejarse suavemente, acabó fácilmente tres veces en corto tiempo. Jorge a punto de explotar, le avisó "te voy a llenar de leche", a lo que ella le dijo "espera", se desmontó y empezó a mamarle la pija hasta que el sin más remedio le lleno la boca de leche. Ella no dejo de mamarla hasta que no le saco la última gota.
Se miraban como si no pudiesen creer lo que estaba pasando. Ella en seguida le preguntó "¿estas bien?" a lo que Jorge respondió afirmativamente pero además confirmo que la leche se la había tragado toda como si nada.
Desde ese día hasta hoy tuvieron encuentros y uno más desatado que otro.
La próxima les cuento otra de esta pareja...[/font]
Todo comenzó alrededor de 3 años. Mi amigo se dedica a reparar computadoras, dar clases de computación, y todo lo relacionado con el tema, y por lo general lo hace a domicilio; porque lo sigue haciendo. Siempre trabajo por recomendaciones. Hasta que una de esas fue con una señora, en ese momento, de 59 años. La señora era casada o estaba en pareja con un señor que trabajaba y estaba poco y nada en su casa. Era del estilo de mujer que se consideraba "retirada".
Era invierno, el había combinado telefónicamente pasar por su casa a ver el problema que tenía. Por teléfono la voz de ella era agradable pero parecía mucho mayor. Tocó timbre y salió ella bien abrigada (era de noche y además llovía), pasaron y fueron a la habitación donde estaba la computadora. Durante la charla, el empezó a recorrerla y veía, aunque con arrugas una boca chiquita y una sonrisa hermosa. Siguió recorréndola y vio una cadera importante, no abultada, pero era de esas que podía agarrase bien. Y luego se detuvo en el sweater que llevaba puesto. Sugería unos pechos un poco más grandes de los normales. Su imaginación ya volaba y trataba de imaginarse como serían sin tanta ropa. Se llevó la computadora para repararla.
Llegó el momento de devolver el computador. Teléfono, combinaron y pasó. Esta vez de día. Esta vez vestía ropa un poco más liviana, ya que estaba con estufas dentro de su casa. Y ahí sí Jorge pudo confirmar las sospechas, de verdad tenía unos pechos hermosos y no eran de esos pechos caídos como podrían tener mujeres de su edad.
Ella lo invitó con un café mientras él armaba todo, siempre charlando de forma muy agradable, ella siempre una señora dulce. Nunca dejaron de mirarse los 2, ella también parecía comerlo con la mirada, pero con la distancia que ponía la edad y esas cosas. Fue el momento de la despedida y él tuvo el impulso de tocarle la boca, aparentemente ella también porque cuando los labios casi se rozaron inmediatamente se miraron y el beso fue intenso, como si se conocieran de toda la vida. El la recorrió con sus manos de punta a punta, ella tampoco se quedaba atrás y hacía lo mismo, como reconociendo el terreno. Hasta que llegó a su miembro y vno tó la dureza del mismo entonces de a poco bajó el cierre de la bragueta, lo siguió acariciando sobre el sleep y casi inmediatamente se lo corrió y sacó la verga dura que además estaba mojada por la calentura de Jorge.
De a poco ella sin desenlazarce lo fue llevando paso a paso hacia la habitación. Una vez ahí ella se sentó en la cama y con la pija delante de los ojos, agarrándola del tronco, se la fue besando poco a poco hasta que empezó a metérsela toda en la boca. Empezó a cogérselo con la boca como hacía rato que a Jorge no se lo hacían. El estaba que bola y con sus manos tocaba esas tetas enormes y hermosas, que ya había dejado al descubierto.
Ella de abajo lo miraba y cada tanto preguntaba el clásico "te gusta", con media pija adrentro de la boca, pero con esa voz y todo ese entorno era imposible decirle otra cosa que sí. Luego de un rato ella se tiró para atrás y dejó que jorge subiera arriba suyo en un clásico misionero. Luego de un lento y suave bombeo, él seguia dura como un tronco y ella lo sacó y se acomodó para subirse arriba de él y montarlo. Que soberana cogida le pegó, no paraba de menearse y quejarse suavemente, acabó fácilmente tres veces en corto tiempo. Jorge a punto de explotar, le avisó "te voy a llenar de leche", a lo que ella le dijo "espera", se desmontó y empezó a mamarle la pija hasta que el sin más remedio le lleno la boca de leche. Ella no dejo de mamarla hasta que no le saco la última gota.
Se miraban como si no pudiesen creer lo que estaba pasando. Ella en seguida le preguntó "¿estas bien?" a lo que Jorge respondió afirmativamente pero además confirmo que la leche se la había tragado toda como si nada.
Desde ese día hasta hoy tuvieron encuentros y uno más desatado que otro.
La próxima les cuento otra de esta pareja...[/font]
0 comentarios - Ella 62, yo 41