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Mi nuera y yo...

Buenas tardes amigos, hoy quiero compartir un relato que encontre en la Web, me gusta mucho leer relatos de este tipo, espero que sea de su agrado.
saludos


Soy una mujer viuda, bien plantada y discreta, con dos hijos casados,
el menor de ellos viviendo con su esposa en la casa familiar, conmigo.
Mi esposo fallecio en un accidente automovilistico hace ya 15años y
desde entonces no he tenido pareja visible. Nunca he permitido que se
supiera de mis relaciones y las que tuve, las maneje con extrema
discreción.

Lo de bien plantada viene a cuento porque, teniendo 52 años, los otros
dias saliendo desnuda de la ducha, pensando que no habia nadie en
casa, me cruzo con mi nuera, la que luego me elogio el fisico. Voy al
gimnasio 3 veces a la semana y cuando el tiempo lo permite, voy a un
natatorio a hacer tres o cuatro largos. Mido 1,70 sin tacos, 95,65 100
y no pareceria que hubiera amamantado dos hijos.

Como se podran imaginar, al no tener una pareja estable e hijos
grandes, las libertades que me pude tomar en determinado momento,
fueron muchas, por lo que, en materia sexual he conocido casi todas
las variantes sobre el tema y a esta altura del partido no habia
muchas cosas que me puedan sorprender.

La cuestion es que, después de aquel cruce con mi nuera, note que
ella me miraba de una manera diferente y que en mas de una ocasión me
espiaba y/o intentaba entablar una conversación sobre un tema pero no
sabia como encararlo. Me supuse, que como casi todas las chicas,
jóvenes y modernosas, queria probar una relacion distinta, que no
fuera con un hombre. Y me propuse darle el gusto.

Tuve algunas experiencias lesbicas netas y tambien como consecuencia
de sesiones grupales y no me resultaron del todo desagradables, en
particular una con otra mujer, mayor que yo, y que, de alguna manera
sabia exactamente que era lo que yo queria en determinado momento.
Con ella en particular tuve algunos encuentros, uno de ellos en casa,
hasta que vaya uno a saber porque, desaparecio de circulación.

Asi que encare la cosa de manera que se sintiera en confianza como
para pedirlo ella puesto que mi interes, si bien me gusta, no pasa
exactamente por alli.

Cuando sabia que estabamos las dos solas en casa, comence a vestirme
mas suelta y a veces sin corpiño, con ropa que lo hacia evidente. Un
baton suelto y una remera liviana hoy, una pollera amplia y una blusa
transparente, mañana y asi sucesivamente. De a poco, Elsa empezo a
usar vestimente parecida pero no se atrevia a mas.

Un dia, vuelvo a casa y cuando voya entrar a mi cuarto, Elsa sale del
baño, desnuda. La misma situación en la que habia estado yo meses
atrás, solo que ella se acurruco y trato de taparse con lo que fuera y
se metio en su cuarto. Al rato sale vestida discreta y colorada hasta
las orejas.

¿De que tenes vergüenza? –le pregunto
Ay, Mabel, que iras a pensar…
Lo mismo que pensaste vos cuando me viste a mi, asi. –le conteste
pasandole un mate.
Pero me dio vergüenza…
¿Vergüenza de que? –le digo- si tenes un cuerpo espectacular…
………
Mas de una te lo envidiaria…
De donde habra sacado el valor, no lo se, pero me suelta
Mas de una envidiaria tener el suyo a su edad…
Elsa, cuando hagas lo que yo hice, lo vas a tener igual que yo…-le
digo acariciandole la cabeza.
No creo –me contesta- a mi ya se me caen….
¡Que se te van a caer, mujer! Si recien estan tomando forma…
Pero se me aflojaron y engorde de cintura…
Hijita, cuando una coje –se lo dije asi, directo.- son cosas que pasan…

Se puso de todos los tonos de rojo que se puedan imaginar y la cosa quedo ahí.

Dos o tres dias después, adrede y a sabiendas que estaba en casa,
salgo desnuda del baño y voy con la ropa sucia al lavadero, no dandole
ninguna importancia a que ella me viera y me la cruzo en la cocina.
Como estaba con el mate en la mano, asi como estaba le pido un mate. Y
cuando se lo devuelvo, le acaricio la mano y me voy a mi cuarto.

Cuando vuelvo a la cocina, con un baton de entre casa y nada mas, me
encuentro que Elsa tambien se habia tirado un baton encima y me
comenta que hacia demasiado calor. No le di mayor importancia y cuando
voy a buscar algo, paso muy cerca de ella, apoyandole tetas en la
espalda. ¡Se puso dura! Pero al rato, que nos cruzamos en el pasillo,
fue ella la que me apoyo a mi.

¿Y me decis que se te estan cayendo? – le digo dandome vuelta

Se quedo esperando a ver que hacia yo.

Le apoye una mano en una teta y la sopese y sobe un poquito y le
comento que a pesar el corpiño se siente durita. Se sonrie y con una
mano afloja el corpiño y me pregunta

¿Y ahora?
¿Ahora? Ahora nos vamos a meter en mi cuarto…

Y tomandola del brazo le lleve hasta mi cuarto, la hice dar vuelta, le
afloje el cinto y le saque el baton.

¡Mabel, que hace!
Te desnudo, hijita, te desnudo y te voy a disfrutar…
No, Mabel, no esta bien…

No le di bolilla y me baje para sacarle la tanguita, que estaba
mojada, y cuando estoy a la altura adecuada, me empuja la cabeza hacia
su concha y se deja caer en la cama. Yo sabia muy bien lo que queria y
me ocupe de darselo. ¡Una chupada de concha bestial! Encima, tenia un
clítoris desarrollado que pedia a los gritos que lo muerdan y torturen
y yo no me hice rogar.

Dos minutos después, entre gritos y jadeos y retorciendose toda,
llegaba a un orgasmo espectacular, con una profusion de flujo
impresionante, que aproveche para lubricar bien toda la zona.

Elsa se habia relajado casi totalmente cuando me paro y me quito el
baton. Me acomodo en la cama y le acerco la pelvis a la cara. ¡Era lo
que ella estaba esperando! ¡Se abalanzo a comerme la concha,
desesperadamente! A mi me estaba llevando al cielo y yo le empece a
meter dos dedos en el culito. ¡Para que! ¡Se desato totalmente! Me
chupaba la concha, me pasaba la lengua por la raya del culo, me
masajeaba las tetas, me mordia. Me puso tan loca que le llegue a meter
cuatro dedos en el culo y se los movia adentro y afuera, cuando llego
a un orgasmo en simultaneo con el segundo de ella. Los gemidos y
jadeos se deben haber escuchado en toda la manzana y no dabamos abasto
en lamernos todo el flujo que nos salia.

Con un suspiro que parecia no terminar nunca, Elsa se estira en la
cama a la par mia y me estampa un beso en la boca que casi me arranca
la lengua mientras me acariciaba suavecito el clítoris. Yo abria las
piernas como para que llegara donde quisiera, pero se concentro en el
clítoris y me lo pellizcaba y lo masajeaba una y otra vez y me estaba
llevando a un segundo orgasmo, maravilloso, y cuando estoy a punto de
explotar, se arquea y baja para llevarme al climax con la boca. Se
tomo todo lo que salia como si saliera del desierto…

Cuando me relajo, se levanta, sale y vuelva al cuarto con un bolsito
mediano. Cuando la miro, comopreguntndo que es, me dice

Que no se entere Mariano que tengo esto…

Y saca un dildo de doble cabeza im-pre-sio-nan-te. Tanto en largo como en grueso

Hace tanto tiempo que sueño con usarlo con vos…

Y sin decir nada, me empieza a meter la cabeza.
Realmente una sensación indescriptible, sobre todo cuando ella se
metio la otra punta y estando en “tijerita” se empezo a mover. ¡A la
mierda lo que se sentia! Elsa se largo de a poco, aumentando despacito
el ritmo, hasta que en un momento encendio el vibrador.

Parecio que ambas habiamos puesto los dedos en el enchufe, nos
agarraron espasmos y temblores incontrolables y nos metiamos y
sacabamos esa cosa con una fuerza y una velocidad increíbles. Elsa fue
la primera en llegar a una acabada, violenta y espasmodica, seguida de
unos gemidos y jadeos profundos que parecia que la estaban matando. En
cuanto a mi, cuando la escuche, me empece a mover mas fuerte hasta que
logre un orgasmo, mucho mas suave, pero mas prolongado que el de ella
y nos quedamos las dos estiradas y relajadas, con el dildo adentro y
acariciando suavemente el clítoris de la otra.
Nos habremos quedado en esa posición unos quince minutos, hasta que
Elsa se sale y sacandolo suavemente, me va mordiendos y lamiendo a
medida que sale. Lo deja a un costado y tirandose encima mio, me
abraza y me besa con suavidad mientras con las piernas se abraza a
las mias y friega concha contra concha despacito.

Miramela a la mosquita muerta –le digo
Te tenia unas ganas, Mabel, que ni te cuento…
¿Y porque no lo dijiste?
Tenia miedo de que te enojaras…

Fue el primero de muchos encuentros, cada uno mas caliente que los
anteriores, donde no nos privamos de nada y siempre pensando en como
podiamos hacer para incluirlo a Mariano, cosa que hicimos un viernes.

Pero eso es otra historia

4 comentarios - Mi nuera y yo...

chikabisex +1
RELATO CALIENTE!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! fELICTACIONES AL AUTOR Y VAN 2 PUNTINES....
garrote2373
Un relato bien caliente!!!!
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