Clarisse~ Anécdota n°3 Nadie toca lo que es mio!

Hola a todos, espero que estén muy bien. Como saben, mi nombre es Clari y tengo 19 años, y acá les cuento otra anécdota (real, obvio) de los jueguitos entre mi novio - unos añitos menor - y yo.
Por si acaso, aclaro que no son textos eróticos, y no todos tienen alto contenido sexual, ya que son cosas que me pasan realmente, y no siempre están tan cargadas de sexo.
Como supondrán, hoy, en el momento en que escribo esto, ya estuve con mi novio, por primera vez. Sin embargo, no es eso de lo que voy a hablar exactamente, sino de algo que pasó la noche anterior a que tuviésemos sexo por vez primera. La cuestión es que fuimos al cumpleaños de un amigo de la secundaria. La fiesta era en una casa normal, con mucha gente, mucha música y más alcohol. La velada pasó rápido, quedando ya, para eso de las cinco de la madrugada, el cumpleañero, su novia, una amiga de la novia, mi novio y yo. Debido a la hora y al estado de ebriedad de mi acompañante, decidimos quedarnos a dormir allí, al igual que las otras dos chicas restantes. Celosamente, pude advertir que esta amiga de la novia del anfitrión, era la misma que había estado mirando provocativamente a mi novio durante toda la noche. A pesar de que confío ciegamente en él, la actitud de la chica me molestó por sobremanera, ya que sabía de nuestra relación.
Estábamos ayudando a nuestro amigo a limpiar un poco la casa, cuando advertimos que además de mi novio - que dormía en una de las habitaciones, completamente ebrio- faltaba esta simpática muchachita. Sin darnos mas tiempos para especulaciones, corrimos todos hacia la misma habitación para encontrarnos con una imagen muy bizarra: sobre la cama mi novio dormía plácidamente sin inmutarse de que la invitada faltante le había quitado toda la ropa y le practicaba sexo oral. La chica se veía exitada, succionando con vehemencia y masturbándose con una de sus manos, sin contar el grado de ebriedad con el que también cargaba. Inmediatamente, nos avocamos a sacarla de encima de mi novio, iniciando un forcejeo por parte de ella, que a su vez nos invitaba a realizar una orgía en ese mismo instante. Seguramente se hubiese dado a no ser por la actitud de ella, que yo consideré muy ofensiva. Luego de recibir una bofetada de su parte pude sacarle a mi novio de sus manos, despertándolo. Su reacción fue la de esperarse, algo asustado y avergonzado ya que estaba completamente desnudo. Tanto nuestro amigo como su novia y su depravada amiga salieron del cuarto dejándonos a solas. Entonces, sentándome a su lado. lo tapé con las mantas y lo abracé mientras besaba su cuello lentamente. Con mis manos lo masturbé hasta hacerlo acabar, durmiéndose entre mis brazos. En cuanto a mí no dormí mucho, ya que estuve vigilando de que ninguna otra mano viniese a tocar lo que es mío.