Compartiendo a mi novia (relato breve)

Invierno y Buenos Aires.
Corto, breve, desconcertante. Por momentos otoñalmente invernal…de a ratos, crudo y despiadado.
A lo mejor por eso, es que me inventé el habito de todos los viernes pasar a buscar a mi novia (ustedes la conocen de mis posts) por el trabajo…para evitarle un viaje asardinado en un subte superpoblado.
Finalmente viernes, cansancio, caos de transito y desde un cartel amarillo alguien que insiste en hacerme creer que “Va a estar bueno Buenos Aires”. 18:30hs, microcentro, y mi novia esperando en la puerta del trabajo, siempre linda, siempre agradable, y siempre con Gonzalo, uno de sus compañeros de trabajo.
--“como va? Mucho lio hoy en el laburo?”
-“hola!, si…viernes…vos sabes como son los viernes”
--“y bueno…como sea, ya termino el día”

Cuando dije esa frase, jamás pensé que todavía le quedaba tanta vida a un viernes que por esos momentos parecía quedarle pocas horas de sobrevida.
--“ahora entre nosotros…este chico Gonzalo que onda? Es una estampilla el chabón!”
-“ja…no pobre! Es medio pesado, pero me da charla siempre mientras te espero”
--“no seas ingenua! Te quiere coger!”
-“no seas así! Además esta de novio con una rubia muy bonita…”
--“como si eso tuviese algo que ver…”

A mis ojos la situación era clara, no había más que mirar al flaco…discípulo de Morgan y Jack Sparrow, claramente era un pirata en búsqueda constante de alguien a quien atraca, con un bronceado de cama solar, y una superficialidad tan evidente como esos falsos ojos verdes que pretendía naturales…
--“sigue en pie lo de esta noche?” cambié de tema
-“si obvio!, dejame en casa así me preparo y pasame a buscar más tarde”

Hacia un tiempo ya que teníamos la idea de ir a algún boliche swinger con la intención de seguir dándole de comer a nuestros ratones, que por esos días no dejaban de roer la fantasía de hacerlo en público.

Tipo 1:30am, la paso a buscar, baja y me sorprende con un corto vestido aleopardado, ceñido a la cintura, desde donde se desplegaba la etérea falda que quedaba a unos 20 kilométricos centímetros de sus rodillas…escote amplio y generoso como sus pechos, y una espalda plenamente descubierta que hacía imposible el uso de sutien alguno. Todo bajo el abrigo de un peludo saco negro que intentaba disimular su soez escote.
--“ah bueno…! Como te viniste!!!”
-“no te gusta?, yo pensé que si…además estoy toda haciendo juego…”

Acababa de sentarse, cuando se subió el vestido para mostrarme una tanga tan chiquita como aleopardada…
--“pero no tenes piedad! Estas a pleno!”
-“si…la verdad que si…además, mientras me vestía tome un poquito de vino y ya me conoces cuando tomo”

Es cierto, cuando sus labios toman contacto con un buen vino se produce una reacción química en su interior que la convierte en una versión por completo desinhibida de ella misma.
Con la excitación a flor de piel, llegamos a la calle Anchorena.
No les voy a mentir, eran evidentes los nervios de los dos primerizos en un ambiente por completo ajeno. Entramos y la primer sensación fue…”por que tardamos tanto en venir acá!!!”
No les puedo explicar ese momento…teníamos la fascinación de un jugador empedernido recién llegado a Las Vegas… el ambiente nos envolvió…estaba lejos de ser una experiencia orgiástica, pero la electricidad en el ambiente nos conectaba con cada uno de los presentes.
Una barra, los tragos que enseguida aparecieron en nuestras manos, los ojos que se caían en el escote de mi novia, besos calientes, mi mano siempre en contacto con su piel…una recorrida por el lugar, para llegar al apartado donde se encontraban parejas…era la exacerbación de los sentidos…la poca luz, hacia agudizar la vista para ver figuras corpóreas recortándose en el ambiente, olor a calor, mi boca anestesiada por un dulce trago, mis tactos en su espalda erizada, y un oído felino que permitía sentir cada pequeño gemido y suspiro que flotaba en el ambiente. Estábamos fuera de nosotros mismos…no había temores, no había dudas, solo excitación…nos sentamos, ella en mi falda…ambos tocando al otro pero mirando todo lo que pasaba a nuestro alrededor…besos, caricias, roces, mi mano levanto su falda para dejar a la vista de todos su pequeña tanga…ella se frotaba contra mi pija que estaba erecta desde la 1:30…nos olvidamos del resto, y nos ocupamos de nosotros, hasta que una frase puso freno:
- “gordo, me están tocando el culo, vamos mejor…”

Efectivamente, uno de nuestros ocasionales vecinos, mientras besaba a su novia, tocaba muy suavemente el culo de la mía…mientras buscaba mi complicidad en cada cruce de miradas…
--“estás segura?...”
-“si, si…además quiero que me cojas en un telo”

A regañadientes, bajamos, y fuimos saliendo del lugar… se le notaba en la cara la excitación…entre el alcohol, el lugar, y el haber sido manoseada por un desconocido, estaba dispuesta a todo.
Rápidamente llegamos al auto, e hicimos todo el camino al hotel sin hablar, ella con su cabeza pegada a mi hombro, y su mano, en mi bulto.
Al ver el primer telo que me pareció más o menos decente entramos. Playa de estacionamiento general inmensa, muchos autos, bajamos, ella como bonzo, recepción, suplica de una habitación, y un “no tengo habitación disponible hasta en 30’ aprox, pueden esperar acá, o en el auto” que me resulto tan violento como cross de derecha de Tyson. Afortunadamente ella dijo…”esperemos un ratito gordo…” mientras me acariciaba la verga…
No me gustaba esperar por una habitación pero toda la situación era tan caliente, que no importaba. Unos pocos silloncitos azules gastado, en un ambiente mínimo, componían una sala de espera afortunadamente desierta. Nos sentamos, nos miramos, y nos besamos…muy rico, muy caliente…ya empezando el juego sexual, le lance un:
--“que pena que no te gusto que te tocaran la cola…”
-“quien te dijo que no me gusto? Me encanto…pero me dio miedo” y sin ningún pudor apretaba el tronco de mi poronga.
Fascinado dije
--”si? mira vos…pero de que te asustaste tonta…si te gustaba…estaba todo bien…”

Antes de que pudiera responder, sentimos unas voces y pasos que se acercaban, una pareja acababa de llegar a la salita. Lo que era de por sí una situación incómoda, se convertía en algo desagradable y ella que dijo:
-“Gon? Hola! Que loco!”

Giré mi cabeza, y no lo podía creer…ahí estaba…con su bronceado en pleno junio, y ojos que ahora extrañamente habían mutado a negros, su compañerito de trabajo… mi impresión inicial, acababa de quedar confirmada…superficialidad nata, como la rubia que lo acompañaba. Saludos, sendas presentaciones, y de buenas a primeras nos vimos inmersos en una conversación de 4 que era insostenible…risas exageradas, miradas cruzadas, ella sosteniendo mi mano, y excitadísima calentando la pija de él…su escote se bamboleaba amenazando con dejar sus pezones al descubierto en cualquier momento, yo asentía a todo con la cabeza. El tiempo no pasaba nunca, y la rubia que dice “Gonza, vamos al auto? Tengo frio acá”. El, siempre con la mirada en las tetas de mi novia, escupió un “bue…ya vamos. Bueno chicos, nos vamos al auto, nos vemos”
Cuando ellos apenas estaban encaminándose a la playa de estacionamiento, un…
-“gordo, nosotros también podríamos ir a esperar al auto no? esta fresquito acá”
--“ok dale, pero no te hacia tan trola”
-“por?” dijo con una media sonrisa…
--“ay, dejate de hinchar…! Le calentaste la pija mal a tu amiguito…se la va a coger pensando que sos vos ahora”
-“jaja…mira lo que decís….! Y bueno, dejalo, tema de él no?”

Ya caminando al auto…veo que su compañerito, se estaba subiendo al coche estacionado junto al mío…increíble…! Justo ese telo, ese día, a esa hora, en ese espacio de la playa general, tenía que haberse estacionado!!!
--“viste a quien tenemos de vecino en el estacionamiento?”
-“si…jaja”

Una vez en el auto, trate de olvidarme de todo, y empecé a comerle la boca…ella estaba aun más caliente que antes…deslice mi mano debajo de su breve vestido, y dijo:
-”para…! al lado esta mi compañero…a ver si nos ve”
--“te encantaría que nos vea, pero despreocúpate, el está en la suya…”

Giró su cabeza para ver lo que ocurría en el auto de al lado, y se encontró a “su Gon", prendido a las tetas de la rubia…mi chica, se acomodo sobre el asiento para no perder detalle de lo que pasaba en el otro auto…recostó su espalda contra mi pecho, y aproveche la situación para empezar a acariciar sus pezones con una mano, y su sexo con la otra…al tiempo que le decía…
--”te calienta no? te gustaría comértelo…?”
-“Si, la verdad que si…me calienta la situación”

Quede duro, frio seco.
La escena lejos de enojarme, me calentó, mal, muy mal, tanto que redoblé la apuesta
--”ah sí?!?! y bueno, anda y cogételo entonces…a que no te animas…”
-“estas seguro que no me animo?”

No había terminado de decirlo, cuando se dio vuelta, me dio un beso, y me dijo
-“mira”

Abrió la puerta del auto, camino los 2 pasos que separaban a ambos autos, golpeo la ventanilla del conductor, y se subió a la parte de atrás…no podía creer lo que estaba viviendo…dudaba si era una broma, o si verdaderamente lo haría…rápidamente se aclararon las dudas
Llegue a ver que se cruzaban unas palabras, e inmediatamente él, la tomo por la nuca, y besó su boca irrefrenablemente….yo sabía que debía sentirme enojado, furioso, sin embargo me encantaba lo que veía…el le empezaba a tocar las tetas cuando empezó a pasarse al asiento de atrás…la rubia…estaba espantada, desorientada como yo…atinó a bajarse del auto dando un portazo, insultos al aire, y desapareció …ellos ya estaban besándose descaradamente, y las manos de el se reproducían para tocarla …yo con la pija señalando al cielo, y el jean desabrochado.
Fue todo muy rápido, aun hoy no puedo explicar la sensación…estaba enojado, celoso como nunca, pero quería que se la cojan con todo, que le den sin asco…el…sin ningún esfuerzo, la sentó en su falda, y de un tirón, desato el nudo que sostenía todo su vestido tras su nuca…quedando sus tetas, duras, respingadas a su merced…el…se zambullo en ellas…las lamia con desesperación, las exprimía, los pezones de mi chica se habían convertido en una especie de goma de mascar para el…mi novia…puta como nunca, hermosa como siempre…apretaba la cabeza de él contra su pecho, y se frotaba contra su bragueta…mi mano subía y baja de mi pija…la cabeza a punto de explotar…sabia que tenía que hacer algo, pero no sabía que…mientras, el pornográfico show continuaba al tiempo que los vidrios empezaban a empañarse…alcance a ver algunos movimientos toscos, asumí que se trataba de el queriendo quitarse el pantalón…no pude mas…metí mi pija dentro del pantalón, me baje del auto, me pare junto al de ellos que ya empezaba a moverse acompasadamente…abrí la puerta delantera y la vi a ella… solo con la tanga de leopardo…arrodillada, con toda la verga de el en la boca…al sentir la mirada en su nuca, sin soltar nunca la poronga, me miro por un segundo, y volvió a lamerla delicadamente…el con los ojos cerrados, en transe…yo…me senté en el asiento del acompañante, cerré la puerta, y continúe pajeandome…eso la éxito aun mas…se la chupaba toda…y me miraba…el la agarraba por la nuca, y hacia que se la meta bien profundo en su garganta…yo como loco…me encantaba verla como se comía una pija que no era la mía mientras ella movía su culo glorioso entangado. Caliente dije
--“no puedo creer lo puta que sos…!”

El se sobresalto y abrió los ojos…aparentemente, nunca se había dado cuenta que yo estaba en el auto…la separo de su verga y asustado como un chico que acaba de ser sorprendido in fraganti, llego a balbucear…
---“flaco! Discúlpame…te juro que yo no quise…!”
--“vos no quisiste, pero yo si…disfruta que la chupa como nadie…!”

Ella me miro, cómplice, como jamás volvió a mirarme y habiendo recibido mi aprobación…se aboco a ordeñar sus huevos engullendo toda su pija…
El aun nervioso, empezó a relajarse, al oírme decir…”dale, chúpasela como me la chupas a mi…sacale toda la leche”, mientras, me pajeaba furibundamente….ella gemía…comía esa pija brutalmente, estaba enceguecida…el, entregado…yo queriendo que nunca termine ese momento…el hizo una mueca grotesca con su cara…ella percibió su verga latiendo dentro de su boca anunciando lo inevitable…yo deseando que la pija le estalle en su boca y frotando mi poronga tan fuerte que podría haber encendido una fogata...con mi mano izquierda, toque su concha depilada definitivamente, y mis dedos empezaron a chorrearse con sus jugos…su cabeza arriba y abajo, el suplicando, yo pajeandonos…hasta que sin más…empezó un efecto domino espeluznante:
Con un grito que trato de sofocar...lleno la boca de mi novia de blanca y tibia leche…yo, al ver que ella seguía lamiendo y un fino hilo de semen unía su lengua con la cabeza de su poronga…no pude soportar más, y acabe de una forma violenta…mi leche voló por el aire, mancho el techo, y empezó a caer en la espalda de mi putita divina que al sentir la leche de el en su boca, y la mía cayendo impasible sobre su espalda, tuvo un orgasmo sobre mis dedos que corono con un grito que de contenido poco tuvo…
Ahí estábamos los 3…su pija aun despidiendo leche…ella rendida de rodillas con la cabeza apoyada en el asiento y bañada a dúo en leche…mientras que yo trataba de guardar cada segundo en mi memoria…

El anuncio de la habitación disponible, nos sorprendió vistiéndonos en el auto, donde nadie emitió sonido, ya al bajarme, el atino a disculparse nuevamente y preguntar por su novia…volvimos a mi auto, nos miramos, puse primera…y ella tuvo el buen tino de devorar mi pija todo el camino de regreso a casa.


Esa fue la primera vez, que fuimos 3…ojala no haya sido la última…se suman?