Espero les guste este relato, dejen su comentario
Estamos en mi tienda, mi marido ha tenido que salir ha hacer unos mandados, vos entrás por la puerta.
Me mirás fijamente a los ojos, la clienta que estoy atendiendo es una de esas típicas pesadas que no se como sacarme de encima.
Saludas --Buenas tardes--, yo te contesto, -Enseguida lo atiendo caballero, ¿viene a probarse?-- vos me contestas que si, entonces te digo --Pase entonces al probador, enseguida estoy con Ud.--.
La clienta esta un poco fastidiada porque he dejado de prestarle atención. Estoy emocionada al saber que me esperás en el probador. La despido enseguida y me dirijo hacia vos con el centímetro en una mano y los alfileres en la otra.
El probador es pequeño y una de sus paredes tiene un espejo de cuerpo entero, también tiene un banqueta de la altura adecuada. Bueno, ya estoy lista para vos. Siento una punzada de deseo en mi entrepierna. vos llevas los pantalones que querés que te arregle.
Sin mediar palabra descorro la cortina del probador y me arrodillo delante tuyo, para medirte el dobladillo. Mi cara queda exactamente a la altura de tu entrepierna, y puedo observar claramente, lo que tu virilidad le está haciendo al pantalón.
Entonces como quien no quiere acerco mi mano a la bragueta, para liberarte de eso que te limita el movimiento. El pantalón te cae hasta los tobillos dejando al descubierto unos bóxer blancos con un ribete negro que te quedan pintados. No puedo evitar abrir la boca en un ohhhh silencioso que me llena la boca de saliva, sólo con pensar de posar mis labios en esa parte de tu anatomía.
Levanto la vista hasta encontrar tu mirada, puedo ver en tus ojos la lascivia que hay en ellos. Vos asentís a mi pregunta no formulada con ansiedad, y doy rienda suelta a mis mas profundos deseos. Tenerte en mi boca.
Suavemente, como si de un tesoro se tratara, separo ligeramente el elástico del bóxer y empiezo a bajarlo lentamente. La erección es fabulosa y tengo que hacer un gran esfuerzo para desviar la vista de esa parte tuya que he anhelado tanto.
Hago que te sientes en la banqueta a la vez que con manos expertas empiezo a desabrocharte la camisa dejando al descubierto esos torneados músculos que tanto me excitan. Acerco tu boca a la mía y nos besamos en un beso húmedo y cálido que incremente el deseo que ya siento por vos.
Hábilmente empiezas a desnudarme, rápidamente como si de una batalla contra mi ropa se tratara. Quedo desnuda ante ti, los dos desnudos en ese pequeño espacio con nuestras imágenes reflejadas por el espejo. ¡Qué excitante!.
Vuelvo a arrodillarme sin dejar de recorrer tu cuerpo con mis manos y mis labios...suave, terso, fuerte, nervudo. Llego a la altura de tu baja cintura, está ahí, tu miembro palpitante y enrojecido por el deseo de mí, no puedo evitarlo, lo introduzco en mi boca, ¡qué hambrienta he estado!,
Suavemente al principio empiezo a recorrer su punta con mi lengua con movimientos circulares, atrapando su cabecita entre mis labios, ¡qué sabroso! Mnnnnnnnn, quiero más de ti. Tengo tantas ganas que ya estoy mojada, mojadísima, y empiezo a mover mis caderas inconscientemente, cadenciosamente, en un movimiento sin fin.
Te deseo, te necesito dentro mio. Al darte cuenta, haces que me levante y con una mano me tocas, --Estás lista—me dices mientras acercas tus dedos a la boca para saborearme.
Tomas mis caderas con tus manos y me llevas hasta tu cuerpo para que pueda sentarme directamente sobre ti. En un único movimiento entras en mi, qué bien encajamos. Esto es la gloria. Bien apoyados mis pies en el suelo, empezamos un movimiento rítmico que nos transporta hasta un lugar inexplorado de nuestros propios cuerpos en conexión.
Respiración entrecortada, jadeos, sudor, caricias, besos, espasmos, éxtasis. Todo esto en una cadencia sin fin hasta llegar al unísono a la culminación de nuestros más íntimos deseos y anhelos.
De vuelta a la tierra, rápidamente nos vestimos y nos despedimos, oímos el sonido de la puerta que se abre. Es mi marido.
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Estamos en mi tienda, mi marido ha tenido que salir ha hacer unos mandados, vos entrás por la puerta.
Me mirás fijamente a los ojos, la clienta que estoy atendiendo es una de esas típicas pesadas que no se como sacarme de encima.
Saludas --Buenas tardes--, yo te contesto, -Enseguida lo atiendo caballero, ¿viene a probarse?-- vos me contestas que si, entonces te digo --Pase entonces al probador, enseguida estoy con Ud.--.
La clienta esta un poco fastidiada porque he dejado de prestarle atención. Estoy emocionada al saber que me esperás en el probador. La despido enseguida y me dirijo hacia vos con el centímetro en una mano y los alfileres en la otra.
El probador es pequeño y una de sus paredes tiene un espejo de cuerpo entero, también tiene un banqueta de la altura adecuada. Bueno, ya estoy lista para vos. Siento una punzada de deseo en mi entrepierna. vos llevas los pantalones que querés que te arregle.
Sin mediar palabra descorro la cortina del probador y me arrodillo delante tuyo, para medirte el dobladillo. Mi cara queda exactamente a la altura de tu entrepierna, y puedo observar claramente, lo que tu virilidad le está haciendo al pantalón.
Entonces como quien no quiere acerco mi mano a la bragueta, para liberarte de eso que te limita el movimiento. El pantalón te cae hasta los tobillos dejando al descubierto unos bóxer blancos con un ribete negro que te quedan pintados. No puedo evitar abrir la boca en un ohhhh silencioso que me llena la boca de saliva, sólo con pensar de posar mis labios en esa parte de tu anatomía.
Levanto la vista hasta encontrar tu mirada, puedo ver en tus ojos la lascivia que hay en ellos. Vos asentís a mi pregunta no formulada con ansiedad, y doy rienda suelta a mis mas profundos deseos. Tenerte en mi boca.
Suavemente, como si de un tesoro se tratara, separo ligeramente el elástico del bóxer y empiezo a bajarlo lentamente. La erección es fabulosa y tengo que hacer un gran esfuerzo para desviar la vista de esa parte tuya que he anhelado tanto.
Hago que te sientes en la banqueta a la vez que con manos expertas empiezo a desabrocharte la camisa dejando al descubierto esos torneados músculos que tanto me excitan. Acerco tu boca a la mía y nos besamos en un beso húmedo y cálido que incremente el deseo que ya siento por vos.
Hábilmente empiezas a desnudarme, rápidamente como si de una batalla contra mi ropa se tratara. Quedo desnuda ante ti, los dos desnudos en ese pequeño espacio con nuestras imágenes reflejadas por el espejo. ¡Qué excitante!.
Vuelvo a arrodillarme sin dejar de recorrer tu cuerpo con mis manos y mis labios...suave, terso, fuerte, nervudo. Llego a la altura de tu baja cintura, está ahí, tu miembro palpitante y enrojecido por el deseo de mí, no puedo evitarlo, lo introduzco en mi boca, ¡qué hambrienta he estado!,
Suavemente al principio empiezo a recorrer su punta con mi lengua con movimientos circulares, atrapando su cabecita entre mis labios, ¡qué sabroso! Mnnnnnnnn, quiero más de ti. Tengo tantas ganas que ya estoy mojada, mojadísima, y empiezo a mover mis caderas inconscientemente, cadenciosamente, en un movimiento sin fin.
Te deseo, te necesito dentro mio. Al darte cuenta, haces que me levante y con una mano me tocas, --Estás lista—me dices mientras acercas tus dedos a la boca para saborearme.
Tomas mis caderas con tus manos y me llevas hasta tu cuerpo para que pueda sentarme directamente sobre ti. En un único movimiento entras en mi, qué bien encajamos. Esto es la gloria. Bien apoyados mis pies en el suelo, empezamos un movimiento rítmico que nos transporta hasta un lugar inexplorado de nuestros propios cuerpos en conexión.
Respiración entrecortada, jadeos, sudor, caricias, besos, espasmos, éxtasis. Todo esto en una cadencia sin fin hasta llegar al unísono a la culminación de nuestros más íntimos deseos y anhelos.
De vuelta a la tierra, rápidamente nos vestimos y nos despedimos, oímos el sonido de la puerta que se abre. Es mi marido.
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6 comentarios - En el probador
Me alegra que te gusten mis relatos, gracias por tu coment y la reco, besazos para vos.
gracias por el aporte!! besoooosssss,
GodiTICA
yo pase por tu post, vos pasaste por el mio?
los comentarios son el apoyo que necesitamos para seguir adelante!!