A mi suegra siempre la vi como a la tipica mujer de su casa, preocupada de su marido y sus hijos, ni siquiera pense que como toda mujer normal, necesitaba sexo. Por motivos laborales, mi suegro se ausento tres dias, mi esposa, la invito a casa para que no quedara sola, por la noche en la cama primero le hice una comida de coño a mi mujer y despues me la folle, esta cuando se corre grita mucho y al ser verano, con las puertas abiertas seguro que lo escucho su madre. Tras el polvo, sali al patio a fumar, por la ventana vi a mi suegra acostada de espaldas a mi, desnuda, esta rellenita pero su culo es todavia respingon, (hay me di cuenta de que mi querida suegra tiene una buena follada), en ese momento se dio la vuelta, tenia los ojos cerrados, pero con una mano se sobaba las tetazas y con la otra estaba dandose caña a su peludo coño, la segui mirando hasta que se mordio los labios y se corrio, regrese a mi cuarto y volvi a follarme a mi mujer. Cuando desperte, mi esposa habia salido a la compra, al entrar en la cocina, su madre estaba fregando, llevaba puesto un playero, se notaba que no tenia sosten pues los melones le bailaban cada vez que se movia, la cara la tenia radiante, la paja nocturna le sentaba muy bien, mi bañador no podia ocultar mi ereccion, se dio cuenta y fijando la vista en mi paquete dijo: que suerte tiene mi hija, anoche tres polvos y nada mas levantarte ya estas empalmado otra vez. A lo que añadio: Yo hace tiempo que me tengo que apañar como viste anoche. Me dejo de piedra, me vio espiandola y no me di cuenta, cuando reaccione, acercando me a ella le dije: para algo esta la familia. Le quite el playero, y vi que tampoco llevaba bragas, comence a comerle las tetas y con la mano le sobe el chocho, cuando este estuvo muy mojado, me arrodille y lo lami con ganas, no tardo en soltar su zumo en mi boca, salio tanto que no pude con todo, al apartarme ella siguio soltando leche como si fuera un hombre, las piernas le temblaron y estuvo a punto de caer, la sujete y la apoye sobre el mueble de cocina, la bese en la boca y mi poya restregaba su coño mojado, sola entro dentro de la cueva, la clave a tope y segui moviendome hasta que mi suegra volvio a correrse, esta, agotada se sento en una silla, le puse la poya en los labios y comenzo a chuparla, se notaba que no era muy experta, la hice tumbar sobre la mesa boca a bajo, y apunte mi capullo en su ojete. Aquel jardin nunca se habia visitado, con delicadeza fui entrando hasta que mis huevos dieron en carne, movi despacio y cuando me vino, le di toda la leche en sus entrañas. Nada mas sacarla, escuchamos llegar a mi mujer, apenas nos dio tiempo de vestirnos, mi esposa nada mas entrar al ver a su madre sofocada y liquido chorreandole por los muslos, imagino lo que habia pasado. en ese momento no dijo nada, pero una vez ella y yo a solas me pidio detalles, se los di y se hizo una paja de campeonato, me dijo que la proxima vez queria estar ella presente. He estado tres dias follando a las dos, la hija enseño a la madre a chuparla y la ultima noche me la chuparon las dos a la vez.
2 comentarios - La visita de mi suegra