(la primera parte está en:
http://www.poringa.net/posts/relatos/2160213/Relato_-Elisa_-mi-companera-de-trabajo-_parte-1_.html
y la segunda en:
http://www.poringa.net/posts/relatos/2160698/Elisa_-mi-companera-de-trabajo-_parte-2_.html
Cuando volvió del baño, yo ya había ido al de hombres, y me encontró poniéndome los pantalones.
Que? Me dijo. Ya te aburriste?
- No, por que?
- Y… te estás vistiendo
- Y… no vamos a quedarnos desnudos
- Que? Te parece que un feriado va a venir algún otro estúpido como nosotros?
- Tenés razón, aunque nunca me voy a quejar de haber venido a trabajar este feriado
- Hagamos una cosa, me dijo, nos quedamos desnuditos y empezamos a trabajar, cuando nos aburrimos de trabajar no tenemos que perder tiempo en desvestirnos y esas estupideces
- Jajajajaja, estás loca petisa, pero no es mala idea. Así que me saqué los pantalones y el slip; y me reía pensando la cara que pondrían mis socios si alguno aparecía, sobre todo porque algunos más, otros menos, pero todos le teníamos ganas a Elisita
Comenzamos con el trabajo, ella me iba alcanzando carpetas, y no perdía oportunidad de apoyar sus tetas en mi cabeza, o acariciarme la pija.
Por supuesto, a la media hora ya había logrado recuperarme, ella se dio cuenta y dijo:
- Tendríamos que descansar, no?
- Te parece?
- Creo que sí. Y dicho esto se arrodilló frente a mí y empezó con otra chupada gloriosa. Realmente no se si yo le gustaba mucho, si estaba dispuesta a hacerle pagar al pelotudo con la misma moneda, si estaba tan caliente que lo hubiera hecho con cualquiera o todas esas cosas a la vez, pero le ponía una garra al asunto… La chupaba un poco, jugueteaba con mi pija en sus pezones, la rodeaba con sus tetas y cuando yo iba para arriba lo rozaba con la lengua. Si esto no era la gloria, no se que puede serlo.
La alcé, la hice agachar contra el escritorio y empecé yo con el chupachupa. Primero unos lengüetazos largos, mientras con mi dedo gordo jugueteaba con su clítoris. Después la lengua contra él, recordando unos tips que había leído en un foro porno, tratando de dibujar el abecedario con la lengua en su botoncito. Creanme amigos, parece que funciona, porque sus gemidos eran increíbles.
Mientras yo seguía meta lengua, metí mi dedo índice en su concha, y con el mayor rozaba el otro agujerito, que no parecía muy usado, lo que por lo menos a mí, me pone como loco, cogerse un culito muy poco usado (no les pasa lo mismo?)
- Mi culito va a ser el postre, dijo. Pero primero el almuerzo, que va a ser de dos o tres platos
- Querés que te coja?
- Mmmmmmmmm sí
- Pedímelo
- Cogeme
- Como?
- Cogeme mi amor, llename de leche de nuevo
Y un caballero no se niega al pedido de una dama, así que me puse de pie y se la enterré hasta el fondo
Pegó un gritito, la levanté, le agarré las tetas y nuestras lenguas se entrelazaban
- Ay, que dura la tenés
- Te gusta así
- Si dale, cógeme duro, metémela toda hasta el fondo
- Así?
- Sí, así, llename la concha de pija
La puse de pie, se afirmó en el borde del escritorio, y mientras con el brazo izquierdo le amasaba sus tetas, con la mano derecha la masturbaba, mientras casi con violencia la penetraba.
No se cuanto duró ese polvo, pero sus gemidos se hacían mas intensos y más rápidos hasta que explotó en un orgasmo con un grito salvaje.
Yo seguía con el mete saca, pero ella salió de mi, se arrodilló, abrió grande su boca, sacó la lengua, y empezó a decir
- Dámela, dame toda la lechona
Y eso bastó para que acabara en su boca, con mis piernas temblando, pero créanme, la visión de esa carita, haciendo globitos con mi leche era espectacular
La levanté nuevamente, y aunque nunca había probado el beso blanco, le fui pasando la lengua por la cara y juntando toda mi semen y pasándoselo a la boca de ella
- Damela que me la voy a tomar toda, y así fue… mi investigación lingüística indicaba que ya no quedaban restos
- Que asquerosito había resultado mi jefe, dijo
- Y eso está mal?
- Al contrario, me calientan mucho esas chanchaditas
La tomé de la mano y fuimos hasta el sillón, donde me dejé caer sentado.
Ella se recostó en el sillón, con la cabeza en mis piernas, donde no perdía oportunidad de darle besos a mi pija, mientras yo le acariciaba las tetas, le rodeaba los pezones con mis dedos, jugaba con su pelo, mientras trataba de recuperar el aliento
- Te propongo algo, dijo
Ay Dios mío, se encendieron todas las alarmas del soltero empedernido
- Que?
- No me gustaría que cambie nuestra relación. Quiero seguir siendo tu amiga. Ya se que soy una boluda, pero sigo enamorada de mi marido
- Ajá, o sea que fueron estos dos polvos y se terminó?
- Ni en pedo nene, yo necesito mucho una pija, y la tuya me encanta. Hagamos un pacto.
- A ver…
- Cuando uno de los dos tiene ganas de garchar le dice al otro, y si el otro está de acuerdo nos matamos en una cama, o en el auto, o donde sea. Si el otro no tiene ganas, no pasa nada, y sin rencores
- No está mal, seguí
- Lo único que prometo, y te pido a vos lo mismo, es que si en algún momento uno de los dos cree que no va más, seamos lo suficientemente buena gente para decirle al otro. Te parece?
- Me parece bárbaro le dije, mientras me agaché para besarla, bastante dulcemente para lo salvajes que habíamos sido hacía un ratito nada más
- Y recuperate pronto porque esto recién es el comienzo
(continuará)
http://www.poringa.net/posts/relatos/2160213/Relato_-Elisa_-mi-companera-de-trabajo-_parte-1_.html
y la segunda en:
http://www.poringa.net/posts/relatos/2160698/Elisa_-mi-companera-de-trabajo-_parte-2_.html
Cuando volvió del baño, yo ya había ido al de hombres, y me encontró poniéndome los pantalones.
Que? Me dijo. Ya te aburriste?
- No, por que?
- Y… te estás vistiendo
- Y… no vamos a quedarnos desnudos
- Que? Te parece que un feriado va a venir algún otro estúpido como nosotros?
- Tenés razón, aunque nunca me voy a quejar de haber venido a trabajar este feriado
- Hagamos una cosa, me dijo, nos quedamos desnuditos y empezamos a trabajar, cuando nos aburrimos de trabajar no tenemos que perder tiempo en desvestirnos y esas estupideces
- Jajajajaja, estás loca petisa, pero no es mala idea. Así que me saqué los pantalones y el slip; y me reía pensando la cara que pondrían mis socios si alguno aparecía, sobre todo porque algunos más, otros menos, pero todos le teníamos ganas a Elisita
Comenzamos con el trabajo, ella me iba alcanzando carpetas, y no perdía oportunidad de apoyar sus tetas en mi cabeza, o acariciarme la pija.
Por supuesto, a la media hora ya había logrado recuperarme, ella se dio cuenta y dijo:
- Tendríamos que descansar, no?
- Te parece?
- Creo que sí. Y dicho esto se arrodilló frente a mí y empezó con otra chupada gloriosa. Realmente no se si yo le gustaba mucho, si estaba dispuesta a hacerle pagar al pelotudo con la misma moneda, si estaba tan caliente que lo hubiera hecho con cualquiera o todas esas cosas a la vez, pero le ponía una garra al asunto… La chupaba un poco, jugueteaba con mi pija en sus pezones, la rodeaba con sus tetas y cuando yo iba para arriba lo rozaba con la lengua. Si esto no era la gloria, no se que puede serlo.
La alcé, la hice agachar contra el escritorio y empecé yo con el chupachupa. Primero unos lengüetazos largos, mientras con mi dedo gordo jugueteaba con su clítoris. Después la lengua contra él, recordando unos tips que había leído en un foro porno, tratando de dibujar el abecedario con la lengua en su botoncito. Creanme amigos, parece que funciona, porque sus gemidos eran increíbles.
Mientras yo seguía meta lengua, metí mi dedo índice en su concha, y con el mayor rozaba el otro agujerito, que no parecía muy usado, lo que por lo menos a mí, me pone como loco, cogerse un culito muy poco usado (no les pasa lo mismo?)
- Mi culito va a ser el postre, dijo. Pero primero el almuerzo, que va a ser de dos o tres platos
- Querés que te coja?
- Mmmmmmmmm sí
- Pedímelo
- Cogeme
- Como?
- Cogeme mi amor, llename de leche de nuevo
Y un caballero no se niega al pedido de una dama, así que me puse de pie y se la enterré hasta el fondo
Pegó un gritito, la levanté, le agarré las tetas y nuestras lenguas se entrelazaban
- Ay, que dura la tenés
- Te gusta así
- Si dale, cógeme duro, metémela toda hasta el fondo
- Así?
- Sí, así, llename la concha de pija
La puse de pie, se afirmó en el borde del escritorio, y mientras con el brazo izquierdo le amasaba sus tetas, con la mano derecha la masturbaba, mientras casi con violencia la penetraba.
No se cuanto duró ese polvo, pero sus gemidos se hacían mas intensos y más rápidos hasta que explotó en un orgasmo con un grito salvaje.
Yo seguía con el mete saca, pero ella salió de mi, se arrodilló, abrió grande su boca, sacó la lengua, y empezó a decir
- Dámela, dame toda la lechona
Y eso bastó para que acabara en su boca, con mis piernas temblando, pero créanme, la visión de esa carita, haciendo globitos con mi leche era espectacular
La levanté nuevamente, y aunque nunca había probado el beso blanco, le fui pasando la lengua por la cara y juntando toda mi semen y pasándoselo a la boca de ella
- Damela que me la voy a tomar toda, y así fue… mi investigación lingüística indicaba que ya no quedaban restos
- Que asquerosito había resultado mi jefe, dijo
- Y eso está mal?
- Al contrario, me calientan mucho esas chanchaditas
La tomé de la mano y fuimos hasta el sillón, donde me dejé caer sentado.
Ella se recostó en el sillón, con la cabeza en mis piernas, donde no perdía oportunidad de darle besos a mi pija, mientras yo le acariciaba las tetas, le rodeaba los pezones con mis dedos, jugaba con su pelo, mientras trataba de recuperar el aliento
- Te propongo algo, dijo
Ay Dios mío, se encendieron todas las alarmas del soltero empedernido
- Que?
- No me gustaría que cambie nuestra relación. Quiero seguir siendo tu amiga. Ya se que soy una boluda, pero sigo enamorada de mi marido
- Ajá, o sea que fueron estos dos polvos y se terminó?
- Ni en pedo nene, yo necesito mucho una pija, y la tuya me encanta. Hagamos un pacto.
- A ver…
- Cuando uno de los dos tiene ganas de garchar le dice al otro, y si el otro está de acuerdo nos matamos en una cama, o en el auto, o donde sea. Si el otro no tiene ganas, no pasa nada, y sin rencores
- No está mal, seguí
- Lo único que prometo, y te pido a vos lo mismo, es que si en algún momento uno de los dos cree que no va más, seamos lo suficientemente buena gente para decirle al otro. Te parece?
- Me parece bárbaro le dije, mientras me agaché para besarla, bastante dulcemente para lo salvajes que habíamos sido hacía un ratito nada más
- Y recuperate pronto porque esto recién es el comienzo
(continuará)
4 comentarios - Elisa, mi compañera de trabajo (parte 3)
gran historia me tienen muy intrigado +10
"se arrodilló frente a mí y empezó con otra chupada gloriosa" así nos gustan... bien putitas y decididas amigo @viejopolirrubro!! 😉
_PUNTOS para VOS
Gracias por comentar
Me alegra que te hayan gustado (y hay una cuarta y última parte)