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Soledad de la Boca

Quizás para cualquiera que vivio la experiencia le resulte simple la situación y mucho mas conocida. Pero a mi realmente me sorprendió. Estaba separado, tenia 3 hijos y una novia 20 años menor que yo. No se ¿porque?, no me lo he cuestionado nunca, no quería tener mas hijos y mucho menos con otra mujer. Pero Soledad si, tenia dos. Producto de dos relaciones anteriores y cada vez que teníamos una relación íntima, el gusto de no usar el preservativo, sus ojos me miraban desafiantes y me gritaba mientras me cabalgaba con su voz suave: ¿dámela? Un día le pregunte si realmente quería que la embarace y me dijo que si. Esto desato en mí un terrible temor a la idea que tenia y que pretendía respetarme con ella. De ahí nació una dicotomía fundamental. Por un lado el Sexo que tenía con soledad era esplendido, por otro a la hora de acabar debía luchar con sus ganas y mis deseos.
Mi primer intento fue diversificar el juego sexual de la pareja, como para no estropear la parte pasional de la misma. Y celebrar su cuerpo tratando de eyacular cada espacio del mismo como una fiesta. La Cara, el culo, la espalda, el vientre, el pelo, los ojos, los pies, las rodillas, las manos, los labios. Pero la boca se me negaba para eyacular, aunque no metía presión sentía terribles imágenes de su boca llena de mi leche. No se negaba a fellarme, pero cuando el ritmo se ponía álgido, se dedicaba a otros menesteres tanto o igual de bellos.
Pero estando una vez en su dormitorio y yo de rodillas con una sola pierna como un torero tenia mi pija en su boca, mientras ella estaba sentada masturbándose fue indescriptible.
La coas se puso muy pasional y nadie aflojaba. Ella con sus dedos se masturbaba el clítoris con mi pene a fondo en su boca. Yo movía mi cintura para acompañar el ritmo de su boca con su fuera su vagina.
Así estabas cuando sentí que ella se iba a ir, mi pija sentía sus estremecimientos en su delicada lengua y meneo. No lo pude evitar mientras ella acababa yo termine en su boca.
Ver sus sensuales labios rosados y carnosos empapados de mi semen fue genial. Me miraba extenuada cuando vi que desafiante se trago la leche que tenía en su boca y volvió por las últimas gotas que salían y mojaban mi glande.
La relación no duro mucho tiempo mas, jamás termine dentro de su vagina, pero me quedó mas que claro que a pesar de no haber llegado ahí juntos, habíamos tenido "un orgasmo" mutuo. La unidad del encuentro de los géneros, total, pero por otra vía alternativa.
Sinceramente, algo que marco mi vida sexual adulta posterior.

1 comentarios - Soledad de la Boca

kramalo
es medio raro lo que contás de ella (bah!, raro no), no será que queria otro pibe para pedirte alimentos...? mira que hay de ésas. Yo me salve recagando una vez....