Mi secretaria Virgen

Después de entrevistar a varias candidatas, decidí contratar como mi secretaria a una muchacha de 22 años, muy inteligente, el día de la entrevista a fin de verme "profesional" no me fijé más en ella. Cuál sería mi sorpresa su primer día de trabajo cuando al llegar a mi oficina vi una muchacha con un culote como me gustan, cadera ancha y nalgas paraditas, cual sería mi sorpresa de ver que era mi nueva secretaria. Así pasaron los primeros 3 meses, yo admirando su culo cada vez que caminaba hacia su escritorio, en la oficina sólo somos ella y yo así que no había problema de mirarla siempre y cuando ella no se diera cuenta. Sin embargo las conversaciones se fueron haciendo más y más personales y las indirectas más y más directas. Finalmente un día me venía a entregar unos cheques para firmar cuando me levante "de improviso" y al chocar se cayeron al suelo, al agacharnos los dos a levantarlos nos quedamos mirando y sin pensarlo nos empezamos a besar. En ese momento me dí cuenta por su manera de besar que era la primera vez que lo hacía. Besaba sólo con los labios sin usar la lengua y sentía que literalmente tenía calentura de lo emocionada que estaba. Conforme la fuí besando se fue soltando y mis manos recorrieron su espalda y llegaron a sus nalgotas, las cuales ella me dejó acariciar durante mucho tiempo. Le levanté la blusa y le chupé sus pezones, ella es muy blanca así que los tiene rositas, además es copa C y como es muy chaparrita se le ven todavía más grandes. Yo sólo oía sus gemidos de placer y empecé a desabrochar sus jeans ajustados, me tope con una puchita muy peluda muy, pero muy húmeda, apenas toqué sus labios interiores cuando sentí su primer orgasmo. En ese momento la coloqué en el sofá de cuero que hay en la oficina y le quite toda la ropa. Me dijo: "soy virgen, ¿me va a doler?" y le conteste con la mexicana frase "y te va a gustar", claro que le dolió, tiene la pucha muy apretada y al principio no la pude penetrar, después de varios intentos encontramos una posición donde a ella le gusto y seguimos follando todo el dia, desde entonces arreglo mi agenda para acabar mi trabajo a medio día y el resto de la tarde nos la pasamos leyendo libros de digitopuntura erótica y practicando.