Mi novia en bolas frente al vecino

Una noche, en que nos encontrábamos cenado con mi novia en un bonito restaurante de la ciudad, luego de la segunda botella de vino, como era costumbre cuando lograba que ella tomara un poco demás, nos pusimos muy cachondos y osados; sin saber que esta vez la cosa iba a ir un poco mas allá.
Asi que, entre disimuladas caricias bajo la mesa, le dije, como tantas veces en el pasado, que me calentaría mucho verla cogiendo con otro tipo, que cuanto mas puta era, mas loco me volvía (lo cual era cierto, para mi ella es el objeto sexual, el sexo en si, no hay nada que me caliente mas que ella). A esto ella respondió, juguetona, corriéndose el escote, y con cara de putita pervertida, mostrándoles las tetas a unos chicos que cenaban delate nuestro.
Como se imaginaran, esto me puso a mil, me explotaba la pija, y esta muy ansioso por ver hasta donde podía llegar esta situación, asi que le dije, por que no nos vamos y hacemos lo de "el vecino". A lo que ella contesto afirmando muy sensualmente.
Debo contar, que desde hacía varios meses, mi novia, bajo insistencia mía, cerraba las persianas en tetas justo a la hora en que el vecino cenaba. Este, naturalmente esperaba religiosamente ese momento, y hasta incluso, a verguenza de él, y sin disiimulo por parte de ella, han intercambiado un par de palabras una vez en que coincidieron cdo ella abrió la persiana en tetas y el se encontraba fumando con la suya abierta. Esta situación, con la que me he calentado mucho, fue hasta ese entonces una de las cosas mas fuertes que me había pasado, ellos dos, a escasos dos metros charlando con mi novia en tetas y sin escrupulo alguno. Asi que a partir de ahi, comence a insistir para que un dia vaya y se lo coja mientras yo los espiara.
Finalmente ese feliz día había llegado, auqnue aún no estaba seguro si en el momento de los hechos ella se iba a animar. En cuanto a mi, sabía que me sería muy dificil, muy contradictorio, pero me había jurado aguantar los celos hasta el ultimo momento y darle espacio al morbo.
Desde que dijimos esas ultimas palabras en el restorant, los dos quedamos en un silencio muy profundo, incluso en el taxi, se notaba el miedo y la inseguridad, peor también la determinación absoluta.
Al llegar al dpto., casi sin esperar, llevamos a cabo el plan. Yo apague el calefon, y esparcí unos fosforos quemos al lado del mismo (lo cual usaría de escusa para atraer al vecino); y ella se quito toda la rota, se dejó unas botas negras altas que le quedan divinas y se puso sobre su cuerpo desnudo tan solo una camisa mía. sin abotonar.
La imagen era terriblemente fuerte, mi novia tenia 23 años, delgadita, peor con unas tetas riquisimas, redondas suculentas, y pezones hermosos, rosas de ideal tamaño. Una cinturita bien marcada, pancita sexy, y las mejore speirnas que se puedan imaginar... y la frutilla del postre, la conchita bien depiladita.
Este era el espectaulo, con su camisa abierta y sus botas altas, con cara de felino caliente, cabellera larga y abultada que caía sobre sus hombros y espalda imprimiendole una imagen salvaje.
Antes de ir hacia la puerta la bese y le dije qe todo iba a etsra bien, ella me respondió con una mirada suplicante pero me resistí, y lejos de ceder le dije firme que era ahora o nunca. Y fuí a esconderme en el lavadero, cuya puerta esta en la cocina pegada al calefón.
De ahí en mas todo fue oidos y especulación:
Escuche la puerta, ella sosteniendose la camisa a la altura del pecho, impaciente, fue hasta la puerta siguiente y tocó tiembre. La espera fue corta, pero ese par de segundos se le hicieron eternas dudas y miedos. Finalmente la puerta se abrió, y el vecino con atónito, peor con disimulo, le preguntó que es lo que buscaba. A lo que ella, lo mas natural posible le cuentó que se quería bañar, que s ele había apagado elcalefón, si sería tan amable de ayudarla.
Naturalmente a esto el repondió imediatamente, fue a buscar calzado, dejando a mi novia esperando en el pasillo, y enseguida salio acomapañandola hasta la cocina en a menos de un metro donde yo me encontraba escondido.
Ami el corazón me iba a mil, nervios, verguenza, celos, calentura, y una maratón de sensaciones fuertisimas me atormentaban.
Mientras que en la cocina, ella comenzó a desplegar su "ingenuidad" y soltandose la camisa, levantando los brazos como para recogerse el pelo le comenzó a hablar: como te llamás? - le dijo; y el al darse vuelta y ver semejante espectaculo, no pudo menos que tardar varios segundos en recordar su nombre y contestar.
El chico trataba de controlar sus nervios, y actuar normalmente, pero la situación era complicada, mi novia es una bestia infartante, y se le había puesto en bolas a menos de un metro de distancia. La situación era tan irreal, tan ideal y perfecta, que el chabón no entendía nada, peor quería actuar acorde, asi que a costo de muchisimo esfuerzo continuo la conversación intentando disimular lo que en el tono de su vos quedaba en evidencia.
La conversación siguió un poco más, ella le confesó que estaba borracha y que se quería cmabiar para salir, y el le pregunto un par de cosas sin snetido. Yo mientras tanto disfrutaba escuchando como mi novia era la que llevaba la vos de mando y desafío ante el muchacho que se encontraba totalmente desorbitado.
Finalmente, logró prender el calefón, y al darse vuelta nuevamente, ya no pudiendo resistirse mas (en ese entonces mi novia estaba con la camisa abierta, una mano en la cintura y con la otra acariciandose el pelo que le caía por el hombro izquierdo) deposito su mirada largamente por la conchita depilada y las duras y suculentas tetas, cuyos pezones se encontraban duros por el frío.
Al ver que los nervios del chico lo inhibían completamente, ella le pregunto como le podía pagar ese favor. A lo que el contesto que no había sido molestia alguna que estaba para ayudarla. Asi que al dirigirse hacia la puerta, ella lo beso en la mejilla rosandolo suabemente con su piel desnuda, y al este no responder, ella comenzó a caminar hacia el baño levantadose la camisa dejandole ver su hermosa colita rendonda, y la parte de atras de la conchita... Mi novia esperaba que en cualquier momento se le tire ensima, peor al darse vuelta al llegar a la puerta del pasillo, vio que el vecino seguía en la misma posición mirando atónito sin poder moverse, y cuando vió que ella se volteaba para mirarlo, no aguanto mas la verguenza y los nervios y se marchó.
Como podrán imaginar luego de esto hicimos el amor como animales salvajes varias veces, pero lo mas gracioso fue que mientars lo estabamos haciendo el timbre sono como cinco veces, y volvía a sonar... era el vecino que recién había caido en lo que le había pasado y quería volver a cobrar revancha. Pero esa vez no le abrimos.