Pido a mis queridos lectores que lean los anteriores relatos para acabar de comprender totalmente esta nueva vivencia con la yegua de mi Tía. Los comentarios me ayudan a seguir en esta tarea hermosa de que todos se pajeen con mis historias reales y si quieres puedes dejarme puntos que me incentivan a seguir calentándolos…
Hoy desperté, fui a la cocina en pelotas y preparé el café negro para mi Tía y para mí. Al entrar a su habitación me sorprendí al verla boca abajo completamente desnuda, fumando y viendo su portátil. Estaba leyendo mis relatos de Poringa. Me recosté encima suyo y le apoye la pija hinchada entre sus nalgas como si nada y nos pusimos a leer el último relato juntos.
-Sobrino- susurró mientras daba una pitada-, ¿no te parece increíble la cantidad de personas que han leído mis andanzas? Son miles…
-Sí Tía- dije apoyándola un poco más fuerte.
-Es que me imagino y no puedo creerlo. Son miles de machos calientes, miles de vergas hinchadas. Seguro que se pajearon imaginando mi cuerpo en tanguita de yegua puta como escribes tú- dijo riendo. Miles de vergas de todo tipo, anchas, largas, negras, blancas, cabezonas…,jóvenes, adolescentes, maduras...
-Tía, jajaja… es divertido no?- mi pija estaba como una estaca.
-Sí!- afirmó abriendo sus piernas un poco…- Me excita mucho imaginar esos cuerpos desnudos masajeándose el nabo duro y pensando en mí, kilos y kilos de carne venosa… rellena de leche calentita. Pensando en mis tetas redondas, en mis tacones, en mi culo bronceado, queriendo cogerme…, sos un hijo de puta Sobri, que bien que relatas mis historias!
-Sí, increíble no?- gemí mientras le metía la puntita disimuladamente. Ella seguía hablando como si nada pasara.
-He sumado todos los lectores y superan los 50000!! Te imaginas?- preguntaba mientras con su concha buscaba hambrienta mi verga humedecida-. 50000 machos que al menos una vez hecharon lechita caliente pensando en mí… esa es mucha leche Sobri, no?- dijo mientras empujaba de golpe introduciéndose el pedazo hasta los huevos.
-Mucha leche Tía, se ve que los calientas mucho- aseguré mientras le devolví la estocada con fuerza.
-Ahh sí! Me encahhntaría mmm que esos machos ahhh… se ahhhcabaran todoshh juntosahh en mi cuerpo, ahhh en mi… bocahhh, en ahhhh en mis tetas…-gemía la muy putona mientras la clavaba salvajemente.
-Sí Tíahh! Mmhhh serían litros de leche caliente…ahhh de todos los gustos… espesa y sabrosahhh para vos..mhh!
-Ajahhh…! Ahh si todoshhh se acabaran en mi bañera..mmmjjhh podría darme un baño de lechehhhahh!! Y beberme el caldito calentitohhh ahhh, mmm que rico…mi pancita llenitah…ahhh!!
No pude aguantar mucho más, saqué la pija de golpe y acabé abundantemente sobre la pantalla de su portátil, sobre su propio relato. No dijo nada, sólo empezó a lamer la leche que se iba deslizando lentamente hacia abajo, y con la lengua recogió cada gotita de mi semen recién salido y caliente. La pantalla quedó reluciente, y siguió leyendo. Sólo introduje mi lengua en su concha a punto de estallar, la dejé inmóvil para que la muy puta trabajara. Refregaba su pulpa en mi boca con fuerza en silencio mientras encendía otro cigarrillo y siguió leyendo, en unos minutos tuvo un orgasmo monumental en mi boca, en mi lengua quieta y tensa… Quedó exhausta, agarró su celular y marcó un número:
-Amor- con voz suave saludó a su reciente pareja- ¿has visto alguna vez la web de Poringa? Hay unos relatos muy interesantes…- , aseguró mientras me miraba aún con leche en sus labios, -sobre todo los de un tal porotito714… Algún día los vamos a leer mientras me cogés amor-.
Le gustaba jugar con fuego a la muy yegua.
Esa era mi Tía y así la recuerdo en aquellos meses de verano.
(Feliz 2011. Dedicado a todos los seguidores de la Tía, si quieren ser incluidos en algunos de los próximos relatos escriban un mensaje privado con alguna propuesta de tema)
Hoy desperté, fui a la cocina en pelotas y preparé el café negro para mi Tía y para mí. Al entrar a su habitación me sorprendí al verla boca abajo completamente desnuda, fumando y viendo su portátil. Estaba leyendo mis relatos de Poringa. Me recosté encima suyo y le apoye la pija hinchada entre sus nalgas como si nada y nos pusimos a leer el último relato juntos.
-Sobrino- susurró mientras daba una pitada-, ¿no te parece increíble la cantidad de personas que han leído mis andanzas? Son miles…
-Sí Tía- dije apoyándola un poco más fuerte.
-Es que me imagino y no puedo creerlo. Son miles de machos calientes, miles de vergas hinchadas. Seguro que se pajearon imaginando mi cuerpo en tanguita de yegua puta como escribes tú- dijo riendo. Miles de vergas de todo tipo, anchas, largas, negras, blancas, cabezonas…,jóvenes, adolescentes, maduras...
-Tía, jajaja… es divertido no?- mi pija estaba como una estaca.
-Sí!- afirmó abriendo sus piernas un poco…- Me excita mucho imaginar esos cuerpos desnudos masajeándose el nabo duro y pensando en mí, kilos y kilos de carne venosa… rellena de leche calentita. Pensando en mis tetas redondas, en mis tacones, en mi culo bronceado, queriendo cogerme…, sos un hijo de puta Sobri, que bien que relatas mis historias!
-Sí, increíble no?- gemí mientras le metía la puntita disimuladamente. Ella seguía hablando como si nada pasara.
-He sumado todos los lectores y superan los 50000!! Te imaginas?- preguntaba mientras con su concha buscaba hambrienta mi verga humedecida-. 50000 machos que al menos una vez hecharon lechita caliente pensando en mí… esa es mucha leche Sobri, no?- dijo mientras empujaba de golpe introduciéndose el pedazo hasta los huevos.
-Mucha leche Tía, se ve que los calientas mucho- aseguré mientras le devolví la estocada con fuerza.
-Ahh sí! Me encahhntaría mmm que esos machos ahhh… se ahhhcabaran todoshh juntosahh en mi cuerpo, ahhh en mi… bocahhh, en ahhhh en mis tetas…-gemía la muy putona mientras la clavaba salvajemente.
-Sí Tíahh! Mmhhh serían litros de leche caliente…ahhh de todos los gustos… espesa y sabrosahhh para vos..mhh!
-Ajahhh…! Ahh si todoshhh se acabaran en mi bañera..mmmjjhh podría darme un baño de lechehhhahh!! Y beberme el caldito calentitohhh ahhh, mmm que rico…mi pancita llenitah…ahhh!!
No pude aguantar mucho más, saqué la pija de golpe y acabé abundantemente sobre la pantalla de su portátil, sobre su propio relato. No dijo nada, sólo empezó a lamer la leche que se iba deslizando lentamente hacia abajo, y con la lengua recogió cada gotita de mi semen recién salido y caliente. La pantalla quedó reluciente, y siguió leyendo. Sólo introduje mi lengua en su concha a punto de estallar, la dejé inmóvil para que la muy puta trabajara. Refregaba su pulpa en mi boca con fuerza en silencio mientras encendía otro cigarrillo y siguió leyendo, en unos minutos tuvo un orgasmo monumental en mi boca, en mi lengua quieta y tensa… Quedó exhausta, agarró su celular y marcó un número:
-Amor- con voz suave saludó a su reciente pareja- ¿has visto alguna vez la web de Poringa? Hay unos relatos muy interesantes…- , aseguró mientras me miraba aún con leche en sus labios, -sobre todo los de un tal porotito714… Algún día los vamos a leer mientras me cogés amor-.
Le gustaba jugar con fuego a la muy yegua.
Esa era mi Tía y así la recuerdo en aquellos meses de verano.
(Feliz 2011. Dedicado a todos los seguidores de la Tía, si quieren ser incluidos en algunos de los próximos relatos escriban un mensaje privado con alguna propuesta de tema)
4 comentarios - Mi Tía visita Poringa