Era una mañana gris, habia llovido desde las 6 pm del dia anterior, haciendo, de por si, mas frio el dia.
Me sente en la ventana del apartamento, viendo pasar los vehiculos por la calle, con nostalgia. Acabas de irte...
Recuerdo cuando a las 7 llegaste sin avisar, con la excusa de una visita corta, para decirme que la habias dejado plantada, -Nadie me la chupa como tu, dijo el, y yo solo rei, porque conocia su excusa para empezar la placentera faena, porque el sexo con el es salvaje, sin culpa y con el motivo: la pasion, la atraccion que sentimos mutuamente.
-¿Quieres algo de comer?
-Pues si, la verdad.
Nos sentamos a comer en el sofa, pasta del almuerzo.
¿No sabes cocinar otra cosa?, yo solo rei, argumentando que simplemente era casualidad el hecho de que cada vez que el venia yo ya habia hecho pasta, era lo que tenia.
Veiamos television, y en los comerciales apartabamos los platos y las copas de vino para sentir que realmente uno estaba al lado del otro, que nada nos iba a interrumpir, a excepcion del intesante programa de tv. Le empezaba a zafar uno a uno los botones de su camisa blanca, montandome encima de el y nos miramos directamente a los ojos, diciendonos "Te amo" con la mirada, aunque nuestras bocas no se atrevian a decir esas palabras, eran como prohibidas en nuestra extraña relacion.
Llego el momento en que mas nada importaba, el empezo a quitarme el sweater primero sintiendo mis caderas, luego mi cintura hasta mis senos, sintiendo mis pezones que estaban realmente duros, aunque cargara un bra.
Termino de quitarme el sweater y empezo a luchar con mi sosten, -es que pierdo la concentracion. "Yo me lo quito". Siempre me ha gustado su mirada cuando ve mis senos desnudos, es de sorpresa, pero a la vez esa mirada de he visto esto muchas veces. Pero no pierde el tiempo y comienza a sentirlos con sus manos con mas fuerza aun, realmente me pone muy humeda que toque tanto mis senos. Luego empieza a explorar toda el area con su lengua, amo esos pequeños toques que me da en los pezones con la punta de la lengua, su rigida lengua.
Es ahi cuando empiezo a perder el control de mis caderas, y con el movimiento involuntario de mis caderas siento como va creciendo poco a poco su pene debajo de ellas. Mientras mas toques, mas lamidas, mas chupadas me muevo aun mas rapido haciendo que el tambien vaya gradualmente perdiendo el control de sus sentidos. Es ahi cuando me dedico a ir bajando hacia donde esta su pene.
Le desabrocho el cinturon, le bajo el cierre y le logro quitar el pantalon. Y es cuando veo y analizo la magnitud y la longitud de su pene. Lo mojado que el tambien esta. Y lo mas excitado porque sabe que tengo la cara que se la chupare hasta que el liquido que cubre su pene sea mi saliva. Empiezo tocandolo con el interior puesto, pero mi canso asi que lo saco de su jaula de tela para masturbar su pene, deslizando el prepucio sobre el glande. Arriba, abajo, arriba, abajo. Lento, mas rapido, sin perder la dureza del toque.
Pero no soporto verlo asi, me gusta mas en mi boca, asi que no pierdo el tiempo, y comienzo a masturbarlo mientras chupo su glande, se que le encanta, se retuerce de placer en el sofa, y yo sigo, tratando de cumplir mi cometido. Que delicioso sentir sus palpitaciones dentro de mi boca, porque se que mi lengua las provoca, y eso me encanta.
-Siento que me voy a venir!
-No! No te vengas todavia!
Me detengo y es ahi cuando empiezo a quitarme el mono, y luego mis panties.
-Espero que hayas traido un condon.
-Sabes que siempre cargo uno. Pasame el pantalon.
Saco un condon, que la verdad no me esperaba, ultra sensitivo, decia el empaque.
-¿Es que nunca sientes nada?
-Es de las reservas.
Rapidamente lo saco de su empaque y vistio a su pene con la membrana de latex.
Me prepare para montarme sobre su pene, y me di cuenta de que no era igual que las otras veces, se sentia mas grande, mi vagina sufrio un poco, pero valio la pena, porque cuando entro completamente senti como si hubiese entrado en una dimension desconocida, donde la felicidad se basa en conseguir el orgasmo mas fuerte.
No pare de moverme de arriba a abajo rapidamente, no podia parar de mover mis caderas al ritmo de las de el.
Me agarro con fuerza y me acosto debajo de el en un misionero super caliente, yo no paraba de gemir, aun sabiendo que cuatro familias podian oirme gritando, nada importaba, nada, solo su pene entrando y saliendo de mi vagina, ese pene con las palpitaciones a mil queriendo llegar al orgasmo y una vagina que no se lo permitia.
Me tomo con fuerza de nuevo, esta vez subiendome por mi cintura para volver a la posicion anterior y yo ganar terreno quedando sobre el.
Entre gemidos dijo mmm... mi posicion favorita.
Empece a mover mis caderas, arriba, abajo, arriba, abajo, hasta que empece a ver la luz, la salida de esa dimension, estaba viniendome con ese orgasmo tan perfecto, y senti dentro de mi la palpitacion mas fuerte marcando el final con dos gemidos al unisono.
Una llamada telefonica interrumpio mis pensamientos sobre ti. Era el.
-Hola mi niña.
-Hola.
-¿Que pasa? ¿Te sucedio algo?
-No nada.
-Bueno eso espero. ¿Almorzamos juntos?
-No he cocinado nada. Si estas dispuesto a brindarme el almuerzo con gusto lo aceptare. Jajaja!
-Pues si, te paso buscando.
-¿A que hora?
-A las 12:30.
-Bien. Me repicas.
-Un beso.
-Igual para ti.
En mi mente, la verdad solo retumbaba el eco de esa frase "Hola mi niña". El nunca me habia dicho asi, la verdad el le decia eso a las chicas con quien siempre salia, las que nunca llamaba despues de una noche como la de anoche. Y el hecho de que yo quizas soy consideraba por el como ese tipo de chica era lo que mas me atormentaba.
-¿Es que no se da cuenta de que lo que siento por el es real?
Sin darme cuenta me salio esa frase en voz alta. Son las 11:30 asi que voy a bañarme, necesitaba sentir el agua caliente recorriendo mi cuerpo. Realmente hacia un frio endemoniado. Y esta ducha me recordo a la ducha que tome despues de lo de anoche, solo faltaba un elemento, el. Sentir sus manos recorriendo cada centimetro de mi cuerpo desnudo, pasandome la esponja enjabonada por la espalda.
Termino de ducharme, y me pongo frente al closet, para escoger la ropa que voy a ponerme y saco un vestido comodo con mis zapatos favoritos y unos aretes de plata.
Me alisto y espero su repique.
Suena el celular y bajo en el ascensor, voy hacia donde esta su vehiculo, me monto en el, y como si fueramos una pareja, me beso casualmente en la boca.
Yo le pregunto extrañada -¿y ese beso fue por...? ¿Acaso no puedo besar a mi novia?.
-¿Realmente soy tu novia?
-Si.
-¿Y cuando me lo preguntaste?
-Yo lo asumi.
-¿Y es que acaso mi opinion no vale?
-Pues... Bueno... ¿Quieres ser mi novia?
Mi corazon palpitaba, mi mente hacia que sudara, si, esa era la respuesta, y simplemente quedaba 🤤 de pensar todo lo que ibamos a gozar, y todas las veces que ibamos a tirar, que no iba a existir la madrugada, que nosotros le ibamos a poner el limite al dia...
-Si.
-Te amo -le dije.
-Como yo a ti.
Me sente en la ventana del apartamento, viendo pasar los vehiculos por la calle, con nostalgia. Acabas de irte...
Recuerdo cuando a las 7 llegaste sin avisar, con la excusa de una visita corta, para decirme que la habias dejado plantada, -Nadie me la chupa como tu, dijo el, y yo solo rei, porque conocia su excusa para empezar la placentera faena, porque el sexo con el es salvaje, sin culpa y con el motivo: la pasion, la atraccion que sentimos mutuamente.
-¿Quieres algo de comer?
-Pues si, la verdad.
Nos sentamos a comer en el sofa, pasta del almuerzo.
¿No sabes cocinar otra cosa?, yo solo rei, argumentando que simplemente era casualidad el hecho de que cada vez que el venia yo ya habia hecho pasta, era lo que tenia.
Veiamos television, y en los comerciales apartabamos los platos y las copas de vino para sentir que realmente uno estaba al lado del otro, que nada nos iba a interrumpir, a excepcion del intesante programa de tv. Le empezaba a zafar uno a uno los botones de su camisa blanca, montandome encima de el y nos miramos directamente a los ojos, diciendonos "Te amo" con la mirada, aunque nuestras bocas no se atrevian a decir esas palabras, eran como prohibidas en nuestra extraña relacion.
Llego el momento en que mas nada importaba, el empezo a quitarme el sweater primero sintiendo mis caderas, luego mi cintura hasta mis senos, sintiendo mis pezones que estaban realmente duros, aunque cargara un bra.
Termino de quitarme el sweater y empezo a luchar con mi sosten, -es que pierdo la concentracion. "Yo me lo quito". Siempre me ha gustado su mirada cuando ve mis senos desnudos, es de sorpresa, pero a la vez esa mirada de he visto esto muchas veces. Pero no pierde el tiempo y comienza a sentirlos con sus manos con mas fuerza aun, realmente me pone muy humeda que toque tanto mis senos. Luego empieza a explorar toda el area con su lengua, amo esos pequeños toques que me da en los pezones con la punta de la lengua, su rigida lengua.
Es ahi cuando empiezo a perder el control de mis caderas, y con el movimiento involuntario de mis caderas siento como va creciendo poco a poco su pene debajo de ellas. Mientras mas toques, mas lamidas, mas chupadas me muevo aun mas rapido haciendo que el tambien vaya gradualmente perdiendo el control de sus sentidos. Es ahi cuando me dedico a ir bajando hacia donde esta su pene.
Le desabrocho el cinturon, le bajo el cierre y le logro quitar el pantalon. Y es cuando veo y analizo la magnitud y la longitud de su pene. Lo mojado que el tambien esta. Y lo mas excitado porque sabe que tengo la cara que se la chupare hasta que el liquido que cubre su pene sea mi saliva. Empiezo tocandolo con el interior puesto, pero mi canso asi que lo saco de su jaula de tela para masturbar su pene, deslizando el prepucio sobre el glande. Arriba, abajo, arriba, abajo. Lento, mas rapido, sin perder la dureza del toque.
Pero no soporto verlo asi, me gusta mas en mi boca, asi que no pierdo el tiempo, y comienzo a masturbarlo mientras chupo su glande, se que le encanta, se retuerce de placer en el sofa, y yo sigo, tratando de cumplir mi cometido. Que delicioso sentir sus palpitaciones dentro de mi boca, porque se que mi lengua las provoca, y eso me encanta.
-Siento que me voy a venir!
-No! No te vengas todavia!
Me detengo y es ahi cuando empiezo a quitarme el mono, y luego mis panties.
-Espero que hayas traido un condon.
-Sabes que siempre cargo uno. Pasame el pantalon.
Saco un condon, que la verdad no me esperaba, ultra sensitivo, decia el empaque.
-¿Es que nunca sientes nada?
-Es de las reservas.
Rapidamente lo saco de su empaque y vistio a su pene con la membrana de latex.
Me prepare para montarme sobre su pene, y me di cuenta de que no era igual que las otras veces, se sentia mas grande, mi vagina sufrio un poco, pero valio la pena, porque cuando entro completamente senti como si hubiese entrado en una dimension desconocida, donde la felicidad se basa en conseguir el orgasmo mas fuerte.
No pare de moverme de arriba a abajo rapidamente, no podia parar de mover mis caderas al ritmo de las de el.
Me agarro con fuerza y me acosto debajo de el en un misionero super caliente, yo no paraba de gemir, aun sabiendo que cuatro familias podian oirme gritando, nada importaba, nada, solo su pene entrando y saliendo de mi vagina, ese pene con las palpitaciones a mil queriendo llegar al orgasmo y una vagina que no se lo permitia.
Me tomo con fuerza de nuevo, esta vez subiendome por mi cintura para volver a la posicion anterior y yo ganar terreno quedando sobre el.
Entre gemidos dijo mmm... mi posicion favorita.
Empece a mover mis caderas, arriba, abajo, arriba, abajo, hasta que empece a ver la luz, la salida de esa dimension, estaba viniendome con ese orgasmo tan perfecto, y senti dentro de mi la palpitacion mas fuerte marcando el final con dos gemidos al unisono.
Una llamada telefonica interrumpio mis pensamientos sobre ti. Era el.
-Hola mi niña.
-Hola.
-¿Que pasa? ¿Te sucedio algo?
-No nada.
-Bueno eso espero. ¿Almorzamos juntos?
-No he cocinado nada. Si estas dispuesto a brindarme el almuerzo con gusto lo aceptare. Jajaja!
-Pues si, te paso buscando.
-¿A que hora?
-A las 12:30.
-Bien. Me repicas.
-Un beso.
-Igual para ti.
En mi mente, la verdad solo retumbaba el eco de esa frase "Hola mi niña". El nunca me habia dicho asi, la verdad el le decia eso a las chicas con quien siempre salia, las que nunca llamaba despues de una noche como la de anoche. Y el hecho de que yo quizas soy consideraba por el como ese tipo de chica era lo que mas me atormentaba.
-¿Es que no se da cuenta de que lo que siento por el es real?
Sin darme cuenta me salio esa frase en voz alta. Son las 11:30 asi que voy a bañarme, necesitaba sentir el agua caliente recorriendo mi cuerpo. Realmente hacia un frio endemoniado. Y esta ducha me recordo a la ducha que tome despues de lo de anoche, solo faltaba un elemento, el. Sentir sus manos recorriendo cada centimetro de mi cuerpo desnudo, pasandome la esponja enjabonada por la espalda.
Termino de ducharme, y me pongo frente al closet, para escoger la ropa que voy a ponerme y saco un vestido comodo con mis zapatos favoritos y unos aretes de plata.
Me alisto y espero su repique.
Suena el celular y bajo en el ascensor, voy hacia donde esta su vehiculo, me monto en el, y como si fueramos una pareja, me beso casualmente en la boca.
Yo le pregunto extrañada -¿y ese beso fue por...? ¿Acaso no puedo besar a mi novia?.
-¿Realmente soy tu novia?
-Si.
-¿Y cuando me lo preguntaste?
-Yo lo asumi.
-¿Y es que acaso mi opinion no vale?
-Pues... Bueno... ¿Quieres ser mi novia?
Mi corazon palpitaba, mi mente hacia que sudara, si, esa era la respuesta, y simplemente quedaba 🤤 de pensar todo lo que ibamos a gozar, y todas las veces que ibamos a tirar, que no iba a existir la madrugada, que nosotros le ibamos a poner el limite al dia...
-Si.
-Te amo -le dije.
-Como yo a ti.
3 comentarios - Para ti, que disfrutas de un buen relato erotico
Excelente Relato!
Ojala Sea Tuyo!
Segui Escribiendo!
:buenpost: