Esta es la tercera y última parte de la saga "después de un relato...", viene de el post anterior. Publiqué rápidamente esta última parte, porque no les gustó que se divida tanto, aunque lo había hecho para que no tuviesen mucho para leer en cada post. 🤔
Agradezco los comentarios y puntos de las partes anteriores y espero que les guste.
Haciendo algo de fuerza, me quité mis zapatos, y los pantalones que estaban a la altura de los tobillos, dejándome mayor libertad, ella se deshizo de sus tacos también, recién en esos instantes me percaté de que no llevaba medias, era solo su piel, depilada, suave, con ese dulce perfume que ahora estaba siendo tapado por el olor de su sexo.
Con el mayor cuidado posible, le quité su ropa interior, descubrí unos pocos vellos púbicos, señalaban mi camino. La agarré fuertemente por la cintura, y la senté sobre el escritorio, ella, con su sexo chorriante y su mirada suplicante, abrió sus piernas rápidamente, mientras que yo bajaba a zambullirme en ellas.
Separé los labios con mi mano izquierda, mojé el dedo mayor de la mano derecha y jugué con su clítoris, mientras paseaba mi lengua en su humedad, hice esto poco tiempo, porque el cuello me reclamaba por la incomodidad de la posición, decidí ser mas práctico, empecé a jugar con su clítoris con mi lengua, succionándolo y dándole pequeños golpecillos con la lengua, mientras dos de mis dedos, se introducían apenas en la entrada de su sexo. Miré su rostro, y vi como se masajeaba los pechos, presionaba y estiraba sus pezones y se mordía fuertemente los labios para no gemir.
No se cuanto tiempo habremos estado así, debo decir que no fue poco, me impresionaba la resistencia de esta mujer, porque empezaba a dolerme la mandíbula, notaba su respiración agitarse cada vez mas, empezó a empujar mi cabeza, intentando que meterme en su interior, para luego estremecerse en un salvaje orgasmo. Yo, con su agrio sabor aún en mi boca, me levanté, vi sangre en sus labios, resultado de morderlos para no gemir, y no pude contenerme, primero, pasé mi lengua por la sangre en su labio, ella dejó su boca abierta, luego limpié sus dientes de sangre y luego me metí en su boca, jugábamos con sabor a sangre y sexo en nuestras bocas, pero nada importaba.
Mi miembro estaba durísimo, dejando escapar liquido preseminal, ella me miró con ojos pícaros y bajó silenciosamente, ahora era yo quien se sostenía en el escritorio mientras ella, torpemente, metía mi hombría en sus labios, para hacerlo aparecer luego, reluciente, duro…
Le indiqué con mi mano en su nuca que faltaba poco, levantó su mirada, se que lo habría hecho, pero sentí que no lo deseaba. Extendí mi mano, ella la tomó, y la ayudé a incorporarse, parada, apoyando su cabeza en mi pecho, siguió masturbándome hasta el final.
Si puedo jactarme de una cosa, es que soy un hombre de, mínimo, 3 al hilo, entonces, mi miembro seguía listo, lubricado por mis propios jugos, sin mediar mucho mas que unos besos, la ayudé a girar, poniéndose de espaldas, apoyada sobre el escritorio, esto, sumado a que soy algo mas alto, me dificultó la tarea de entrar en ella, pero lo suplí separando y flexionando levemente las piernas. Comencé a jugar con la punta de mi miembro en la entrada de su sexo, masturbándola, inmediatamente, se agarró fuerte con las manos a los costados del escritorio, con lo que me mostró que llegando a su segundo orgasmo, aumenté la velocidad, masturbándola hasta que empecé a notar como arqueaba la espalda, ahí, llevé mi miembro hasta su entrada y lo metí hasta el fondo, con esto, ella se desplomó, exhausta sobre el escritorio, aún teniendo espasmos que me presionaban en su interior. Fue fantástico, pero no hacía mas que empezar, empecé a moverme en su interior, acompañando su respiración, cuando inhalaba, entraba, cuando exhalaba salía, primero despacio, solo una parte, luego mas rápido, hasta que su respiración volvió a acelerarse, todavía estaba lejos de mi orgasmo, pero ella iba por el tercero de la tarde, sin hacerme desear, empecé a moverme mas rápido, combinándolo con movimientos circulares de cadera y pocos segundos mas tardes, con todo mi miembro en su interior, terminaba violentamente…
…se levanto torpemente, aún con mi miembro dentro, cosa que me incomodo, pero no dije nada, y me dio un beso tierno en los labio, sacó mi hombría de entre sus piernas, y se dio vuelta, cruzó sus piernas alrededor de mi cintura, yo me apoyé sobre el escritorio, y empecé a marcar el ritmo, de vez en cuando, la dejaba ir hacia atrás, sosteniéndola con mi brazo para lamerle los pechos.
Mi momento estaba llegando, ella lo sabía, tomó el control y empezó marcar el ritmo, lento pero largo, llevaba mi miembro hasta la punta y entraba fuerte hasta su base, yo, con mis manos jugaba, apretando sus nalgas, separándolas, llevé una manos mas allá, y la humedecí de sus jugos, movía mis dedo mayor desde su sexo a su ano, jugando circularmente, me faltaba poco, muy poco, y la punta de mi dedo comenzaba a entrar, en otro momento, la hubiese dejado quieta, dejando que se acostumbre preparando su ano para mi miembro, pero no, no en ese momento, mis pulsaciones se elevaban, la sangre se agolpaba en mi miembro, la yema de mi dedo se movía en pequeños círculos en su ano, esto la volvió loca y me cabalgó salvaje, ferozmente. El único sonido que delataba lo que ocurría era el de su sexo chorreante al ser embestido una y otra vez por mi miembro, la velocidad aumentaba, sus uñas se clavaban en mi espalda por momentos sus dientes mordían mi hombro fuerte, clavándose en mi carne.
Por unos instantes, mientras yo la ayudaba con el movimiento, ella probaba mi sangre, mi transpiración, mi piel, mientras yo estaba todo dentro de ella, llenando su sexo y un dedo en su cola, abriéndola, llenándola… …los movimientos se hacían mas lentos, mas largos, estábamos terminando en un orgasmo profundo, silencioso… …precioso…
…terminamos el orgasmo, yo manteniendo el ritmo unos segundos mas, como se que les gusta, ella exhausta, yo también; me marca con su pierna que quiere moverse sin que salga de su interior, la acompaño, y agarra unos pañuelitos descartables de un cajón, la tomo fuerte por la cadera, y la voy quitando lentamente de mi miembro, sin dejar de ver las muecas de placer que se formaba en su rostro, ella se limpia, me extiende unos pañuelitos a mi, hago lo propio, y mientras lo hago, se acerca, me pasa sus dedos por la sangre que dejó su mordida en mi hombre, se acerca, y limpia la sangre con su lengua caliente, me da un tierno beso, y comienza a vestirse… …lenta, silenciosa, placenteramente…
…sin decir palabra, hago lo mismo, por último, tomo la hoja que había puesto sobre su escritorio, algo arrugada, y me retiro saludándola con una leve inclinación de cabeza al salir.
Fui hasta el baño y me enjuagué abundantemente la cara, aún sin salir de ese estado de sorpresa y excitación en el que me encontraba…
…con mi sexo aún duro, fui hasta mi oficina y me senté mientras pensaba como retomar mis tareas después de una experiencia como aquella, hasta que el teléfono me trajo de vuelta al mundo real, levanto el teléfono y solo escucho silencio, en un momento, creí escuchar la respiración turbada y entrecortada contra el teléfono… …era ella….
- …ya que… …hoy no pudimos revisar los números, deberé solicitarle que la revisemos mañana a primera hora…
…muchas gracias…
Con esto concluye la saga "Después de un relato...", espero les haya gustado leerla, tanto como a mi vivirla...
...a modo anecdótico, les cuento que pospuso esa última reunión, y no volvió a suceder nada desde entonces...
...por el momento siento que me está evitando, pero, quien sabe...
...ya veremos que nos depara el destino...
Agradezco los comentarios y puntos de las partes anteriores y espero que les guste.
Haciendo algo de fuerza, me quité mis zapatos, y los pantalones que estaban a la altura de los tobillos, dejándome mayor libertad, ella se deshizo de sus tacos también, recién en esos instantes me percaté de que no llevaba medias, era solo su piel, depilada, suave, con ese dulce perfume que ahora estaba siendo tapado por el olor de su sexo.
Con el mayor cuidado posible, le quité su ropa interior, descubrí unos pocos vellos púbicos, señalaban mi camino. La agarré fuertemente por la cintura, y la senté sobre el escritorio, ella, con su sexo chorriante y su mirada suplicante, abrió sus piernas rápidamente, mientras que yo bajaba a zambullirme en ellas.
Separé los labios con mi mano izquierda, mojé el dedo mayor de la mano derecha y jugué con su clítoris, mientras paseaba mi lengua en su humedad, hice esto poco tiempo, porque el cuello me reclamaba por la incomodidad de la posición, decidí ser mas práctico, empecé a jugar con su clítoris con mi lengua, succionándolo y dándole pequeños golpecillos con la lengua, mientras dos de mis dedos, se introducían apenas en la entrada de su sexo. Miré su rostro, y vi como se masajeaba los pechos, presionaba y estiraba sus pezones y se mordía fuertemente los labios para no gemir.
No se cuanto tiempo habremos estado así, debo decir que no fue poco, me impresionaba la resistencia de esta mujer, porque empezaba a dolerme la mandíbula, notaba su respiración agitarse cada vez mas, empezó a empujar mi cabeza, intentando que meterme en su interior, para luego estremecerse en un salvaje orgasmo. Yo, con su agrio sabor aún en mi boca, me levanté, vi sangre en sus labios, resultado de morderlos para no gemir, y no pude contenerme, primero, pasé mi lengua por la sangre en su labio, ella dejó su boca abierta, luego limpié sus dientes de sangre y luego me metí en su boca, jugábamos con sabor a sangre y sexo en nuestras bocas, pero nada importaba.
Mi miembro estaba durísimo, dejando escapar liquido preseminal, ella me miró con ojos pícaros y bajó silenciosamente, ahora era yo quien se sostenía en el escritorio mientras ella, torpemente, metía mi hombría en sus labios, para hacerlo aparecer luego, reluciente, duro…
Le indiqué con mi mano en su nuca que faltaba poco, levantó su mirada, se que lo habría hecho, pero sentí que no lo deseaba. Extendí mi mano, ella la tomó, y la ayudé a incorporarse, parada, apoyando su cabeza en mi pecho, siguió masturbándome hasta el final.
Si puedo jactarme de una cosa, es que soy un hombre de, mínimo, 3 al hilo, entonces, mi miembro seguía listo, lubricado por mis propios jugos, sin mediar mucho mas que unos besos, la ayudé a girar, poniéndose de espaldas, apoyada sobre el escritorio, esto, sumado a que soy algo mas alto, me dificultó la tarea de entrar en ella, pero lo suplí separando y flexionando levemente las piernas. Comencé a jugar con la punta de mi miembro en la entrada de su sexo, masturbándola, inmediatamente, se agarró fuerte con las manos a los costados del escritorio, con lo que me mostró que llegando a su segundo orgasmo, aumenté la velocidad, masturbándola hasta que empecé a notar como arqueaba la espalda, ahí, llevé mi miembro hasta su entrada y lo metí hasta el fondo, con esto, ella se desplomó, exhausta sobre el escritorio, aún teniendo espasmos que me presionaban en su interior. Fue fantástico, pero no hacía mas que empezar, empecé a moverme en su interior, acompañando su respiración, cuando inhalaba, entraba, cuando exhalaba salía, primero despacio, solo una parte, luego mas rápido, hasta que su respiración volvió a acelerarse, todavía estaba lejos de mi orgasmo, pero ella iba por el tercero de la tarde, sin hacerme desear, empecé a moverme mas rápido, combinándolo con movimientos circulares de cadera y pocos segundos mas tardes, con todo mi miembro en su interior, terminaba violentamente…
…se levanto torpemente, aún con mi miembro dentro, cosa que me incomodo, pero no dije nada, y me dio un beso tierno en los labio, sacó mi hombría de entre sus piernas, y se dio vuelta, cruzó sus piernas alrededor de mi cintura, yo me apoyé sobre el escritorio, y empecé a marcar el ritmo, de vez en cuando, la dejaba ir hacia atrás, sosteniéndola con mi brazo para lamerle los pechos.
Mi momento estaba llegando, ella lo sabía, tomó el control y empezó marcar el ritmo, lento pero largo, llevaba mi miembro hasta la punta y entraba fuerte hasta su base, yo, con mis manos jugaba, apretando sus nalgas, separándolas, llevé una manos mas allá, y la humedecí de sus jugos, movía mis dedo mayor desde su sexo a su ano, jugando circularmente, me faltaba poco, muy poco, y la punta de mi dedo comenzaba a entrar, en otro momento, la hubiese dejado quieta, dejando que se acostumbre preparando su ano para mi miembro, pero no, no en ese momento, mis pulsaciones se elevaban, la sangre se agolpaba en mi miembro, la yema de mi dedo se movía en pequeños círculos en su ano, esto la volvió loca y me cabalgó salvaje, ferozmente. El único sonido que delataba lo que ocurría era el de su sexo chorreante al ser embestido una y otra vez por mi miembro, la velocidad aumentaba, sus uñas se clavaban en mi espalda por momentos sus dientes mordían mi hombro fuerte, clavándose en mi carne.
Por unos instantes, mientras yo la ayudaba con el movimiento, ella probaba mi sangre, mi transpiración, mi piel, mientras yo estaba todo dentro de ella, llenando su sexo y un dedo en su cola, abriéndola, llenándola… …los movimientos se hacían mas lentos, mas largos, estábamos terminando en un orgasmo profundo, silencioso… …precioso…
…terminamos el orgasmo, yo manteniendo el ritmo unos segundos mas, como se que les gusta, ella exhausta, yo también; me marca con su pierna que quiere moverse sin que salga de su interior, la acompaño, y agarra unos pañuelitos descartables de un cajón, la tomo fuerte por la cadera, y la voy quitando lentamente de mi miembro, sin dejar de ver las muecas de placer que se formaba en su rostro, ella se limpia, me extiende unos pañuelitos a mi, hago lo propio, y mientras lo hago, se acerca, me pasa sus dedos por la sangre que dejó su mordida en mi hombre, se acerca, y limpia la sangre con su lengua caliente, me da un tierno beso, y comienza a vestirse… …lenta, silenciosa, placenteramente…
…sin decir palabra, hago lo mismo, por último, tomo la hoja que había puesto sobre su escritorio, algo arrugada, y me retiro saludándola con una leve inclinación de cabeza al salir.
Fui hasta el baño y me enjuagué abundantemente la cara, aún sin salir de ese estado de sorpresa y excitación en el que me encontraba…
…con mi sexo aún duro, fui hasta mi oficina y me senté mientras pensaba como retomar mis tareas después de una experiencia como aquella, hasta que el teléfono me trajo de vuelta al mundo real, levanto el teléfono y solo escucho silencio, en un momento, creí escuchar la respiración turbada y entrecortada contra el teléfono… …era ella….
- …ya que… …hoy no pudimos revisar los números, deberé solicitarle que la revisemos mañana a primera hora…
…muchas gracias…
Con esto concluye la saga "Después de un relato...", espero les haya gustado leerla, tanto como a mi vivirla...
...a modo anecdótico, les cuento que pospuso esa última reunión, y no volvió a suceder nada desde entonces...
...por el momento siento que me está evitando, pero, quien sabe...
...ya veremos que nos depara el destino...
14 comentarios - Después de un relato (final)
Un toque de fantasia pinta divino ...
Se nota que amas la cultura oriental 😃
Muy buena La Saga del Silencio
Me gusta tu forma de Relatar, espero más Historías...
¡Felicitaciones!
Muchas gracias por leer La saga del silencio (me encantó el nombre =P), me alegro que te haya gustado 😬
Jajajaja lo de la sangre fué algo del momento que me dió mucho morbo, fué inevitable 😬
Gracias por leer, comentar y puntuarme.
No duden q voy a avisarles cuando suba el siguiente relato.
Saludos
lindo relatoo!!!!
Si puedo jactarme de una cosa, es que soy un hombre de, mínimo, 3 al hilo > Cheronca, el amigo!!! Pero te creo!
Eeeehhh!! Qué decís, che? No nos subestimes!! 😩 ... 😀
Lo que pasa que en las mujeres es distinto... en un extremo tenés la frígida y en el otro, la multiorgásmica 🤤 . Los varoncitos somos más "regulares". No voy a introducirme en el territorio científico del porqué del porqué.
La cosa es que en los varones, como dice Kaku, en realidad, llegar "llegás" al 3ro, quizá un perdido 4to... La cosa es cómo llegás. Porque no es lo mismo echar un chorro de 5 ml (jaja!! re-grosso!!) que una gotita perdida de semen... Sepan comprendernos mujeres! 😀
"sus uñas se clavaban en mi espalda por momentos sus dientes mordían mi hombro fuerte, clavándose en mi carne.
Por unos instantes, mientras yo la ayudaba con el movimiento, ella probaba mi sangre, mi transpiración, mi piel" > Bien hard! 🙎♂️
"se acerca, me pasa sus dedos por la sangre que dejó su mordida en mi hombre, se acerca, y limpia la sangre con su lengua caliente, me da un tierno beso" > Me encantó el toque vampiresco que le diste al relato.
Ojalá que el destino te depare un nuevo encuentro. 🆒
Si tenés la confianza suficiente con tu jefa... qué se yo... le podrías decir que subiste la historia a internet y que lo suyo ya es público. Que hay seguidores de su affaire y que no los podés descepcionar... jeje! 😛 Que apreveche que no hay fotos y nadie va a reparar ni sospechar quién es! (Ya me veo que al otro día que se lo contás te llega el telegrama de despido!! 😀 )
De vuelta, felicitaciones por esta primer historia que compartís! Gracias! 😃
Gracias!
Gracias, me alegro q te haya gustado.
No se q puede pasar, no quiero presionar el tema, quiero ver como avanza, se q, como yo, la pasó muy bien.
Y, a juzgar por la llamada, quería mas, después debe haber tenido algún tipo de dilema moral...
...habrá q ver, si pasa algo, voy a plasmarlo en papel y después lo subo.
Saludos y gracias por pasar.
ME ENCANTÓ
me guardé los 10 de hoy porque te los mereces para llegar a NFU.
Bienvenido!!! Espero con ansias leerte entre los demás post, especialmente los mios obvio 😀
Muchas gracias, me alegro q te hayan gustado mis relatos 🙂
Gracias por leer, comentar, y por los puntos, obvio 🙂
saludos...
Gracias
Gracias por pasar y puntear.
Me alegro q les haya gustado