olas a todos soy yo con los nuevos de hoy ayer no puse poner porq no tenia tiempo ya les dejo esto nuevos de hy y comenten bay
Diana (algo inesperado)
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Hola, saludos a todos, les dejo un fragmento de este relato, estoy comenzando con esto de escribir asi que espero les guste... D i a n a después de un mes de las deliciosas vacaciones que había pasado con diana y antonio allá en cancún, regresaba de la sierra allá por el municipio de guachochi e inesperadamente mi telefono celular timbro, no tenía ni la menor idea de quien pudiera serbusque de entre mi portafolio y al verificar el numero, cual fue mi sorpresa al ver que era diana, no era una llamada era un mensaje el cual decía: ⿿⿿hola norteñito, estoy en casa y la verdad me gustaría que estuvieras a mi lado ahora que no esta toño, para sentirte dentro de mi y es que me tienes olvidada, besos y te veré pronto- una sonrisa picara salio de mi y es que sin duda fue muy agradable saber de ese monumento de mujer y saber que no se había olvidado de mi, pero sobremanera me llamo mucho la atención que me dijera ⿿te veré pronto!!!, en fin la verdad no le tome mucha importancia y seguí mi andar por los sinuoso caminos de las montañas. Era tarde cuando llegue a casa, cansado y sin ganas de nada metí la camioneta al garaje y no baje nada, ya lo haría mañana, mire frente a la casa las luces estaban apagadas salvo la del frente lo que indicaba que mis vecinas no estaban, era temporada de vacaciones y habían regresado a su tierra. Saque las llaves abrí la puerta, busque el apagador y encendí la luz, todo estaba como lo había dejado, me dirigí a mi recamara subiendo pesadamente los escalones, sin más me deje caer en la cama y en poco rato me quede dormido. Al día siguiente la luz del sol en mi rostro me despertó, además de la música que se escuchaba afuera, me levante todo somnoliento , aún vestido y con las botas de trabajo. Alcance a ver por la ventana y supe que era juan mi vecino quien lavaba su auto. Sin más me quite la ropa y me meti al baño donde heché un regaderazo, ya despierto del todo baje a la cocina y prepare el desayuno, algo sencillo, estaba por sentarme a la mesa y cuando el teléfono sonó: ⿿si bueno- contesté, -hola, como estas?-, - de momento no supe quien era - que tan rápido nos olvidaste?- esa palabra hizo dirigir mi pensamiento hacia diana ⿿diana???- -si, soy yo- respondió ⿿que gusto saludarte, que milagro que me hablan- le dije asumiendo que eran los dos que se comunicaban ⿿si verdad, el tiempo pasa rápido desde aquellas vacaciones que fueron sensacionales, únicas- dijo diana mientras en mi pensamiento decía si únicas, realmente algo inesperado ⿿bueno solo llamaba para saludarte y deseartejejejejejebuenos días, bye- una sonrisa salio de mi y me despedí ⿿hasta pronto, me saludas a toño- deje el teléfono y procedí a almorzar. Ya eran cerca de las diez de la mañana cuando baje las cosas de la pick up, pues tenía que ordenar los documentos de compraventa de madera que había realizado y planear mi próxima ruta para visitar a los ejidos donde trataría de comprar un poco más para abastecer el mercado al interior del país. Cerca del medio día decidí salir a comprar algo de comer, la verdad estaba muy entrado en lo que hacía como para ponerme a cocinar, fui a un súper y compre un pollo rostizado un poco de tortillas y me regresé lo más pronto posible. Al llegar a casa no podía creer lo que estaba viendo, y aún no bajaba del coche!!!, era verdaduna verdad sorprendente, en verdad era lo ultimo que me esperababaje del auto y sin decir más me acerque a la casa lentamente y con la mirada fija, era ella, sin decir nada y con una hermosa sonrisa corrió hacia mi abrazándome, aún recuerdo la imagen de ella ante la puerta, traía puesto unos lentes de sol, con un vestido azul marino, de tirantes y corto que realzaba aún más sus torneadas piernas, y su piel blanca, como olvidarlo... Era diana. Sorpresa!!!-, me dijo, -te gusta la sorpresa- yo sin saber que decir le dije ⿿hola- -solo hola, eso es todo-, dijo con un tono suave y un poco triste ⿿no, claro que me da gusto verte, pero como llegaste, quiero decir sin avisar- ella solo contestó ⿿quería darte la sorpresa y parece que lo logre- de pronto me vino un pensamiento ⿿y toño, donde esta?- pregunte ⿿vine sola, pedí permiso- -soooolaaaa???- pregunte asintiendo ella con la cabeza ⿿y no me invitas a pasar?- -perdon, por supuesto pasa y dime como es eso de que pediste permiso- me miro picaramente y dijo ⿿si, el esta fuera con su padre que le esta enseñando el manejo de la empresa y fueron a brasil, italia e inglaterra y aprovechando su ausencia le dije que no me gustaría estar sola pues que deseaba estar en compañía de alguien, claro que el me dijo que me fuera a casa de su mamá, y pues la verdad no me gusto su idea yo le quería decir que mi intención era la de venir contigosola, pero no hallaba la forma pues tenía miedo de que se molestara- me contó ⿿la verdad estuve una semana pensando y analizando como decírcelo, y una noche mientrasel y yo estábamos juntos en la cama-una sonrisa picara apareció en su rostro mientra dijo: ⿿lo estábamos haciendo y comencé a recordarle lo que habíamos vivido contigo en las vacaciones, le decía de las caricias, de cómo me lo hacías, de cómo me lo hacían de las sensaciones que se venían sobre mi al tenerlos a los dos y toño estaba muy excitado y comentando que recordaba cuan exitado se encontraba al ver como yo le poseia a su mujercita, en ese momento diana le dijo a toño amor, tengo una idea fantastica, imagina que te vas, imagina que durante tu viaje yo, yo estoy con otro - creo que toño se a de haber enojado-, le dije a diana ⿿al principio como que quiso quitarme, pues yo estaba montada en el- - que???, montada en el?????, pensecreo que con esa conversación ya me estaba excitando. Diana continuó platicandome lo sucedido ⿿no amor, mira toño, piensa tu de viaje y yo gozando mientras tu imaginaras todo lo que yo hago,cuando estés de regreso te podría contar como lo vivícomo, como me lo hizo, todo con lujo de detalle- según dijo diana vio un brillo de lujuria y libido en los ojos de toño al mismo tiempo que le respondió ⿿esta bien, pero con quien será??? - diana respondió, puedo sugerir a algunas personas y tu decides- toño respondió ⿿ esta bien dime, -era mi oportunidad de decirle que quería estar contigo, me dijo diana. Deseaba decírselo, gritale a toño con ansia y sin rodeo, ⿿carlos, con carlos, con el!!!-me dijo caray, yo estaba solo escuchando lo que me decía y no perdía detalle sin embargo, según me dijo guardo compostura y le dijo a toño -déjame pensar, déjame pensar, aunqueesta algo lejosy en primer lugareste, puesque te parece???- toño un tanto exitado y desesperado le respondió ⿿quien, dilo- -estaba pensandoeneste carlos- dijo diana, esperando la respuesta de toño, quien se quedo pensando y sin quitarle la mirada le respondió ⿿me gusta, si me gusta que sea el- les diré que me sentí un tanto alagado por esa respuesta, y quien no. Yo desde que los conocí percibí que diana era quien llevaba los pantalones en casa aunque hacia parecer que era toño quien tomaba las decisiones, cualquier cosa ella siempre encontraba la forma de convencerlo y hacer que el creyera que fue su decisión, por lo que no me extrañaba que el hubiese aceptado. Volviendo a la realidad diana me pregunto -y dime piensas en mi- yo le sonreí y acercándome a ella le dije con tono suave ⿿no hay día que no te recuerde, no hay noche que en mis sueños no estés, en mis pensamientos más íntimos apareces tu, en mis noches de desvelo ahí estas, ahora responde por mi esa pregunta, crees que te extrañe?- y sin darle oportunidad de responder mis labios tomaron los suyos sin tener resistencia de ningún tipo, era algo agradable volver a sentir sus labios que me extasiaban, dulces y sexys, jugosos y sensualesmi mano tomo su cintura atrayéndola hacia mi con delicadeza ⿿te extrañaba tanto, no se que me sucede, pero algo paso en cancún, que no te puedo alejar de mi, en mi mente siempre estas aun cuando estoy con toño en la intimidad imagino que estoy contigo, cuando estoy sola me e masturbado pensando en ti, que hiciste para querer estar solo contigo, que hiciste que todos estos días han sido como un siglo lejos de ti, que me pasa?- me sorprendió lo que dijo, waooow la verdad yo no me esperaba todo eso, me sentía alagado y a la vez mal y no se por que. Sus labios frescos besaron los míos con gran euforia, sus manos acariciaban mi espalda, mi mano bajo hasta el borde de su vestido que se introdujo debajo de el para poder acariciar sus hermosas piernas sintiendo su piel tan tersa y suave, mi boca comenzó a besar su cuello el cual tenia un aroma fabuloso, baje despacio los tirantes de su vestido y poder besar libremente sus hombros, mientas comencé a acariciar suavemente sus pechos,que emanaban erotismo ademas que según recordaba eran exquisitos, turgentes y deliciosos, mi mano comenzó a deslizar el vestido hacia abajo, con la urgencia de sentir esos frutos que deseaban salir de esa prisión, mis labios inmediatamente probaron esos manjares saboreando de sobremanera y disfrutándolos mientras diana comenzaba a gemir por la sensación que le causaba tomando mi cabeza con su mano para que no dejase de hacer mi trabajo, deje de comer esas delicias, mis manos acariciaban su espalda tan suave y sugerente, sin decirle nada la tome en mis brazos y la lleve a mi habitación. Al llegar entre y le deposite suavemente en la cama, diana se puso de pie y se hecho para atrás y comenzó a despojarse del vestido que solo le alcanzaba ya a tapar sus increíbles piernas, suavemente, y de una forma sensual y provocativa comenzó a deslizarlo hacia abajo sin dejar de mirarme, su vientre comenzó a asomarse, su piel asomaba y me traía recuerdos de su calidez, tersura y suavidad, eso hacía que me excitara aún más, pronto una tanga apareció, color negra de encaje que contrastaba con su piel blanca, diana giro lentamente mostrándome en todo su esplendor la maravilla de cuerpo que tiene, su espalda hermosa, y su delicado y gran trasero que invitaba a ser tomado, más su tanga que iniciaba en la parte superior y mientras bajaba se desvanecía ocultándose entre esas dos divinas nalgas y probando atrevidamente su culito sin duda una escena de fotografía, yo ya no aguantaba mi palo ya estaba a mil, tratando de escapar del pantalón mi respiración estaba sumamente agitada, me encontraba como una fiera en celo yo sin pensar más me acerque tomándole de la cintura y besándole férreamente mientras acariciaba su espalda mientras mi mano bajaba buscando despojarla de la única prenda que le cubría, pronto agarre y sobe sus nalgas, tan bellas y ricas, mi boca probaba de nuevo sus pechos que son todo una exquisitez. -papito, no sabes como te deseo, te e deseado y quiero ser tuya, házmelo, házmelo como tu quieras- dijo mientras su respiración comenzó a acelerarse, me levante para quitarme la ropa, saque mi camiseta la cual tire, comencé a desabrochar el pantalón ⿿espera- dijo poniéndose de rodillas desabrochando de forma desesperada y bajándolo de un solo jalón junto con mi ropa interior, dejando al descubierto mi pene totalmente erecto y listo para dar guerra, parecía que buscaba ansiosamente donde entrar, a lo que ella rápidamente lo tomo con su mano lo acaricio y beso suavemente, mirándome acerco su boca para introducirlo en ella. Yo en cambio al sentir la calidez de esa boca y de lo increíble que se comía mi verga, me deje llevar -si, si...rico- alcanzaba a pronunciar mientras diana seguía con su labor, las sensaciones que despertaba el sentir como me la mamaba, el verla como se la comía, la habilidad de aquella mujer para hacerlo era increíble, era sus laios rodeaban mi verga con finura y suavidad, entraba y salia despacio toda una experta en mamar palos!!! sin duda a sido de los mejores mamadas que alguien me pudiera haber hecho, - te gusta papi, te gusta que te la como, mmmhhh, esta deliciosa tu verga- me dijo el placer y la pasión invadía mi cuerpo, ya sin más le detuve y como un poseído le arroje a la cama y comencé a chupar sus pechos que tanto me fascinabachupaba sus pezones rosados y hermoso parecian despertar de un sueño y comenzaban a apuntar hacia el cielo, duritos y bien paraditos mi lengua jugaba con ellos, mis manos sobaban y acariciaban todo su cuerpo que comenzaba a transpirar una fragancia que no había olvidado, mi mano bajo y encontro aquella conchita que despedia calor y jugos, mi mano comenzo a acariciar aquella rajita...que rico, hazme...hazme rico...mmmmmmmhhh, papi... Diana tomaba mi pene y lo masturbaba suavemente y despacio, tratando de que yo lo disfrutara y preparandolo para ingresar en su cuevita humeda, caliente y deliciosa. ⿿ya papito, siiii, siiiiya, yahazme tuya, ya quierosentir tu palo dentro de mi cogete a tu gatita...anda hazlo, hazlo- eso me éxito aún más mientras su cuerpo se contoneaba y arqueaba sensualmente, gemidos comenzaron a aparecer, suaves, delicados llenos de erotismo ⿿mmmmmmmm, mmmmgghhaaaaaaaahhh, si perrito.siii, ya hazme tuya- al momento que mis dedos jugaban con su vagina,pero aún no era tiempo, comencé a deslizarme hacia abajo y a lo largo de su vientre sin dejar de besar hasta llegar su cosita, esa conchita que desde la primera vez que la vi totalmente depilada, me fascino, mis manos abrieron sus piernas descubriendo totalmente ese manjar, mi lengua inmediatamente comenzó a abrirse paso entre esas carnes que estaban totalmente mojadas ⿿aaaaaahhh, papimmmmmhhhh, siiiii, hazme, hazmenono te detengasssssssaaaaaaagghhhh.mmmmmque ricolo haces- decía mientras yo probaba sus delicias. No supe como pero lo que había iniciado de forma tierna con palabras dulces se estaba volviendo subido de tono, pues no supe como me salio y le dije⿿te gusta perra, te gustapor que te voy a coger cabrona, te voy a hacer míapara que le digas a toño lo rico que lo hace tu semental- mientras me acomodaba para meterle mi verga, ella sonrío de forma lasciva, sus ojos brillaban de pasión y respondió ⿿ si cojéeme, cojéeme haz que esta perra aullé de placer- en el momento se la deje ir de un solo golpe ⿿aaaaaaaahhhhgggg.aaaaaaaahhh sisi, vamos cabrón, házmelo- decía y comencé a mover mi cuerpo para meter y sacar mi verga de esa vagina llena de calor y jugos, -siente , siente como esta verga te entra, siente esta verga, anda perra cabrona ⿿ ammmmmmsiiiimmmmmmaaaaaaahhhvavamos, así, sisi, que rico mi macho, cogemecocogeme metemela toda- mientras yo seguía trabajando y sintiendo miles de sensaciones que me trastornaban ⿿aaaaaaahhhestas bien buena putitaestas bien sabrosa.siiiii, te gustadilo, dilo- dije subiendo el tono de voz, casi gritandole ⿿si megustasiiiii, siii, me encantame enloqueceslo haces muy rico papá- grito, en su rostro de percibía la excitación, la pasión, lo cachonda que estaba, las gotas de sudor corrían por su cuerpo, su respiración sumamente agitada ⿿vamos más cabrónhazme saber quienaaaaaahhhhmmmsiiiiihazme saber quienes el que mandaquien esmi dueño- le saque mi verga y la jale y voltee para que su trasero quedara frente a mi y poder gozar del espectáculo, le abrí un poco las nalgas y mi lengua paso por su raja subiendo hasta su culito ⿿que rico culo tienes putota y va a ser mío, lo voy a gozar de lo lindo para que le cuentes a tu guey como lo disfrutaste- ella no dijo nada solo resollaba agitada y sonreía y consentia con su cabeza, su rostro denotaba lujuria agarre mi verga y la introducí en su raja de golpe como queriéndole traspasar más allá de sus límites, -siiiiiii, mi dueño, cojéememás durodestrozame mmmmmmmmhhhh que rico- mi verga entraba y salía fuertemente y mi cuerpo golpeaba sus nalgas ⿿toma perra, puta calienteeres mi perra en celoeres una perra caliente- alcanzaba a percibir que eso le excitaba más pues cada vez gemía y se contorsionaba de tal forma que cualquiera enloquecería de excitación ⿿si, sisi, soy tuyaaaargaaahhaaahh, soy tu puta, tu esclava calientesi aaaajj, aaaajajajmmmmhhh, soy tu mmmmjjjhh, soy tu perrammmmjjjmmjjjaaaaaammmmjjj, soy aaaahhhjjjsoy tu esclava- respondió al momento que se arqueo y soltó un grito ⿿aaaaaaaaaaagggggggggggaahhaaaah..a- al mismo tiempo que se estremecía de placer, echaba su cabeza para atrás, comencé a sentir como su concha se humedecía mucho más el orgasmo llegó de forma espectacular y candente su cuerpo se estremecia y movia de forma sensual y espectacular al mismo tiempo se levanto quedando de rodillas y conmigo en la espada y aún dentro de ella dijo⿿eres un gran macho, papacito, eres increíble- decía sin dejar de jadear buscando mi boca para fundirnos en un beso, yo por mi parte le dije ⿿ te gusto, que bueno que te halla gustado jodida por que no e terminado y aventándola quedo tendida en la cama ⿿ahora, perra, vas a hacerme que me venga- tome mi verga y la moje con sus jugos de su cuevita, abrí esas maravillosas nalgas y le puse en su agujerito-ten cuidadoamor, hazlo despacio- me dijo ⿿cállate perra, tu vas a hacer lo que yo diga por que eres mi esclava y te lo haré como yo lo diga, de acuerdo???- le dije casi gritando, ella me miro ⿿lo que tu digas cabroncito, yo soy tuya y haz conmigo lo que quieras!!!- dijo de nuevo, puse mi verga afuera de su culito y comencé a empujar suavemente, se dolió un poco y me detuve un momento ⿿putita, haz que te entre mi palo, muevete cabrona!!!- diana comenzó a hacerse para atrás lentamente, yo sentía como mi verga entraba e iba siendo aprisionado, la sensación es increíble- que deliciaaaaaahhhh!!!- le dije mientras ella seguía hasta que sus nalgas toparon con mi cuerpo, entonces comencé a moverme lentamente ⿿veamos que tal lo haces con tu agujero- le dije y comencé a hacerlo cada vez más rápido, diana se estaba habituando a mi verga en su culito y comenzó de nuevo ⿿mmmmmhhhpapi, muévete más rápido, vamos- me dijo ⿿no es rápido?- pregunte ⿿pues tu lo pediste- y sin darle oportunidad a nada la agarre de sus hombros y con fuerza la hacia mi sacando y metiendo fuertemente mi verga alcanzando a ver de vez en cuando como ese culito quedaba abierto despues de sacarle mi pene ⿿así esta mejor perra puta?- a lo que respondió ⿿si papito así, tu mandas- las sensaciones de placer, pasión y morbo corrían por todo mi cuerpo al ver ese cuerpo que estaba sodomizando, eso me gusto ⿿que rica estas puta mía, te gusta, te gusta lo que te hago perra... Pues toma, toma cabrona, hasta adentro puta, puta caliente- le decía al mismo tiempo que le daba envestidas que terminaban en un fuerte golpe ⿿eres mi puta, eres mi prostituta, eres mi golfa, eres una perra en celo???- le pregunte, a lo que contesto ⿿si, siiii soy tutu puta exclusiva,tu perra, mmmmmmhhhaaaaajjj, aj, aj soy..tu golfa, y puedes hacer conmigolo que quierasaaaaaaaahhhmmmjjj, aaaajjjjmmm- dijo al momento que comencé a sentir como un torrente de sensaciones subía por todo mi cuerpo como una llamarada de fuego ⿿aaaaaaaagggggggghhh- chorros de semen salieron por mi pene dejándolos instalados en su ano. Cansados por la actividad nos dejamos caer en la cama respirando apresuradamentey sin sacarle mi palo y mientras nos mirábamos. Con la voz más calmada me dijo ⿿ eres lo máximo y si, soy tuya, soy tu puta, soy tu perra en celo, soy tu esclava, soy la yegua que puedes montar cuando tu quieras, soy tu juguete, lo que quieras que yo sea seré y te repito amor, puedes hacer conmigo lo que quieras, soy totalmente tuya- dijo al momento que me besaba . Por el cansancio nos quedamos dormidos, tendidos en la cama completamente desnudos. Al día siguiente desperté y me vi desnudo, recordé lo que había sucedido pero diana no estaba conmigo, me levante y olía a café, me puse un short y me dirigí hasta la cocina, cual fue mi sorpresa encontrar a diana cocinando con solo un mandil para protegerse del fuego de la estufa, era maravilloso ver como deja apreciar parte de sus cuerpo, su espalda tersa, su trasero hermoso, sus piernas, ella me vio y sonriendo dijo ⿿hola corazón, quise hacerte de almorzar, hice mal o por que estas tan serio- la verdad estaba estupefacto por lo increíble que se veía vestida, si se le puede decir así, de esa forma ⿿no, la verdad gracias huele muy bien- sonrió y siguió su tarea, les diré que fue el inicio de quince días llenos de pasión y sexo lleno de lujuria y desenfrenoy efectivamente ella ya era mía aunque, estuviera con toñoy en realidad hice lo que quise con ellaya les platicare.
¿Te gusta el sextel?
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Me basta con cerrar los ojos y pensarte para sentirte de nuevo junto a mí. Tu voz deliciosa en mi oído en medio de la noche mientras mis manos juguetean con mi cuerpo y mi mente tiene la capacidad de convertirlas en las tuyas
Me gusta rememorar el momento cuando te encuentro, o ¿Acaso me encuentras tú? La cuestión es que sucedió una de esas noches de ocio y deseo, donde era imperante compartir con una voz la locura de este cuerpo ardiente de esta rajita caliente que desea tanto de este dildo que penetra mi sexo provocando llamaradas. Sin más, ingreso a una sala de cibersexo. Mentiría acerca de esos detalles pero en algún momento me encuentro dándote mi teléfono mientras deseo de manera ferviente que sea algo agradable y pueda tener un delicioso orgasmo acompañada de ti.
Inicia la charla y así nos enganchamos en un intercambio de palabras, de opiniones, de pensamientos mientras disfrutaba de tu voz, esa seductora voz que penetraba en lo más profundo de mi cabeza con desparpajo y cierto cinismo, del tintineo de los hielos en tu vaso y las bocanadas de humo del cigarrillo que, me parece, llena el ambiente. Hasta que me sentí lo suficientemente cerca de ti para rozar tu cara, recorrer tus cejas, ojos, mejillas y boca con mis labios convertidos en mariposa mientras tú me alientas a seguir diciéndome cuanto te gusta, la mariposa evoluciona en un ser reptante, envolvente, anhelante... en un ser todo dientes ansioso de probarte, regresando a tu boca para beberte... tú no perdías tiempo, tus manos me recorrían, me estrujaban, jaloneando mi cabello mientras musitabas mi nombre, pero era mi momento y siempre agradecí que me permitieras saborearte, bajar hasta tu pecho donde inhalaba tu aroma saturando con él mis pulmones ¿Recuerdas como nos excitaba el olisquearnos como fieras salvajes? el pensar en tu aroma de macho, en el vello de tu axila, de tu vientre y mi nariz aspirándote, intoxicándose...
Sí, era toda una hembra deseosa de ti, que en medio de lengüetazos y olisqueos seguía bajando por tu cuerpo hasta llegar a tu miembro, el cual deslizaba por toda mi cara ¡Que rico sentir tu carne dura y vibrante marcando el contorno! Acercar mis pezones duros y erectos a la cabecita para que se encuentren y se humedezcan con el jugo de tu calor mmm para entonces afloraba ese lobo que llevas dentro y te convertías en una fiera que me devoraba... ¡Ahhh! esas mordidas que me dabas en el cuello entre gruñidos provocaban que yo me entregara sumisa y dócil a ti, mi amo para que hicieras de mi lo que quisieras... como una presa entre tus fuertes mandíbulas.
Acariciabas mi sexo, húmedo y caliente para ti... por ti... a veces de una manera dulce y suave, otras... como se toquetea el sexo de una golfa que encuentras en la calle y por ese simple hecho ya es tuya. Bajabas a él, para comerlo con maestría, para saborearlo como solo tú puedes hacerlo, recorriendo con tu lengua toda mi vulva y ano, diciéndome como te gustan y el sabor tan dulce que tienen, mientras en mi cama yo me contorsiono envuelta en un orgasmo... sudando con un dildo dentro de mi... perdida en la fantasía de tu voz.
Comienzas a penetrar mi rajita con tus dedos, los cuales llenas de mis jugos, los llevas a tu nariz y los hueles para después meterlos en tu boca y saborearlos en medio de la lujuria. Después, lo que tanto esperaba tu verga, entrando totalmente. Comienza el mete y saca que me convierte, me transforma y dejo de ser quien soy para solamente convertirme en deseo y carne, llegar al punto donde me confieso una puta clamando por ti, mi macho. Somos todo jadeos y calentura cuando te pido que me cojas por el ano, por mi culo así con fuerza, sin reparo ni piedad... y lo haces. Así, fuerte, como el cabrón que eres y que tanto me calienta, de nuevo me pierdo en la bruma donde lo único claro es cuanto disfrutamos.
¿Sabes? en medio de la vorágine de las sensaciones se sobrepone el sonido de tu voz diciendo mi nombre de manera apremiante, cada vez más y más intensa hasta convertirse en un grito, que va disminuyendo así como de tu verga fluye y fluye el líquido que me inunda.
La calma llegaba y nos despedíamos, sin preguntar por una próxima vez, aunque debo agregar que hubo muchas, hasta que sin saberlo, aconteció la última.
Fuiste el primero de varias maneras. Después de esto, después de ti alguien se atrevería a preguntarme ¿Te gusta el sextel?
dulcemujer
La madura en llamas.
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La ciudad estaba en llamas, el calor llegaba a los 42 grados y el fin de la tarde no auspiciaba algo mejor: una serie de cortes de luz convulsionaron toda la semana y ese viernes no fue la excepción. Otra vez el barrio empezó la noche sin electricidad. Los vecinos, cansados de la situación, comenzaron a llegar a una esquina estratégica y de mucho transito, para cortar las intersecciones y manifestarse ante los reiterados cortes. Vestido como estaba, bermuda y musculosa, fui hasta la esquina a hacer valer mi protesta. Al comienzo no había tanta gente, por eso podía reconocer a la mayoría de vecinos. Una mujer que vivía enfrente de mi departamento agitaba con fuerza un palo contra una olla de acero inoxidable. Nunca la había visto antes. Enseguida me llamó la atención la pasión que le ponía a la protesta. Sin embargo, lo más llamativo eran sus pechos: generosos, bien redondos y llamativamente conservados por la edad que yo suponía que pasaban los cincuenta años. Tenía una estatura baja, unas piernas bastante bien formadas, pelo rubio y unos rulos vistosos. Me acerqué a ella despacio e intente iniciar alguna conversación. Pronuncié una queja al aire y después de enojarnos con la empresa eléctrica comenzamos a contarnos de nuestras vidas. Sofía era separada y vivía sola, ya que su hija se había ido a vivir con el novio unos meses antes. La charla era amena, al menos eso parecía, porque mi mirada decía lo contrario: solo enfilaba hacia esas tetas lujuriosas y poco prestaba atención a lo que ella me decía.
-¿Vos vivís solo? - me preguntó sin mucho preámbulo.
-Si, solito y solo -dije
-¿Y como un chico tan joven no tiene a nadie para compartir ese departamento?- añadió ella guiñando levemente su ojo derecho
La insinuación parecía evidente. Me atreví a sonreír. Contesté con un lugar común: todavía no encontré a nadie o algo así. Ella puso su mejor cara, mezcla de mujer sensible y prostituta callejera con su sonrisa que le ocupaba toda su cara. Nuestros cuerpos estaban cada vez más cerca y el calor hacían estragos en mí; todo transpirado y con mi bulto que se estaba marcando por entre mi bermuda de solo observar esos pechos provocadores.
-Espero que las bebidas en la heladera todavía se conserven- le dije a modo de invitación
-Quien sabe, pero podríamos probar-
Costó un poco subir los cuatro pisos por la escalera. Cuando llegamos a la puerta ella elogió mi estado atlético, ya que subí las escaleras con facilidad.
Todavía la luz del día nos guiaba hasta la heladera. Tomamos unas latas de gaseosa y conversamos un poco. Cada uno tenía un lugar en el sillón, estábamos relajados, con las piernas que cada vez se acercaban más. Sonreía. Yo vi un dejo de lujuria en sus ojos y quise averiguar hasta donde podía llegar con mis pretensiones con ella. Sin decir una palabra mi mano comenzó a recorrer una de sus piernas. Y ella se dejó encantada. La mano siguió hasta encontrar la tela de la bombacha por entre el vestido azul. La respiración de Sofía fue más intensa, y los suspiros subieron el volumen cuando empecé a besarla por el cuello y por sus hombros. No pudimos aguantar mucho y las bocas se unieron con descaro, atragantándonos de lengua y mordiéndonos furiosos los labios. Así estuvimos algunos minutos. Creo que no llegué a darme cuenta como nos desnudamos, pero así estábamos: como Dios nos trajo al mundo.
-¿El bebe quiere la teta de su mami? -preguntó con un toco maternal en su voz.
Yo no respondí con palabras, mi boca se dirigió sin preámbulos y con furia a esos pezones que ya estaban duritos. Los succionaba como si mi vida se fuera en esa chupada. Ella me tocaba cariñosamente la cabeza y yo alternaba sus hermosas tetas en chupeteos y mordiscos deliciosos. Podía haber seguido comiéndome esos pechos eternamente pero mi sexo estaba punto de reventar; me paré en el sillón donde estábamos y sin decir ni una palabra bajé mi bermuda y le acerqué mi verga para pasársela por toda su cara. Su miraba parecía perdida por la lujuria.
-¿Te gusta el regalito que tenia para vos?- le dije. Un nuevo suspiro de ella y una respuesta que pareció un grito. No llegó a concluir afirmativamente cuando comenzó a lamerme la pija con una dulzura asombrosa. Pasaba su lengua por mi glande y luego metía toda su boca hasta el fondo de su garganta, para después volver a excitarme con su lengüita suave. La poca luz que había de afuera se estaba extinguiendo. Me pareció una buena idea ir al balcón y tomar un poco de aire, aun cuando el mínimo viento sea cálido. En el balcón siguió la chupada a un ritmo cada vez más vertiginoso. La música de fondo eran los ruidos de los bombos que provenían de la protesta. Mi respiración se entrecortaba entre cada embate de su boca. No quería terminar todavía y saqué entonces la verga de sus labios y propuse cambiar de posición. Ahora mi vecinita estaba tomada de la baranda del balcón dispuesta a que la devolvieran el placer sexual que había perdido en su matrimonio. Sin perder tiempo tomé sus caderas con mis manos y penetré su conchita ardiente. El ritmo se aceleraba, los gemidos eran cada vez más intensos como mis embates. No podía creer la situación que estaba viviendo, pero no pensaba en eso. Mis energías estaban puestas en bombear sin parar y sentir los gemidos cada vez más intensos de ella. Mi pedazo de carne se deslizaba hasta el fondo.
-Seguí, no pares, seguí pendejo - aullaba como poseída.
Descansamos no más de diez minutos en mi cama. Luego, mi vecina empezó a recorrerme con su lengua todo mi pecho. Su boca bajó por mi abdomen hasta mi sexo que otra vez volvió a tomar formar para la acción. Todavía no había llegado a una erección total cuando ella ya lo estaba comiendo entero.
-Que rica verga que tiene mi macho- decía ella al mismo tiempo que devoraba mis huevos con fruición
Pareciera que todavía me quedaban energías porque mi sexo continuaba con ganas. Sofía volvió a chupármela con gusto. A esa altura ya no quedaba luz ambiental y apenas se veían unos rulos rubios entre mis piernas. Entre la oscuridad solo sentí unos ruidos de movimientos. Pude enterarme segundos después que su culo transpirado se sentó firme contra mi cara. Se movían con paciencia y salvajismo, las redondas nalgas, y me rociaban con sus deliciosos jugos sexuales. Mi lengua recorría su concha y se detenía con la punta en su clítoris erecto. Sofía lanzó un grito que habría de callar cualquier manifestación. Mi boca bebió su orgasmo extasiado. Yo continuaba boca arriba. Otra vez sentí el movimiento de su cuerpo. Ahora, su culo se sentó arriba de mi verga. Demostraba Sofía que era experimentaba en el sexo, porque movía su cuerpo con irreverencia y distinción; puso las palmas de sus manos en mi pecho y sacudía su cuerpo de veterana de mil batallas. Un sinfín de gemidos y gritos fueron la antesala de nuestros orgasmos que se complementaron como un reloj. Sofía sintió como ella quería toda la descarga de semen dentro, toda la leche caliente en su hermosa concha.
Con el orgasmo volvió la luz. Pudimos observar nuestros cuerpos hastiados de sexo. Sonreímos. Nos besamos como dos novios que se acababan de conocer y nos prometimos sexo eterno.
gracias espero que les guste les dejos mi pagina (1)http://www.poringa.net/posts/relatos/1310452/retaltos-buenos.html
Diana (algo inesperado)
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Hola, saludos a todos, les dejo un fragmento de este relato, estoy comenzando con esto de escribir asi que espero les guste... D i a n a después de un mes de las deliciosas vacaciones que había pasado con diana y antonio allá en cancún, regresaba de la sierra allá por el municipio de guachochi e inesperadamente mi telefono celular timbro, no tenía ni la menor idea de quien pudiera serbusque de entre mi portafolio y al verificar el numero, cual fue mi sorpresa al ver que era diana, no era una llamada era un mensaje el cual decía: ⿿⿿hola norteñito, estoy en casa y la verdad me gustaría que estuvieras a mi lado ahora que no esta toño, para sentirte dentro de mi y es que me tienes olvidada, besos y te veré pronto- una sonrisa picara salio de mi y es que sin duda fue muy agradable saber de ese monumento de mujer y saber que no se había olvidado de mi, pero sobremanera me llamo mucho la atención que me dijera ⿿te veré pronto!!!, en fin la verdad no le tome mucha importancia y seguí mi andar por los sinuoso caminos de las montañas. Era tarde cuando llegue a casa, cansado y sin ganas de nada metí la camioneta al garaje y no baje nada, ya lo haría mañana, mire frente a la casa las luces estaban apagadas salvo la del frente lo que indicaba que mis vecinas no estaban, era temporada de vacaciones y habían regresado a su tierra. Saque las llaves abrí la puerta, busque el apagador y encendí la luz, todo estaba como lo había dejado, me dirigí a mi recamara subiendo pesadamente los escalones, sin más me deje caer en la cama y en poco rato me quede dormido. Al día siguiente la luz del sol en mi rostro me despertó, además de la música que se escuchaba afuera, me levante todo somnoliento , aún vestido y con las botas de trabajo. Alcance a ver por la ventana y supe que era juan mi vecino quien lavaba su auto. Sin más me quite la ropa y me meti al baño donde heché un regaderazo, ya despierto del todo baje a la cocina y prepare el desayuno, algo sencillo, estaba por sentarme a la mesa y cuando el teléfono sonó: ⿿si bueno- contesté, -hola, como estas?-, - de momento no supe quien era - que tan rápido nos olvidaste?- esa palabra hizo dirigir mi pensamiento hacia diana ⿿diana???- -si, soy yo- respondió ⿿que gusto saludarte, que milagro que me hablan- le dije asumiendo que eran los dos que se comunicaban ⿿si verdad, el tiempo pasa rápido desde aquellas vacaciones que fueron sensacionales, únicas- dijo diana mientras en mi pensamiento decía si únicas, realmente algo inesperado ⿿bueno solo llamaba para saludarte y deseartejejejejejebuenos días, bye- una sonrisa salio de mi y me despedí ⿿hasta pronto, me saludas a toño- deje el teléfono y procedí a almorzar. Ya eran cerca de las diez de la mañana cuando baje las cosas de la pick up, pues tenía que ordenar los documentos de compraventa de madera que había realizado y planear mi próxima ruta para visitar a los ejidos donde trataría de comprar un poco más para abastecer el mercado al interior del país. Cerca del medio día decidí salir a comprar algo de comer, la verdad estaba muy entrado en lo que hacía como para ponerme a cocinar, fui a un súper y compre un pollo rostizado un poco de tortillas y me regresé lo más pronto posible. Al llegar a casa no podía creer lo que estaba viendo, y aún no bajaba del coche!!!, era verdaduna verdad sorprendente, en verdad era lo ultimo que me esperababaje del auto y sin decir más me acerque a la casa lentamente y con la mirada fija, era ella, sin decir nada y con una hermosa sonrisa corrió hacia mi abrazándome, aún recuerdo la imagen de ella ante la puerta, traía puesto unos lentes de sol, con un vestido azul marino, de tirantes y corto que realzaba aún más sus torneadas piernas, y su piel blanca, como olvidarlo... Era diana. Sorpresa!!!-, me dijo, -te gusta la sorpresa- yo sin saber que decir le dije ⿿hola- -solo hola, eso es todo-, dijo con un tono suave y un poco triste ⿿no, claro que me da gusto verte, pero como llegaste, quiero decir sin avisar- ella solo contestó ⿿quería darte la sorpresa y parece que lo logre- de pronto me vino un pensamiento ⿿y toño, donde esta?- pregunte ⿿vine sola, pedí permiso- -soooolaaaa???- pregunte asintiendo ella con la cabeza ⿿y no me invitas a pasar?- -perdon, por supuesto pasa y dime como es eso de que pediste permiso- me miro picaramente y dijo ⿿si, el esta fuera con su padre que le esta enseñando el manejo de la empresa y fueron a brasil, italia e inglaterra y aprovechando su ausencia le dije que no me gustaría estar sola pues que deseaba estar en compañía de alguien, claro que el me dijo que me fuera a casa de su mamá, y pues la verdad no me gusto su idea yo le quería decir que mi intención era la de venir contigosola, pero no hallaba la forma pues tenía miedo de que se molestara- me contó ⿿la verdad estuve una semana pensando y analizando como decírcelo, y una noche mientrasel y yo estábamos juntos en la cama-una sonrisa picara apareció en su rostro mientra dijo: ⿿lo estábamos haciendo y comencé a recordarle lo que habíamos vivido contigo en las vacaciones, le decía de las caricias, de cómo me lo hacías, de cómo me lo hacían de las sensaciones que se venían sobre mi al tenerlos a los dos y toño estaba muy excitado y comentando que recordaba cuan exitado se encontraba al ver como yo le poseia a su mujercita, en ese momento diana le dijo a toño amor, tengo una idea fantastica, imagina que te vas, imagina que durante tu viaje yo, yo estoy con otro - creo que toño se a de haber enojado-, le dije a diana ⿿al principio como que quiso quitarme, pues yo estaba montada en el- - que???, montada en el?????, pensecreo que con esa conversación ya me estaba excitando. Diana continuó platicandome lo sucedido ⿿no amor, mira toño, piensa tu de viaje y yo gozando mientras tu imaginaras todo lo que yo hago,cuando estés de regreso te podría contar como lo vivícomo, como me lo hizo, todo con lujo de detalle- según dijo diana vio un brillo de lujuria y libido en los ojos de toño al mismo tiempo que le respondió ⿿esta bien, pero con quien será??? - diana respondió, puedo sugerir a algunas personas y tu decides- toño respondió ⿿ esta bien dime, -era mi oportunidad de decirle que quería estar contigo, me dijo diana. Deseaba decírselo, gritale a toño con ansia y sin rodeo, ⿿carlos, con carlos, con el!!!-me dijo caray, yo estaba solo escuchando lo que me decía y no perdía detalle sin embargo, según me dijo guardo compostura y le dijo a toño -déjame pensar, déjame pensar, aunqueesta algo lejosy en primer lugareste, puesque te parece???- toño un tanto exitado y desesperado le respondió ⿿quien, dilo- -estaba pensandoeneste carlos- dijo diana, esperando la respuesta de toño, quien se quedo pensando y sin quitarle la mirada le respondió ⿿me gusta, si me gusta que sea el- les diré que me sentí un tanto alagado por esa respuesta, y quien no. Yo desde que los conocí percibí que diana era quien llevaba los pantalones en casa aunque hacia parecer que era toño quien tomaba las decisiones, cualquier cosa ella siempre encontraba la forma de convencerlo y hacer que el creyera que fue su decisión, por lo que no me extrañaba que el hubiese aceptado. Volviendo a la realidad diana me pregunto -y dime piensas en mi- yo le sonreí y acercándome a ella le dije con tono suave ⿿no hay día que no te recuerde, no hay noche que en mis sueños no estés, en mis pensamientos más íntimos apareces tu, en mis noches de desvelo ahí estas, ahora responde por mi esa pregunta, crees que te extrañe?- y sin darle oportunidad de responder mis labios tomaron los suyos sin tener resistencia de ningún tipo, era algo agradable volver a sentir sus labios que me extasiaban, dulces y sexys, jugosos y sensualesmi mano tomo su cintura atrayéndola hacia mi con delicadeza ⿿te extrañaba tanto, no se que me sucede, pero algo paso en cancún, que no te puedo alejar de mi, en mi mente siempre estas aun cuando estoy con toño en la intimidad imagino que estoy contigo, cuando estoy sola me e masturbado pensando en ti, que hiciste para querer estar solo contigo, que hiciste que todos estos días han sido como un siglo lejos de ti, que me pasa?- me sorprendió lo que dijo, waooow la verdad yo no me esperaba todo eso, me sentía alagado y a la vez mal y no se por que. Sus labios frescos besaron los míos con gran euforia, sus manos acariciaban mi espalda, mi mano bajo hasta el borde de su vestido que se introdujo debajo de el para poder acariciar sus hermosas piernas sintiendo su piel tan tersa y suave, mi boca comenzó a besar su cuello el cual tenia un aroma fabuloso, baje despacio los tirantes de su vestido y poder besar libremente sus hombros, mientas comencé a acariciar suavemente sus pechos,que emanaban erotismo ademas que según recordaba eran exquisitos, turgentes y deliciosos, mi mano comenzó a deslizar el vestido hacia abajo, con la urgencia de sentir esos frutos que deseaban salir de esa prisión, mis labios inmediatamente probaron esos manjares saboreando de sobremanera y disfrutándolos mientras diana comenzaba a gemir por la sensación que le causaba tomando mi cabeza con su mano para que no dejase de hacer mi trabajo, deje de comer esas delicias, mis manos acariciaban su espalda tan suave y sugerente, sin decirle nada la tome en mis brazos y la lleve a mi habitación. Al llegar entre y le deposite suavemente en la cama, diana se puso de pie y se hecho para atrás y comenzó a despojarse del vestido que solo le alcanzaba ya a tapar sus increíbles piernas, suavemente, y de una forma sensual y provocativa comenzó a deslizarlo hacia abajo sin dejar de mirarme, su vientre comenzó a asomarse, su piel asomaba y me traía recuerdos de su calidez, tersura y suavidad, eso hacía que me excitara aún más, pronto una tanga apareció, color negra de encaje que contrastaba con su piel blanca, diana giro lentamente mostrándome en todo su esplendor la maravilla de cuerpo que tiene, su espalda hermosa, y su delicado y gran trasero que invitaba a ser tomado, más su tanga que iniciaba en la parte superior y mientras bajaba se desvanecía ocultándose entre esas dos divinas nalgas y probando atrevidamente su culito sin duda una escena de fotografía, yo ya no aguantaba mi palo ya estaba a mil, tratando de escapar del pantalón mi respiración estaba sumamente agitada, me encontraba como una fiera en celo yo sin pensar más me acerque tomándole de la cintura y besándole férreamente mientras acariciaba su espalda mientras mi mano bajaba buscando despojarla de la única prenda que le cubría, pronto agarre y sobe sus nalgas, tan bellas y ricas, mi boca probaba de nuevo sus pechos que son todo una exquisitez. -papito, no sabes como te deseo, te e deseado y quiero ser tuya, házmelo, házmelo como tu quieras- dijo mientras su respiración comenzó a acelerarse, me levante para quitarme la ropa, saque mi camiseta la cual tire, comencé a desabrochar el pantalón ⿿espera- dijo poniéndose de rodillas desabrochando de forma desesperada y bajándolo de un solo jalón junto con mi ropa interior, dejando al descubierto mi pene totalmente erecto y listo para dar guerra, parecía que buscaba ansiosamente donde entrar, a lo que ella rápidamente lo tomo con su mano lo acaricio y beso suavemente, mirándome acerco su boca para introducirlo en ella. Yo en cambio al sentir la calidez de esa boca y de lo increíble que se comía mi verga, me deje llevar -si, si...rico- alcanzaba a pronunciar mientras diana seguía con su labor, las sensaciones que despertaba el sentir como me la mamaba, el verla como se la comía, la habilidad de aquella mujer para hacerlo era increíble, era sus laios rodeaban mi verga con finura y suavidad, entraba y salia despacio toda una experta en mamar palos!!! sin duda a sido de los mejores mamadas que alguien me pudiera haber hecho, - te gusta papi, te gusta que te la como, mmmhhh, esta deliciosa tu verga- me dijo el placer y la pasión invadía mi cuerpo, ya sin más le detuve y como un poseído le arroje a la cama y comencé a chupar sus pechos que tanto me fascinabachupaba sus pezones rosados y hermoso parecian despertar de un sueño y comenzaban a apuntar hacia el cielo, duritos y bien paraditos mi lengua jugaba con ellos, mis manos sobaban y acariciaban todo su cuerpo que comenzaba a transpirar una fragancia que no había olvidado, mi mano bajo y encontro aquella conchita que despedia calor y jugos, mi mano comenzo a acariciar aquella rajita...que rico, hazme...hazme rico...mmmmmmmhhh, papi... Diana tomaba mi pene y lo masturbaba suavemente y despacio, tratando de que yo lo disfrutara y preparandolo para ingresar en su cuevita humeda, caliente y deliciosa. ⿿ya papito, siiii, siiiiya, yahazme tuya, ya quierosentir tu palo dentro de mi cogete a tu gatita...anda hazlo, hazlo- eso me éxito aún más mientras su cuerpo se contoneaba y arqueaba sensualmente, gemidos comenzaron a aparecer, suaves, delicados llenos de erotismo ⿿mmmmmmmm, mmmmgghhaaaaaaaahhh, si perrito.siii, ya hazme tuya- al momento que mis dedos jugaban con su vagina,pero aún no era tiempo, comencé a deslizarme hacia abajo y a lo largo de su vientre sin dejar de besar hasta llegar su cosita, esa conchita que desde la primera vez que la vi totalmente depilada, me fascino, mis manos abrieron sus piernas descubriendo totalmente ese manjar, mi lengua inmediatamente comenzó a abrirse paso entre esas carnes que estaban totalmente mojadas ⿿aaaaaahhh, papimmmmmhhhh, siiiii, hazme, hazmenono te detengasssssssaaaaaaagghhhh.mmmmmque ricolo haces- decía mientras yo probaba sus delicias. No supe como pero lo que había iniciado de forma tierna con palabras dulces se estaba volviendo subido de tono, pues no supe como me salio y le dije⿿te gusta perra, te gustapor que te voy a coger cabrona, te voy a hacer míapara que le digas a toño lo rico que lo hace tu semental- mientras me acomodaba para meterle mi verga, ella sonrío de forma lasciva, sus ojos brillaban de pasión y respondió ⿿ si cojéeme, cojéeme haz que esta perra aullé de placer- en el momento se la deje ir de un solo golpe ⿿aaaaaaaahhhhgggg.aaaaaaaahhh sisi, vamos cabrón, házmelo- decía y comencé a mover mi cuerpo para meter y sacar mi verga de esa vagina llena de calor y jugos, -siente , siente como esta verga te entra, siente esta verga, anda perra cabrona ⿿ ammmmmmsiiiimmmmmmaaaaaaahhhvavamos, así, sisi, que rico mi macho, cogemecocogeme metemela toda- mientras yo seguía trabajando y sintiendo miles de sensaciones que me trastornaban ⿿aaaaaaahhhestas bien buena putitaestas bien sabrosa.siiiii, te gustadilo, dilo- dije subiendo el tono de voz, casi gritandole ⿿si megustasiiiii, siii, me encantame enloqueceslo haces muy rico papá- grito, en su rostro de percibía la excitación, la pasión, lo cachonda que estaba, las gotas de sudor corrían por su cuerpo, su respiración sumamente agitada ⿿vamos más cabrónhazme saber quienaaaaaahhhhmmmsiiiiihazme saber quienes el que mandaquien esmi dueño- le saque mi verga y la jale y voltee para que su trasero quedara frente a mi y poder gozar del espectáculo, le abrí un poco las nalgas y mi lengua paso por su raja subiendo hasta su culito ⿿que rico culo tienes putota y va a ser mío, lo voy a gozar de lo lindo para que le cuentes a tu guey como lo disfrutaste- ella no dijo nada solo resollaba agitada y sonreía y consentia con su cabeza, su rostro denotaba lujuria agarre mi verga y la introducí en su raja de golpe como queriéndole traspasar más allá de sus límites, -siiiiiii, mi dueño, cojéememás durodestrozame mmmmmmmmhhhh que rico- mi verga entraba y salía fuertemente y mi cuerpo golpeaba sus nalgas ⿿toma perra, puta calienteeres mi perra en celoeres una perra caliente- alcanzaba a percibir que eso le excitaba más pues cada vez gemía y se contorsionaba de tal forma que cualquiera enloquecería de excitación ⿿si, sisi, soy tuyaaaargaaahhaaahh, soy tu puta, tu esclava calientesi aaaajj, aaaajajajmmmmhhh, soy tu mmmmjjjhh, soy tu perrammmmjjjmmjjjaaaaaammmmjjj, soy aaaahhhjjjsoy tu esclava- respondió al momento que se arqueo y soltó un grito ⿿aaaaaaaaaaagggggggggggaahhaaaah..a- al mismo tiempo que se estremecía de placer, echaba su cabeza para atrás, comencé a sentir como su concha se humedecía mucho más el orgasmo llegó de forma espectacular y candente su cuerpo se estremecia y movia de forma sensual y espectacular al mismo tiempo se levanto quedando de rodillas y conmigo en la espada y aún dentro de ella dijo⿿eres un gran macho, papacito, eres increíble- decía sin dejar de jadear buscando mi boca para fundirnos en un beso, yo por mi parte le dije ⿿ te gusto, que bueno que te halla gustado jodida por que no e terminado y aventándola quedo tendida en la cama ⿿ahora, perra, vas a hacerme que me venga- tome mi verga y la moje con sus jugos de su cuevita, abrí esas maravillosas nalgas y le puse en su agujerito-ten cuidadoamor, hazlo despacio- me dijo ⿿cállate perra, tu vas a hacer lo que yo diga por que eres mi esclava y te lo haré como yo lo diga, de acuerdo???- le dije casi gritando, ella me miro ⿿lo que tu digas cabroncito, yo soy tuya y haz conmigo lo que quieras!!!- dijo de nuevo, puse mi verga afuera de su culito y comencé a empujar suavemente, se dolió un poco y me detuve un momento ⿿putita, haz que te entre mi palo, muevete cabrona!!!- diana comenzó a hacerse para atrás lentamente, yo sentía como mi verga entraba e iba siendo aprisionado, la sensación es increíble- que deliciaaaaaahhhh!!!- le dije mientras ella seguía hasta que sus nalgas toparon con mi cuerpo, entonces comencé a moverme lentamente ⿿veamos que tal lo haces con tu agujero- le dije y comencé a hacerlo cada vez más rápido, diana se estaba habituando a mi verga en su culito y comenzó de nuevo ⿿mmmmmhhhpapi, muévete más rápido, vamos- me dijo ⿿no es rápido?- pregunte ⿿pues tu lo pediste- y sin darle oportunidad a nada la agarre de sus hombros y con fuerza la hacia mi sacando y metiendo fuertemente mi verga alcanzando a ver de vez en cuando como ese culito quedaba abierto despues de sacarle mi pene ⿿así esta mejor perra puta?- a lo que respondió ⿿si papito así, tu mandas- las sensaciones de placer, pasión y morbo corrían por todo mi cuerpo al ver ese cuerpo que estaba sodomizando, eso me gusto ⿿que rica estas puta mía, te gusta, te gusta lo que te hago perra... Pues toma, toma cabrona, hasta adentro puta, puta caliente- le decía al mismo tiempo que le daba envestidas que terminaban en un fuerte golpe ⿿eres mi puta, eres mi prostituta, eres mi golfa, eres una perra en celo???- le pregunte, a lo que contesto ⿿si, siiii soy tutu puta exclusiva,tu perra, mmmmmmhhhaaaaajjj, aj, aj soy..tu golfa, y puedes hacer conmigolo que quierasaaaaaaaahhhmmmjjj, aaaajjjjmmm- dijo al momento que comencé a sentir como un torrente de sensaciones subía por todo mi cuerpo como una llamarada de fuego ⿿aaaaaaaagggggggghhh- chorros de semen salieron por mi pene dejándolos instalados en su ano. Cansados por la actividad nos dejamos caer en la cama respirando apresuradamentey sin sacarle mi palo y mientras nos mirábamos. Con la voz más calmada me dijo ⿿ eres lo máximo y si, soy tuya, soy tu puta, soy tu perra en celo, soy tu esclava, soy la yegua que puedes montar cuando tu quieras, soy tu juguete, lo que quieras que yo sea seré y te repito amor, puedes hacer conmigo lo que quieras, soy totalmente tuya- dijo al momento que me besaba . Por el cansancio nos quedamos dormidos, tendidos en la cama completamente desnudos. Al día siguiente desperté y me vi desnudo, recordé lo que había sucedido pero diana no estaba conmigo, me levante y olía a café, me puse un short y me dirigí hasta la cocina, cual fue mi sorpresa encontrar a diana cocinando con solo un mandil para protegerse del fuego de la estufa, era maravilloso ver como deja apreciar parte de sus cuerpo, su espalda tersa, su trasero hermoso, sus piernas, ella me vio y sonriendo dijo ⿿hola corazón, quise hacerte de almorzar, hice mal o por que estas tan serio- la verdad estaba estupefacto por lo increíble que se veía vestida, si se le puede decir así, de esa forma ⿿no, la verdad gracias huele muy bien- sonrió y siguió su tarea, les diré que fue el inicio de quince días llenos de pasión y sexo lleno de lujuria y desenfrenoy efectivamente ella ya era mía aunque, estuviera con toñoy en realidad hice lo que quise con ellaya les platicare.
¿Te gusta el sextel?
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Me basta con cerrar los ojos y pensarte para sentirte de nuevo junto a mí. Tu voz deliciosa en mi oído en medio de la noche mientras mis manos juguetean con mi cuerpo y mi mente tiene la capacidad de convertirlas en las tuyas
Me gusta rememorar el momento cuando te encuentro, o ¿Acaso me encuentras tú? La cuestión es que sucedió una de esas noches de ocio y deseo, donde era imperante compartir con una voz la locura de este cuerpo ardiente de esta rajita caliente que desea tanto de este dildo que penetra mi sexo provocando llamaradas. Sin más, ingreso a una sala de cibersexo. Mentiría acerca de esos detalles pero en algún momento me encuentro dándote mi teléfono mientras deseo de manera ferviente que sea algo agradable y pueda tener un delicioso orgasmo acompañada de ti.
Inicia la charla y así nos enganchamos en un intercambio de palabras, de opiniones, de pensamientos mientras disfrutaba de tu voz, esa seductora voz que penetraba en lo más profundo de mi cabeza con desparpajo y cierto cinismo, del tintineo de los hielos en tu vaso y las bocanadas de humo del cigarrillo que, me parece, llena el ambiente. Hasta que me sentí lo suficientemente cerca de ti para rozar tu cara, recorrer tus cejas, ojos, mejillas y boca con mis labios convertidos en mariposa mientras tú me alientas a seguir diciéndome cuanto te gusta, la mariposa evoluciona en un ser reptante, envolvente, anhelante... en un ser todo dientes ansioso de probarte, regresando a tu boca para beberte... tú no perdías tiempo, tus manos me recorrían, me estrujaban, jaloneando mi cabello mientras musitabas mi nombre, pero era mi momento y siempre agradecí que me permitieras saborearte, bajar hasta tu pecho donde inhalaba tu aroma saturando con él mis pulmones ¿Recuerdas como nos excitaba el olisquearnos como fieras salvajes? el pensar en tu aroma de macho, en el vello de tu axila, de tu vientre y mi nariz aspirándote, intoxicándose...
Sí, era toda una hembra deseosa de ti, que en medio de lengüetazos y olisqueos seguía bajando por tu cuerpo hasta llegar a tu miembro, el cual deslizaba por toda mi cara ¡Que rico sentir tu carne dura y vibrante marcando el contorno! Acercar mis pezones duros y erectos a la cabecita para que se encuentren y se humedezcan con el jugo de tu calor mmm para entonces afloraba ese lobo que llevas dentro y te convertías en una fiera que me devoraba... ¡Ahhh! esas mordidas que me dabas en el cuello entre gruñidos provocaban que yo me entregara sumisa y dócil a ti, mi amo para que hicieras de mi lo que quisieras... como una presa entre tus fuertes mandíbulas.
Acariciabas mi sexo, húmedo y caliente para ti... por ti... a veces de una manera dulce y suave, otras... como se toquetea el sexo de una golfa que encuentras en la calle y por ese simple hecho ya es tuya. Bajabas a él, para comerlo con maestría, para saborearlo como solo tú puedes hacerlo, recorriendo con tu lengua toda mi vulva y ano, diciéndome como te gustan y el sabor tan dulce que tienen, mientras en mi cama yo me contorsiono envuelta en un orgasmo... sudando con un dildo dentro de mi... perdida en la fantasía de tu voz.
Comienzas a penetrar mi rajita con tus dedos, los cuales llenas de mis jugos, los llevas a tu nariz y los hueles para después meterlos en tu boca y saborearlos en medio de la lujuria. Después, lo que tanto esperaba tu verga, entrando totalmente. Comienza el mete y saca que me convierte, me transforma y dejo de ser quien soy para solamente convertirme en deseo y carne, llegar al punto donde me confieso una puta clamando por ti, mi macho. Somos todo jadeos y calentura cuando te pido que me cojas por el ano, por mi culo así con fuerza, sin reparo ni piedad... y lo haces. Así, fuerte, como el cabrón que eres y que tanto me calienta, de nuevo me pierdo en la bruma donde lo único claro es cuanto disfrutamos.
¿Sabes? en medio de la vorágine de las sensaciones se sobrepone el sonido de tu voz diciendo mi nombre de manera apremiante, cada vez más y más intensa hasta convertirse en un grito, que va disminuyendo así como de tu verga fluye y fluye el líquido que me inunda.
La calma llegaba y nos despedíamos, sin preguntar por una próxima vez, aunque debo agregar que hubo muchas, hasta que sin saberlo, aconteció la última.
Fuiste el primero de varias maneras. Después de esto, después de ti alguien se atrevería a preguntarme ¿Te gusta el sextel?
dulcemujer
La madura en llamas.
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La ciudad estaba en llamas, el calor llegaba a los 42 grados y el fin de la tarde no auspiciaba algo mejor: una serie de cortes de luz convulsionaron toda la semana y ese viernes no fue la excepción. Otra vez el barrio empezó la noche sin electricidad. Los vecinos, cansados de la situación, comenzaron a llegar a una esquina estratégica y de mucho transito, para cortar las intersecciones y manifestarse ante los reiterados cortes. Vestido como estaba, bermuda y musculosa, fui hasta la esquina a hacer valer mi protesta. Al comienzo no había tanta gente, por eso podía reconocer a la mayoría de vecinos. Una mujer que vivía enfrente de mi departamento agitaba con fuerza un palo contra una olla de acero inoxidable. Nunca la había visto antes. Enseguida me llamó la atención la pasión que le ponía a la protesta. Sin embargo, lo más llamativo eran sus pechos: generosos, bien redondos y llamativamente conservados por la edad que yo suponía que pasaban los cincuenta años. Tenía una estatura baja, unas piernas bastante bien formadas, pelo rubio y unos rulos vistosos. Me acerqué a ella despacio e intente iniciar alguna conversación. Pronuncié una queja al aire y después de enojarnos con la empresa eléctrica comenzamos a contarnos de nuestras vidas. Sofía era separada y vivía sola, ya que su hija se había ido a vivir con el novio unos meses antes. La charla era amena, al menos eso parecía, porque mi mirada decía lo contrario: solo enfilaba hacia esas tetas lujuriosas y poco prestaba atención a lo que ella me decía.
-¿Vos vivís solo? - me preguntó sin mucho preámbulo.
-Si, solito y solo -dije
-¿Y como un chico tan joven no tiene a nadie para compartir ese departamento?- añadió ella guiñando levemente su ojo derecho
La insinuación parecía evidente. Me atreví a sonreír. Contesté con un lugar común: todavía no encontré a nadie o algo así. Ella puso su mejor cara, mezcla de mujer sensible y prostituta callejera con su sonrisa que le ocupaba toda su cara. Nuestros cuerpos estaban cada vez más cerca y el calor hacían estragos en mí; todo transpirado y con mi bulto que se estaba marcando por entre mi bermuda de solo observar esos pechos provocadores.
-Espero que las bebidas en la heladera todavía se conserven- le dije a modo de invitación
-Quien sabe, pero podríamos probar-
Costó un poco subir los cuatro pisos por la escalera. Cuando llegamos a la puerta ella elogió mi estado atlético, ya que subí las escaleras con facilidad.
Todavía la luz del día nos guiaba hasta la heladera. Tomamos unas latas de gaseosa y conversamos un poco. Cada uno tenía un lugar en el sillón, estábamos relajados, con las piernas que cada vez se acercaban más. Sonreía. Yo vi un dejo de lujuria en sus ojos y quise averiguar hasta donde podía llegar con mis pretensiones con ella. Sin decir una palabra mi mano comenzó a recorrer una de sus piernas. Y ella se dejó encantada. La mano siguió hasta encontrar la tela de la bombacha por entre el vestido azul. La respiración de Sofía fue más intensa, y los suspiros subieron el volumen cuando empecé a besarla por el cuello y por sus hombros. No pudimos aguantar mucho y las bocas se unieron con descaro, atragantándonos de lengua y mordiéndonos furiosos los labios. Así estuvimos algunos minutos. Creo que no llegué a darme cuenta como nos desnudamos, pero así estábamos: como Dios nos trajo al mundo.
-¿El bebe quiere la teta de su mami? -preguntó con un toco maternal en su voz.
Yo no respondí con palabras, mi boca se dirigió sin preámbulos y con furia a esos pezones que ya estaban duritos. Los succionaba como si mi vida se fuera en esa chupada. Ella me tocaba cariñosamente la cabeza y yo alternaba sus hermosas tetas en chupeteos y mordiscos deliciosos. Podía haber seguido comiéndome esos pechos eternamente pero mi sexo estaba punto de reventar; me paré en el sillón donde estábamos y sin decir ni una palabra bajé mi bermuda y le acerqué mi verga para pasársela por toda su cara. Su miraba parecía perdida por la lujuria.
-¿Te gusta el regalito que tenia para vos?- le dije. Un nuevo suspiro de ella y una respuesta que pareció un grito. No llegó a concluir afirmativamente cuando comenzó a lamerme la pija con una dulzura asombrosa. Pasaba su lengua por mi glande y luego metía toda su boca hasta el fondo de su garganta, para después volver a excitarme con su lengüita suave. La poca luz que había de afuera se estaba extinguiendo. Me pareció una buena idea ir al balcón y tomar un poco de aire, aun cuando el mínimo viento sea cálido. En el balcón siguió la chupada a un ritmo cada vez más vertiginoso. La música de fondo eran los ruidos de los bombos que provenían de la protesta. Mi respiración se entrecortaba entre cada embate de su boca. No quería terminar todavía y saqué entonces la verga de sus labios y propuse cambiar de posición. Ahora mi vecinita estaba tomada de la baranda del balcón dispuesta a que la devolvieran el placer sexual que había perdido en su matrimonio. Sin perder tiempo tomé sus caderas con mis manos y penetré su conchita ardiente. El ritmo se aceleraba, los gemidos eran cada vez más intensos como mis embates. No podía creer la situación que estaba viviendo, pero no pensaba en eso. Mis energías estaban puestas en bombear sin parar y sentir los gemidos cada vez más intensos de ella. Mi pedazo de carne se deslizaba hasta el fondo.
-Seguí, no pares, seguí pendejo - aullaba como poseída.
Descansamos no más de diez minutos en mi cama. Luego, mi vecina empezó a recorrerme con su lengua todo mi pecho. Su boca bajó por mi abdomen hasta mi sexo que otra vez volvió a tomar formar para la acción. Todavía no había llegado a una erección total cuando ella ya lo estaba comiendo entero.
-Que rica verga que tiene mi macho- decía ella al mismo tiempo que devoraba mis huevos con fruición
Pareciera que todavía me quedaban energías porque mi sexo continuaba con ganas. Sofía volvió a chupármela con gusto. A esa altura ya no quedaba luz ambiental y apenas se veían unos rulos rubios entre mis piernas. Entre la oscuridad solo sentí unos ruidos de movimientos. Pude enterarme segundos después que su culo transpirado se sentó firme contra mi cara. Se movían con paciencia y salvajismo, las redondas nalgas, y me rociaban con sus deliciosos jugos sexuales. Mi lengua recorría su concha y se detenía con la punta en su clítoris erecto. Sofía lanzó un grito que habría de callar cualquier manifestación. Mi boca bebió su orgasmo extasiado. Yo continuaba boca arriba. Otra vez sentí el movimiento de su cuerpo. Ahora, su culo se sentó arriba de mi verga. Demostraba Sofía que era experimentaba en el sexo, porque movía su cuerpo con irreverencia y distinción; puso las palmas de sus manos en mi pecho y sacudía su cuerpo de veterana de mil batallas. Un sinfín de gemidos y gritos fueron la antesala de nuestros orgasmos que se complementaron como un reloj. Sofía sintió como ella quería toda la descarga de semen dentro, toda la leche caliente en su hermosa concha.
Con el orgasmo volvió la luz. Pudimos observar nuestros cuerpos hastiados de sexo. Sonreímos. Nos besamos como dos novios que se acababan de conocer y nos prometimos sexo eterno.
gracias espero que les guste les dejos mi pagina (1)http://www.poringa.net/posts/relatos/1310452/retaltos-buenos.html
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