Su primer anal
Marta tiene 27 años y desde hace mas de 3 años es mi amante, ella tiene un cuerpo espectacular, a pesar de estar un poco gordita, sus tetas son bastante grandes, y su coñito, que casi siempre lleva depiladito, muy sabroso.
Un día quedamos en su casa, para follar como hacíamos a menudo, por lo que dirigí hasta allí, mi primera sorpresa, fue cuando me abrió la puerta y me la encontré con una minifalda espectacular y una camiseta de tirantes ajustada, bajo la cual se notaban sus enormes tetas, iba sin sujetador, por lo que me quede un rato mirándola.
-¡¡¡¡¡ Buenos días!!!!!, ¿No me das a dar un beso siquiera?. - Me dijo ella.
A lo que me lance sobre ella a besarla la boca, empezamos a besarnos y a excitarnos, cuando empecé a bajar mi mano por la espalda y llegue a su culo solo notaba la tela de su minifalda entre su culo y mi mano, cuando le empecé a subir la falda, esperando un tango de hilo, pues sabe que me gustan mucho, pero mi sorpresa fue que debajo de la falda no llevaba nada, como me puso eso. Mientras nos besamos la lleve hasta el salón de su casa, la recosté boca abajo sobre una mesa que tiene, y le empecé a comer el culo, que rico lo tenia, empezó a gemir de placer, la di la vuelta y me lance sobre su coño, tras un buen rato decidimos subir a la planta de arriba, por las escaleras no dejaba de masajearla el coño y el culito, que mojadito que estaba, fuimos directos al baño, y sobre la encimera que tiene seguí comiéndole el coño, cuando se bajo, se puso de rodillas frente a mi, mi saco la polla del calzoncillo, y empezó a chuparmela, ¡¡¡ Qué manera de chupar!!!.
Después de un rato la levante y le clave la polla, no os imagináis como entro, que mojadito, estuvimos un buen rato follando delante del espejo que tiene en la habitación, los dos mirándonos en él, hasta que le dije de hacer un 69.
Como se pone cuando se lo digo, y cuando lo hacemos, imaginároslo, empezamos a comernos, ella se agarro a mi polla, y no paraba, yo comiéndola el coño y el culo, hasta que se corrió en mi boca, hazto seguido, se volvió y me la comió. Le encanta besarme después de correrse en mi boca, la tumbe en la cama boca abajo, le metí la polla otra vez, de vez en cuando me quitaba para comerle el culo.
No pare hasta que me dijo, que porque no le daba por el culo, después de preguntarle, si estaba segura, puesto que otra vez que lo intentamos, le dolió muchísimo, me dijo que si, así que me lance a ello, puse el capullo de mi polla frente a su culo y empecé metersela poco a poco, estaba cachondisima, porque ni siquiera hacia falta aceite ni nada por el estilo, según se la metía no hacia mas que quejarse, pero de un dolor placentero, como decía ella.
Enseguida mi polla entraba en su culo, como si estuviera echo para ella, continuaba follandole el culo, mientras alternaba con su coñito, o se le comía las 2 cosas, continué follandole el coño hasta que se corrió, con todo su jugo en mi polla se la volví a meter por el culo, pero se quito para volver a chuparmela.
Yo ya no podía mas estaba a puntito de correrme, así que opte por correrme en el culo, se la volví a meter, un par de embestidas y me llego el orgasmo, y la deje el culo lleno de mi leche bien calentita, tanto que le chorreaba hacia su rosado y lubricado coño.
Marta tiene 27 años y desde hace mas de 3 años es mi amante, ella tiene un cuerpo espectacular, a pesar de estar un poco gordita, sus tetas son bastante grandes, y su coñito, que casi siempre lleva depiladito, muy sabroso.
Un día quedamos en su casa, para follar como hacíamos a menudo, por lo que dirigí hasta allí, mi primera sorpresa, fue cuando me abrió la puerta y me la encontré con una minifalda espectacular y una camiseta de tirantes ajustada, bajo la cual se notaban sus enormes tetas, iba sin sujetador, por lo que me quede un rato mirándola.
-¡¡¡¡¡ Buenos días!!!!!, ¿No me das a dar un beso siquiera?. - Me dijo ella.
A lo que me lance sobre ella a besarla la boca, empezamos a besarnos y a excitarnos, cuando empecé a bajar mi mano por la espalda y llegue a su culo solo notaba la tela de su minifalda entre su culo y mi mano, cuando le empecé a subir la falda, esperando un tango de hilo, pues sabe que me gustan mucho, pero mi sorpresa fue que debajo de la falda no llevaba nada, como me puso eso. Mientras nos besamos la lleve hasta el salón de su casa, la recosté boca abajo sobre una mesa que tiene, y le empecé a comer el culo, que rico lo tenia, empezó a gemir de placer, la di la vuelta y me lance sobre su coño, tras un buen rato decidimos subir a la planta de arriba, por las escaleras no dejaba de masajearla el coño y el culito, que mojadito que estaba, fuimos directos al baño, y sobre la encimera que tiene seguí comiéndole el coño, cuando se bajo, se puso de rodillas frente a mi, mi saco la polla del calzoncillo, y empezó a chuparmela, ¡¡¡ Qué manera de chupar!!!.
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Como se pone cuando se lo digo, y cuando lo hacemos, imaginároslo, empezamos a comernos, ella se agarro a mi polla, y no paraba, yo comiéndola el coño y el culo, hasta que se corrió en mi boca, hazto seguido, se volvió y me la comió. Le encanta besarme después de correrse en mi boca, la tumbe en la cama boca abajo, le metí la polla otra vez, de vez en cuando me quitaba para comerle el culo.
No pare hasta que me dijo, que porque no le daba por el culo, después de preguntarle, si estaba segura, puesto que otra vez que lo intentamos, le dolió muchísimo, me dijo que si, así que me lance a ello, puse el capullo de mi polla frente a su culo y empecé metersela poco a poco, estaba cachondisima, porque ni siquiera hacia falta aceite ni nada por el estilo, según se la metía no hacia mas que quejarse, pero de un dolor placentero, como decía ella.
Enseguida mi polla entraba en su culo, como si estuviera echo para ella, continuaba follandole el culo, mientras alternaba con su coñito, o se le comía las 2 cosas, continué follandole el coño hasta que se corrió, con todo su jugo en mi polla se la volví a meter por el culo, pero se quito para volver a chuparmela.
Yo ya no podía mas estaba a puntito de correrme, así que opte por correrme en el culo, se la volví a meter, un par de embestidas y me llego el orgasmo, y la deje el culo lleno de mi leche bien calentita, tanto que le chorreaba hacia su rosado y lubricado coño.
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