la historia de Karina

...20.30, se fueron todos de la oficina, me quede ordenando unos papeles para el pago de un proveedor.

No esta permitido fumar pero a nadie le iba a molestar que lo hiciera, estaba solo.

Hacia tiempo que llevaba debajo de la ropa masculina, lencería femenina, y fantaseaba con la idea de que alguien se diera cuenta y ver como reaccionaba.

Pero bueno, aprovechando que estaba solo, saque de mi bolso unos zapatos negros de tacos finitos, me quite el jean y el buzo,y segui trabajando sentado frente a la computadora vestido como una hermosa secretaria con medias de lycra negra, con ligas, con el brillo justo, tenia una mini ajustadita negra y una camisa blanca semi abierta por donde se podia ver un corpiño de encaje blanco, la tanga era blanca, diminuta, con encaje tambien.

Me cruzé de piernas y sentía como la tanga me apretaba en la cola, mientras pasaba los documentos en la PC, me acariciaba las piernas desde los zapatos de taco hasta la rodilla.

Actuaba como una mujer y me salía bastante bien, tanto que me habia olvidado donde estaba, tanto que tenía primordios de erecciones. En el sexto piso del edificio de compras, el último donde yo estaba,la única oficina con luz era la mía.

Mientras escribía percibí en la pantalla de la computadora que algo se habia movido detrás mío, como un reflejo, y me quede helado pensé que había alguien.

Si era así , no tenía escapatoria, quien fuese que estuviera ahí, si era una persona, me había descubierto, vestido de mujer.

Me levanté y caminé hacia la puerta, para ver si realmente había alguien me asome al pasillo; no vi nada, o a nadie y volví a mi escritorio, después de un rato, de nuevo esa sensación. En mi oficina había una especie de bar, ya que allí se realizaban capacitaciones para el personal. Me levanté nuevamente y fui a servirme un vaso de gaseosa, cuando veo detrás de la barra a Mario, el empleado de maestranza, un señor de 58 años.

Cuando lo vi, me dí cuenta que estaba escondido espiándome y me dijo: me descubriste!

Que haces ahí agachado ? le dije, y yo que debo decir entonces, dije con fastidio.

Esto es algo que no esperaba y realmente no se que decir!. Me dijo él. Se levantó, aun estaba con su ropa de trabajo, un enterito azul y debajo una remera blanca, me dijo:
- no digas nada, solo quiero que camines hasta tu escritorio y te sientes, como estabas hace un rato, tomemos algo, dijo, y sirvió dos vodkas, con hielo.

La sensación era ambigua, estaba nervioso, por la situación, pero tenía un deseo enorme de estar así con alguien, vestido de mujer y que me observara, que se diera algo, cualquier cosa, tanto una conversación, como sexo.

Mario me dijo:
-Nunca imaginé que eras travesti.

-no soy travesti, soy crossdresser, no quiero ser mujer, solo cambiar de rol, pero sabes que me gustan las mujeres, de hecho tengo novia y la conoces.

-tu novia sabe que te vistes de mujer? me preguntó, mientras me miraba las piernas, el vodka le había quitado el pudor.

-No, no sabe, y no quiero que sepa.

-Tu novia esta buenísima, tiene un culo terrible, y vos gay!, Dios da pan...

-Je, quizás, el hecho de que en la cama, sutilmente en algunos momentos la acaricie como una mujer, inconscientemente haga que se sienta atraída hacia mí, quizás no es que soy gay, sino que crucé la barrera del machismo y no me reprimo por pensar en que puedo tener sexo con un hombre o mejor aún, que puedo dar sexo como una mujer

-puede ser, habría que redefinir entonces qué es ser hombre, según vos, ¿se trata de una barrera?, suena a simplificación

-da un paso más, redefinamos qué es "ser" humano, o acaso no conviven en la unidad que vemos como el todo, el conjunto de sus partes, y no es que vemos de lo que tomamos como el todo la parte que mas se expresa o se muestra a nuestros ojos de todas las que lo forman?, no vemos de un árbol el tronco y sus hojas y sin embargo las raíces, que son parte de ese todo y bien importante que son sino acaso lo principal, no se muestran, negarías que un árbol no tiene raíces solo porque no se ven?

-Ja, ja, el primer travesti filosofo !!!, eres gay y no quieres asumirlo!.

-entonces el que simplifica eres tú, te es más fácil determinar, que pensar, bien mortal que eres, solo puedes conocer las cosas asignándole un nombre, sin saber cuál es la esencia real de esa cosa.

-Mira, me dijo, para mi las cosas son así, a mi no me atrae un hombre y me atraen las mujeres, me gustan demasiado, me encanta mirarles la piernas, el culo, las tetas, me encanta espiarlas, no saben que puedo verlas en el baño, y las cosas que he visto, harían excitar hasta un muerto, son muy putas, se besan a escondidas entre ellas, se tocan, y se ríen de lo que hacen !!!, a veces pienso que entraría al baño y me las cojeria a todas!

-No te da que pensar ? que las mujeres sepan darse placer entre ellas sin tener ningun complejo y para el hombre sea tan tortuoso tener que decir que le gustaría tocar un pene de otro hombre?

-A mi no me gustaría para nada!!!

-Oye, le dije, porque me espiabas entonces?, creo que sabes que soy un hombre y me espiabas porque estaba vestido de mujer y en tu imaginación mientras me espiabas, quitaste del medio que soy hombre y me veías como mujer, y si no me equivoco creo que hasta una erección tenías.

-Mm, si puede ser, que haya sido así.

-Entonces convengamos que te has excitado con un hombre, pero que estaba vestido de mujer

-Sí, puede ser, no lo voy a negar

-y entonces si cerraras los ojos y me dejaras acariciarte hasta quizás te olvidarías por completo que soy un hombre y terminarías teniendo sexo conmmigo

-tú crees?

-sin duda...

-no se, como sería?...

-mira, no me has quitado los ojos de mis piernas en todo este tiempo que hemos hablado

-es que realmente así luces como una mujer y tienes mejores piernas y cola que muchas mujeres,

-bueno parece que me has visto bastante, y algunas barreras tuyas han caído ya que te has permitido juzgar jaja!!!

Mario,se estaba excitando conmigo y no lo quería reconocer, no quería reconocer que a él como a muchos hombres también lo atraía la idea de ser penetrado, no hay peor gay que el que piensa que es un macho por que la pone.

Mario tiene 58 años pero es buen mozo, va al gimnasio, come bien, se ve saludable, es bastante bruto, pero para lo que hace en el trabajo no se necesitaba mucho. Zafa.

Se desabrochó el enterito, y se lo dejó como pantalón, porque hacía calor y se quedó con la remera sola en el torso. Mirándolo bien tiene una linda figura, es musculoso, no tiene vello, (válgame Dios!, se depila, como yo!).

-Me dijo: como es que tocas a tu mujer como una mujer?

-No has oído decir que los que mejor practican sexo oral a los hombres son lo hombres?, bueno cuando estoy con mi mujer, no la acaricio como un hombre ya que por lo general el hombre le da placer a una mujer como efecto secundario, el hombre solo piensa en el hombre. La mujer es distinto, sabe pensar en el otro, de hecho la naturaleza la eligió para que sean madres a las mujeres y no a los hombres, no?. No se puede ser madre sino tienes un profundo sentido del desprendimiento, de la renuncia..., algo que al hombre de hoy le resulta imposible alcanzar.

Por eso cuando estoy con ella pienso en brindarle placer, sin pensar en recibir, lo importante es dar, y eso solo lo puedes realizar si te compenetras bien y te pones tú mismo en el rol de mujer. Es mas, muchas veces ni siquiera acabo, pero me da mucho placer a mí, sentir como goza ella, buscar el orgasmo propio como fin tan solo es vanidad.

-Ni hablar, yo solo me compenetro en metérsela hasta el fondo para que goce !!!

-Eres un primate !, pensé,... Eres un paramecio! le dije.

-Un necio?!, por qué? me preguntó

-No, deja, mira cierra los ojos - le dije

-Ok, me dijo, pero ni se te ocurra tocarme!!!

Cuando cerró los ojos, me levante de la silla y comencé a caminar alrededor de el, no lo tocaba, solo caminaba, lentamente, felinamente, y marcaba bien el taco en el piso, quería que se olvidara que estaba con un hombre, que sintiera la presencia de una mujer. Saqué del bolso, una frasquito con Angel, el perfume de mi novia, es fuerte, afrodisíaco, penetrante, es sabido que puede mas el poder de la sugestión, que mil razones, sino, no existirían las religiones.

Ahora que el ambiente olía a mujer, me acerqué a él, y como tenía las manos colgando de la silla, rocé sus dedos con mi piernas, con las medias, y con las llemas de los dedos, acaricié su brazo, desde la muñeca hasta el bícep, por el lado de adentro, Mario, para quien los gays son el anticristo, tenía la piel de gallina por una caricia mía, un hombre vestido de mujer, despojado de falicidad, entregaba un retoño de felicidad.

Mario,con su otra mano no resistió buscar mi otra pierna, y comenzo a acariciarla, subía y bajaba su mano apretándome el muslo, subía la mano hasta donde empieza mi cola y me apretaba el cachete buscando mi tanga, me acariciba el triangulito que queda en la cola, la cola less, y yo le acariciaba suavemente el cuello, y notaba cuando pasaba la mano por su yugular como le habían subido las pulsaciones, Mario estaba exitado, y otras partes de su cuerpo habian empezado a dar muestra de su exitación, su pene estaba durísimo. Apoyé mi pierna, la rodilla mas bien, en su pene, aún con su ropa puesta y acerque mi boca a su mejilla, con mis labios rozaba la comisura de sus labios, y el me apretaba contra su pene, yo me movía con la pierna acariciandoselo, y lo besaba suavemente mojando los labios y metiendole suavemente la punta de la lengua en su boca. El saboreaba mi lapiz labial y el brillo que me había puesto.

-tus labios, me dijo, son muy suaves, jadeando, respiraba entrecortado,

-tu boca es recia, tu piel, es de hombre, tus brazos son fuertes, tu pene es enorme, le dije, susurrandole al oído y pasandole la lengua por el pabellón de la oreja,

Mario abrió los ojos y me miró, en ese instante metí la mano por arriba de su enterito y agarré su miembro, y le apreté suavemente la cabeza, como un anillo, hice con los dedos, y tiré para arriba suvemente,

Gimió de placer, se bajo los pantalones y dejo sus piernas abiertas, yo estaba en el medio de ellas y con mi pubis,con mi pene frotaba su pecho, mientras con la mano agarrandole pija, me la pasaba por la cola y lo besaba efusivamente, haciendo un movimiento pendular con mi cintura,

Nos besabamos como adolescentes, nos chupabamos, nos metíamos la lengua, me besaba las tetillas, mordía el corpiño, yo lo pajeaba, el me tocaba el borde del ano, me metía un dedo en la cola y enloquecía, yo me sentaba arriba de su dedo y arqueba mi cuerpo apoyandome en el, me mordía los hombros, le temblaban la piernas, yo sentía como su liquido seminal empezaba a salir y me mojaba la cola, me quería penetrar, y yo le decía:

-me querés cojer no?, me la queres meter?, no?, me vas a hacer doler?

-no, me decía el, quiero que acaricies así, quiero que me hagas sentir tu piel, me encanta tu piel, es muy suave, me encanta tu ropa, me gusta com olés, aún no usé mi pija y siento tanto placer como si te la hubiera metido, me dijo

-será que te acaricio con cariño mas que con pasión, y abrió los ojos me miró me agarró de la nuca y me metio la lengua hasta la garganta, y me abrio la boca con su lengua y me empezo a chupar mi lengua como si fuese un pene.

En ese momento me tomo de la cintura se paró, me dio vuelta y me sento de un solo movimiento en la silla, me agarro de la nuca de nuevo y me metio la verga en la boca,

Gemía, la sacaba de mi boca y me la metia de nuevo, me la tocaba a mí, me pajeaba con fuerza, me abría las piernas y me metia los dedos en mi cola, yo estaba sentado en la silla, con las piernas abiertas de para en par y me exitaba muchisimo a mi ver mis piernas enfundadas en esas medias, la mini subida hasta la cintura, mis tacos, mis pies arqueados, la cola sacada para afuera tanto que la tanga me quedaba tirante y me apretaba en el ano, me sentía como una mujer a pesar de mi pene erecto, yo tambien me tocaba...

Mario ya no daba mas, se la chupaba con fuerza y le mordía la cabeza, apretaba la cabeza de su verga con mis labios y tiraba para afuera, el me la quería meter adentro, hasta la garganta, pero yo lo sacaba y le chupaba la cabeza com si fuese esos chupetines redondos, le pasaba la lengua por debajo de la cabeza por el frenillo, y su pija se ponía mas dura se doblaba para arriba, era un fierro, yo lo tocaba en determinadas partes del cuerpo, de la espalda, con mis dedos, hincaba lo dedos en lugares específicos de su espalda y Mario se retorcía de placer,

-Qué me haces ???, me decía; cómo lo haces ???, me preguntaba; donde estuviste hasta ahora ???, me indagaba,

Se cuestionaba como aquel hombre que le inquirió a Dios cuando murió y fue al infierno, porque no le había mandado una señal, y Dios le dijo: " a los 14 años, ese árbol que te cruzaste en la ruta, a los 30 esa mendigo que ignoraste en la calle, a los 70 esa flor que arrancaste de tu jardín porque no te gustaba , fueron las señales para salvarte y no les diste importancia, ahora estas perdido...

Mario me pidio que me apoye en el escritorio, con la cola para arriba, me pedía por favor que termine con ese suplicio, que lo dejara metermela, porque estaba por enloquecer.

Me di cuenta que Mario iba mas rápido con la mente que con el cuerpo, su imaginación potenciada por las caricias y el ambiente creado era demasiado estímulo para su mente sencilla de poner y sacar, poner y sacar, poner...

Me apoye en la mesa yo estaba exitadísimo, tanto chuparsela tenía los labios anestesiados, era baba por todos lados, me apoye y abri las piernas, Mario agarro su pene, me marco la cola con el dedo pulgar para no errarle, me lo lleno de saliva con la lengua, con los dedos, me escupió, me paso de nuevo la lengua me mordía los cachetes, las piernas, metia su nariz en la zanja de mi cola y metia la lengua en el culo, se paró me marco de nuevo la cola con el dedo apoyo la cabeza en la puerta de mi ano y la metio, hasta el fondo, toda adentro en un solo movimiento, y se quedó quieto un instante, en ese momento pense que me moría, me aferré a la mesa, levante la cola, abrí mas las piernas, entendí la hipotesis de Nietszche de que en el dolor hay placer, estaba con la boca abierta y la saliva caía de mis labios como si fuesen las fauces de una loba con rabia, estaba todo colorado, en ese instante que nos quedamos quietos así yo empalado hasta el fondo por la verga de Mario y MArio agarrado de mis caderas empujando lo que ya no se podía empujar mas,le dije,

Así, quiero sentirla adentro, se me paró, la tengo dura, y Mario la tocaba mientras me cojía primero despacio, luego fuerte, me abrazaba y me apoyaba contra su pecho, me besaba el cuello y me levantaba del piso en cada arremetida de su verga, la sacaba y la mojabacon su saliva y me la volvia a meter, eso me hacía morir de placer, mi cola estaba dura, parada, y me movía hacia atras y adelante en contra de su movimiento, el chasquido de nuestros cuerpos era el ritmo del placer,

Mario se sento y yo me senté penetrado de espaldas a él me apoye en sus rodillas y empece a subir y bajar mi cola, me decía que mi cola parecía una vagina, entonces me uso en cuantro patas en el piso y me dijo que me iba a acabar, que me iba a acabar adentro toda su leche, y empezamos un franeleo ritmico intenso, yo estaba muy exitado y sentía el arrebato del orgasmo inminente, así sin tocarme, empece a jadear muy fuerte ya sentía cada vez mas grande la pija de Mario adentro y el me pidió que abra mas las piernas, me empujó los hombros hacia abajo y quedo la cola bien arriba, me agarro de la cadera y en tres bombeos que me mando empezo a acabar, sus espasmo eran terribles, y sentía como me iba llenando por dentro, todo su semen caliente me inundaba y se salía para afuera, lo sentía bajar por mis piernas, y entonces llego ese momento que esperaba, me levante un poco y moví la cadera intensamente refregando su pija adentro mío, mi pene estaba duro y así sin tocarlo acabé yo de una forma descontrolada, sin masturbarme , penetrado por la pija de MArio tuve mi orgasmo, por la presión de la pija de Mario adentro de mi cola, acabé mucho mas que de costumbre como hombre, y me desmoroné en el piso con Mario arriba empapados de sudor los dos, me daba mordiscos en la espalda y nos dormimos así, un buen rato.

Cuando me desperté, miré el reloj en la pared, eran las 22.30, Mario seguía dormido así, arriba mío, en ese momento no me imaginé todo lo que se vino después, porque a la mañana siguiente, cuando entré al edificio...

Karamazov, 03/08/09, 23.30 hs