You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Relato Erotico (I)

Espero que le guste me costo bastante hacerlos
Son 3 relatos eroticos algo cortos pero exitantes



Relato I

Una Hermana De Mi Mujer

Hace un año y medio vino a vivir en el fondo de la casa una hermana de mi mujer. Tiene unos 33 años, es morocha de cabello y piel. Hace bicicleta fija por eso tiene unas piernas increibles. Toma sol en el patio con una microbikini que no le cubre casi nada.
Tiene unos pechos redondos muy lindos, todo firme. Un dia le llevaba una cerveza que me habia pedido y entre sin hacer ruido y la vi depilandose las piernas. Solo tenia un conjunto de bombacha y corpiño color blanco. Tuve que ir al baño a masturbarme para bajarme la ereccion. Que cuerpo que tiene mi cuñada. Un dia a la noche me pidio que le revise la pc porque no le funcionaba bien y me pidio que le grabara unas fotos que habia sacado. Despues me pregunto si le habia grabado todo. Le dije que si, entonces me dijo que ahi habia un par de fotos "inconvenientes". En cuanto pude me hice con el cd y ahi estaba mi cuñadita completamente desnuda. Le dedique y le sigo dedicando unos buenos "trabajos manuales". Pero lo bueno estaba por venir...
Un dia ella estaba cargando ropa sucia en el lavarropas automatico cuando me pidio que la ayude. Levanta una pila de ropa y entonces se cae una tanga leopardo al piso y me dice si no se la alcanzo. La agarro y me dice si queria olerla. Entonces no se que se cruza por la cabeza y le digo que prefiero oler lo que la tanga tapa. Se levanta la pollera y me dice que se la chupe. Cuando le pase la lengua por esas carnes humedas y calientes jadeó y me empujo con las dos manos la cabeza, hundiendome en su entrepierna. Que lindo y rico olia la almejita de mi cuñadita. La lami un ratito y ella se mordia dos dedos para no gritar de placer.
Me apuro entonces pidiendome que la penetre. Ahi mismo la subi a una mesada que hay en el lavadero y se la meti hasta el fondo. En un par de embestidas ella acado por enesima vez y yo me descargue chupandole los pezones. Se acomodo un poco la ropa y se fue al baño a lavarse el semen que le chorreaba por las piernas.


Relato II

Romina es una re mina

Ella es la menor de las hermanas de mi mujer, Nancy, y es muy atractiva, simpática, conversadora, bromista y mal hablada como la mayoría de las entrerrianas. Morena, 1,74 m de estatura sin tacos, cara bonita, no de modelo, de chica de barrio y cuerpo con todo en la justa medida y armoniosamente. En la primera quincena del mes pasado con su marido, Pedro, un pequeño empresario de Paraná, vino unos días a nuestra casa en Buenos Aires. El tenía que hacer trámites de negocios y ella aprovechó para visitar a su hermana. Habitualmente, los días hábiles yo estoy fuera de casa todo el día, Nancy, los tres días que atiende en un consultorio odontológico en el barrio de Belgrano. Romina se quedaba en casa a la espera de nuestros regresos, al final del día laborable. Pero el miércoles yo me vi obligado a volver antes de tiempo porque había olvidado en casa unos documentos que necesitaba “escanear” y enviar a la casa matriz, en Milán, de la empresa que me emplea. Dada la diferencia horaria y que los esperaban durante el horario laborable europeo decidí enviarlos desde casa, donde regresé apenas pasada las 12 del mediodía. Entré en casa, saludé a Romina (que estaba planchando algunas prendas y le expliqué brevemente el motivo de mi presencia a destiempo), tomé los papeles, salí (a un locutorio-cyber para escanear y remitir) y en, menos de media hora volví. Ella seguía con la plancha y, encima de la pila de ropa ya planchada, se veía una bombacha rosada. Saltó una chispa en mi cabeza y se encendió en los ojos de mi mente la señal “SEXO”.

- ¿Queres comer algo, Javier?- preguntó sonriente

- No tengo hambre. ¿sabes de lo que tengo ganas? ¡De verte puesta esa linda bombachita! - y se la señalé con el índice.

- ¿Ehhhh? ¿Te estás haciendo el pija conmigoooo? Si se entera Nancy te va a dar vuelta como una media – había girado y fijado sus ojos en los míos mientras procesaba mi imprevista y sorpresiva propuesta.

- No tiene porque enterarse –

- ¡Dejate de joder! Esto no tiene sentido. ¡No seas insensato Javi! –

- No soy insensato pero no soy rehén de la sensatez, Nena. Si no la usas en su justa medida, le bajas la persiana a las cosas maravillosas que suelen ponerse a tu alcance de vez en cuando. –

La tomé de la cintura y, sin gran esfuerzo, la atraje.

- ¡No hagamos una cagada, ¡Javier! – alcanzó a musitar, antes de dejarse besar.

El beso fue como la luz verde en el semáforo: ambos “pisamos el acelerador” y de mis labios en sus labios a mi mano en la concha tardé pocos segundos. Al percibir las caricias íntimas ella respondió con su lengua en la mi boca. Abrazados encaramos el trayecto a la cama más próxima. Ahí el ataque, recíproco, a las prendas de vestuarios fue con precipitación y alevosía. En menos que se tarda en decir “¡Verga váaaa!” la tumbé en el colchón y la “empomé”. Ella comenzó a moverse al ritmo de una música, que supongo salía de la quena que tenía embutida en su concha, y que sólo ella oía. No paró de gemir, suspirar, clavarme las uñas en la espalda, al rato presa del placer, casi me gritó:

- ¡Ahhhhhhh, hijo de putaaaa! ¡Que lindo que me estas culiandoooo! -

Le devolví el cumplido:

- Hija de 100 padres desconocidos, coges como una diosa –

De verdad cogerla era una gloria indescriptible; ella gemía, reía, gritaba hasta que estalló su orgasmo, con profundos suspiros, sus ojos cerrados y sus uñas hundidas en mi espalda. Cuando sintió mi semen derramarse en su interior, redobló la presión de sus uñas y contrajo, repetidamente, la concha como queriendo exprimir hasta la gota más insignificante.

Recobrada la calma, cuando aún estaba encima de ella me dijo sonriendo:

- Estuvo requete bueno, nunca me habían cogido como vos,....así suavemente...despacito...pero sin pausa....me alucinaste, Javito ¡Te lo juro! ¿Me vas a pinchar otra vez?- me halagó.

- Seguro. Tenemos tiempo para otra vuelta hoy. Ya habrá ocasión para otra vez y otra y otra…..Me gustas muuuuuuucho – le respondí.

- Soy una loca. Loca de arriba y de abajo, de la sesera y de entrepiernas. Acabo de ponerles, en un solo acto, los cuernos a mi marido y a mi hermana y no sólo no se me mueve un pelo, sino que ya estoy pidiendo más. – hizo una pausa y agregó:

- ¿Me crees si te digo que es sólo la segunda vez que lo cago a Pedro, encamándome con otro, después que nos casamos? –

- Si vos lo decís no tengo porqué ponerlo en dudas, ¿que ganarías con embaucarme? Pero dejate de historias pasadas y disfrutemos -

La segunda cogida fue más variada: en cuatro (el culo me pidió que lo dejáramos para la próxima), ella arriba cabalgando, la cucharita y acabada, como manda la naturaleza, ella abajo y yo bombeando entre sus piernas. Una maravilla de cierre para nuestra primera transa. Dos días después, el viernes, Romina se las arregló para venir al centro.

Almorzamos, en menos de una hora y fuimos a un hotel cercano, en la calle Cochabamba. Prolegómeno fugaz de besos y caricias, más que suficiente para elevar la temperatura vertiginosamente, nos desnudamos y, bajo la ducha, “enjaboné y enjuagué” con esmero sus tetas, concha y culo. Romina hizo lo propio con mis testículos y mi bate templado. Fregado somero con las toallas y con los cuerpos aun húmedos, nos tiramos en la cama, juntamos los labios y la penetré sin dilaciones. Cogí como un cruzado de regreso de Jerusalem después de un largo año en pos del Santo Sepulcro, sin “enterrar el tubérculo”. Ella no se quedó atrás, hasta el orgasmo desplegó toda su arte para complacer: besos de lengua, pelvis inquieta, gemidos, suspiros, exteriorizaciones de deleite <¡siiiii!....¡asiiiiiiií!> <..¡por Dioooosss!!! que pijota divinaaaa..> <…¡que bueno!...¡seguí boludooo!> y clímax apoteótico. Hubo un segundo polvo, pero me negó la cola. Mejor dicho, prometió dármela si voy a Paraná, a visitarla. Bueno escribo esto mientras espero, en Aeroparque, que salga de una vez el maldito vuelo demorado de Austral a Rosario. Allí voy a alquilar un auto y, una vez terminado el breve trabajo que justifica el viaje, cubro los 145 Km de la autopista Rosario – Santa Fe. Romina me va a estar esperando. En Sante Fé, acordamos, no correremos riesgos de que alguien, conocido de ella, nos sorprenda entrando a un hotel. Vamos a devorarnos, eso sí, esta vez, no voy a dejar que me mezquine su “pimpante” retaguardia...

Relato III

Mi mujer le paga al mecanico

En esa ocasión la empresa donde yo trabajaba por motivos legales la serraron, y al igual que mucha gente quede sin empleo, pero con un poco de suerte conseguí uno bastante cómodo, casi todo el día me la pasaba en una oficina sin hacer nada, así fue como descubrí de lleno el Internet y todas su facilidades. En pocos dais ya estaba navegando con cierta habilidad y conocía varias formas de contacto sexuales, pero ninguno en mi ciudad, era muy chica y aun prejuiciosa, bueno para no hacerla muy larga, uno de tantos días que estaba chateando encontré un contacto de mi ciudad, pasamos varios días platicando y nos dimos cuenta que ambos teníamos la afición de compartir a nuestras esposas, resulto que ya nos conocíamos en persona, el era un mecánico viejo conocido mió, así que fue mas fácil el expresarme.

Así pasamos como dos semana, y un buen día mi auto necesitaba algunas reparaciones y se lo comente, me dijo que se lo llevara, pero yo le comente que en ese momentos no tenia dinero, que esperaría a que me pagaran para llevárselo, pero el dijo que ese no era problema, que me lo reparaba y cuando yo tuviera el dinero le pagara, total que me convenció, se lo lleve y lo reparo.

Ese día en la noche estando con mi esposa le comente que seria divertido que ella le pagara con su cuerpo, fantaseamos y el encuentro estuvo excelente, pero cuando bajo la temperatura de mi esposa me dijo que no estaba muy segura de hacer lo que le propuse, y ahí quedo la charla. Al día siguiente mi esposa fue a visitarme a la oficina y toco la casualidad que estaba chateando con el mecánico, y me acababa de mandar fotos de el y de su esposa, entre todas las fotos estaba una del miembro del mecánico, se la mostré a mi esposa y se quedo boquiabierta al ver el grosor de esa verga, eso le llamo mucho la atención y se puso a mil, y me dijo…quiero eso dentro de mi, e inmediatamente se lo comente al mecánico, el acepto gustoso y contactamos la cita para el día siguiente.

Llagada la hora de la cita, mi esposa y yo nos subimos al coche y nos dirigimos hacia la calle donde el nos estaría esperando para seguirnos en su coche, en cuanto pasamos cerca de el nos siguió y en una calle obscura yo me detuve y el a tras de mi, yo me baje y le hice ciertas recomendaciones y peticiones, el a todo dio el visto bueno. Regrese al auto abrí la puerta por donde estaba mi esposa y la ayude a bajar, la encamine hacia el auto del mecánico y se subió.

Yo regrese a mi casa a esperar con ansias y nervios el regreso de mi esposa para que me contara lo que paso. No estoy seguro cuanto tiempo pasaría pero creo que unas 3 o 4 horas, cuando en eso llega mi esposa, con un aspecto de cansancio pero con una sonrisa picara en su rostro, yo no podía esperar mas y solo le rogaba que me platicara todo con lujo de detalles, ella se recostó en la cama y yo a un lado de ella, suspiro y dijo…fue increíble, me llevo por la carretera y se detuvo a un costado, ahí empezó a tocarme, me saco las tetas de mi blusa, las mamo, las acaricio, luego empezó a desearme con suavidad, se le notaba la experiencia, después de un rato así me dijo que había rentado un cuarto en un hotel. Que si quería iríamos para estar mas tranquilos, mi esposa acepto.

Dice que al llegar a la habitación el la recostó en la cama, la desnudo y con una habilidad notable le empezó a mamar la concha, mi esposa dijo no aguantar mas, por que tenia una lengua muy hábil, de repente el se para y se quita la ropa, dejando al aire aquel grueso miembro del que mi esposa no podía quitar la vista de enzima, cuan el se acerco ella solo quería tocarlo, y así lo hizo, lo acaricio, lo masturbo y por fin se lo metió a la boca, mmmmm dice ella, apenas me cabía de lo grueso que estaba, luego se pusieron en posición del 69 así estuvieron un buen rato, describe ella… lo mamaba y lo sacaba de mi boca para verlo, era increíble.

Después de unos minutos así, el se levanta y se pone entre las piernas de ella, dijo mi esposa que le daba un poco de miedo de que la fuera a lastimar, pero el con toda la experiencia que tenia por ser un hombre de unos 40 años, se acomodo lentamente, le acerco la verga a la entrada de la concha de mi esposa, la cual ya era una cascada de flujo, estaba muy lubricada, le metió la punta, DESI ella que pensó que la abriría por la mitad, le dolió, pero solo quería sentirla toda adentro, ella se lo pidió, métela mas, cuando el se abalanzo, de un golpe la metió toda, ella dio un pugido largo de dolor, pero el placer era superior, el empezó a bombear, y mi esposa solo le pedía que le diera mas fuerte, así lo hizo, luego la volteó, la puso de cuatro en la orilla de la cama, el parado en el suelo se la volvió a meter, y le empezó a dar como un salvaje, ella describe que sentía como le abría la concha por dentro, casi podía oír el tronido de sus huesos, pero estaba en un clímax enorme, ella solo pedía mas y mas, así que aquel hombre se lo concedió, hasta que no pudo mas y termino.

Yo estaba súper excitado de oír esa historia, mientras oía a mi esposa relatar lo que le acababa de pasar la empecé a desnudar, cuando le toque su concha aun estaba súper mojada, pero cuando le metí el dedo, me percate de lo abierta que venia, le cabían varios dedos a la vez, eso me puso como loco, y le hice el amos frenéticamente, ella estaba muerta de cansancio, pero había pasado uno de sus mejores experiencias sexuales de su vida.

Ella me comento unos días después, que una de las cosas que le había excitado mas, había sido el cambio de coche, que se había sentido como una puta trabajando, y así fue, ella pago un servicio que le dieron a nuestro coche.


Bueno eso es todo espero que les halla gustado

nada copiado y pegado todo a tecla,lo escribe un conocido que se "dedica" a esto y yo le di la idea para subirlos a la web


Suerte y Saludos

Gracias por pararse a leer estos 3 relatos

Agradezco si comentan o si dejan puntos 🙂 🙂

3 comentarios - Relato Erotico (I)

titorito28
unos relatos super calientes
🙂
espero escribas mas
emainlove
mas fea la historia,anda manicito