You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

El debut con mis primas 2

Ese verano fue el mejor de nuestras vidas, dicho hoy por los 3 después de más de 30 años...
Continuaron los descubrimientos y una práctica que no es la más común se convirtió en un juego diario, les cogí en culo hasta el fin de las vacaciones..
Nos íbamos de paseo en bicicleta a algún lugar alejado, playa, monte y más de una vez nos prestaban el auto para andar por calles internas con la promesa de no cruzar la ruta.
A fines del verano tenían el ano tan entrenado que mientras me cogía a una, a la otra le enterraba un pepino 🥒 y viceversa.
Poco a poco después de esas primeras experiencias cada uno fué perfilando su rol.
La más chica era la más perversa y le gustaba controlar a su hermana mayor, la mayor cada día gozaba más y más de su sumisión, tanto que la íbamos probando y con el avance del hostigamiento sexual sus orgasmos crecían y se tornaban más delirantes y potentes. Se acababa tanto que todo a su alrededor era un charco. Se meaba toda y con ello la castigabamos y con ello se meaba más. Era un círculo vicioso, virtuoso y fantástico llenandonos a todos e inflamando los deseos de los 3. 
Ahí me formé como dominante, me potencié, me enbravecí, me puse muy violento con el sexo y eso sumaba mucho al juego.
Seguimos todo el verano sin insistir con penetrarlas por adelante, eso quedaría para después..
Por todo eso naturalizamos la sodomización al punto de que sus anos estaban totalmente adaptados a las dimensiones de mi falo, lo abrazaban al punto de estirarse al máximo dejando la aureola naturalmente oscura y de mil arrugas totalmente lisa y aclarada..
Los rectos casi perdían sus estrías al sacar la pija, fueron muchos polvos, muchas penetraciones y una energía juvenil que hoy se añora.
Cuánta leche me sacaron, me exprimieron al máximo. No sé si en alguna otra etapa de mi vida mi producción de guasca fue tanta, les alimenté la cola a leche todo el verano, jamás usamos un solo forro..
Les enseñe a comer de la pija, a tomarse toda la chele y pedir más, las llamaba cariñosamente mis gatitas lecheras.
Aprendieron a gozarse y entenderse corporalmente como sujetos de placer más allá del vínculo..
Lo probamos todo, y el trencito no fue la excepción y con ello descubrieron la excitación suprema que les producía tanto a la más chica como dómina y a la más grande como sumisa el apoyarse fuerte en cuatro patas mientras yo penetraba a la otra.
Ese verano se sellaron varios pactos, la lealtad absoluta, la reserva y el cariño eterno que mezclado con el morbo que produciamos era increíble.
Con el tiempo vendrán otras etapas que más adelante contaré, el trío siguió su rumbo por varios años más..
Hoy ya no jugamos más de esa manera pero me las sigo cogiendo individualmente, eso nunca cesó...
Pasaron matrimonios, hijos y embarazos en los 3 casos pero hay algo que creo nunca va a cambiar...
Ese pacto sexual de por vida que no solo se asienta en el pasado sino que se sostiene por el morbo permanente que disfrutamos..
Siempre decimos medio en broma medio enserio que sus sistemas nerviosos están impregnados por en veneno de mi pija y eso les dispara el morbo y la perversidad profunda que solo conmigo llegan a vivir, jamás con sus maridos.
La más chica se desarrolló cómo dómina no solo con su hermana sino también con alguna de sus parejas y uno de sus matrimonios.
Conmigo y con la hermana lograba sentirse completa, plena. Siempre fué la más versátil de los 3 y vivía a fondo sus 2 facetas de dómina ,(con ella) y de sumisa (conmigo).
La mayor es menos versátil, es sumisa total. Una receptora, abierta, dispuesta, puta al mil %. Hoy transcurridos más de 30 años es mi sumisa x excelencia y lo será por siempre. 
Su hermana también es mi sumisa y lo disfruta a pleno pero en el horizonte de su fantasía siempre hay alguien imaginario a quien ella domina mientras la penetro y aunque muchas veces la incentivé a volar siempre vuelve a mi y me demuestra fidelidad total y asegura hasta las lágrimas que nunca se va a desestaquear de mi falo mientras viva.
Yo soy lo opuesto a mi sumisa por eso nos complementamos a la perfección y también comparto placeres cerebrales con mi sumisa versátil y es por eso que nos comprendemos tanto.
Soy domador por naturaleza, dominante por antonomasia, severo como nadie y justicimo como un árbitro incorruptible, implacable y feroz ante un incumplimiento, penetrador obtuso y ciego sin miramientos, violento y castigador...
Ese mix hace explotar a mis sumisas como también me ha sido útil en algunas experiencias cuckold...
Una de ellas vivida con mi prima chica y su ex marido y padre de los hijos. 
En un momento decidió contarle de sus experiencias de iniciación sexual, sin descubrir que seguíamos fallando, y él se excitó mucho y se masturbaba mientras la escuchaba relatar como el primo se la garchaba. Lo supo trabajar como nadie hasta el límite y se entregó x completo a sus caprichos de dómina y después a los míos...
Pero eso es para otra historia..

0 comentarios - El debut con mis primas 2