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Compendio II
😘
¡Hola a todos!
¡Tanto tiempo!
XD
Les quería contar un poquito de qué ha sido de nuestras vidas con mi mejor amigo desde el nacimiento de Jacintito.
(Y les pido paciencia, porque tengo harto que contar -_-)
😍
¡Jacintito es un niñito tan lindo y tierno!
Nuestras peques lo adoran y me ayudan mucho, preguntándome si necesito algo o haciéndome compañía.
Pero no quiero irme por las ramas todavía.
😕
La verdad, es que estoy súper preocupada por mi marido últimamente.
😔
Él ha hecho de todo en este tiempo.
Todas las mañanas, lleva a las niñas a la escuela (para variar, Alicia sigue pidiéndole que la lleve a su sala de clases :/) e incluso se las arregla para llevarse a Bastiáncito.
Después él vuelve a la casa, prepara el almuerzo, y por la tarde, después de ir a buscar a las niñas, se acuesta conmigo y me hace compañía, mientras trabaja para la minera.
😂
¡Incluso se encarga de los pañales!
Lo amo mucho por eso.
😍
Él es magistral.
Es mi mejor amigo, mi todo.
Cuando estaba embarazada, incluso vio “My Hero Academia” conmigo.
¡Todas las temporadas!
😍
Había sido algo que le supliqué por mucho tiempo y al fin, accedió verla para hacerme compañía.
Son cositas como esas las que me hacen mi corazón derretirse.
❤️
Él incluso se hizo el tiempo para llevarme a la academia.
😮
Yo le dije que uno de mis grandes lamentos fue no despedirme de 12avo grado, así que fuimos en patota a la escuela.
XD
Mis niñitas estaban súper emocionadas y alegres de verme de nuevo y les encantó nuestro Jacinto.
Pero claro, también hubo algunas que no estaban tan entusiasmadas (Melissa y Bonnie), pero no dejé que me molestara.
😍
Amo mucho a mi mejor amigo y por supuesto que quería tener otro bebé con él, así que no me arrepiento de nada.
XD
Lo más chistoso fue que nuestra Alicia mágica me fue llevando en procesión a cada una de mis clases, haciendo que se me cayera la cara de vergüenza, mientras que las pequeñas no le dieron tanto color.
Mis otros colegas y la directora fueron súper gentiles y la profesora que cubría mis clases fue amable y comprensiva, así que todo bien.
😃
Pero bueno, después de dejar a Bastiáncito en la escuela, mi mejor amigo nos vino a buscar para llevarnos a la casita.
Momentos como estos son los que me hacen enamorarme un mundo de él.
Pero no todo ha sido color de rosa.
😕
Aunque tengo a Jacintito y lo estoy cuidando, también he sentido pena postparto.
Pero trato de que no me gane, porque no quiero fallarle a mi marido y sé que me ama un montón.
😟
Él me dice que no me preocupe.
Que piense solo en Jacinto.
Pero si él está haciendo todas estas cosas, ¿Cómo espera que yo me siente así tranquila sin ayudarle?
😔
Me sentía tan inútil y por eso, tuve que preguntarle…
Estábamos todos sentados a la mesa y le pregunté muerta de vergüenza si podría enseñarme a cocinar.
😅
¡Lo sé!
Diez años de casada y mi única comida decente son los tallarines que a mi marido y a mi Alicia mágica les gustan.
T.T
Pero quería ayudarle a hacer algo por nosotros y por la familia.
Las peques me miraron raro, como si me hubiera salido un cacho y no las culpo.
😕
La verdad, las tres sabemos que es su papá el del talento culinario, pero mi mejor amigo me miró con esa sonrisa tan linda, tan preciosa, tan encantadora, que me hace enrojecer como una escolar.
😊
Le dejé bien clarito que no quería agotarlo más porque sé lo cansado que está, pero le dije que yo necesito hacer mi parte.
Y fue ahí que las pequeñas se dieron cuenta de lo mucho que su papá hace por nosotras.
:o
Claro que nuestra Alicia mágica, dulce como siempre, se puso súper feliz, porque le gusta mucho cómo los dos cocinamos por igual.
😈
Pero aquí, las cosas se pusieron calientes.
La verdad que no sé qué nos pasa.
Todos nos han dicho (desde mi mamá hasta mis suegros e incluso nuestros matrimonios amigos) que lo del primer amor se acaba, pero a nosotros todavía no nos pasa.
😅
Incluso les llama mucho la atención que casi no peleamos, porque mi mejor amigo prefiere entenderme a pasar rabias y a mí, me da cosa ofenderlo o abusar de su cariño, así que lo resolvemos todo tranquilo.
Y es así cómo nos pasan cosas.
😍
O sea, yo lo veo a los ojos y todavía encuentro al chico lindo y dulce que tomó al perro Pepito en brazos, aunque lo mordiera.
O mi mejor amigo que me decía que podía ser una buena profesora y llegar a estudiar a la universidad.
O mi pololo, que me decía que sería una excelente mamá.
😘
Todas esas cosas las siento día a día y al triple, mínimo, cuando él y yo estamos a solas.
Llevamos a Jacintito en su cunita, poniéndolo en una parte que estuviera seguro y pudiéramos mirarlo. Entonces, mi mejor amigo me pasó una cebolla, algunas zanahorias y unos dientes de ajo.
:o
Todo fue como tan sensual, tan discreto, tan adulto.
Me dijo que me iba a empezar a enseñar cómo freír el arroz, que le queda excepcionalmente tan rico.
Mi primer desafío fue pelar la cebolla.
😭
Aunque me picaban los ojos, lo tenía a él abrazado a mi cintura, mientras me susurraba rico al oído.
Me tomó las manos y me enseñó a cortar la cebolla, trozarla y rebanarla, de una manera que me hacía sentir excitada y linda.
“Sabes que no me molesta cocinar…” Me dijo él, besándome el cuellito súper húmedo.
😩
“Yo sé… pero quiero ayudarte…” Le dije yo, tratando de concentrarme.
“¡Eres tan linda!” Me dijo.
Y nos empezamos a besar.
😚
O sea, él me encanta.
Lo amo un mundo y es mi mejor amigo.
Pero tenerlo cerca y oler su cuerpito rico y perfumado es mucha tentación para mí.
😘
Nos fuimos acomodando en el mueble de la cocina (¡Vaya que me gusta esta cocina americana! XD), abriéndome de piernas y levantando mi falda.
Mientras nos besábamos, mi mejor amigo me levantó la falda y me metió unos dedos en mi conchita.
😫 😖
Pensaba yo en esos momentos que, a lo mejor, podríamos sacarle a Jacintito otro hermanito al toque en el momento…
Pero, aunque mi chico me dice que quiere tener otro hijo conmigo, quiere que esperemos un poco, para que los disfrutemos bien a cada uno.
Así que yo de acuerdo…
😩 😖
Su cosa se le veía enorme bajo el pantalón.
0.0
O sea, yo entiendo a Emma y sus amigas…
Mi marido guarda mucha carne ahí abajo.
😆
Pero lo que siempre me ha encantado e impresionado de él es que siempre se preocupa primero de mi placer y se aguanta…
Se aguanta como un monje, hasta que las ganas se me vuelven locas porque me la meta.
“¡Mi amor!” Le dije con mi voz más de putita, más romántica. “¡Creo que los dos estamos tensos! ¡Creo que deberíamos tomarnos un descanso!”
😏
Me dio una sonrisa calentona, su paquete enorme latiendo inquieto.
“Sí, estoy de acuerdo.” Me respondió él, finalmente desabrochándose el pantalón.
😋
No me pude aguantar las ganas.
Tenía que sentirla entre mis dedos.
Se veía enorme…
0.0
La sentí en la palma de mi mano, caliente, enorme, palpitante.
Mi mejor amigo se quejó de gusto.
Se ponía más y más dura.
Más excitante.
Más caliente en mi mano.
“¡Tómame!” le pedí, porque si no, me iba a volver loca.
😩 😖
Y me la empezó a meter de a poco.
Haciéndome el quite, como ya es su costumbre, a mis calzones y ensanchándome más que la vida misma.
😫 😖
En esos momentos, me sentía tan agradecida de Erin.
Porque claro, como ella nunca ha hecho el amor con alguien que la vuelve loca de pies a cabeza, que te ama y te quiere un mundo, nunca sabrá lo irresistible que es tener a tu chico entre tus piernas, bombeándote fuertemente.
Y peor todavía, cuando tu mente todavía recuerda cómo tu cuerpo igual te terminó traicionando al final del embarazo, sin dejarte sentir este manjar de placer.
😩 😲
De a poco, mi chico me fue desnudando.
Sus manos tibias masajeando mis pechitos enormes e hinchados, llenos de leche.
Mientras que yo me mordía la lengua, para no despertar a nuestro Jaci de su lindo sueño.
😩 😖
Estábamos los dos calientes.
Les digo, son contadas con una mano las noches en el año que no le damos con todo en la cama.
Pero ahí a solas, en la cocina, donde todas desayunamos y compartimos la comida, era demasiado sexy para dejarlo pasar.
😖😲
Su cosa enorme me abría implacable.
“¡Eres tan perfecta!” Me alcanzó a decir, cuando su boca finalmente me soltó la pechuga, besándome tan deliciosamente con el sabor de mi leche.
😩 😖
Mi corazón se aceleraba al 1000%.
Él, bombeándome como nunca, disfrutando ver cómo mis pezones bailaban de lado a lado con sus impactantes embestidas.
Yo ya volaba por el cielo…
Viendo estrellitas y planetas, flotando en el espacio sideral.
😵 😲
Nuestros cuerpos se agolpaban con golpes secos.
Mi cuerpo entero vibrando por lo duro que me daba.
😍
Lo amo.
Es mi chico.
Mi mejor amigo.
Amo cuando me hace el amor dulce y adorable.
Y me vuelve loca cuando me da con todo, como caja, como en esos momentos.
😩 😖
A esas alturas, me acordaba de lo que años atrás me comentaba mi prima.
Mi chico se ha vuelto tan bueno, que te hace sentir un tren de orgasmos que te rompe entera.
😫 😖
Una fuerza imparable entre las piernas.
Y lo que más me encanta de él es que en esos momentos, todavía se aguanta.
Se aguanta, se aguanta y se aguanta.
Hasta el punto en que empiezas a suplicar porque se venga.
😩 😲
Te la está metiendo lo más profundo entre las piernas.
Su cabezota enorme te aprieta el vientre, volviéndote loca por querer gritar, pero tener que aguantarte porque no quieres que tu guagua o tus hijas te escuchen gozar como una verdadera puta.
Pero es que su papá, aparte de ser un excelente cocinero, tiene un tremendísimo talento al hacer gozar una mujer en el sexo.
“¡Ruiseñor, me voy a venir!” Me avisó con una voz desesperada, sus ojitos cerrados, aguantando ya lo último.
“¡Ya, por favor, vente!” le supliqué yo, no pudiendo aguantar más. “¡Me voy a venir también!”
Y nos besamos…
💦 💦 💦 💦
Nos besamos, mientras él me llenaba con lechada tras lechada de verga.
Mis dientes, chocando con los suyos, reclamándole por la impaciencia de ponerme así de caliente.
De por qué tiene que aguantarse tanto…
😂
Pero lo amo.
Es mi mejor amigo.
Mientras esperábamos que esa cosa enorme se deshinchara un poquito para sacarla, nos quedamos ahí, mirándonos y besándonos.
Me arregló la ropa y mis pechos, aunque obvio que dándome un tremendo manoseo.
Pero lo que es yo, me puse de rodillas y se la limpié, rica, disfrutando del sabor de nuestros jugos y mirándolo a los ojos, viéndole disfrutar de mi garganta profunda y de la putita particular que él tiene como esposa en su casa.
😆
Una vez arreglados, seguimos preparando la comida.
La cocina era un desastre, pero era un desorden lindo, con olorcito a amor apasionado y a arroz frito.
😂
Me acordó de la sal y de que constantemente, no dejara que el sofrito se pegara en la olla.
Y bueno, cuando le agregamos el agua y esperamos que se cociera, dale que vamos otra vez, corriéndonos mano como malos de la cabeza…
😈
Pero aunque los dos queríamos ponerle de nuevo, la verdad es que también estábamos curiosos de cómo nos quedó la comida.
Así que podrán imaginar que quedé con mis pechugas súper manoseadas y él, acomodándose ese enorme revolver en sus pantalones.
XD
¡Probamos la comida y quedó exquisita!
Me tiré encima de él y me lo comí a besos.
Esa noche, lo monté y lo monté hasta hacerle suplicar, pidiéndome que parara y aun así, me lo comí a besos y lo ahogué con mis súper pechugas.
XD
Y al día siguiente, al almuerzo, nuestras gemelas me dieron su sello de aprobación.
😤
Así que cada noche, mi marido y yo hemos estado practicando, practicando y practicando bien duro, para que me deje tan buena como él en la cocina.
(Y por supuesto, archi recontra bien cogida…XD)
😉
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