Era sábado a la noche y Paula estaba festejando en su departamento su despedida de soltera juntos a sus amigas Mariana y Ana, después de comer de un bar y las 3 potras estaban vestidas para el infarto, lastres claramente pueden ser modelos play boys.Paula al otro día se casaba con Gonzalo su novio de toda la vida, un tipo normal, abogado con muy buen chamuyo barba recortada a la perfección, pero era el típico chanta que siempre se mantiene bien en todos los aspectos.
Era verano así que las 3 tenían puesto vestidos, Paula uno blanco bien cortito, Mariana uno negro con bolados y Ana uno rojo bien pegado al cuerpo por encima de las rodillas
Las 3 tomaban champagne y ríen a carcajadas en el sillón
Ana – tu última noche de soltera – mientras brindaban
Mariana – A partir de mañana dejas de ser una persona libre.
Paula – Al fin, yo confieso que viví lo suficiente como para perder mi libertad.
Las 3 siguen riendo – a partir de ahora soy de un solo hombre – continuo Paula.
A partir de ahora no, a partir de mañana- concluyo Mariana
Bueno no importa, no va a entrar otro hombre que sea mi hombre-.
Bueno tu hombre en este momento debe estar despidiéndose rodeado de putas- dijo sin anestesia Mariana
No es así- se defendió Paula
Bueno no se si no es así- participo Ana – con alguna minita debe estar
Pero si salió con sus amigos.
¿Pero vos no sabes cómo son las despedidas de soltero de los tipos? - pregunto Ana
Bueno no me importa porque él no va a cagarme – dijo Paula con determinación
Mariana – no sería cargarte, porque si él decide despedirse de las minas esta noche es porque te quiere. Y no piensa cagarte nunca más.
Paula – vos me queres arruinar la despedida de soltera?
A – no todo lo contrario.
Mariana se para y va donde está Paula y le tapa los ojos. En ese momento Ana apaga las luces y empieza parpadear luces rojas por el living del departamento,
Ana abre la puerta y aparece el Pantera (un stripper contratado por Mariana)
Con paso entre cortados el Pantera se para frente a Paula que le tenía tapado los ojos todavía, Pantera junto con Ana corre la mesa ratona y empieza a sonar música típica (era Shankin Hand de Nickelback) de quienes realizan estos servicios.
El stripper era un chico de unos 28 años calvo con cara linda y alto con un cuerpo fibroso y bien marcados los inmensos musculo. Para este show se vistió con un sobrero acompañado con un traje negro y camisa blanca. Coloco su sobrero en la cabeza de Paula que estaba sentada juntos a sus amigas en el sofá, ya el show había empezado.
Con movimientos sexy el caballero se sacó el saco y contra la pared de abajo hacia arriba bajaba y subía su cuerpo se acercó a Paula y le dio un beso en su boca lo cual causo el grito y aplauso de todas. Lo cual lo provocaba más con su movimiento de caderas, se desabrochaba la camisa mientras se tocaba los pectorales que, hacia excitar a las chicas, se pone de espalda dejando caer la camisa.
Se da vuelta y mete su mano por debajo de los pantalones tocándose el miembro, luego se sienta por encima de Paula y les lleva las manos de ella a que le toque el trasero, mientras la otra 2 chica aprovecha para tocarle las espalda y pecho. Levanta a Paula del sofá y le da un azote en la cola, se pone de espalda a ella y lleva sus manos ahora a su cuerpo haciendo que baje hasta su miembro lo cual la futura esposa aprovecha a tocar u comprobar que era algo muy interesante en tamaño esa herramienta. Mientras ella toca las chicas ayuda a poder tantear ese terrible cuerpo, Pantera sin perder concentración se empieza a sacar el cinturón, y baila unos pasos con todas de a una, ellas se sientan lo cual Pantera empieza a bajarse el pantalón dejando a las vista su fornidas nalgas de la bella clientas. Vuelve a levantar a Paula y agarra su mano derecha sobre sus testículos y la besa apasionadamente. Ella se sienta y el ahora en frente de ella y sus amigas se termina de desnudar arrancándose el slip.
Las chicas quedan impresionadas a ver esa enorme pija parada era de unos 26 cm, blanca y venosa como también de ancho. La deja a merced de las chicas las cuales tocan y masturban. Pantera decide tomar de la cabeza a Paula y levantarla para decirle algo al oído como una propuesta que es aceptada por ella.
Paula mira a sus amigas con una sonrisa picaresca y cómplice, agarra de la mano al chico y juntos van hacia la habitación de la futura mujer casada. Sus amigas no lo podían creer, pero lo avalaban.
Ya en el cuarto de ella pintado de blanco con piso parque y una cama de 2 plazas y media también de sábanas blancas se tiran y comienzan a besarse con pasión. El chico mientras se besan le baja el vestido colocándola boca arriba de la cama.se lo saca y lo tira a un costado, acto siguiente le arranca la tanga de color blanca también para abrirle las piernas y hundirse en su vagina empezando a chupársela.
Lo hacía como un profesional, le metía la lengua como penetrándola con ella. Y Paula lo aceptaba hundiéndole la cabeza con sus manos hacia sus depiladas conchas.
Paula – ahhhh ahhhh aggggg si papito si así papito – comenzaba con su primeros gemidos
Pantera – te gusta putita – le decía de forma muy sensual
Paula – se me encanta –
Pantera se levanta sobre la cama y se inclina sobre sus tetas la cual agarra y empieza a hacerse una turca sobre ella, luego se coloca sobre los pies de la cama, lo cual Paula se dirige hacia el gateando, Pantera le agarra la cabeza y se la lleva hacia su pene.
Paula abre la boca y se la introduce adentro, empieza a chuparle la pija. Cabecea rápidamente ayudada con el movimiento de pelvis del muchacho unos 5 min, Pantera se sienta en la cama y Paula prosigue a continuar chupándosela. Ahora no solo la chupa, aunque no se la puede meter entera de forma más pasional, lamiendo ese tronco de carne mientras el con la mano derecha la masturba con los dedos.
Pantera – aaaaahhhh bien nena bien –
Paula – mmmmmmua ggggg mmmmm-
Pantera vuelve a tomar la cabeza de la novia y la hunde sobre su pene.
Paula – ggggggguaaadd gggggauaaggg – luego se la sacaba de boca y pasaba la lengua de abajo hacia arriba y volvía introducir.
Pantera – si putita seguí así que sé que te encanta – y así siguió por 10 min.
Ahora Pantera ponía al revés a Paula con la cola en su cara y más al medio en la cama, y se inca sobre ella, y comienza a cogerla de perrito y los gemidos aumenta de forma más fuerte y amplia.
El mete y saca de Pantera le abre la concha, mientras ya era la garchada era mucho más fuerte y Pantera azotaba el culo de Paula, y le agarra el pelo para que sienta mejor la embestida mientras se escuchaba como golpeaba los huevos en el cuerpo de ella.
Plaffs plaffs plaffs plaffs plaffs plaffs se escuchaba repetidamente en la habitación como los gritos de placer de Paula, los gemidos de satisfacción de Pantera.
Paula – aaaaaahaaahahahahaahhahah aaaaaaaaaaaaahhhhhhhhh si mi vidaaaaa!!!!!!!!! ¡Más dame más!!!!!!!!! –
De pronto se decide un cambio de posición, Paula boca arriba acostada con las piernas en el hombro del chico mientras le introducía la verga y con una mano le tocaba la teta y pellizcaba el pezón, con la otra mano le metía los dedos en la boca lo cual ella los chupabas.
La vuelve a poner en cuatro y le dice al oído – te la voy a meter por el orto –
Paula sonrojada – dale rómpeme el culo –
Pantera primero le mete el dedo luego de mojarselo con la saliva y escupirle el ano a Paula, y así le lubricaba el orto, con un dedo, luego 2 y hasta llega a 4.
Paula – ahaahahahahah mmmmm siiiiii –
Pantera se posiciona y empieza a introducir la verga dentro de Paula
Paula- aaaaaaaaaaahhhhh despacio animal aaaaaaahhhh-
Pantera – shhh vos goza nomas, que ahí va 1 – mientras seguía metiéndola – dos – llevaba la mitad adentro – yyyyyyyyyyyy 3 – completa
Paula – aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!
Y empezó en el mete y saca de nuevo Paula pedia que le rompiera el orto hasta que empezó a acabar y tras uno momentos Pantera saco la verga y le tocaba acabar, Paula recobro la posición boca arriba
Pantera se pone de pie sobre la cama y va la cabeza de ella, un pie en cada costado agarro su miembro apuntando su pija hacia abajo justo es su boca que la tenía abierta mientras se masturbaba el también y empezó a acabar sobre como cascada blanca caía sobre la boca y tetas de Paula.
Con toalla húmeda Paula se seca y termina acostado con Pantera tapándose con una fina sabana. Desde que llego el Pantera hasta ese momento paso una hora.
Pantera y Paula quedaron exhausto después de la cogida, pero justo sonó el timbre que solamente lo escucharon Mariana y Ana.
Van corriendo Asia la puerta y Mariana pregunta quién es. Lo cual de otro lado responde con “soy yo”, la vos es reconocida rápidamente por las chicas. Es la voz de Gonzalo
Mariana – anda a decirle a Paula- palabras dirigidas por lo bajo a Ana.
Ana – ok- mientras iba hacia el cuarto.
Gonzalo – hola Mariana sos vos? -
Mariana – si quién es?
Gonzalo – yo Gonzalo, abrime por favor? –
Mariana – si báncame que busco la llave-
Ana fue al cuarto de Paula y estaba acostada desnuda junto a Pantera tapados con una sábana blanca.
Ana – Paula, está Gonzalo afuera.
Paula – qué??????? – y salta de la cama asustada.
Ana – si está afuera, no entró-
Paula – levántate, levántate!!! No escuchas que vino mi novio, te tenés que ir– se lo decía Pantera. Mientras este se levanta de la cama.
Ana – pero por donde se va a ir si Gonzalo está en la puerta –
Justo aparece Mariana diciendo que Gonzalo esta apurado esperando que le abran, entonces Paula le pide a Ana que le traiga la ropa mientras Pantera se ponía los pantalones que ya le había traído Ana.
Mariana – hay que esconderlo a él – refiriéndose al muchacho.
Paula – cierto que carajo hago ahora???? – lo decía angustiada y asustada.
Mientras el timbre estaba meta sonar, Paula se pone el vestido y les pide a sus amigas que esconda al chico en el baño. Que justo esta al entrar al departamento, lo cual sus amigas lo hacen.
Las 3 chicas van hacia la puerta y Paula se decide hablar con Gonzalo atreves de las misma.
Paula – Gonzalo, que hacés acá? - le recriminaba – no te voy a abrir porque yo estoy con mis amigas festejando mi despedida me tenés que respetar – le decía con complicidad en la mirada de sus amigas – y vos tenés que estar en tu despedida de soltero con tus amigos –
Gonzalo – si mi amor, pero los chicos me dejaron tirado justo acá –
Después de un rato decide abrirle y lo que ven es sorprendente. Estaba Gonzalo completamente desnudo lleno de huevo y harina.
Gonzalo – hola amor si los chicos me hicieron esta joda y quería ver si me puedo bañar acá, después me voy – decía con una falsa inocencia.
Entro y saludo amablemente mientras Paula fue a buscar una toalla al baño justo su amante está escondido en la ducha detrás de la cortina. Así que decide sacarlo por la puerta que comunica el baño con su cuarto.
Paula – ahí está – le dijo a Gonzalo mientras lo tapaba con el toallon para que sus amigas no lo pudieran ver desnudo
Gonzalo – que suerte que el portero me conoció y me dejo pasar – decía mientras se dirigía al cuarto donde ahora estaba el Pantera.
Mariana – pará, anda a ducharte y yo te llevo la ropa, si no me vas a ensuciar la habitación – lo cual a Gonzalo aceptó. Y así evitaba que su novio vea al chico.
Gonzalo fue al baño y comenzó a ducharse mientras Paula fue a dejarle y sus amigas a tratar de ayudar al Pantera que pueda huir sin ser visto, pero se tardó unos minutos para vestirse. Y cuando al fin se podía escapar, pasando por el baño que tenía la puerta abierta Gonzalo sale de la ducha y Paula no pudo hacer nada para que Gonzalo no viera al chico.
Y si… justo los 2 se cruzaron con la mirada mientras las chicas estaban paradas a lado del amante de la despedida de soltera de Paula, intentando ayudar a que su salida se más rápida Mariana justo había abierto la puerta de salida y Ana le llevaba el sobrero de él.
Era una escena de novela, Paula por un lado no quería ser descubierta y se sentía que el mundo caía sobre sus pies. Por otro sus amigas que evitaron y ayudaron a que pasara una gran noche en su despedida de soltera y tratar de encubrir lo sucedido. También estaba el lado del Pantera que solo vino a realizar un servicio y como no olvidar a Gonzalo a cuál fue herido su honor de hombre.
Gonzalo – y este quién es? – pregunto en general mientras se ponía el toallón.
Mariana – ya se va – dijo con una sonrisa falsa.
Gonzalo – acá no se va nadie, cerra ya la puerta- dijo como una orden a lo cual Ana decidió obedecer. – de donde saliste vos? - ahora se lo decía de forma muy descortés al Pantera.
Pantera – mira flaco tranquilo a mí solo me contrataron –
Gonzalo acercadonce al el de forma tenas – te contrataron para qué? –
Pantera – para un show –
Gonzalo – que clase de show –
La tensión se sentía en todo el lugar
Pantera – bueno mira normalmente no incluye sexo, pero había bastante guita y no pude despreciarla –
Paula no podía creer lo que escuchaba todo se descubriría y ya tenía los ojos como vidrio.
Gonzalo – sexo con quién? –
Mariana – conmigo – y justo a Mariana se le ocurre adjudicarse la culpa.
No creyéndole para nada, Gonzalo se dirige hacia el cuarto a buscar pistas que compruebe lo que decía Mariana, justo lo sigue Paula diciendo que no iba a encontrar nada en una situación desesperante para ambos. Gonzalo no hizo caso a las palabras y siguió rastreando y oliendo las sabanas lo cual Paula decía que el único olor que iba a hallar era el de ella ya que duerme ahí, pero justo encuentra la tanga que se sacó Paula o mejor dicho que le bajo el imponente stripper y ella se excusó alegando de que pertenecía a Mariana.
Gonzalo con toda la furia va hacia Mariana lo cual dice – a pensé que la había perdido – dándose cuenta de la excusa que dio su amiga y haciéndose cómplice de la misma. Pero Gonzalo de un abrir y cerrar los ojos le levanta la falda del vestido y comprueba que ella si tenía su tanga, lo cual no solo no era de ella si no que era de Paula, si la misma que tenía en la mano dejaba fuera de toda sospecha que Gonzalo era cornudo horas antes de su matrimonio.
Inmediatamente le pide que se retire Pantera, lo cual el mismo hace.
Se acerca a Paula que ya no podía aguantar el llanto y le dice – me cagaste la vida antes de nuestro casamiento hija de puta, te juro que no me caso, escuchaste no me caso– mientras le tiraba la tanga en la cara.
Gonzalo fue a baño a recoger su ropa y luego al cuarto a vestirse.
Paula – Gonzalo escúchame –
Gonzalo – te escucho, pero no me caso – mientras se vestía.
Paula – era mi despedida de soltera, lo hice para despedirme de los hombres, te juro que nunca más te voy a cagar – Gonzalo la mira sorprendido mientras se pone las zapatillas ya que estaba vestido de la cintura para abajo.
Gonzalo – ¿hace 3 años que estamos juntos y justo hoy se te ocurre despedirte de los tipos, pelotuda? –
Paula – es la primera vez, te juro que nunca más – llorando desconsoladamente mientras que Gonzalo se burla diciendo que se patética pronunciando esas palabras con la tanga en la mano.
Mientras Gonzalo se colocaba su remera Nike blanca que era de la misma marca que el pantalón y las zapatillas negras, le dedicó unas palabras a las amigas de Paula que hasta ese momento eran espectadoras de lo sucedido ya que no podían y no sabían cómo ayudar a Paula.
Gonzalo – ustedes no son ningunas santas, metieron a un tipo en esta casa para que se las cogiera a las 3 –
Ana – para para que yo…. –
Gonzalo – ¿vos qué? – le corto las palabras que iba a decir Ana – ¿caliente como estás no te ibas a dejar coger? – continuo.
Mariana – para te estas yendo al carajo Gonzalo –
Gonzalo – ¿vos pensás que si no llegaba este tipo no se cogía a las 3? – ¿y vos Paula te diste el gusto, te echaste terrible polvo, no?, ¿ahora ustedes que les cague la garchada se quedaron calentitas no? –
Mariana – sos un guarango –
Gonzalo – yo soy un guarango, pero ustedes son unas putas - y se marcha.
Pero antes de irse amenaza a Paula de que lo va pagar. Y se va.
Las chicas durante media hora lloraron y discutían de que quien era o no la culpa de lo sucedido, pero la situación fue bajando cuando volvió a sonar el timbre.
Y era Gonzalo las chicas y sobre todo Paula se esperanzan que Gonzalo decidió perdonarla y que todo estará bien, le abre la puerta y lo hace pasar hasta la sala donde su amiga lo deja sentar en el sofá.
Mariana – bueno nosotras nos vamos, los dejamos que se arreglen tranquilos –
Ana – chau – mientras agarraban sus carteras.
Gonzalo – de acá no se mueve nadie – como una orden, los cual las 3 chicas sorprendidas se quedaron heladas.
Gonzalo – tengo una idea, yo les voy a sacar la calentura a Mariana y Ana, me las voy a coger yo –
Paula – que???? –
Gonzalo – si no no me caso –
Mariana – pero que te pasa? Estas en pedo – lo decía con una risa nerviosa.
Gonzalo – ustedes se van a tener que hacer cargo –
Ana – yo no tengo que hacer cargo de nada – lo decía de forma desafiante.
Gonzalo – vos te callas la boca – siguió – la única manera de que yo me case es teniendo una verdadera despedida de soltero, como la tuya Pau – siguió – yo también me quiero despedir de las mujeres para siempre con las chicas – con una risa llena de maldad.
Paula – no hagas eso por favor – le suplico con ternura
Gonzalo – me garcho a tus amigas y acá no pasó nada, nos casamos felices y contentos. Sino no me caso – dijo con toda firmeza – la decisión es de ustedes – mientras se dirigía al cuarto de Paula sacándose la remera como comunicando que iba a esperar la decisión denudo en ahí mismo o esperando quien iba a ser la primera es acostarse con él, si Mariana o Ana, o porque no las 2 juntas.
Paula mira con odio a Mariana y le dice que le arruino la vida. Mientras se dirige al comedor
Mariana – yo te la arruine? Bien que te cogiste al desconocido –
Ana – yo siempre dije que estas cosas terminan mal – interrumpió la discusión
Mariana – mal para vos que te calentaste y te quedaste con las ganas – le contesto a Ana.
Ana – sos una …-
Mariana – una qué? – le dijo – porque no te callas antes de hacerte la mosquita muerta –
Paula – tiene razón Ana, vos siempre le tenías ganas a Gonzalo –
Mariana – a si?, ¿Siempre? ¿Estas segura? - le decía ya más tranquila – pero si no te casas no va a ser por mi culpa, tenes un rato para convencer a Anita –
Paula – que vas a hacer? -
Mariana – lo que quiere tu marido, dale ya mañana se casan y no pasó nada –
Paula – Mariana – le grito – gracias –
Mariana se dirige al cuarto donde ya Gonzalo estaba en calzoncillo
El sienta al borde de cama con una sonrisa soberbia, lo cual Mariana hace una mueca.
Mariana – a ver que sos capaz de hacer? –
Gonzalo – jajaajaja dale ponete en bolas –
Mariana cierra la puerta y se saca las botas para luego desprenderse el vestido y que el mismo cae al suelo se sienta al lado de Gonzalo y comienzan a besarse luego el beso se hizo más pasional con lengua y saliva mientras el masajeaba las tetas de ella, tan grande duras y comienza a besarlas.
Se entereza y con el calzoncillo ahogando su pene decide bajárselo y liberar su herramienta de 24 cm de largo con un gran glande al rojo vivo. Toma la cabeza de Mariana y de un empujo se la lleva a que le chupe la pija, ella entendió lo que debía hacer a la perfección. Y en un abrir y cerrar de ojo la cabeza de Mariana subía y bajaba mientras chupaba el pene del futuro marido de su amiga.
Mariana para estar más cómoda decide que es mejor arrodillarse ante él, y cuando lo hace sigue peteando pero también chupa como un helado el glande de Gonzalo.
Gonzalo – ahhhh que bien que la chupas putita, seguí así trolita – lo cual ella hacía.
Mariana – te gusta hijo de puta, mira que dura la tenés – mientras Gonzalo sonreía orgulloso
Después de un rato Mariana decidió seguir complaciéndolo con una turca, la verga de Gonzalo se veía espectacular entre esos dos globos. Gonzalo tomó a Mariana y la levantó, puso sus manos sobre su cadera y le bajo la tanguita roja que tenía puesta para llevar a la chica entre su y verga. Mientras la atraía le separo las piernas y ahora frente a frente la subió hacia el para comenzar a meterle la pija y empujarla para clavarla mejor, sentía muy jugoso el miembro de Gonzalo la conchita de su madrina de boda. Y empezó el clásico PLAFF PLAFF PLAFF¡!!!!!
Mariana – aaaaaaaahhhhhhh ¡!!!!!!!!! ¡Si dale cornudo!!!!!!-
Gonzalo – jajaajaja mmmmmm que rica tetas – mientras la cogía le chupaba las tetas
Gonzalo se paró con ella a upa, la inclino un poco hacia atrás y empezó cogérsela en el aire prácticamente. Ella se sostenía del cuello y él la sostenía de las caderas en el vaivén del mete y saca a una velocidad máxima.
Mariana – aahhhhhhhhhh si dale cógeme, sácate las ganas puto –
Gonzalo la acuesta boca arriba y encima de ella sigue garchandola, el grito de placer de ambos se sentía en toda la habitación y departamento.
Ana y Paula escuchaban todo lo cual Ana decide agarrar sus cosas e irse la situación la había superado, pero justo en la puerta logra interceptarla Paula.....
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