Le fallé a mi amiga

Mi nombre es Eugenia, lo que voy a contar sucedió un año antes de la pandemia, en ese entonces tenía 60 años de edad, me divorcié cuando tenía 42 años de Daniel (43 años), me casé con el siendo mi primer novio y una mujer virgen, tengo 3 hijos, antes del divorcio sufrí mucho por distintos motivos, así que tomé la decisión de terminar mi matrimonio, luego durante cinco años salí con algunos hombres, pero en la primera cita ya te querian llevar a la cama, así que no tuve ninguna pareja, y por consiguiente no tuve nunca más sexo, así que me dediqué a mis hijos, que por suerte cada uno siguió su vida e independencia, viviendo sola sin compromiso, dedicándome al trabajo, viajar, asistir a reuniones con amigas.- Mi mejor amiga Susana (60 años) con quien estudiamos y nos recibimos de Contadoras, había tenido un accidente doméstico, que le produjo una fractura en la cadera, así que fui a visitarla en su casa, se encontraba junto a su esposo Aldo (65 años), conversamos un buen rato, cuando llegaron otros amigos de ellos a saludarla, me pidió que como conocía la casa si podía preparar café y té, le dije que si, dirigiéndome a la cocina acompañada de su marido para ayudarme, estaba todo preparado y ubicado en las bandejas para llevarlas, cuando siento dos manos grandes sobre mis hombros, pega su cuerpo junto al mío, susurrándome al oído, siempre quise hacer esto, decirte que te deseo, me puse feliz cuando te divorciaste pero no tuve la oportunidad de estar a solas contigo como en este momento, le dije no por favor, no puedo hacerle esto a mi amiga, de engañarla así, sos hermoso, pero no debemos, giró mi cabeza hacía él, sus azules ojos se clavaron en los míos, puso sus labios en mi boca, su lengua buscó la mía, me quede quieta, sorprendida, me deje llevar, recibiendo el mejor beso de mi vida, todo fue tan rápido, que levantó la bandeja salió de la cocina, me repuse tomando la otra bandeja con masas e infusiones, llegué a la habitación, serví a sus amigos, estaba en shock, me fui al baño a pensar lo sucedido, me encantó ser deseada, sentir ese beso despertó en mi sensaciones que estaban olvidadas, mi parte intima estaba humeda, pensé que esto no era lo correcto, no podía traicionar a mi amiga, regresé a la habitación estuve un rato, despidiendome de los presentes, me dirigí a la salida Aldo me acompañó, en la puerta le dije que olvidaramos lo sucedido, él insistió que hablaramos, el necesitaba contarme lo que le sucedía, le contesté que mañana en el bar cerca de mi departamento podriamos reunirnos para aclarar esta historia, quiso darme un beso nuevamente, corrí mi cara besando mi  mejilla, pero con su mano izquierda tomó la mía, llevándola hacia su miembro que estaba erecto, perfectamente acomodado, hizo que lo recorriera varias veces de arriba hacia abajo, me dijo, deseas perderte esto? creio que es mas largo y grueso que el de tu ex. no sabía que hacer para irme, le dije vuelve con los demás asi no te extrañan, nos mandamos mensajes mas tarde, te parece? ok me dijo.- De regreso a casa pensaba al tocar y sentir ese pene grande, grueso, mi cuerpo estaba con ganas de ser nuevamente acariciado por esas manos,  además siempre este hombre me gustó, 1,80 mts. cuerpo bien formado, rubio de ojos celestes, al llegar a casa preparé una estrategia para ver que podía hacer: 1) Cortar lo sucedido 2) Tener una aventura 3) Ser amantes. A cada instante recordaba mi mano sobre su pene, cuantos centimetros tendrá? (seguro mas de 20 el de mi ex eran 15).- Ya estaba para acostarme cuando entró un mensaje, era Aldo, como estás? no dejo de pensar en vos, me encanta el aroma de tu piel, tus senos, siempre tuve deseos de ti, sé que estás pensando mucho, aquí está para que tengas una idea de lo que te dije al salir de mi casa, era la foto de su pene, lo miré, me gustó, le dije es bastante grande y grueso el de mi ex era mucho mas pequeño. Ves lo que te estas perdiendo , nos encontramos mañana a hs. 19,30 en el bar de la otra cuadra de tu departamento , te parece ? le dije que si, me fui a dormir, a la mañana fui a mi trabajo, al regresar en la tarde, me duche para prepararme para la cita, me estaba vistiendo, cuando sonó el portero eléctrico, atendí, quien es? ...soy Aldo, le dije pero no quedamos encontrarnos en el bar?, me dijo si, pero vine temprano asi conversamos mejor sin que nadie nos observe, le di acceso a los departamentos, golpeó la puerta, le abrí, ya estaba vestida, lo miré, acercó su cara para darme un beso, estaba tan hermoso, su perfume era exquisito, que puse mis labios en los suyos, nos besamos apasionadamente, durante bastante tiempo, hasta que quedamos semi-desnudos,
tomo mis senos con sus manos, los acarició, con su boca y lengua jugó con ellos, sus manos acariciaban mi cuerpo, fue bajando lentamente hasta llegar a mi vagina, vamos a mi pieza así estamos mejor, llegamos a mi cama me senté abrí mis piernas, sus dedos abrieron mis labios vaginales, introdujo su lengua, comenzó a jugar con mi clítoris, sus dedos entraban en mi conducto vaginal, hasta que tuve múltiples orgasmos, se detuvo, puso su pene en mi cara, invitándome a que era mi turno de hacerlo gozar a él, tomé con mi mano derecha, lo observé atentamente, dije que grande que es, puse mi boca en su cabeza, apenas lo pude introducir, lo hice hasta donde pude, luego lo acaricie, lo recorrí punta a punta con mi boca y lengua, jugué con sus testículos, estuve bastante tiempo así, le dije que necesitaba ser penetrada, estaba desesperada, me recosté abrí mis piernas, puso su gruesa cabeza en mis labios vaginales, le costaba entrar, hasta que mis flujos, el empuje del mismo, sentí dolor, pegué un grito, pidiéndole que vaya despacio, lentamente se fue abriendo hasta llegar al final, sentí una hermosa sensación, al entrar y salir, sentir el golpe de los testículos, rápidamente comencé a tener sucesivos orgasmos, hasta que me llenó de su caliente semen, que se deslizaba lentamente entre mis piernas, su grueso miembro perdió su dureza, pero seguía entrando y saliendo, mi clítoris seguía trabajando con sucesivos orgasmos, mientras comía mis senos, con su boca, jugaba con mi cuello, sus besos estremecían mi cuerpo, pues su lengua hacía estragos en mi boca, nunca antes había sido amada así de esta manera, mi vagina era perfecta para su pene, luego nos acostamos en mi cama abrazados le dije que no estaba en mis planes de que se de esta situación, pero me sentía feliz de haber sido cogida así después de mucho tiempo, con ese pene grande, me dijo, ahora viene lo mejor, se puso de espaldas con su pene bien parado, mis glúteos hacía su cara, comenzó a deslizarlo desde mi recto a los labios vaginales, sus grandes dedos abrían mi conducto anal, los flujos que largaba mi vagina llegaban a las puertas del orificio, hasta que se detuvo, acomodó la gruesa cabeza, con sus manos tomó mi cintura tirando mi cuerpo hacia abajo, le dije por favor despacio, soy virgen por allí, es grande y grueso, comenzó a entrar lentamente, le dije que parara me dolía bastante, así lo hizo, seguimos conversando, hasta que de repente bajó mi cuerpo, llegando hasta el final, pegué un grito "me rompiste el culo" comenzó a moverse hasta que eyaculó, sentí un gran alivio, pues perdió su dureza, con sus dedos jugo con mi vagina y clítoris, teniendo muchos orgasmos, su pene se puso erecto, lo acomodé en mi vagina, comencé a moverme nuevamente, así que pude manejar la situación, hasta que quedamos rendidos los dos, nos dormimos, cuando él se despertó miró la hora era más de la medianoche, nos levantamos, se duchó rápidamente para volver a su casa, quedando en estar juntos nuevamente al día siguiente en mi departamento, nos despedimos, le dije flor de chupada te voy a dar y tomaré toda tu lechita que debe ser exquisita