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El semental y sus adorables vecinas Cap 13 - Ganando orgasmo

(Lean los anteriores capítulos para entender la historia erótica)

 Cuando Gastón abrió los ojos a su lado estaba la bella deJohana dormida y completamente desarreglada, en sus nalgas se le notaban aunlas marcas de las nalgadas que le había dado durante la noche anterior, pero detodas formas se la veía muy sensual con sus medias y sus tacones aun puestos,fue en ese momento que el anciano se dio cuenta que amaneció muy duro a pesarde haber tenido una noche muy ardiente.
 
Agarro con fuerza su verga y con la otra mano comenzó aacariciar las nalgas de la joven, que aun estaba muy dormida sin saber que elviejo ya estaba disfrutando de su joven cuerpo, el no tardo mucho para estarlisto para acabar, fue en ese momento que acerco su verga hacia una de lasnalgas de Johana y comenzó a descargar todo lo que tenia — Esto es un buendespertar — Murmuro mientras veía como su esperma chorreaba hacia la otra nalgade Johana sin que esta se diera cuenta de nada.
 
— Interrumpo
 
Gastón se dio vuelta para ver de quien era esa voz, y ahí lavio a la joven Abril apoyada en la puerta viendo toda la escena con una sonrisade oreja a oreja — para nada, como veras ya terminé — Al viejo no le afecto enlo mas minino que lo estén viendo.
 
Abril se quedo mirando al anciano como se levantaba conmucha paciencia sin preocuparse de estar desnudo mostrando su cuerpo arrugado ycon la verga aun dura, ella no sentía celos, pero si un poco de envidia deJohana que había disfrutado de una noche a solas con su jefe, cosa que ellatodavía no había tenido esa oportunidad.
 
Gastón se vistió y fue en ese momento que miro detenidamentea Abril que estaba con una falda corta y medias de red, ropa que él le habíacomprado — Estas muy linda hoy ¿Qué te dijo tu abuela al verte así?
 
— Nada, porque me cambie acá ¿Les gusta como me queda esteatuendo? — La joven dio una vuelta mostrando su cuerpo.
 
— Si me encanta — En ese momento se acercó a darle un besoen la boca y agarrar fuerte una de sus nalgas.
 
Luego del saludo matutino ambos se fueron a visitar a losproveedores, dejando a Johana dormida en la cama con sus nalgas manchada deesperma, a los pocos minutos Johana se despertó sobresaltada, no estaba en sucuarto, esa habitación olía a sexo, y solo tardo unos segundos en recordar losucedido la noche anterior — Me deje usar como una puta — La joven se agarro lacara de la vergüenza.
 
Se levanto de la cama con cuidado tenía el cuerpo adoloridoy cansado de su larga sesión de sexo y castigo, se saco los tacones que aun lostenía puesto, luego comenzó a recorrer la casa de Gastón para ver si loencontraba, pero a ver la hora se dio cuenta que seguramente estaba con losproveedores, fue en ese momento que entro al baño al verse al espejo.
 
— Ah dios mío — Grito cuando se pudo ver, tenia marcas portodo el cuerpo, los pezones mordidos igual que su cuello, las nalgas llenas demoretones por las nalgadas.
 
Mientras se miraba las nalgas noto el esperma de Gastón — Esinsaciable este hombre a pesar de su edad no lo puedo cree — Con su dedo índicejunto algo de esperma lo olio y luego cerró sus ojos para saborear con su leguael ultimo regalo del viejo  — Dios mepuede este hombre, mejor me baño y me voy a casa antes de que vuelva — Johanahablaba solo en el baño, era su forma de sobrellevar que había tenido una nochede sexo intensa con un anciano y le había gustado mas de lo que ella jamáspodía haber imaginado.
 
Luego de bañarse rápido se fue a su casa con el cabellomojado, con los tacones en la mano, y su vestido sensual, miro hacia todoslados con mucha vergüenza por si alguien la veía saliendo de la casa de Gastón,pero no vio a nadie y se sintió aliviada, aunque no vio que a lo lejos Larisala ex modelo la vio salir, ella se levantaba temprano para salir a correr.
 
Sin saber nada de esa situación Gastón seguía comprando conla joven Abril, en cada negocio que entraban las miradas iban hacia ella y sufalda corta, a ella no le molestaba que la miraran todo lo contrario laexcitaba, antes de entrar al ultimo negocio Gastón le hizo una pregunta que lasorprendió — Que color es tu braga.
 
— Negras, combinan con mis medias y mi falda — Contesto coningenuidad haciendo una sonrisa tímida.
 
— Quiero que te las saques y que hoy no usaras nada abajo.
 
— ¿Por qué?
 
— Porque tu jefe te lo pide ¿te molesta?
 
— No me molesta, solo que no entiendo porque, pero si mijefe me lo pide lo are — Levanto un poco sus nalgas del haciendo del auto y enun rápido movimiento las bragas estaban en sus tobillos.
 
— Buena niña — Le acarició arriba de su cabeza, Gastón noentendía porque era tan obediente, pero agradecía por su sumisión — ¿Te sientesrara por no usar nada abajo?
 
— No solo entra fresquito — Ella se comenzó a reír contimidez.
 
El viejo Gastón no se aguantó más y comenzó a meter mano ensu entrepierna mientras la besaba con intensidad, a los pocos segundos pudonotar la humedad de la joven — ¿Ya estas caliente?
 
— Si me toca así es difícil contenerse — Contesto ya con lacara roja.
 
— Avísame cuando estés por acabar — Sin decir mas le metióun dedo en la jugosa vagina de la joven mientras la seguía besando, Abrilcomenzó a jadear mientras movía su pelvi despacio, disfrutando del contacto deese hombre que la había convertido en mujer y que la encendía enseguida a pesarde la diferencia de edad.
 
— Siga jefe que ya casi estoy — La joven se había olvidadoque estaba en un público a la vista de cualquier transeúnte.
 
Cuando escucho las palabras de la joven de cabello negro elviejo automáticamente se detuvo — Si eres una buena niña te are acabar mastarde, ahora tenemos que entrar al último negocio.
 
— pero yo soy una buena niña.
 
— Si eres una buena niña esperaras a tu orgasmo calladita,ahora entremos al negocio.
 
Gastón acomodó su verga dura en el pantalón para disimularsu erección, mientras Abril acomodaba su diminuta falda y pedía por favor a suvagina que deje de mojarse que en el negocio podrían notar algo, fue así queesta pareja despareja entro el negocio — Buenos días — Saludo Abril con surostro más rojo que nunca a entrar al negocio del ultimo proveedor.
 
Los saludaron con normalidad y no les prestaron muchaatención para ellos eran unos clientes más, sin notar que a la joven Abril sele podía ver como chorreaba sus jugos por su muslo interior, esto la preocupabamucho, pero a su vez la excitaba saber que alguien descubriera que estaba tanmojada en ese momento.
 
Gastón hizo las compras con normalidad, pago y agarro dosgrandes cajas y Abril otra, coloco las cajas en el auto, y la joven intentohacer lo mismo, pero al a ver poco lugar se inclino para ser fuerza y que entrela caja, el viejo no perdió oportunidad y le metió un dedo en su ajustadavagina en la vía publica — Aun estas mojada putita.
 
— Si, pero no haga eso alguien nos puede ver.
 
— Pero no te has movido, te gusta mucho, tanto que le ganaal miedo que te vean con un dedo en tu conchita.
 
— No me desagrada y quiero acabar, pero en un lugar másprivado por favor.
 
— Bueno entra al auto y veremos si te has ganado tu orgasmo.
 
Como ordeno el viejo Gastón entraron los dos al auto, yAbril se abrió de piernas en su asiento esperando su ansiado orgasmo, cuando elviejo la vio sonrió al instante — Creo que no entendiste, todavía no te lo hasganado, primero voy yo — En ese momento se bajo el cierre del pantalón dejandoa la vista su bóxer, luego puso primera y salió conduciendo.
 
La joven a pesar que era una inexperta sabía lo que queríaese anciano, y inclino su cuerpo a lo largo del auto dejando su boca cerca dela entrepierna de este, bajo el bóxer con lentitud dejando a la vista su vergadura que olía mas fuerte que la vez anterior que la tuvo en su boca, era normalhabía tenido sexo mas de una vez con Johana y no se había bañado aún.
 
Pese a ese olor tan fuerte la joven deseaba tenerlo en suboca, no solo por su orgasmo, sino que la vez anterior lo había disfrutadomucho porque limitarse a saborearlo solo unas pocas veces, si el viejo era sujefe lo tenía más cerca que nadie, y sin pensar más se dejó llevar dándole dosfuertes chupones en su grande.
 
Abril comenzó a tragárselo mas y mas sintiendo como esaverga se hacia mas grande en su boca, disfrutaba mucho saber que gracias a susestímulos le ponía la verga bien dura a su jefe, no quería llegar a destinosolo quería tener ese pene en su boca todo el día, jamás es su vida hubiesepensado en sentido tan excitada solo por tener la pija de un viejo en su boca.
 
A Gastón se le hacía muy difícil conducir sin distraerse,pero la joven estaba poniendo lo mejor de ella tragándose su verga, y elpensaba tenerla así hasta llegar al barrio privado — Aprendes muy rápido, vas aser una buena putita pucha pija.
 
La forma de hablarle de su jefe en vez de enfurecerla la hacíaexcitar más, sin darse cuenta comenzó a gemir con la verga en la boca, se habíaolvidado del mal olor o que cualquiera que mirara adentro del auto la podíaver, solo quería seguir sintiendo como esa verga dura seguía palpitando dentrode su boca.
 
Abril seguía gimiendo con la verga en la boca sin darsecuenta que Gastón se había estacionado en frente de la entra del barrio, sepodía ver la entrada y en la garita dos guardias, aunque no se habían dadocuenta de lo que estaban haciendo adentro del auto en cualquier momento lopodían notar y eso le encantaba a Gastón.
 
La joven de pelinegro mientras estaba absorta en esa vergacaliente sintió que sin previo aviso Gastón comenzó a descargar su semencaliente mientre la obligaba a tragarse toda la verga empujando su cabeza confuerza, aunque era una posición incomoda la jovencita se trago todo lo que sujefe descargo en su boca.
 
Una vez que acabo Gastón dejo libre la cabeza de Abril, peroesta seguía con ganas de más, estaba demasiado excitada y quería seguir jugandocon esa verga y sin que se lo pida la siguió lamiendo como una perrita para quese vuelva a poner dura.
 
— Putita me parece que te has ganado tu premio — La nalgueóbien duro sabiendo lo que le aria a la joven inexperta en minutos.
 
Continuara…


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