Y llegó el final de esta historia...
Al llegar a Buenos Aires, agarré nuestras valijas y tomamos un taxi yendo directamente a la casa de mis papás para ver quien la había ido a ver a mi mamá, al llegar ahí, ella nos abrió la puerta de entrada:
-Hola ma...- Le dije
-Hola Ana... hola mis nenas - me respondió dándome un beso y a mis hijas
-Hola abuela- dijo Guille
-Holaaaa... y el abuelo?- preguntó Fran
-Esta allá adentro, pasen!
-Yo las dejo... necesito ir a verlo a Martin
-Hija, él está acá- Martín apareció con su mirada baja y se notaba lo mucho que había llorado- traten de hablar, si quieren irse a otro lugar, háganlo. Nosotros nos quedamos con sus hijas
-Hola Martin- quise abrazarlo y me apartó
-No no te acerques... que haces acá? Te dije que no quería volver a verte...
-Martin... yo intenté decirte pero... pero justo te llamaron y...
-¿Porque no me dijiste la verdad de ese tipo?¿Porque no me lo dijiste desde un principio?? Realmente cogiste con él ese día que yo me había ido a San Luis?? ¿¿Volviste a coger con él???- Yo agaché la mirada y le asentí con la cabeza- y ni el valor de mirarme tenes! ¿Sabias que mi mamá entró en la casa de ese basura y vio una foto tuya y de esa inmundicia besándose con esa dedicatoria?? El tipo le dijo todo, todo, todo... terminaste con él y te fuiste conmigo, ¿porque?? ¿Por calentura?? ¿Vos nunca me amaste???
-Claro que te amé... y te amo... pero nunca me enamoré de vos como lo estuve de Gastón...- yo me puse a llorar- pero te amé de otras formas, de otras maneras porque no solo sexo se vive y...
-Siiii... vos solo querías que cojamos
-No...
-Si Anabella!
-Noo no entendes... hicimos otras cosas nosotros que me di cuenta que lo nuestro sería más fuerte y seria mucho mejor: Nos casamos, planificamos nuestra vida juntos, tuvimos a nuestras hijas... tuvimos esa familia que tanto queríamos
-Pero a vos no te alcanzo!
-Nooo, no digas eso... después de cortar con Gaston yo no lo volví a ver más... pasaron más de nueve años que no lo vi más y me lo crucé de casualidad esa mañana que íbamos a verte a vos... pero no creí que iba a volver a verlo ese mismo día y después me invitó ese café al día siguiente y...
-¿Y que?? ¿Ahí mismo cogieron??
-Noooo.. no no... tuvimos una charla, pero yo me intenté ir porque me insinuaba cosas como volver a vernos y demás y yo me negué, me fui de ahí... y a partir de ese momento él me comenzó a seguir! Cuando iba al supermercado, me lo cruzaba, iba a donde fuera él estaba y...
-¿Con respecto a la empresa? ¿Lo metiste vos???
-No, no eso no. Eso te puedo jurar que dio la casualidad de que ambos conocían a Marcelo y las cosas se dieron así
-Te juro que no te creo nada... aunque sea verdad. Yo ya no te creo, Anabella! Vos y esa basura se rieron de mi, mataron juntos de tristeza e impotencia a mi mamá, ¿Sabes lo que es eso, Anabella??? Se llama maldad, se llama ser malditos y cagarse en todos! Ahora voy por mis hijas y ojalá hayas traído todas tus cosas porque me voy con mis hijas a San Luis y con una orden para que vos no te acerques más ni a mi ni a ellas...
-Martin... Martin déjame hablar, déjame explicarte. Solo quiero que me escuches
-No, no... ya esta! Cuando tuviste tiempo de hacerlo no lo hiciste, ahora yo ya no quiero escucharte
-Por favor... déjame que te explique algo.
-Solo te doy diez minutos y contando desde ya!
-Estuve mal de que no te haya contado, lo sé. Pero creí que iba a ser esa vez y nunca más me lo iba a cruzar pero él estaba obsesionado conmigo, al volverme a ver él me dijo que se esfumo todo a su alrededor y lo único que le interesaba era yo. Al verme bajar esa mañana del auto con nuestras hijas, él un poco se decepcionó, pero igual aun así, continuó y continuó persiguiendome. También me siguió al supermercado, me siguió cuando íba a buscarlas a jardín a las nenas, te juro que eso de la empresa no creí que podía ser posible de que él estuviera involucrado, también con respecto del restaurante...
-¿Que pasó en el restaurante?
-Él al verme que fui al baño, él me siguió y me "apretó" mientras esperaba
-¿Como te apretó?
-Se hizo el tonto preguntándome algo y al verlo yo me quede inmóvil
-¿Porque no gritaste o hiciste algo para defenderte??
-No, no se porque no lo hice!
-Porque en el fondo te gustó que él estuviera ahí!
-No, no es así...
-Siii, claro que es así. Ante un violador o cuando uno corre peligro, uno grita y se defiende, el que no lo hace es porque le gusta lo que le está pasando
-No, no es así... y él se acercó y me besó, yo lo intenté abofetear y me detuvo la mano y yo entré al baño. Fue tanto la angustia y lo mal que la pasé que tenía mis mejillas muy coloradas...
-Ah si si... me acuerdo. Y vos en vez de decirme la verdad ahí me mentiste, diciéndome que te había dado calor por la espera... fuiste una mentirosa...
-Y los papeles de la casa y mi auto que él compró yo no tengo nada que ver...
-Seguro que si... igual no me importa. Ahora él logro lo que quería era estar con vos, estarán juntos y yo estaré con mis hijas... lo único que ahora te pido es que las saludes y te excuses con cualquier mentira como me hacías a mi, mentiles a ellas que se irán conmigo y vos estarás acá sola!
-No, no Martin... no puedo hacer eso. No puedo alejarme de ellas... por lo menos pongamos una custodia compartida
-Noooooo, sos una pésima madre. Pésima mujer. No te dejaré que te acerques más a ellas!!
-Martin... por favor... Martin...- yo lloraba arrodillada en el piso y él entró a la casa de mi mamá y fue a buscar a nuestras hijas y salieron por la otra puerta que salía sl garaje, con las valijas y las cosas de ellas.
Mi mamá al verme por la ventana, salió, se me acercó y me consolaba, yo decepcionada, le decía:
-Ay ma... perdí todo lo que mas amaba en este mundo...
-Anabella... debes luchar y demostrarle a Martin que vos lo amas
-No, no ya esta... él no me quiere escuchar. Tampoco me quiere cerca. Él me odia!! Me odia... no puedo vivir si no los tengo a ellos tres...
-Ya ya... Ana... vení entra. Toma agua y reponete. Él estuvo acá preguntándome varias cosas de vos y algunas cosas que sabia y vos me dijiste, yo le conté
-¿Queeeeee??
-Siiii, debiste haber sido siempre franca con él! El no merecía esto! Yo te dije Ana, debías cuidar a tu familia, tu marido y tus hijas... pero no entiendo que te paso que no me hiciste caso para llegar a esto!
-Esto es una pesadilla! Esto es una pesadilla... me quiero despertar...
-Ana... Anabella, hija... anda apúrate, seguilo... Buscalo... Hablen, hablen y traten de reparar todo esto. Decile que te equivocaste y queres hacer las cosas bien y que queres estar con él y acompañarlo. Que Gaston o como se llame ese imbecil, no existe ni existió en tu vida. Hazlo... Anda...
-Pero...
-Dale, Ana... él se iba para la casa de sus padres y nose su dirección pero vos la sabes, deben estar ahí
-Pero...
-Ana... anda. Hoy velarán a tu suegra, así que Martin estará ahí. No lo dejes ir, lucha por el amor que le tienes a él... ¿lo amas?
-Siiii siii siiii...
-Entonces andate en nuestro auto y para la casa de ellos. No lo dejes ir, él se que te ama, ahora está herido pero si no intentas remediar, te odiara de por vida
-Porque lo decis?
-Por nada... vete!
Tome las llaves, fui con el auto a la casa de los padres de Martín, vi el auto de él afuera y había una gran cantidad de autos y lo pare más lejos y lo llame al celular para decirle que estaba ahí, no me atendía y le dejé un mensaje
"Martin, Martin... Amor... estoy acá en la casa de mis suegros, es decir de tus papás... necesito verte, necesito que hablemos. Te amo, sabes? Te amo mucho..."
Y me quedé en la entrada del vecino de ellos y miraba constantemente mi celular y estaba por darme la vuelta cuando escucho que alguien viene detrás mio, me doy vuelta y lo veo a Martín
-Ay Martin...
-¿Que pasa Ana... que queres??
-Necesito estar con vos en este momento, necesito acompañarte como siempre lo he estado, por favor odiame en silencio, odiame en otro momento pero ahora no, estemos juntos para atravesar este momento. Tu mamá era muy importante para mí, para vos y para las nenas... tenemos que acompañarnos
-Mira Anabella... yo nose que hice mal para que vos me pagaras así...
-En otro momento hablaremos eso, pero permitime hoy y hasta que la entierren a tu mamá estar a tu lado, al lado de las nenas... les dijiste?
-No, no aun no... pero me preguntan porque estoy tan triste y nose... nose como darles la noticia... se pondrán muy mal, mis nenas... mis bebitas
-¿Tus hermanas están acá? ¿Saben lo que le paso a tu mamá?
Mis hermanas están, pero me pidió mi mamá que a nadie le dijera esta aberración que vos hiciste, porque sabía que si mis hermanas y mi papá se enteraban te iban a hacer mucho daño... y yo... y yo... a vos te amo... yo nunca permitiré que nadie te dañe, aunque vos... vos... vos te hayas acostado con tu ex a mis espaldas!
Y yo me acerqué y lo abracé, él se puso a llorar mientras me abrazaba y yo lo acariciaba lentamente devolviéndole ese abrazo que necesitaba, que ambos necesitábamos.
Entramos a la casa, nos apartamos del resto para hablar con nuestras hijas y comentarles de la situación de su abuela Lourdes
-Esto es muy difícil contarles algo que ha pasado con la abuela Lourdes, pero ella... ella...
-La abuela se fue al cielo, ella murió- les dije
-¿Porque? ¿Que le paso?
-Ella era una persona grande y... y... se enfermó... y por eso murió... pero me dijo que siempre que ustedes la extrañaran miren al cielo y busquen la estrella más luminosa, será ella cuidándolas
-¿Y el abuelo? ¿El nonno?
-El abuelo está triste, así como todos, pero irá con nosotros para nuestra casa nueva apenas la llevemos a la abuela
-¿A donde la llevan?? Yo quiero ir... -dijo Fran
-No, no Fran... este lugar solo van gente adulta y grande porque es muy triste esta situación y habrá mucha gente que llora y está muy triste, ustedes se quedarán con los abus Tata y Mandy
-Yo si, voy con ellos- dijo Guille
-Yo no... yo quiero ir y verla- dijo Fran con su carita triste pero muy segura de lo que quería hacer
Ese mismo día fue el velorio y al día siguiente fue el entierro. Para poder acompañar a Martin, dejé a mis dos hijas con mis papás y estuve en todo momento con Martín, consolándolo, abrazándolo y conteniendolo para que no se sintiera solo en ese momento tan difícil que estabamos atravesando.
Al volver del cementerio, volvíamos en su auto junto con una tía y un primo de Martín, los dejamos en la casa de ellos y nosotros íbamos solos rumbo para la casa de los padres de Martín
-Martin... quería... quería darte las gracias por haberte podido acompañar para estar con vos... y yo quiero estar con vos, quiero luchar por lo nuestro y no habrá más secretos ni mas mentiras...
-Mira Anabella... por hoy es suficiente, déjame estar solo... porque esto es muy difícil.. fueron muchas cosas juntas que pasaron, que me enteré que aún no puedo asimilar.
-Esta bien, pero no puedo dejarte solo... no quiero quedarme acá sin vos y sin nuestras hijas. Sos muy importante para mí- le sonreí y le toqué la mano
-No quiero yo tampoco que lo nuestro termine, porque te amo mi hermosa, te amo y te amé siempre... - detuvo el auto en una esquina- voy a ser lo que sea necesario para que estemos bien, para que estemos juntos y no más mentiras, me lo prometes?
-Si, te lo prometo! -Le acariciaba su rostro
-Haber mirame a los ojos y decimelo
-Te prometo Martin, que no habrá más mentiras y lucharé por demostrarte que te amo
-Y yo te prometo como lo hice hasta ahora, respetarte, amarte, cuidarte a vos y a nuestras hijas para que no les falte nada- me dio un beso suave en mis labios, yo intenté abrir un poco más la boca y él me detuvo- mañana quiero volverte a ver y dame tiempo, por favor...
-Esta bien amor. Te esperaré. Así volvemos a San Luis juntos, los cuatro o si es con tu papá también, no tengo problemas
-Con respecto a eso tengo que hablar con mis hermanas... necesito que me dejes solo y mañana hablamos si?
-Ok, amor. Te quiero!
-Y yo te amo, Anabella
-Te amo, Martín
Continuamos camino, me dejó cerca de la casa de mis papás y él se fue
Al día siguiente, a la mañana temprano le envié un mensaje
-"Buenos dias amor. ¿Ya estas despierto?"
Y me levanté a desayunar junto con mis papás y me llega un mensaje
-"Buen día... con ganas de seguir durmiendo o acostado en la cama"
Y le respondí: "Si si yo también pero no puedo dormir sola. Estoy acostumbrada a dormir con vos y cuando no estoy a tu lado, no puedo dormir bien"
-"Yo tampoco dormí mucho, me faltabas vos... ¿y las niñas duermen aun?
-"Si, si ya las voy a despertar. Porque quiero que estemos listas para cuando vos nos digas"
-"Tipo 10 estaré por ahí, dales un beso grande de mi parte y más tarde nos vemos. Te amo!"
Las levanté a las niñas, desayunaron, yo me bañé y cambié de ropa. Las preparé a ellas
A las 10 llegó Martin tan puntual como siempre y al bajar del auto, tenía otro semblante mucho más asemejandose a otros días anteriores de cuando estábamos juntos
-Hola hermosa buen día
-Hola amor, buen día. Vení, pasa...
-Permiso... ¿y mis cachorritas??
-Papi.... -gritaron a dúo Fran y Guille
Se abrazaron y yo me quedé inmóvil mirándolos enternecida con esa imagen
Nos despedimos de mís papás y Martin le agradecía algo a mi mamá y yo después la abracé a ella y me dijo al oido:
-Hablando, se solucionan las cosas!
-Gracias ma. Te amo... los amo...
Las niñas los abrazaron a sus abuelos y Martin dejó el auto ahí y nos fuimos en taxi al aeropuerto y tomamos el avión para ir nuevamente a nuestra casa
Luego de esa vez que el destino o la casualidad me volvió a poner a alguien del pasado en mi camino, nunca más volví a mentirle a mi marido, porque Gaston de vez en cuando me escribia o me llamaba y yo no le respondía a ninguno de sus mensajes ni ninguna de las llamada de él.
Aun sigo casada con Martín, nos amamos, de vez en cuando tenemos nuestros momentos de intimidad, nunca faltan esos momentos de picardia, pasión, desenfreno y amor que tuvimos y ahora tenemos estando solos, ya que esas dos niñas, hoy mujeres crecieron y se independizaron, quedando la casa sola para hacer esas cosas que hacíamos cuando ellas de pequeñas dormian o no estaban!
Al llegar a Buenos Aires, agarré nuestras valijas y tomamos un taxi yendo directamente a la casa de mis papás para ver quien la había ido a ver a mi mamá, al llegar ahí, ella nos abrió la puerta de entrada:
-Hola ma...- Le dije
-Hola Ana... hola mis nenas - me respondió dándome un beso y a mis hijas
-Hola abuela- dijo Guille
-Holaaaa... y el abuelo?- preguntó Fran
-Esta allá adentro, pasen!
-Yo las dejo... necesito ir a verlo a Martin
-Hija, él está acá- Martín apareció con su mirada baja y se notaba lo mucho que había llorado- traten de hablar, si quieren irse a otro lugar, háganlo. Nosotros nos quedamos con sus hijas
-Hola Martin- quise abrazarlo y me apartó
-No no te acerques... que haces acá? Te dije que no quería volver a verte...
-Martin... yo intenté decirte pero... pero justo te llamaron y...
-¿Porque no me dijiste la verdad de ese tipo?¿Porque no me lo dijiste desde un principio?? Realmente cogiste con él ese día que yo me había ido a San Luis?? ¿¿Volviste a coger con él???- Yo agaché la mirada y le asentí con la cabeza- y ni el valor de mirarme tenes! ¿Sabias que mi mamá entró en la casa de ese basura y vio una foto tuya y de esa inmundicia besándose con esa dedicatoria?? El tipo le dijo todo, todo, todo... terminaste con él y te fuiste conmigo, ¿porque?? ¿Por calentura?? ¿Vos nunca me amaste???
-Claro que te amé... y te amo... pero nunca me enamoré de vos como lo estuve de Gastón...- yo me puse a llorar- pero te amé de otras formas, de otras maneras porque no solo sexo se vive y...
-Siiii... vos solo querías que cojamos
-No...
-Si Anabella!
-Noo no entendes... hicimos otras cosas nosotros que me di cuenta que lo nuestro sería más fuerte y seria mucho mejor: Nos casamos, planificamos nuestra vida juntos, tuvimos a nuestras hijas... tuvimos esa familia que tanto queríamos
-Pero a vos no te alcanzo!
-Nooo, no digas eso... después de cortar con Gaston yo no lo volví a ver más... pasaron más de nueve años que no lo vi más y me lo crucé de casualidad esa mañana que íbamos a verte a vos... pero no creí que iba a volver a verlo ese mismo día y después me invitó ese café al día siguiente y...
-¿Y que?? ¿Ahí mismo cogieron??
-Noooo.. no no... tuvimos una charla, pero yo me intenté ir porque me insinuaba cosas como volver a vernos y demás y yo me negué, me fui de ahí... y a partir de ese momento él me comenzó a seguir! Cuando iba al supermercado, me lo cruzaba, iba a donde fuera él estaba y...
-¿Con respecto a la empresa? ¿Lo metiste vos???
-No, no eso no. Eso te puedo jurar que dio la casualidad de que ambos conocían a Marcelo y las cosas se dieron así
-Te juro que no te creo nada... aunque sea verdad. Yo ya no te creo, Anabella! Vos y esa basura se rieron de mi, mataron juntos de tristeza e impotencia a mi mamá, ¿Sabes lo que es eso, Anabella??? Se llama maldad, se llama ser malditos y cagarse en todos! Ahora voy por mis hijas y ojalá hayas traído todas tus cosas porque me voy con mis hijas a San Luis y con una orden para que vos no te acerques más ni a mi ni a ellas...
-Martin... Martin déjame hablar, déjame explicarte. Solo quiero que me escuches
-No, no... ya esta! Cuando tuviste tiempo de hacerlo no lo hiciste, ahora yo ya no quiero escucharte
-Por favor... déjame que te explique algo.
-Solo te doy diez minutos y contando desde ya!
-Estuve mal de que no te haya contado, lo sé. Pero creí que iba a ser esa vez y nunca más me lo iba a cruzar pero él estaba obsesionado conmigo, al volverme a ver él me dijo que se esfumo todo a su alrededor y lo único que le interesaba era yo. Al verme bajar esa mañana del auto con nuestras hijas, él un poco se decepcionó, pero igual aun así, continuó y continuó persiguiendome. También me siguió al supermercado, me siguió cuando íba a buscarlas a jardín a las nenas, te juro que eso de la empresa no creí que podía ser posible de que él estuviera involucrado, también con respecto del restaurante...
-¿Que pasó en el restaurante?
-Él al verme que fui al baño, él me siguió y me "apretó" mientras esperaba
-¿Como te apretó?
-Se hizo el tonto preguntándome algo y al verlo yo me quede inmóvil
-¿Porque no gritaste o hiciste algo para defenderte??
-No, no se porque no lo hice!
-Porque en el fondo te gustó que él estuviera ahí!
-No, no es así...
-Siii, claro que es así. Ante un violador o cuando uno corre peligro, uno grita y se defiende, el que no lo hace es porque le gusta lo que le está pasando
-No, no es así... y él se acercó y me besó, yo lo intenté abofetear y me detuvo la mano y yo entré al baño. Fue tanto la angustia y lo mal que la pasé que tenía mis mejillas muy coloradas...
-Ah si si... me acuerdo. Y vos en vez de decirme la verdad ahí me mentiste, diciéndome que te había dado calor por la espera... fuiste una mentirosa...
-Y los papeles de la casa y mi auto que él compró yo no tengo nada que ver...
-Seguro que si... igual no me importa. Ahora él logro lo que quería era estar con vos, estarán juntos y yo estaré con mis hijas... lo único que ahora te pido es que las saludes y te excuses con cualquier mentira como me hacías a mi, mentiles a ellas que se irán conmigo y vos estarás acá sola!
-No, no Martin... no puedo hacer eso. No puedo alejarme de ellas... por lo menos pongamos una custodia compartida
-Noooooo, sos una pésima madre. Pésima mujer. No te dejaré que te acerques más a ellas!!
-Martin... por favor... Martin...- yo lloraba arrodillada en el piso y él entró a la casa de mi mamá y fue a buscar a nuestras hijas y salieron por la otra puerta que salía sl garaje, con las valijas y las cosas de ellas.
Mi mamá al verme por la ventana, salió, se me acercó y me consolaba, yo decepcionada, le decía:
-Ay ma... perdí todo lo que mas amaba en este mundo...
-Anabella... debes luchar y demostrarle a Martin que vos lo amas
-No, no ya esta... él no me quiere escuchar. Tampoco me quiere cerca. Él me odia!! Me odia... no puedo vivir si no los tengo a ellos tres...
-Ya ya... Ana... vení entra. Toma agua y reponete. Él estuvo acá preguntándome varias cosas de vos y algunas cosas que sabia y vos me dijiste, yo le conté
-¿Queeeeee??
-Siiii, debiste haber sido siempre franca con él! El no merecía esto! Yo te dije Ana, debías cuidar a tu familia, tu marido y tus hijas... pero no entiendo que te paso que no me hiciste caso para llegar a esto!
-Esto es una pesadilla! Esto es una pesadilla... me quiero despertar...
-Ana... Anabella, hija... anda apúrate, seguilo... Buscalo... Hablen, hablen y traten de reparar todo esto. Decile que te equivocaste y queres hacer las cosas bien y que queres estar con él y acompañarlo. Que Gaston o como se llame ese imbecil, no existe ni existió en tu vida. Hazlo... Anda...
-Pero...
-Dale, Ana... él se iba para la casa de sus padres y nose su dirección pero vos la sabes, deben estar ahí
-Pero...
-Ana... anda. Hoy velarán a tu suegra, así que Martin estará ahí. No lo dejes ir, lucha por el amor que le tienes a él... ¿lo amas?
-Siiii siii siiii...
-Entonces andate en nuestro auto y para la casa de ellos. No lo dejes ir, él se que te ama, ahora está herido pero si no intentas remediar, te odiara de por vida
-Porque lo decis?
-Por nada... vete!
Tome las llaves, fui con el auto a la casa de los padres de Martín, vi el auto de él afuera y había una gran cantidad de autos y lo pare más lejos y lo llame al celular para decirle que estaba ahí, no me atendía y le dejé un mensaje
"Martin, Martin... Amor... estoy acá en la casa de mis suegros, es decir de tus papás... necesito verte, necesito que hablemos. Te amo, sabes? Te amo mucho..."
Y me quedé en la entrada del vecino de ellos y miraba constantemente mi celular y estaba por darme la vuelta cuando escucho que alguien viene detrás mio, me doy vuelta y lo veo a Martín
-Ay Martin...
-¿Que pasa Ana... que queres??
-Necesito estar con vos en este momento, necesito acompañarte como siempre lo he estado, por favor odiame en silencio, odiame en otro momento pero ahora no, estemos juntos para atravesar este momento. Tu mamá era muy importante para mí, para vos y para las nenas... tenemos que acompañarnos
-Mira Anabella... yo nose que hice mal para que vos me pagaras así...
-En otro momento hablaremos eso, pero permitime hoy y hasta que la entierren a tu mamá estar a tu lado, al lado de las nenas... les dijiste?
-No, no aun no... pero me preguntan porque estoy tan triste y nose... nose como darles la noticia... se pondrán muy mal, mis nenas... mis bebitas
-¿Tus hermanas están acá? ¿Saben lo que le paso a tu mamá?
Mis hermanas están, pero me pidió mi mamá que a nadie le dijera esta aberración que vos hiciste, porque sabía que si mis hermanas y mi papá se enteraban te iban a hacer mucho daño... y yo... y yo... a vos te amo... yo nunca permitiré que nadie te dañe, aunque vos... vos... vos te hayas acostado con tu ex a mis espaldas!
Y yo me acerqué y lo abracé, él se puso a llorar mientras me abrazaba y yo lo acariciaba lentamente devolviéndole ese abrazo que necesitaba, que ambos necesitábamos.
Entramos a la casa, nos apartamos del resto para hablar con nuestras hijas y comentarles de la situación de su abuela Lourdes
-Esto es muy difícil contarles algo que ha pasado con la abuela Lourdes, pero ella... ella...
-La abuela se fue al cielo, ella murió- les dije
-¿Porque? ¿Que le paso?
-Ella era una persona grande y... y... se enfermó... y por eso murió... pero me dijo que siempre que ustedes la extrañaran miren al cielo y busquen la estrella más luminosa, será ella cuidándolas
-¿Y el abuelo? ¿El nonno?
-El abuelo está triste, así como todos, pero irá con nosotros para nuestra casa nueva apenas la llevemos a la abuela
-¿A donde la llevan?? Yo quiero ir... -dijo Fran
-No, no Fran... este lugar solo van gente adulta y grande porque es muy triste esta situación y habrá mucha gente que llora y está muy triste, ustedes se quedarán con los abus Tata y Mandy
-Yo si, voy con ellos- dijo Guille
-Yo no... yo quiero ir y verla- dijo Fran con su carita triste pero muy segura de lo que quería hacer
Ese mismo día fue el velorio y al día siguiente fue el entierro. Para poder acompañar a Martin, dejé a mis dos hijas con mis papás y estuve en todo momento con Martín, consolándolo, abrazándolo y conteniendolo para que no se sintiera solo en ese momento tan difícil que estabamos atravesando.
Al volver del cementerio, volvíamos en su auto junto con una tía y un primo de Martín, los dejamos en la casa de ellos y nosotros íbamos solos rumbo para la casa de los padres de Martín
-Martin... quería... quería darte las gracias por haberte podido acompañar para estar con vos... y yo quiero estar con vos, quiero luchar por lo nuestro y no habrá más secretos ni mas mentiras...
-Mira Anabella... por hoy es suficiente, déjame estar solo... porque esto es muy difícil.. fueron muchas cosas juntas que pasaron, que me enteré que aún no puedo asimilar.
-Esta bien, pero no puedo dejarte solo... no quiero quedarme acá sin vos y sin nuestras hijas. Sos muy importante para mí- le sonreí y le toqué la mano
-No quiero yo tampoco que lo nuestro termine, porque te amo mi hermosa, te amo y te amé siempre... - detuvo el auto en una esquina- voy a ser lo que sea necesario para que estemos bien, para que estemos juntos y no más mentiras, me lo prometes?
-Si, te lo prometo! -Le acariciaba su rostro
-Haber mirame a los ojos y decimelo
-Te prometo Martin, que no habrá más mentiras y lucharé por demostrarte que te amo
-Y yo te prometo como lo hice hasta ahora, respetarte, amarte, cuidarte a vos y a nuestras hijas para que no les falte nada- me dio un beso suave en mis labios, yo intenté abrir un poco más la boca y él me detuvo- mañana quiero volverte a ver y dame tiempo, por favor...
-Esta bien amor. Te esperaré. Así volvemos a San Luis juntos, los cuatro o si es con tu papá también, no tengo problemas
-Con respecto a eso tengo que hablar con mis hermanas... necesito que me dejes solo y mañana hablamos si?
-Ok, amor. Te quiero!
-Y yo te amo, Anabella
-Te amo, Martín
Continuamos camino, me dejó cerca de la casa de mis papás y él se fue
Al día siguiente, a la mañana temprano le envié un mensaje
-"Buenos dias amor. ¿Ya estas despierto?"
Y me levanté a desayunar junto con mis papás y me llega un mensaje
-"Buen día... con ganas de seguir durmiendo o acostado en la cama"
Y le respondí: "Si si yo también pero no puedo dormir sola. Estoy acostumbrada a dormir con vos y cuando no estoy a tu lado, no puedo dormir bien"
-"Yo tampoco dormí mucho, me faltabas vos... ¿y las niñas duermen aun?
-"Si, si ya las voy a despertar. Porque quiero que estemos listas para cuando vos nos digas"
-"Tipo 10 estaré por ahí, dales un beso grande de mi parte y más tarde nos vemos. Te amo!"
Las levanté a las niñas, desayunaron, yo me bañé y cambié de ropa. Las preparé a ellas
A las 10 llegó Martin tan puntual como siempre y al bajar del auto, tenía otro semblante mucho más asemejandose a otros días anteriores de cuando estábamos juntos
-Hola hermosa buen día
-Hola amor, buen día. Vení, pasa...
-Permiso... ¿y mis cachorritas??
-Papi.... -gritaron a dúo Fran y Guille
Se abrazaron y yo me quedé inmóvil mirándolos enternecida con esa imagen
Nos despedimos de mís papás y Martin le agradecía algo a mi mamá y yo después la abracé a ella y me dijo al oido:
-Hablando, se solucionan las cosas!
-Gracias ma. Te amo... los amo...
Las niñas los abrazaron a sus abuelos y Martin dejó el auto ahí y nos fuimos en taxi al aeropuerto y tomamos el avión para ir nuevamente a nuestra casa
Luego de esa vez que el destino o la casualidad me volvió a poner a alguien del pasado en mi camino, nunca más volví a mentirle a mi marido, porque Gaston de vez en cuando me escribia o me llamaba y yo no le respondía a ninguno de sus mensajes ni ninguna de las llamada de él.
Aun sigo casada con Martín, nos amamos, de vez en cuando tenemos nuestros momentos de intimidad, nunca faltan esos momentos de picardia, pasión, desenfreno y amor que tuvimos y ahora tenemos estando solos, ya que esas dos niñas, hoy mujeres crecieron y se independizaron, quedando la casa sola para hacer esas cosas que hacíamos cuando ellas de pequeñas dormian o no estaban!
1 comentarios - ¿Destino o Casualidad? Parte 18 ¡FINAL!!