Daniel (22) era un joven recto y honorable. Sus maestros de la Uni, sus compañeros, sus compañeras, todo mundo lo quería y respetaba por que el se lo ganaba a pulso. Aunque, como todos había cosas de su pasado que prefería guardar en secreto.
El verano recién comenzaba, Daniel había terminado el último semestre de la Uni y viajó en autobús de regreso a casa de sus padres donde lo esperaban con brazos abiertos ellos y sus dos queridas hermanas.
Esa casa le traía muy buenos recuerdos pero también guardaba sus secretos mas oscuros. Los padres de Daniel decidieron retirar todas las puertas de su hogar con excepción de la puerta principal y la puerta del patio. Ninguna recamara, ningun baño, ningún closet, ni siquiera la alacena tenía puerta. Mas adelante sabrás por qué.
Luisa (19) Piel clara, delgada, no tenía senos muy grandes pero su tamaño era perfecto para cualquier hombre además que lo que mas llamaba la atención de su cuerpo era su trasero, grande sin ser enorme, firme, duro paradito, le podía provocar una erección hasta a su propio padre cuando este la miraba de espaldas.
De las dos hermanas Luisa siempre fue la mas "curiosa" sexualmente hablando. Espiaba a sus padres cuando tenían relaciones por las noches, espiaba al mismo Daniel cuando este se duchaba y masturbaba, llegó un punto en el que Luisa se obsesionó con los penes, cada vez que veía a un hombre se preguntaba: -¿como será su pene?-, -Será mas grande que el de papá y el de mi hermano?-.
Comenzó a pedirle a sus amigos del barrio y de el colegio que le mostraran su "cosa" (así le decía ella). Al principio lo hacía a escondidas, los tocaba y disfrutaba sentir como se endurecían en sus manos. Después se empezó a juntar con chicos mas grandes que ella en la plaza del barrio, ahí los chicos se lo sacaban frente a ella al aire libre y podía ver y tocar de a varios al mismo tiempo. Fue entonces cuando descubrió que podía hacerlos eyacular y eso le encantó. Ver como los chicos se convulsionaban antes de salpicarla de semen le hacia sentir casi poderosa. Esos chicos la enseñaron a chuparla y eso le fascinó aún mas.
Una mañana a la hora del descanso en el cole, Luisa fue sorprendida por una maestra mientras masturbaba a un compañero y se la chupaba a otro. Desde ese momento la expulsaron de la institución y no volvió a estudiar mas.
Paty (18) tenía el cuerpo mas delgadito que el de su hermana, su trasero no era tan llamativo aunque no dejaba de ser hermoso, paradito y firme. A diferencia de Luisa ella tenía pechos mas grandes, casi como melones y en su delgadito cuerpo se veían espectaculares, Ningún hombre era capaz de resistirse a mirarlos aunque fuera por un instante. Maestros, amigos, primos, tios, novios de amigas y hasta su propio padre y hermano le habían dedicado mas de una paja alguna vez.
Paty era muy linda pero también muy penosa y aunque siempre iba con su hermana a todas partes no había tocado tantos penes como ella pero siempre veía de lejos y fantaseaba con un día hacer lo mismo. Tampoco le pedía a todo mundo que le mostraran su "cosa", solo a los chicos que le parecían lindos.
Después de espiar a Daniel mientras se duchaba no pudo dejar de fantasear con tocar el pene de su hermano. Un día en el cole, convenció a un maestro que era parecido físicamente a Daniel de que le mostrara su pene y lamentablemente para ella, los descubrieron a los pocos segundos. A ella también la expulsaron y sus padres no confiaban en inscribirla en otra institución por miedo a que se volviera a exponer.
Cuando las hermanas se quedaban solas en casa, metían a hombres de diferentes edades a su recamara y por lo general jugaban a "los esposos" solo se desnudaban y acostaban en la cama con ellos, los arbazaban para sentir con su cuerpo desnudo el cuerpo de ellos y dejaban que las tocaran aplacer mientras ellas se embobaban tocando sus penes.
Cuando Paty aprendió a hacer eyacular a los hombres no podía dejar de pensar en hacerlo con su hermano. Una noche se metió en su recamara y casi se desnudó frente a el, lo convenció de desnudarse también y comenzó a chuparsela de rodillas frente a su cama. Antes de terminar, su madre entró sin avisar y los encontró así, desnudos con ella haciéndole sexo oral. Ahí fue cuando los padres decidieron enviar a Daniel a estudiar la uni a otra ciudad. Ese era el secreto vergonzoso de Daniel, haber tenido ese encuentro con su hermanita.
Antes ya la habian descubierto masturbando a un primo y a otro chico en ocasiones diferentes. Tambien la descubrieron junto con Luisa masturbando a un tio durante una fiesta familiar. Fue así como los padres decidieron retirar todas las puertas de la casa.
El día que Daniel regresó a casa todo fue alegría, abrazos, risas, historias, etc... Pasaron horas divirtiéndose con juegos de mesa hasta que anocheció y antes de irse a dormir los padres les avisaron que la mañana del sábado tendrían que salir de la ciudad y volverían hasta la mañana del lunes. Para Daniel no fue nada sorprendente, quizás sus padres solo querían descansar un tiempo a solas y el estaba feliz de estar en casa otra vez pero para Luisa fue una oportunidad de pasar un fin de semana lleno de diversión y así se lo hizo saber a Paty.
A las 7 a.m. El papá de Daniel lo despertó para hacerle saber que estaban a punto de irse y el se levantó convertido en todo un hijo universitario, maduro, responsable y cariñoso. Ya no pudo volver a dormirse así que se sentó en el sillón grande de la sala a ver la televisión.
Después de un par de horas apareció Luisa que con voz tierna y adormilada le dio los buenos dias. Luisa solamente llevaba puestas unas panties y una playera ligera y larga. Cuando se sentó en el sillón a lado de el se levantó la playera permitiéndole ver por un par de segundos su hermoso y firme trasero.
Su pene no dejó pasar la situación y comenzó a endurecerse, era como si tuviera consciencia propia y tomara sus propias decisiones. Y es que era una reacción natural en cualquier hombre al estar a lado de una mujer con tan precioso cuerpo.
Platicaron unos minutos y Luisa le propuso preparar el desayuno: unos "hotcakes" con miel de maple. -Voy a invitar a desayunar a "el pelón"-. Dijo Luisa. "el pelón (18)" era un primo de la edad de Paty que vivia en la misma calle y siempre había sido muy unido con las hermanas. Daniel aceptó. Además de tener ganas de verlo pensaba que el que estuviera su primo podia bajar la temperatura de la situación.
Minutos mas tarde bajó Paty, con su linda carita adormilada, cabello recogido y un poco despeinada, Paty vestía igual que su hermana, panties y una ligera playera larga solamente. Si los pechos de Luisa se veian excitantes con esa ligera playera los de Paty no tenian otra descripción mas que hermosos y perfectos, se le podía notar el bultito de cada uno aún sin estar duros.
Cuando llegó el pelón a la casa se lanzó encima de Daniel con una enorme sonrisa, se abrazaron fuertemente insultándose y riendo a la vez (así se llevaban ellos). El pelón acostumbraba hacer caras graciosas y decir idioteces sin parar, eso siempre les daba mucha risa a Daniel y a sus hermanas, por eso lo querían mucho.
Se sentaron en la mesa de la cocina mientras Luisa preparaba los hotcakes. Con una mano en la cintura ajustaba un poco la larga playera y esta se levantaba dejando ver su hermoso culo. El hermano mayor no podía evitar ver el firme trasero de su querida hermana y notó que "el pelón" se acercaba a ella por la espalda diciendo boberías para hacerla reir y dando ligeros tocamientos con su mano en las casi desnudas nalgas de Luisa además de uno que otro arrimón asi nomás, como sin querer.
Al sentarse a platicar en la mesa, el pelón comenzó a jugar con Paty, picandole las costillas con un dedo y haciendo cosquillas, Daniel pudo darse cuenta que su primo también aprovechaba para tocar como "sin querer" los hermosos pechos de la hermana mas joven. Paty solo reía pidiendo al pelón que se detuviera, su bella carita adormilada y su hermosa sonrisa provocaban a Daniel la sensación de flotar en el aire, la atracción que sentía por ella volvió a despertar. Tenía un par de minutos con una completa erección, su pene pedía a gritos furiosos ser liberado como el craken.
Despues de desayunar, duraron mas de 1 hora platicando y riendo en la mesa de la cocina, esto ayudo a que la erección de Daniel se calmara un poco hasta que Luisa se puso de pie para lavar los platos con la playera completamente levantada hasta la cintura, los movimientos de su cuerpo hacían que el meneo de sus preciosas nalgas fuera hipnotizante para el hermano mayor que seguía tratando de disimular.
Pasó un rato mas y el pelón se despidió, tenía que hacer unas vueltas con su mamá y luego acompañar a su padre a otras cosas. Ya casi era medio día y los tres se preguntaron que harían para pasar la tarde.
A Luisa se le ocurrió la mejor de las ideas: -¿Y si lavamos la pileta?-, Paty inmediatamente propuso hacer un asado y Luisa colaboró con la idea de comprar cerveza. -Si!!! Fiesta!!!- Celebró Paty.
Daniel trató de comportarse como el hermano mayor, serio y responsable que estaba al cuidado de sus hermanas. Pero las dos lo convencieron fácilmente. -Nosotras limpiamos la pileta y tu vas a comprar la carne y las cervezas- Propuso Luisa. -Y preparas la carne- Apuntó Paty.
Al final fueron los tres a comprar todo, al regresar a la casa Daniel no tenía mucho trabajo que hacer así que abrió una cerveza y se sentó en una silla reclinable de el patio. Las hermanas movieron la pileta y con una manguera y mas herramientas fueron limpiándola poco a poco.
Las playeras blancas que llevaban las hermanas se fueron mojando y transparentando con el agua de la manguera que salpicaba al rebotar contra la pileta. Cuando Luisa se inclinaba sus nalgas quedaban a la vista del hermano, con gotitas de agua escurriendo, cuando Paty se enderezaba para reacomodarse su largo cabello su perfectas tetas se marcaban y transparentaban al presionarse con la playera húmeda. El pene de Daniel comenzó de nuevo a endurecerse con tan hermoso espectáculo.
Cuando terminaron de lavar la pileta y la llenaron:
PATY: Oye yo no tengo traje de baño.
LUISA: Yo tampoco! (risas) Pero pues nos metemos así.
PATY: Dani? Tu tienes traje de baño?
DANIEL: (riendo) No! (todos rieron).
LUISA: Pues metete en trusa, nosotras estamos igual.
Daniel no puso mucha resistencia ante la propuesta de su hermana y se comenzó a quitar la ropa, el practicaba varios deportes como hobbie y sin ser musculoso tenía un cuerpo atlético de todas maneras. Cuando Daniel se quedó en trusa no se pudo ocultar mas su erección y las hermanas se miraron sonriendo como cómplices de una travesura.
DANIEL: De que se rien?
PATY: De nada...
LUISA: De que la traes parada (risas).
DANIEL: Callate! No la traigo parada!
LUISA: Si, se te paró por estar viendo a Paty verdad? (las hermanas rieron)
PATY: Calla tonta!
La pileta era pequeña si Daniel se ponia de pie el agua le llegaba un poco mas arriba de las rodillas. Cuando el iba a entrar a la pileta Luisa le pidió una cerveza para cada una.
DANIEL: Y por que no van ustedes por ella?
LUISA: Ves? nos quieres ver asi verdad? (risas)
Daniel caminó con mucha confianza y acercó la hielera con cervezas a la pileta, sacó dos cervezas y se las dió en la mano a cada una de sus hermanas, ellas no disimularon, se le quedaban viendo a la erección del hermano mayor.
DANIEL: Hey! que estan viendo? (como cubirendose).
HERMANAS: Nada...
LUISA: Anda ya metete.
Cuando Daniel entró a la pileta trató de cambiar la platica, los tres se sentaron dentro del agua y comenzaron a hablar de la visita del pelón, de como los hacia reír con sus caras y sus boberías, por un rato casi parecían hermanos normales hasta que Luisa se puso de rodillas y se apoyó en la orilla de la pileta para agarrar otra cerveza. -¿Quien quiere otra?- Preguntó Luisa. -Pasame otra Lu- Pidió el hermano con amabilidad. -yo también- agregó Paty.
PATY: (riendo) Si se te quedó viendo.
LUISA: Si me vio? Ya ves? Se te para mirando a tus hermanas! Cochino!
Daniel se quedó con la boca abierta pensando en decir algo para su defensa y Luisa le aventó agua de la pileta justo a su cara. El hermano tragó un poco y respondió aventando mas agua en contra de la cara de sus hermanas. Luisa inmediatamente se le lanzó al cuello como jugando luchitas y Daniel respondió.
Paty reía mirando a sus hermanos pelear como en los viejos tiempos.
Danel era mas grande y fuerte que Luisa así que no duró mucho en someterla, la pantie mojada de Luisa se fue deslizando hacia abajo y la erección de su hermano fue tan dura que se salió del trusa. Luisa terminó en cuatro y Daniel arriba de ella, el pene de Daniel estaba frotandose de lleno contra la conchita de Luisa, ambos se dieron cuenta y ninguno dejó de oponer resistencia al combate pero cada vez era mas obvio que trataban de frotar sus partes intimas, Daniel descaradamente apretó un seno de su hermana mientras ella no podía hacer nada mas que reir, sonreir, disfrutar el hecho de que su querido hermano por fin la tocaba lascivamente, sin remordimientos y sin disimulo.
LUISA: Ayudame!
Paty respondió a la petición de su hermana y se lanzó al cuello de su hermano. De inmediato Daniel sintió los grandes y perfectos pechos de Paty presionandose en su espalda y con una mano agarró y apretó una nalguita de Paty. Sentía las nalgas de Luisa preionandose contra su cuerpo, su pene estaba frotandose con su calida vagina, en su espalda sentía las hermosas tetas y firmes tetas de Paty y con la otra mano le apretaba su apretado culito.
Solo se escuchaban las risas de los tres, Daniel cambió de victima y sometió facilmente a Paty la puso en cuatro e hizo lo mismo: presionar su erección contra las nalguitas de Paty y tocarle sus preciosos pechos. Luisa contra atacó y bajó de un intento la trusa de Daniel. El, en lugar de evitar eso reaccionó bajando facilmente la pantie de Paty y siguió disfrutando el toqueteo con su hermana favorita, la que había deseado por años en secreto.
Después de unos minutos los tres se cansaron y pidieron tregua. Daniel se volvió a sentar dentro del agua con los braos sobre la orilla de la pileta y Paty se recargó a un lado, Luisa preguntó se inclinó hacia afuera de la pileta preguntando si alguien quería otra cerveza y nuevamente paró su precioso culo, esta vez desnuda, los labios de su vagina quedaban a la vista de su hermano mayor, Paty confesó que ya le molestaba la playera y tenía ganas de quitársela.
LUISA: Pues quítatela, total, ya estamos todos en cueros (riendo). yo tambien me la voy a quitar.
Y ahí estaba el honorable universitario, respetado por sus maestros, compañeros y compañeras por ser tan recto. Sentado dentro de la pileta con sus hermanas desnudas a cada lado y con una endemoniada y palpitante erección.
LUISA: (con voz tierna) Te la puedo tocar?
DANIEL: Si.
PATY: (enderezándose) Me las quieres tocar?
Daniel tenía uno de esos penes por los que la mayoría de las mujeres presumen no interesarse, 20 cms de largo, grueso y con un par de pelotas grandes. Mientras Luisa lo masturbaba lentamente dentro del agua el jaló del culito a Paty provocando que ella le acerara las tetas a su boca. Ahora las dos estaban cumpliendo una de sus mas fuertes fantasías, ser deseadas por su hermano mayor sin ningún disimulo.
Aunque por su descripción Luisa podría parecer bastante promiscua, ella solamente había tenido relaciones varias veces con dos hombres en toda su vida, un novio que tuvo en el cole y uno de los chicos mayores del barrio.
Mientras Paty le ofrecía sus jugosas tetas a Daniel, Luisa, sin decir nada, se puso de rodillas sobre su hermano y de frente a el se fue sentando poco a poco, introduciendo su verga en la vagina. Luisa cerró los ojos, levanto la cara y soltó un suspiro largo y liberador. Al principio se movía tiernamente haciéndose penetrar por hermano pero poco tiempo comenzó a hacer movimientos mas fuertes, Daniel y Paty se dieron su primer beso en los labios mientras su hermana lo montaba. Paty le susurro al oido: -Yo también quiero-. Daniel asintió con la cabeza y volvió a besar a su hermanita tocándole las tetas.
LUISA: Ya voy a terminar...
DANIEL: Lenvantate! (empujandola hacia arriba).
Luisa cayó a un lado y se convulsionó unos momentos corriendose dentro del agua y emitiendo un gemido "rasposo". Daniel también hizo un ruido gutural y dejó liberar su semen dentro de la pileta. Paty, sonriente y curiosa trató de atrapar el semen de su hermano que flotaba por debajo del agua.
DANIEL: Vamos a salirnos ya.
LUISA: No puedo, no siento las piernas, ayudame.
Daniel trató de ayudar a Luisa a salir de la pileta y ambos cayeron riendo al cesped. Los tres se acostaron desnudos en el césped y quedaron dormidos por un rato. Daniel tendido boca arriba y cada una de sus hermanitas a un lado recostadas sobre el.
Casi una hora después despertaron los tres y ya era prácticamente de noche, ni si quiera prendieron la leña para hacer el asado y tenían mucha hambre. Luisa era la de las buenas ideas así que propuso pedir una pizza, ver películas y dormir esa noche en la sala con el aire acondicionado encendido.
Se vistieron un poco, las hermanas se pusieron panties y playeras secas, el hermano mayor se puso solamente un short, recibió las pizzas y mas cerveza a domicilio. Entre los tres bajaron el colchón de la recamara de Daniel y se dispusieron a ver peliculas, a la mitad de la primera movie Luisa señaló que sus pezones estaban duros por el aire acondicionado.
DANIEL: Estan duros?
LUISA: Si, tócalos para que veas que no miento.
PATY: Los míos también.
El hermano abrazó a cada una de sus hermanas y comenzó a tocarles los pechos corroborando que tenían los pezones duritos.
LUISA: Dani ha de tener su "cosa" bien chiquita, así les pasa a los hombres con el frio.
DANIEL: Callate, como que chiquita?
PATY: A ver?
Paty apretó el bulto de su hermano y este ya lo comenzaba a tener duro. -No! lo tiene igual de grande-. Señaló. Las hermanas rieron y comenzaron a tocar el pene de Daniel.
LUISA: Te la chupo?
PATY: No! yo también quiero! (haciendo berrinche).
LUISA: Bueno, tu le chupas la cabeza y yo le chupo los webos?
PATY: Bueno. (sonriendo)
Nuevamente desnudas, las hermanitas le dieron un doble oral al buen Daniel, se turnaron, una le chupaba el falo y la otra le chupaba los webos. Paty, sin decir nada quitó la cabeza de Luisa y se montó sobre su hermano. Diciendo: -Ya me toca a mi-. Mirándolo a los ojos con mirada y sonrisa angelical.
Paty planeaba perder su virginidad con aquel maestro que se parecía a su hermano pero como fueron descubiertos no pudo lograrlo. el único chico con el que Paty había tenido sexo era el pelón, su primo, no una o dos veces, a lo largo de los años había cogido con su primo mas de 20 veces. El pelón era flacucho, feo y no se parecía en nada a su querido hermano mayor pero era de confianza y le tenía mucho cariño así que decidió saciar su calentura con el por años.
Paty, desnuda y montada sobre su tambien desnudo hermano comenzó a frotar su vagina con el pene de Daniel sin introducirlo. -¿Quieres estar dentro de mi? Pideme que lo meta-. -Metelo flaquita, quiero estar dentro de ti-. respondió el hermano acariciando su lindo rostro.
Paty se fue sentando lentamente sobre el pene de su hermano, los dos cerraron los ojos y suspiraron al unísono, como cuando dos enamorados se conectan al hacer el amor.
Paty montó delicadamente a Daniel, el trataba de apresurar el ritmo para hacerle bailar las tetas, la bella carita de placer que Paty tenía lo enamoraba aún mas. Luisa se mantuvo a un lado de sus hermanos y se limitó a masturbarse mirando el espectáculo. Cambiaron de posición varias veces, Daniel no se pudo resistir a coger el delgado y frágil cuerpecito de su hermana con fuerza casi animal. Seguramente los gemidos llegaron a los oídos de alguna vecina metiche. El hermano mayor no pudo detenerse, Paty se corrió con el pene de Daniel dentro de ella y el terminó dentro de la vagina de Paty unos segundos después.
A lo largo dela noche y madrugada las hermanas siguieron turnándose para coger con su hermano mayor. En una ocasión que Luisa se ofreció para traerles otra cerveza del refri a su hermano y hermana dijo: -Debimos haber comprado condones-.
Silencio total.
Los padres hicieron un viaje de placer y regresaron hasta el lunes por la mañana, ellos también tenían un secreto, eran swingers y antes de tener hijos solían hacer fiestas con la hermana de la madre y su esposo. Ahora que el hijo mayor habia terminado la uni hicieron ese corto viaje para recordar viejos tiempos. Unos meses después de aquel fin de semana, a pesar de la leve negativa de sus padres, Luisa y Paty se mudaron a la ciudad donde vivía su hermano Daniel, los tres vivieron felizmente por unos años hasta que tuvieron hijos y la historia se repitió con algunos cambios.
El pobre pelón era hijo del tio paterno de Daniel y se quedó solo cuando sus primas se fueron a otra ciudad, por un tiempo, hasta que descubrió que a su tia (la madre de Daniel) también le gustaba cocinarle semi desnuda.
FIN.
Si te gustó dale puntos que lo escribí para ti.
El verano recién comenzaba, Daniel había terminado el último semestre de la Uni y viajó en autobús de regreso a casa de sus padres donde lo esperaban con brazos abiertos ellos y sus dos queridas hermanas.
Esa casa le traía muy buenos recuerdos pero también guardaba sus secretos mas oscuros. Los padres de Daniel decidieron retirar todas las puertas de su hogar con excepción de la puerta principal y la puerta del patio. Ninguna recamara, ningun baño, ningún closet, ni siquiera la alacena tenía puerta. Mas adelante sabrás por qué.
Luisa (19) Piel clara, delgada, no tenía senos muy grandes pero su tamaño era perfecto para cualquier hombre además que lo que mas llamaba la atención de su cuerpo era su trasero, grande sin ser enorme, firme, duro paradito, le podía provocar una erección hasta a su propio padre cuando este la miraba de espaldas.
De las dos hermanas Luisa siempre fue la mas "curiosa" sexualmente hablando. Espiaba a sus padres cuando tenían relaciones por las noches, espiaba al mismo Daniel cuando este se duchaba y masturbaba, llegó un punto en el que Luisa se obsesionó con los penes, cada vez que veía a un hombre se preguntaba: -¿como será su pene?-, -Será mas grande que el de papá y el de mi hermano?-.
Comenzó a pedirle a sus amigos del barrio y de el colegio que le mostraran su "cosa" (así le decía ella). Al principio lo hacía a escondidas, los tocaba y disfrutaba sentir como se endurecían en sus manos. Después se empezó a juntar con chicos mas grandes que ella en la plaza del barrio, ahí los chicos se lo sacaban frente a ella al aire libre y podía ver y tocar de a varios al mismo tiempo. Fue entonces cuando descubrió que podía hacerlos eyacular y eso le encantó. Ver como los chicos se convulsionaban antes de salpicarla de semen le hacia sentir casi poderosa. Esos chicos la enseñaron a chuparla y eso le fascinó aún mas.
Una mañana a la hora del descanso en el cole, Luisa fue sorprendida por una maestra mientras masturbaba a un compañero y se la chupaba a otro. Desde ese momento la expulsaron de la institución y no volvió a estudiar mas.
Paty (18) tenía el cuerpo mas delgadito que el de su hermana, su trasero no era tan llamativo aunque no dejaba de ser hermoso, paradito y firme. A diferencia de Luisa ella tenía pechos mas grandes, casi como melones y en su delgadito cuerpo se veían espectaculares, Ningún hombre era capaz de resistirse a mirarlos aunque fuera por un instante. Maestros, amigos, primos, tios, novios de amigas y hasta su propio padre y hermano le habían dedicado mas de una paja alguna vez.
Paty era muy linda pero también muy penosa y aunque siempre iba con su hermana a todas partes no había tocado tantos penes como ella pero siempre veía de lejos y fantaseaba con un día hacer lo mismo. Tampoco le pedía a todo mundo que le mostraran su "cosa", solo a los chicos que le parecían lindos.
Después de espiar a Daniel mientras se duchaba no pudo dejar de fantasear con tocar el pene de su hermano. Un día en el cole, convenció a un maestro que era parecido físicamente a Daniel de que le mostrara su pene y lamentablemente para ella, los descubrieron a los pocos segundos. A ella también la expulsaron y sus padres no confiaban en inscribirla en otra institución por miedo a que se volviera a exponer.
Cuando las hermanas se quedaban solas en casa, metían a hombres de diferentes edades a su recamara y por lo general jugaban a "los esposos" solo se desnudaban y acostaban en la cama con ellos, los arbazaban para sentir con su cuerpo desnudo el cuerpo de ellos y dejaban que las tocaran aplacer mientras ellas se embobaban tocando sus penes.
Cuando Paty aprendió a hacer eyacular a los hombres no podía dejar de pensar en hacerlo con su hermano. Una noche se metió en su recamara y casi se desnudó frente a el, lo convenció de desnudarse también y comenzó a chuparsela de rodillas frente a su cama. Antes de terminar, su madre entró sin avisar y los encontró así, desnudos con ella haciéndole sexo oral. Ahí fue cuando los padres decidieron enviar a Daniel a estudiar la uni a otra ciudad. Ese era el secreto vergonzoso de Daniel, haber tenido ese encuentro con su hermanita.
Antes ya la habian descubierto masturbando a un primo y a otro chico en ocasiones diferentes. Tambien la descubrieron junto con Luisa masturbando a un tio durante una fiesta familiar. Fue así como los padres decidieron retirar todas las puertas de la casa.
El día que Daniel regresó a casa todo fue alegría, abrazos, risas, historias, etc... Pasaron horas divirtiéndose con juegos de mesa hasta que anocheció y antes de irse a dormir los padres les avisaron que la mañana del sábado tendrían que salir de la ciudad y volverían hasta la mañana del lunes. Para Daniel no fue nada sorprendente, quizás sus padres solo querían descansar un tiempo a solas y el estaba feliz de estar en casa otra vez pero para Luisa fue una oportunidad de pasar un fin de semana lleno de diversión y así se lo hizo saber a Paty.
A las 7 a.m. El papá de Daniel lo despertó para hacerle saber que estaban a punto de irse y el se levantó convertido en todo un hijo universitario, maduro, responsable y cariñoso. Ya no pudo volver a dormirse así que se sentó en el sillón grande de la sala a ver la televisión.
Después de un par de horas apareció Luisa que con voz tierna y adormilada le dio los buenos dias. Luisa solamente llevaba puestas unas panties y una playera ligera y larga. Cuando se sentó en el sillón a lado de el se levantó la playera permitiéndole ver por un par de segundos su hermoso y firme trasero.
Su pene no dejó pasar la situación y comenzó a endurecerse, era como si tuviera consciencia propia y tomara sus propias decisiones. Y es que era una reacción natural en cualquier hombre al estar a lado de una mujer con tan precioso cuerpo.
Platicaron unos minutos y Luisa le propuso preparar el desayuno: unos "hotcakes" con miel de maple. -Voy a invitar a desayunar a "el pelón"-. Dijo Luisa. "el pelón (18)" era un primo de la edad de Paty que vivia en la misma calle y siempre había sido muy unido con las hermanas. Daniel aceptó. Además de tener ganas de verlo pensaba que el que estuviera su primo podia bajar la temperatura de la situación.
Minutos mas tarde bajó Paty, con su linda carita adormilada, cabello recogido y un poco despeinada, Paty vestía igual que su hermana, panties y una ligera playera larga solamente. Si los pechos de Luisa se veian excitantes con esa ligera playera los de Paty no tenian otra descripción mas que hermosos y perfectos, se le podía notar el bultito de cada uno aún sin estar duros.
Cuando llegó el pelón a la casa se lanzó encima de Daniel con una enorme sonrisa, se abrazaron fuertemente insultándose y riendo a la vez (así se llevaban ellos). El pelón acostumbraba hacer caras graciosas y decir idioteces sin parar, eso siempre les daba mucha risa a Daniel y a sus hermanas, por eso lo querían mucho.
Se sentaron en la mesa de la cocina mientras Luisa preparaba los hotcakes. Con una mano en la cintura ajustaba un poco la larga playera y esta se levantaba dejando ver su hermoso culo. El hermano mayor no podía evitar ver el firme trasero de su querida hermana y notó que "el pelón" se acercaba a ella por la espalda diciendo boberías para hacerla reir y dando ligeros tocamientos con su mano en las casi desnudas nalgas de Luisa además de uno que otro arrimón asi nomás, como sin querer.
Al sentarse a platicar en la mesa, el pelón comenzó a jugar con Paty, picandole las costillas con un dedo y haciendo cosquillas, Daniel pudo darse cuenta que su primo también aprovechaba para tocar como "sin querer" los hermosos pechos de la hermana mas joven. Paty solo reía pidiendo al pelón que se detuviera, su bella carita adormilada y su hermosa sonrisa provocaban a Daniel la sensación de flotar en el aire, la atracción que sentía por ella volvió a despertar. Tenía un par de minutos con una completa erección, su pene pedía a gritos furiosos ser liberado como el craken.
Despues de desayunar, duraron mas de 1 hora platicando y riendo en la mesa de la cocina, esto ayudo a que la erección de Daniel se calmara un poco hasta que Luisa se puso de pie para lavar los platos con la playera completamente levantada hasta la cintura, los movimientos de su cuerpo hacían que el meneo de sus preciosas nalgas fuera hipnotizante para el hermano mayor que seguía tratando de disimular.
Pasó un rato mas y el pelón se despidió, tenía que hacer unas vueltas con su mamá y luego acompañar a su padre a otras cosas. Ya casi era medio día y los tres se preguntaron que harían para pasar la tarde.
A Luisa se le ocurrió la mejor de las ideas: -¿Y si lavamos la pileta?-, Paty inmediatamente propuso hacer un asado y Luisa colaboró con la idea de comprar cerveza. -Si!!! Fiesta!!!- Celebró Paty.
Daniel trató de comportarse como el hermano mayor, serio y responsable que estaba al cuidado de sus hermanas. Pero las dos lo convencieron fácilmente. -Nosotras limpiamos la pileta y tu vas a comprar la carne y las cervezas- Propuso Luisa. -Y preparas la carne- Apuntó Paty.
Al final fueron los tres a comprar todo, al regresar a la casa Daniel no tenía mucho trabajo que hacer así que abrió una cerveza y se sentó en una silla reclinable de el patio. Las hermanas movieron la pileta y con una manguera y mas herramientas fueron limpiándola poco a poco.
Las playeras blancas que llevaban las hermanas se fueron mojando y transparentando con el agua de la manguera que salpicaba al rebotar contra la pileta. Cuando Luisa se inclinaba sus nalgas quedaban a la vista del hermano, con gotitas de agua escurriendo, cuando Paty se enderezaba para reacomodarse su largo cabello su perfectas tetas se marcaban y transparentaban al presionarse con la playera húmeda. El pene de Daniel comenzó de nuevo a endurecerse con tan hermoso espectáculo.
Cuando terminaron de lavar la pileta y la llenaron:
PATY: Oye yo no tengo traje de baño.
LUISA: Yo tampoco! (risas) Pero pues nos metemos así.
PATY: Dani? Tu tienes traje de baño?
DANIEL: (riendo) No! (todos rieron).
LUISA: Pues metete en trusa, nosotras estamos igual.
Daniel no puso mucha resistencia ante la propuesta de su hermana y se comenzó a quitar la ropa, el practicaba varios deportes como hobbie y sin ser musculoso tenía un cuerpo atlético de todas maneras. Cuando Daniel se quedó en trusa no se pudo ocultar mas su erección y las hermanas se miraron sonriendo como cómplices de una travesura.
DANIEL: De que se rien?
PATY: De nada...
LUISA: De que la traes parada (risas).
DANIEL: Callate! No la traigo parada!
LUISA: Si, se te paró por estar viendo a Paty verdad? (las hermanas rieron)
PATY: Calla tonta!
La pileta era pequeña si Daniel se ponia de pie el agua le llegaba un poco mas arriba de las rodillas. Cuando el iba a entrar a la pileta Luisa le pidió una cerveza para cada una.
DANIEL: Y por que no van ustedes por ella?
LUISA: Ves? nos quieres ver asi verdad? (risas)
Daniel caminó con mucha confianza y acercó la hielera con cervezas a la pileta, sacó dos cervezas y se las dió en la mano a cada una de sus hermanas, ellas no disimularon, se le quedaban viendo a la erección del hermano mayor.
DANIEL: Hey! que estan viendo? (como cubirendose).
HERMANAS: Nada...
LUISA: Anda ya metete.
Cuando Daniel entró a la pileta trató de cambiar la platica, los tres se sentaron dentro del agua y comenzaron a hablar de la visita del pelón, de como los hacia reír con sus caras y sus boberías, por un rato casi parecían hermanos normales hasta que Luisa se puso de rodillas y se apoyó en la orilla de la pileta para agarrar otra cerveza. -¿Quien quiere otra?- Preguntó Luisa. -Pasame otra Lu- Pidió el hermano con amabilidad. -yo también- agregó Paty.
PATY: (riendo) Si se te quedó viendo.
LUISA: Si me vio? Ya ves? Se te para mirando a tus hermanas! Cochino!
Daniel se quedó con la boca abierta pensando en decir algo para su defensa y Luisa le aventó agua de la pileta justo a su cara. El hermano tragó un poco y respondió aventando mas agua en contra de la cara de sus hermanas. Luisa inmediatamente se le lanzó al cuello como jugando luchitas y Daniel respondió.
Paty reía mirando a sus hermanos pelear como en los viejos tiempos.
Danel era mas grande y fuerte que Luisa así que no duró mucho en someterla, la pantie mojada de Luisa se fue deslizando hacia abajo y la erección de su hermano fue tan dura que se salió del trusa. Luisa terminó en cuatro y Daniel arriba de ella, el pene de Daniel estaba frotandose de lleno contra la conchita de Luisa, ambos se dieron cuenta y ninguno dejó de oponer resistencia al combate pero cada vez era mas obvio que trataban de frotar sus partes intimas, Daniel descaradamente apretó un seno de su hermana mientras ella no podía hacer nada mas que reir, sonreir, disfrutar el hecho de que su querido hermano por fin la tocaba lascivamente, sin remordimientos y sin disimulo.
LUISA: Ayudame!
Paty respondió a la petición de su hermana y se lanzó al cuello de su hermano. De inmediato Daniel sintió los grandes y perfectos pechos de Paty presionandose en su espalda y con una mano agarró y apretó una nalguita de Paty. Sentía las nalgas de Luisa preionandose contra su cuerpo, su pene estaba frotandose con su calida vagina, en su espalda sentía las hermosas tetas y firmes tetas de Paty y con la otra mano le apretaba su apretado culito.
Solo se escuchaban las risas de los tres, Daniel cambió de victima y sometió facilmente a Paty la puso en cuatro e hizo lo mismo: presionar su erección contra las nalguitas de Paty y tocarle sus preciosos pechos. Luisa contra atacó y bajó de un intento la trusa de Daniel. El, en lugar de evitar eso reaccionó bajando facilmente la pantie de Paty y siguió disfrutando el toqueteo con su hermana favorita, la que había deseado por años en secreto.
Después de unos minutos los tres se cansaron y pidieron tregua. Daniel se volvió a sentar dentro del agua con los braos sobre la orilla de la pileta y Paty se recargó a un lado, Luisa preguntó se inclinó hacia afuera de la pileta preguntando si alguien quería otra cerveza y nuevamente paró su precioso culo, esta vez desnuda, los labios de su vagina quedaban a la vista de su hermano mayor, Paty confesó que ya le molestaba la playera y tenía ganas de quitársela.
LUISA: Pues quítatela, total, ya estamos todos en cueros (riendo). yo tambien me la voy a quitar.
Y ahí estaba el honorable universitario, respetado por sus maestros, compañeros y compañeras por ser tan recto. Sentado dentro de la pileta con sus hermanas desnudas a cada lado y con una endemoniada y palpitante erección.
LUISA: (con voz tierna) Te la puedo tocar?
DANIEL: Si.
PATY: (enderezándose) Me las quieres tocar?
Daniel tenía uno de esos penes por los que la mayoría de las mujeres presumen no interesarse, 20 cms de largo, grueso y con un par de pelotas grandes. Mientras Luisa lo masturbaba lentamente dentro del agua el jaló del culito a Paty provocando que ella le acerara las tetas a su boca. Ahora las dos estaban cumpliendo una de sus mas fuertes fantasías, ser deseadas por su hermano mayor sin ningún disimulo.
Aunque por su descripción Luisa podría parecer bastante promiscua, ella solamente había tenido relaciones varias veces con dos hombres en toda su vida, un novio que tuvo en el cole y uno de los chicos mayores del barrio.
Mientras Paty le ofrecía sus jugosas tetas a Daniel, Luisa, sin decir nada, se puso de rodillas sobre su hermano y de frente a el se fue sentando poco a poco, introduciendo su verga en la vagina. Luisa cerró los ojos, levanto la cara y soltó un suspiro largo y liberador. Al principio se movía tiernamente haciéndose penetrar por hermano pero poco tiempo comenzó a hacer movimientos mas fuertes, Daniel y Paty se dieron su primer beso en los labios mientras su hermana lo montaba. Paty le susurro al oido: -Yo también quiero-. Daniel asintió con la cabeza y volvió a besar a su hermanita tocándole las tetas.
LUISA: Ya voy a terminar...
DANIEL: Lenvantate! (empujandola hacia arriba).
Luisa cayó a un lado y se convulsionó unos momentos corriendose dentro del agua y emitiendo un gemido "rasposo". Daniel también hizo un ruido gutural y dejó liberar su semen dentro de la pileta. Paty, sonriente y curiosa trató de atrapar el semen de su hermano que flotaba por debajo del agua.
DANIEL: Vamos a salirnos ya.
LUISA: No puedo, no siento las piernas, ayudame.
Daniel trató de ayudar a Luisa a salir de la pileta y ambos cayeron riendo al cesped. Los tres se acostaron desnudos en el césped y quedaron dormidos por un rato. Daniel tendido boca arriba y cada una de sus hermanitas a un lado recostadas sobre el.
Casi una hora después despertaron los tres y ya era prácticamente de noche, ni si quiera prendieron la leña para hacer el asado y tenían mucha hambre. Luisa era la de las buenas ideas así que propuso pedir una pizza, ver películas y dormir esa noche en la sala con el aire acondicionado encendido.
Se vistieron un poco, las hermanas se pusieron panties y playeras secas, el hermano mayor se puso solamente un short, recibió las pizzas y mas cerveza a domicilio. Entre los tres bajaron el colchón de la recamara de Daniel y se dispusieron a ver peliculas, a la mitad de la primera movie Luisa señaló que sus pezones estaban duros por el aire acondicionado.
DANIEL: Estan duros?
LUISA: Si, tócalos para que veas que no miento.
PATY: Los míos también.
El hermano abrazó a cada una de sus hermanas y comenzó a tocarles los pechos corroborando que tenían los pezones duritos.
LUISA: Dani ha de tener su "cosa" bien chiquita, así les pasa a los hombres con el frio.
DANIEL: Callate, como que chiquita?
PATY: A ver?
Paty apretó el bulto de su hermano y este ya lo comenzaba a tener duro. -No! lo tiene igual de grande-. Señaló. Las hermanas rieron y comenzaron a tocar el pene de Daniel.
LUISA: Te la chupo?
PATY: No! yo también quiero! (haciendo berrinche).
LUISA: Bueno, tu le chupas la cabeza y yo le chupo los webos?
PATY: Bueno. (sonriendo)
Nuevamente desnudas, las hermanitas le dieron un doble oral al buen Daniel, se turnaron, una le chupaba el falo y la otra le chupaba los webos. Paty, sin decir nada quitó la cabeza de Luisa y se montó sobre su hermano. Diciendo: -Ya me toca a mi-. Mirándolo a los ojos con mirada y sonrisa angelical.
Paty planeaba perder su virginidad con aquel maestro que se parecía a su hermano pero como fueron descubiertos no pudo lograrlo. el único chico con el que Paty había tenido sexo era el pelón, su primo, no una o dos veces, a lo largo de los años había cogido con su primo mas de 20 veces. El pelón era flacucho, feo y no se parecía en nada a su querido hermano mayor pero era de confianza y le tenía mucho cariño así que decidió saciar su calentura con el por años.
Paty, desnuda y montada sobre su tambien desnudo hermano comenzó a frotar su vagina con el pene de Daniel sin introducirlo. -¿Quieres estar dentro de mi? Pideme que lo meta-. -Metelo flaquita, quiero estar dentro de ti-. respondió el hermano acariciando su lindo rostro.
Paty se fue sentando lentamente sobre el pene de su hermano, los dos cerraron los ojos y suspiraron al unísono, como cuando dos enamorados se conectan al hacer el amor.
Paty montó delicadamente a Daniel, el trataba de apresurar el ritmo para hacerle bailar las tetas, la bella carita de placer que Paty tenía lo enamoraba aún mas. Luisa se mantuvo a un lado de sus hermanos y se limitó a masturbarse mirando el espectáculo. Cambiaron de posición varias veces, Daniel no se pudo resistir a coger el delgado y frágil cuerpecito de su hermana con fuerza casi animal. Seguramente los gemidos llegaron a los oídos de alguna vecina metiche. El hermano mayor no pudo detenerse, Paty se corrió con el pene de Daniel dentro de ella y el terminó dentro de la vagina de Paty unos segundos después.
A lo largo dela noche y madrugada las hermanas siguieron turnándose para coger con su hermano mayor. En una ocasión que Luisa se ofreció para traerles otra cerveza del refri a su hermano y hermana dijo: -Debimos haber comprado condones-.
Silencio total.
Los padres hicieron un viaje de placer y regresaron hasta el lunes por la mañana, ellos también tenían un secreto, eran swingers y antes de tener hijos solían hacer fiestas con la hermana de la madre y su esposo. Ahora que el hijo mayor habia terminado la uni hicieron ese corto viaje para recordar viejos tiempos. Unos meses después de aquel fin de semana, a pesar de la leve negativa de sus padres, Luisa y Paty se mudaron a la ciudad donde vivía su hermano Daniel, los tres vivieron felizmente por unos años hasta que tuvieron hijos y la historia se repitió con algunos cambios.
El pobre pelón era hijo del tio paterno de Daniel y se quedó solo cuando sus primas se fueron a otra ciudad, por un tiempo, hasta que descubrió que a su tia (la madre de Daniel) también le gustaba cocinarle semi desnuda.
FIN.
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0 comentarios - Daniel y sus hermanas.