Los Amantes

Todo comenzó con una llamada por teléfono, ella era secretaria/recepcionista, y él un agente de exportación de una reconocida empresa.

Al principio se saludaron cordialmente pero cada vez que él llamaba, se quedaban conversando por teléfono hasta que uno de los dos recordaba que él necesitaba hablar con alguien más, o que ella necesitaba seguir atendiendo más llamadas entre las muchas responsabilidades que tenía. Al final en esa oportunidad, sólo se caían bien con toques de coqueteo, y a pesar que ambos se fueron de sus respectivas empresas, la vida tiene una curiosa manera de juntar a los que se tienen que conocer, y la rrss encargada fue facebook.

Así cuando fb te muestra quién pudiera ser amigo, así mismo un día x ella recibió una solicitud y correo, ella con muy buena memoria reconoció el nombre de quién le escribía, le preguntó de todas maneras a modo de confirmación, y las conversaciones no sólo se reanudaron, sino que también subieron de tono hasta ser tan calientes que podrían haber incendiado las pantallas.

Ambos tenían sus respectivas relaciones, ambos felices y con una vida sexual sana y activa, pero ambos eran mucho más cerdos que sus parejas y querían más...mucho más.
Siguieron conversando hasta que ninguno aguantaba estar sin el otro, pero no era porque se quisieran, sino porque la calentura ya les quemaba la piel, los pensamientos, el cuerpo....pero nunca se habían visto en persona, sólo un par de fotos...así y todo decidieron juntarse en el departamento de ella, un día en la mañana después que la pareja de ella se fuera a trabajar.

Llegó el día, ambos nerviosos porque estaba la calentura por un lado, pero las dudas y expectativas sobre si se gustarían o no, el caso es que él llegó a la casa y ella le abrió la abrió la puerta. Al principio sólo se saludaron, conversaron un poco hasta que la química y la calentura pudo más y se dieron un beso....un beso que incendió todo.

Ese día culiaron como animales, él la chupó entera, tanto que tuvo tres orgasmos mientras él le metía la lengua...y esa lengua por primera vez supo él sabor que tenía esos labios y esa vagina apretada....tantos orgasmos que no pudo evitar mear de placer. Él se sorprendió por el sabor medio dulzón, y un olor que lo dejó caliente e hipnotizado, también se sorprendió con esa vagina caliente y apretada que llegaba a vibrar de placer, y ya no pudo soportar no culiarla después que ella tuvo ese orgasmo líquido en su boca.

Culiaron duro y a ella no le quedó orificio virgen, quedó sudada, meada por ella misma y por él, tan mojada, tan sudada y tan adolorida que una vez que él se fue, se reía sola de darse cuenta que tenía músculos adoloridos que ni sabía que tenía. Él hizo con ella lo que quiso, ella le pagó con tanto placer que él después la llamaba sólo para decirle que tenía la verga dura de sólo recordar cómo ella había gritado y gemido. Se hicieron amantes, se culiaban tan duro, sucio y rico que hasta el día de hoy, a pesar que ya no están juntos, recuerdan ese breve tiempo como las mejores culiadas de la vida.

Fin

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Espero que les haya gustado el cuento (no soy la protagonista), pocas veces comparto uno, ya me contarán si los entretuvo o si al menos los calentó.