Resulta que este relato es de hace dos años, cuando todavía no conocía este portal, pero creo que vale la pena compartirlo, puesto que aquí fue donde me inicié en este mundo...
Resulta que en aquel entonces tenía una novia con la que ya tenía más de tres años de relación, las cosas estaban mal así que decidimos danos un tiempo, aunque seguíamos platicando y saliendo, pero cada quien llevaba sus vidas. Resulta que ella tenía un típico amigo que la deseaba cuando ella era mi novia, por lo que siempre le coqueteaba por Facebook o Whatsapp, ahí es cuando me di cuenta que era probable que me gustara el mundo swinger, porque aunque ella se molestaba por sus actitudes, yo no, incluso a veces tenía fantasías con que ella estuviera con él. Varias veces le propuse el que hiciéramos tríos, pero ella se negaba a que yo o ella estuviéramos con alguien más.
El punto es que un buen día la invité a salir cuando estábamos en esa pausa en la relación, y ella me dijo que no, que tenía planes, por lo que le pregunté cuáles eran, y me evadió la pregunta durante todo el día. Yo sospechaba que algo traía con el tipo que les mencioné, pues cuando la invitaba a salir como amigos veía que le mandaba corazones o fotos, y le publicaba cosas en su muro de Facebook.
Le terminé preguntado si saldría con él, a lo que me contestó que sí, y logré sacarle la sopa de que estaban en su casa tomando. Instintivamente le conteste "mínimo invita". Me respondió unos dos minutos después diciendo que para ambos era bienvenido, así que compré unas cervezas, vino tinto y fui para allá. Llegué a su casa y ambos estaban sentados en un sillón bebiendo vodka con jugos y cerveza. Saludé y me di cuenta que ella ya estaba algo tomada, y sentí un poco de molestia por parte de su amigo, me imagino que no pensó que fuera a ir.
Posteriormente jugamos beerpong en el patio, y luego por el calor entramos para jugar algún juego de borrachos por medio de cartas. Para ese entonces ya habían pasado tres horas desde que llegué, y tanto ella como el estaban sumamente borrachos. Jugamos el famoso "yo nunca" donde nos empezamos a hacer preguntas incómodas para hacer perder a alguien y que bebiera más. Yo intencionalmente hice preguntas sexuales, donde salió a la luz que ambos ya habían cogido durante el tiempo que nos estábamos dando. Aunque ella se puso roja de la pena, a mí no me importó, al contrario, me sentí excitadísimo. En una ida que él tuvo al baño, ella intentó darme mil explicaciones, por lo que simplemente la callé a besos, los cuales me correspondió, y le di un vaso grande de tequila que habíamos comprado, le dije que no importaba y ambos nos tomamos un fondo de aquel vaso. La empecé a besar con más intensidad y terminó encima de mí en el sofá. El amigo, quien se encontraba muy borracho, salió, nos miró y dijo con cierta tristeza que subiría a su cuarto.
Una vez que vi que subió a su recamara, sin pensarlo cargué a mi ex mientras la besaba, y la subí por las escaleras, a lo que ella me respondió que hacía, y le dije que le haríamos compañía a su amigo. Abrí la puerta, él estaba sentada frente a un computador, y nos vio con cara de asombro cuando nos acostamos en su cama y nos empezamos a besar. Se levantó para salir del cuarto, y mi novia extrañada me dijo que porqué le hacía eso a su amigo, a lo que le respondí que hablaría con él de forma breve. Salí del cuarto a encontrarlo, y le dije que en esta vida me gustaba compartir lo que tenía, y que si quería gozarla entrara al cuarto. Regresé, y tuve la idea de ponerle mi camisa como venda en los ojos a mi ex, y seguimos besándonos y desnudándonos. Cuando de pronto sentí que alguien entró al cuarto, era el amigo, quien se sentó en la silla que estaba ahí. Le sonreí y le hice señas para que se masturbara con confianza, por lo que se desabrochó el pantalón y empezó a frotarse el pene con su mano, ya no teníamos ropa ni ella ni yo, por lo que le empecé a hacer sexo oral. Después de besar, lamer y chupar esos hermosos labios vaginales, me hice a un lado, y le hice señas a su amigo para que viniera. No sé si ella no se percató por la venda improvisada o el alcohol, o simplemente si se dejó llevar por el momento, pero me hice a un lado y su amigo empezó a hacerle un delicioso oral, sin que ella dijera nada, mientras yo me masturbaba viendo tan hermosa escena. Posteriormente, ella lo tomó del pelo y llevó su cabeza hasta la suya para compartir unos apasionados besos, y me quedé paralizado cuando se quitó la camisa de los ojos. Nos vio a ambos y se quedó seria, luego su amigo y yo nos volteamos a ver, nos sonreímos y ambos la volteamos a ver sonriendo.
Sin pensarlo mucho, tomé a su amigo por la espalda, lo acerqué a ella y los pegué cara a cara, luego ambos se empezaron a besar apasionadamente. Fue uno de los momentos más excitantes de mi vida, estaba cumpliendo una de mis fantasías más añoradas. Mientras ellos se besaban yo le besaba sus senos y recorría con mis manos su torneado trasero, incluso a veces mis manos con las de su amigo se juntaban tocando las mismas zonas. Posteriormente, ella se empezaron a inclinar hacia enfrente, y ella descendió su cabeza hasta la punta de su pene, haciéndole un maravilloso sexo oral. Yo hice lo propio, pues mientras escuchaba los sonidos excitantes que hacía su garganta al prácticamente tragarse el pene de su amigo, yo le estaba realizando sexo oral desde atrás, dándole besos y chupando su vagina y ano. No me pude resistir mucho tiempo más, y pronto me acosté a un lado de su amigo a masturbarme con tan hermosa escena. Luego ella me vio, sonrió y con sus manos empezó a masturbarnos, una mano para cada pene. Ver su cara de maniaca al hacer eso es una de las experiencias más increíbles que he visto. Hubo un punto en donde pegó nuestros penes uno con el otro y con ambas manos nos estaba masturbando, y nos hizo doble sexo oral, pues se llevó los dos penes al mismo tiempo a su boca, su lengua pasaba por la cabeza de uno y luego de otro. Con el salvajismo de su sexo oral podía sentir el roce combinado de sus labios, su lengua y el pene de su amigo, y debo de admitir que fue tan rico que me aguanté unas cuatro veces el venirme. Posteriormente se levantó y nos besó apasionadamente a los dos, turnándose para hacerlo. Yo me levanté, me puse detrás de ella y aventé su espalda hacia enfrente, pues me disponía a penetrarla de perrito. Le hice señas a su amigo para que la tomara de la cabeza y le hiciera un oral mientras yo le daba por detrás. Ver esa imagen, escuchar los sonidos que emitía su garganta al hacerle el oral alternado con sus gritos de placer cuando intentaba tomar aire, es algo que nunca olvidaré. Después de estar así unos minutos, cambiamos de posición, él le daba por detrás y yo recibía su delicioso oral. Posteriormente me levanté, y cuando noté que ellos pararían para ver que sugerencia daba, les dije que siguieran haciéndolo igual. Mientras él le daba de perrito, yo me escabullí haca la parte medular de la acción, pues metí mi cabeza por debajo de sus piernas, admirando en primera vista su vagina siendo penetrada brutalmente por su pene. No pude resistirme y empecé a besar la parte exterior de su vagina mientras era penetrada, incluso mis labios alcanzaban a rozar el pene que penetraba con fuerza. No sabía si esto molestaría a su amigo, pero no me dijo nada al respecto, al contrario, incrementó la fuerza de su penetración. Mientras yo les hacía ese oral compartido con mis labios y lengua, ella me hacía oral a mí. Después de eso, el dejó de darle y ella se abalanzó hacia mí, me besó y me montó, por lo que procedí a darle con todas mis fuerzas y a agarrarle sus senos, mientras su amigo estaba de rodillas recibiendo un oral. Después de eso cambiamos de lugar, y ahora era yo quien estaba de rodillas recibiendo el oral. Después me alejé de ellos y me senté en la silla para admirar tan bella postal, ver sus hermosas nalgas rebotando contra sus piernas y su pene entrar y salir con fuerza de ella. Fue entonces cuando me acerqué a ellos, miré de cerca la acción y empecé a darle sexo oral a ella en su ano mientras el la penetraba por la vagina. Estaba tan caliente que decidí poner en práctica una cosa más de las que había visto en porno de este tipo. Me puse de rodillas, y con cuidado, acerqué mi pene a su ano, poco a poco metiéndolo por ahí. Solamente escuché un grito de dolor y placer, y como sus movimientos empezaban a incrementarse, por lo que él también los empezó a incrementar. Así estuvimos dándole unos cinco minutos, hasta que sentí como su piel se ponía de gallina, y sus piernas temblaban, a lo que siguió un largo y escandaloso grito de placer, por lo que el amigo y yo coincidimos en seguirle dando, y ella gritaba cada vez más y más, pues estaba teniendo su orgasmo. Yo ya había dejado varias oportunidades para venirme, por lo que exclamé que ya me iba a venir, y unos diez segundos después liberé todo mi semen en el delicioso ano de mi ex. Ella me volteó a ver con una sonrisa de oreja a oreja, y su amigo la quitó de encima, ella se tiró sobre la cama y él se empezó a masturbar con fuerza. Vi todas sus intenciones de venirse, así que le exclamé que se viniera en su cara. El sin dudarlo se puso frente a ella y le apuntó con su pene en el rostro, y unos segundos después dejó salir todo su semen sobre su cara y sus senos. Los tres nos volteamos a ver, y nos reímos como por un minuto de la situación. Nos acostamos un rato, y posteriormente ella se quedó dormida, él y yo nos vestimos y fuimos a la planta baja a conversar. Le dije que hace mucho lo quería hacer y él no lo podía creer, pues nunca lo había pensado. Como una hora después de terminado el acto, bajó mi ex novia ya vestida, y dijo que se retiraba, por lo que también dije que me iba y la acompañé a su auto. Solamente me vio con una amplia sonrisa y exclamó. "Te saliste con la tuya cabrón".
Hoy en día ya no estoy con ella, pero gracias a esa experiencia me di cuenta de la enorme pasión por el mundo swinger que tengo. Espero les haya gustado, saludos a toda la comunidad!
Por si quieren redes de la chica de la foto estas son:
IG: mariposita._.grosera
Resulta que en aquel entonces tenía una novia con la que ya tenía más de tres años de relación, las cosas estaban mal así que decidimos danos un tiempo, aunque seguíamos platicando y saliendo, pero cada quien llevaba sus vidas. Resulta que ella tenía un típico amigo que la deseaba cuando ella era mi novia, por lo que siempre le coqueteaba por Facebook o Whatsapp, ahí es cuando me di cuenta que era probable que me gustara el mundo swinger, porque aunque ella se molestaba por sus actitudes, yo no, incluso a veces tenía fantasías con que ella estuviera con él. Varias veces le propuse el que hiciéramos tríos, pero ella se negaba a que yo o ella estuviéramos con alguien más.
El punto es que un buen día la invité a salir cuando estábamos en esa pausa en la relación, y ella me dijo que no, que tenía planes, por lo que le pregunté cuáles eran, y me evadió la pregunta durante todo el día. Yo sospechaba que algo traía con el tipo que les mencioné, pues cuando la invitaba a salir como amigos veía que le mandaba corazones o fotos, y le publicaba cosas en su muro de Facebook.
Le terminé preguntado si saldría con él, a lo que me contestó que sí, y logré sacarle la sopa de que estaban en su casa tomando. Instintivamente le conteste "mínimo invita". Me respondió unos dos minutos después diciendo que para ambos era bienvenido, así que compré unas cervezas, vino tinto y fui para allá. Llegué a su casa y ambos estaban sentados en un sillón bebiendo vodka con jugos y cerveza. Saludé y me di cuenta que ella ya estaba algo tomada, y sentí un poco de molestia por parte de su amigo, me imagino que no pensó que fuera a ir.
Posteriormente jugamos beerpong en el patio, y luego por el calor entramos para jugar algún juego de borrachos por medio de cartas. Para ese entonces ya habían pasado tres horas desde que llegué, y tanto ella como el estaban sumamente borrachos. Jugamos el famoso "yo nunca" donde nos empezamos a hacer preguntas incómodas para hacer perder a alguien y que bebiera más. Yo intencionalmente hice preguntas sexuales, donde salió a la luz que ambos ya habían cogido durante el tiempo que nos estábamos dando. Aunque ella se puso roja de la pena, a mí no me importó, al contrario, me sentí excitadísimo. En una ida que él tuvo al baño, ella intentó darme mil explicaciones, por lo que simplemente la callé a besos, los cuales me correspondió, y le di un vaso grande de tequila que habíamos comprado, le dije que no importaba y ambos nos tomamos un fondo de aquel vaso. La empecé a besar con más intensidad y terminó encima de mí en el sofá. El amigo, quien se encontraba muy borracho, salió, nos miró y dijo con cierta tristeza que subiría a su cuarto.
Una vez que vi que subió a su recamara, sin pensarlo cargué a mi ex mientras la besaba, y la subí por las escaleras, a lo que ella me respondió que hacía, y le dije que le haríamos compañía a su amigo. Abrí la puerta, él estaba sentada frente a un computador, y nos vio con cara de asombro cuando nos acostamos en su cama y nos empezamos a besar. Se levantó para salir del cuarto, y mi novia extrañada me dijo que porqué le hacía eso a su amigo, a lo que le respondí que hablaría con él de forma breve. Salí del cuarto a encontrarlo, y le dije que en esta vida me gustaba compartir lo que tenía, y que si quería gozarla entrara al cuarto. Regresé, y tuve la idea de ponerle mi camisa como venda en los ojos a mi ex, y seguimos besándonos y desnudándonos. Cuando de pronto sentí que alguien entró al cuarto, era el amigo, quien se sentó en la silla que estaba ahí. Le sonreí y le hice señas para que se masturbara con confianza, por lo que se desabrochó el pantalón y empezó a frotarse el pene con su mano, ya no teníamos ropa ni ella ni yo, por lo que le empecé a hacer sexo oral. Después de besar, lamer y chupar esos hermosos labios vaginales, me hice a un lado, y le hice señas a su amigo para que viniera. No sé si ella no se percató por la venda improvisada o el alcohol, o simplemente si se dejó llevar por el momento, pero me hice a un lado y su amigo empezó a hacerle un delicioso oral, sin que ella dijera nada, mientras yo me masturbaba viendo tan hermosa escena. Posteriormente, ella lo tomó del pelo y llevó su cabeza hasta la suya para compartir unos apasionados besos, y me quedé paralizado cuando se quitó la camisa de los ojos. Nos vio a ambos y se quedó seria, luego su amigo y yo nos volteamos a ver, nos sonreímos y ambos la volteamos a ver sonriendo.
Sin pensarlo mucho, tomé a su amigo por la espalda, lo acerqué a ella y los pegué cara a cara, luego ambos se empezaron a besar apasionadamente. Fue uno de los momentos más excitantes de mi vida, estaba cumpliendo una de mis fantasías más añoradas. Mientras ellos se besaban yo le besaba sus senos y recorría con mis manos su torneado trasero, incluso a veces mis manos con las de su amigo se juntaban tocando las mismas zonas. Posteriormente, ella se empezaron a inclinar hacia enfrente, y ella descendió su cabeza hasta la punta de su pene, haciéndole un maravilloso sexo oral. Yo hice lo propio, pues mientras escuchaba los sonidos excitantes que hacía su garganta al prácticamente tragarse el pene de su amigo, yo le estaba realizando sexo oral desde atrás, dándole besos y chupando su vagina y ano. No me pude resistir mucho tiempo más, y pronto me acosté a un lado de su amigo a masturbarme con tan hermosa escena. Luego ella me vio, sonrió y con sus manos empezó a masturbarnos, una mano para cada pene. Ver su cara de maniaca al hacer eso es una de las experiencias más increíbles que he visto. Hubo un punto en donde pegó nuestros penes uno con el otro y con ambas manos nos estaba masturbando, y nos hizo doble sexo oral, pues se llevó los dos penes al mismo tiempo a su boca, su lengua pasaba por la cabeza de uno y luego de otro. Con el salvajismo de su sexo oral podía sentir el roce combinado de sus labios, su lengua y el pene de su amigo, y debo de admitir que fue tan rico que me aguanté unas cuatro veces el venirme. Posteriormente se levantó y nos besó apasionadamente a los dos, turnándose para hacerlo. Yo me levanté, me puse detrás de ella y aventé su espalda hacia enfrente, pues me disponía a penetrarla de perrito. Le hice señas a su amigo para que la tomara de la cabeza y le hiciera un oral mientras yo le daba por detrás. Ver esa imagen, escuchar los sonidos que emitía su garganta al hacerle el oral alternado con sus gritos de placer cuando intentaba tomar aire, es algo que nunca olvidaré. Después de estar así unos minutos, cambiamos de posición, él le daba por detrás y yo recibía su delicioso oral. Posteriormente me levanté, y cuando noté que ellos pararían para ver que sugerencia daba, les dije que siguieran haciéndolo igual. Mientras él le daba de perrito, yo me escabullí haca la parte medular de la acción, pues metí mi cabeza por debajo de sus piernas, admirando en primera vista su vagina siendo penetrada brutalmente por su pene. No pude resistirme y empecé a besar la parte exterior de su vagina mientras era penetrada, incluso mis labios alcanzaban a rozar el pene que penetraba con fuerza. No sabía si esto molestaría a su amigo, pero no me dijo nada al respecto, al contrario, incrementó la fuerza de su penetración. Mientras yo les hacía ese oral compartido con mis labios y lengua, ella me hacía oral a mí. Después de eso, el dejó de darle y ella se abalanzó hacia mí, me besó y me montó, por lo que procedí a darle con todas mis fuerzas y a agarrarle sus senos, mientras su amigo estaba de rodillas recibiendo un oral. Después de eso cambiamos de lugar, y ahora era yo quien estaba de rodillas recibiendo el oral. Después me alejé de ellos y me senté en la silla para admirar tan bella postal, ver sus hermosas nalgas rebotando contra sus piernas y su pene entrar y salir con fuerza de ella. Fue entonces cuando me acerqué a ellos, miré de cerca la acción y empecé a darle sexo oral a ella en su ano mientras el la penetraba por la vagina. Estaba tan caliente que decidí poner en práctica una cosa más de las que había visto en porno de este tipo. Me puse de rodillas, y con cuidado, acerqué mi pene a su ano, poco a poco metiéndolo por ahí. Solamente escuché un grito de dolor y placer, y como sus movimientos empezaban a incrementarse, por lo que él también los empezó a incrementar. Así estuvimos dándole unos cinco minutos, hasta que sentí como su piel se ponía de gallina, y sus piernas temblaban, a lo que siguió un largo y escandaloso grito de placer, por lo que el amigo y yo coincidimos en seguirle dando, y ella gritaba cada vez más y más, pues estaba teniendo su orgasmo. Yo ya había dejado varias oportunidades para venirme, por lo que exclamé que ya me iba a venir, y unos diez segundos después liberé todo mi semen en el delicioso ano de mi ex. Ella me volteó a ver con una sonrisa de oreja a oreja, y su amigo la quitó de encima, ella se tiró sobre la cama y él se empezó a masturbar con fuerza. Vi todas sus intenciones de venirse, así que le exclamé que se viniera en su cara. El sin dudarlo se puso frente a ella y le apuntó con su pene en el rostro, y unos segundos después dejó salir todo su semen sobre su cara y sus senos. Los tres nos volteamos a ver, y nos reímos como por un minuto de la situación. Nos acostamos un rato, y posteriormente ella se quedó dormida, él y yo nos vestimos y fuimos a la planta baja a conversar. Le dije que hace mucho lo quería hacer y él no lo podía creer, pues nunca lo había pensado. Como una hora después de terminado el acto, bajó mi ex novia ya vestida, y dijo que se retiraba, por lo que también dije que me iba y la acompañé a su auto. Solamente me vio con una amplia sonrisa y exclamó. "Te saliste con la tuya cabrón".
Hoy en día ya no estoy con ella, pero gracias a esa experiencia me di cuenta de la enorme pasión por el mundo swinger que tengo. Espero les haya gustado, saludos a toda la comunidad!
Por si quieren redes de la chica de la foto estas son:
IG: mariposita._.grosera
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