Un clima ameno y tranquilo recorría la ciudad de Musutafu, el mes de diciembre era siempre muy concurrido a causa de la franja navideña, llevando a la gente hasta las calles y tiendas en busca de los regalos perfectos.
Sin embargo, para algunos la Navidad no era tan importante como el propio cumpleaños, como piensaba Ochaco, y aunque esa fecha sea justo dos días después de la Navidad, en un momento donde todos están más preocupados con el buen viejito, ella se alegraba de saber que sus papis siempre priorizaron su cumpleaño. Y ahora, Uraraka no podría estar más contenta de celebrar esa fecha con toda su familia reunida.
Una pequeña celebración se celebró durante el día para que todos se divirtieran juntos en su chalet, pero era obvio que los chicos planearían una fiesta privada para más tarde. Durante la noche, Uraraka fue arrastrada hasta la ciudad y llevada a aquella mansión donde tuvo los mejores años de su vida. No tenía la menor idea de lo que los tres estaban tramando, con todo, ella jamás se quejaría, porque seguro que sería muy bueno.
Ochaco se encontraba en una de las suites, sentada en el regazo de Izuku, mientras observaba atentamente cómo Katsuki abría el envase de trufas achocolatadas con relleno de fresa. Uno de sus favoritos.
Él camina lentamente en su dirección, jugando con uno de los dulces entre los dedos y expresando una sonrisa en sus labios antes de sentarse a su lado.
_¿Lo quieres?_preguntó, levantando el chocolate a la altura de sus ojos. La mujer asintió de inmediato, balanceando la cabeza positivamente mientras miraba fija para trufa, salivando expectante. _Abre la boca para mí.
Ella realizó el pedido, separando los labios y esperando ansiosa para sentir aquel gusto magnífico. Sin embargo, quedó solo en la voluntad, pues Bakugou guió el dulce hacia su boca y luego desvió en el último segundo, impidiéndole matar el deseo.
El rubio sonrió delante de la expresión decepcionada que la castaña mostraba; los labios estaban crispados, formando un piquito, y los ojos parpadeando lentamente mientras que poco a poco las cejas iban frunciendo el ceño.
_Lo siento, pero fue muy buena tu cara._rió, y ella gruñó._Te lo voy a dar ahora, lo prometo.
De nuevo, Ochaco siente el dulce aroma acercarse a su rostro. Incluso se podía sentir la fresa derretida dentro. No obstante, una vez más el gracioso de su papi le impide de experimentar esta maravilla. Todo lo que siente en su boca son los labios cálidos del rubio, recibiendo un breve e intenso beso.
Deku suelta una suave risa con el triste gemido de la chica, apretando su cintura y dejando ligeros besos sobre el hombro, mientras se divierte con la escena.
_Kats..._murmuró mañosa, apelando para él.
Bakugou pasa la lengua entre los dientes, sonriendo ampliamente con el rostro tierno y chillón de la joven. Le encantan estas facetas. Finalmente metió el chocolate en la boca de la mujer y sintió que sus dedos eran chupados por ella, que limpiaba los rastros con lamedas maliciosas.
_¿Gustó?_ella asintió. Quiere uno más?
._Te doy..._tomó otra trufa._Pero solo si haces algo por mí primero._dejó la caja en la mesita de café frente a la cama y la miró de nuevo._Extraño esa boquita tuya, ángel. ¿Por qué no te arrodillas ante mí y me das ese regalo, hun?
_ No puedo._recuerdó.
_Shoto dijo que solo yo recibiría atención hoy.
Katsuki pone los ojos en blanco, molesto. Esa regla que el Todoroki estableció entre los cuatro para el día, era que toda atención sería brindada solamente a castaña y que el acuerdo extendería hasta la noche. Así que, sólo por hoy, los mimos serán solo de la chica. Como si ya no fueran exclusividad de ella cada vez que están juntos, incluso después de la maternidad sus cuidados solo se triplicaron.
Resulta que Shoto dejó bien claro que ninguno de ellos podría pedir algo íntimo a la mujer hasta el momento adecuado, y que si lo pedían, debería ser negado. Siendo la buena chica que Ochaco era, no lo desobedecería, más aún porque sabe lo aterrador que puede ser cuando está enojado, y no le gustaría verlos pelear.
_Ah, que se joda el medio a medio. Vamos, hazlo por tu papi._insiste, comenzando a darle besos en el cuello._El nerd también quiere._la chica mira para Midoriya, que desvía la mirada y sonríe ladino, no queriendo meterse en el asunto._Va a ser nuestro secretito._propone.
La petición era tentadora, no se puede negar. La sensación de tener Katsuki en su boca era extremadamente excitante. El glande tocando su garganta mientras intenta acomodar toda la extremidad en su boca la hace que se atragante, provocándole tos si no tiene cuidado; el sabor fuerte y viril son sus favoritos, incitándola a dar lo mejor de sí en la mamada para complacerlo.
Pero antes de que puedan continuar con la discusión sobre el tema, la puerta del cuarto se abre, trayendo a Shoto de vuelta a la habitación.
Lo primero que los ojos de Uraraka notan, es la bolsa marrón con el logotipo de una joyería cara de la ciudad en las manos del bicolor. Ella sonríe, acostada sobre el pectoral de Izuku.
_Qué tienes ahí dentro, Shou? _pregunta curiosa._Puedo ver?
_Aún no, princesa. Dentro de poco te mostraré._negó, colocando el regalo en el sillón y caminando hasta el sofá de frente a la cama, mientras se quitaba la camisa y desabrochaba el cinturón._Ahora te vas a sentar para mí, ¿verdad?
Uraraka hace un sonido de confirmación, mordiéndose el labio inferior ligeramente. Ella deja el regazo de Deku, haciendo que el chico gimotee tristemente, camina hacia el hombre en el sofá y se monta sobre sus muslos, colocando una rodilla a cada lado.
Shoto rodea su cintura con los brazos, recibiéndole con esa sonrisa malvada que la hace suspirar, él inclina la cabeza hacia abajo y la entierra entre los pechos sobresalientes en el escote del sujetador de encaje, dejando besos mojados sobre la superficie. El muchacho empujó su cadera hacia arriba, dando espacio para que él pudiera bajar la ropa, y cuando forzó su cuerpo hacia abajo nuevamente, el ardor en su interior le hizo chillar de dolor mientras apretaba los hombros ajenos.
.¿Qué pasa, mi amor?_él interrogó, extrañando su incomodidad._Te lastimé?
Si hubiera sido con Katsuki, esa pregunta habría salido como un típico libertinaje lleno de malicia para provocarla. Detalle que la irrita y excita al mismo tiempo. Sin embargo, la pregunta había partido de Shoto, por lo que en ese caso, podía estar segura de que había una preocupación sencilla en sus palabras. Después de todo, entre los tres, el bicolor era el que más la mimaba y cuidaba con suma atención, especialmente en ocasiones conmemorativas. Era su cumpleaños, todos los focos estaban dirigidos únicamente a ella
_Uhum..._ella gimió, asintiendo.
El chico frunció el ceño.
_¿Por qué?_cuando él salió temprano a buscar su regalo, Bakugou se había vanagloriado, asegurando que la dejaría abiertita para que los tres jugaran juntos. Pero ahora, invirtiendo nuevamente su miembro en la entrada vaginal y escuchando el gemido de dolor de ella, Todoroki se da cuenta de que el rubio no hizo absolutamente nada, había sido solo una broma._Pensé que ustedes se divertirían antes de que yo volviera._provocó, mientras inclinaba la cabeza para observar a los amigos._Pero parece que no... ¿Qué han estado haciendo? Mirando al techo? No, eso no parece algo que harías, Katsuki..._estrechó los ojos, desconfiado._Lo que me hace pensar que usted puede haber incumplido la regla que yo impuse.
Bakugou apenas arregló el cuerpo sobre la cama, apoyando las espaldas en la cabecera y estirando las piernas, ignorando totalmente el habla del bicolor.
_ Cuéntamelo a mí, princesa._Shoto agarró la barbilla de la mujer, haciéndola mirarle a los ojos._Él intentó romper la regla, ¿verdad?
A Ochaco no le gusta causar intrigas entre ellos. Sin embargo, en ese momento, siente una inmensa voluntad de delatar a Katsuki. La imagen de él revolviendo los ojos con irritación, cuando le recordó antes que no podría realizar un oral porque Shoto había prohibido, vuelve a su mente. No sabe por qué, pero eso la estimula, calentando su cuerpo con una satisfacción tremenda.
Siempre serás una buena chica. Obediente, mimada y le encanta escucharlos alabar su actuación. Pero hoy, si Bakugou descontara el estrés con palabras degradantes sobre sí, no se quejaría en absoluto.
Uraraka muerde el labio inferior, conteniendo la sonrisa malvada.
Intentó sí._respondió lo suficientemente alto para que todos allí oyeran.
Todos escuchan al rubio soltar, ruidosamente, el aire por la boca, causando un sonido de indignación. La chica sostiene la sonrisa mientras Todoroki alisa una de sus mejillas y pregunta más sobre el asunto.
_¿En serio, nena?
.Sí.
¿Y tú lo hiciste?
_No, ni un poquito._ella negó, y él siguió deslizando su pulgar por su mejilla, en una suave caricia que la hace cerrar los ojos por un momento.
_ Buena chica. Obediente como siempre._sonrió.
_Si él trató de romper la regla a pesar de que le dejamos muy claro que no podía..._Midoriya inició._Creo que ella puede elegir si tener o no sexo con él hoy.
_¡¿Como?! ¡Maldito nerd!_Bakugou grita enojado, mirando al verdoso con advertencia.
La propuesta logra provocar una sonrisa de aprobación en Shoto.
_Me gusta. Es el justo._concordó, sintiendo la mirada del rubio arder sobre sí._Así será, princesa: No tienes que prestarle atención a Katsuki si no quieres. ¿De acuerdo?
_Bueno.
_¡Carajo!_el rubio se quejó una vez más, golpeando el puño contra el colchón. Desde cuando usted hace las reglas?
_ Fue la decisión de la mayoría._el bicolor respondió, fingiendo inocencia.
¡Vete a la mierda, bastardo!
_Pero yo también te quiero, Kats._Ochaco intentó tranquilizarlo.
Usted quiere lo que le conviene._él no mide las palabras, aunque su tono no demuestre más que exaltación._No pasa de una mimadita del carajo. Principalmente con mitad y mitad.
_Ella merece toda la atención que recibe. Mi princesa es la madre de nuestra hija._ Todoroki la defiende, pero honestamente, escuchar a Katsuki hablar así era mucho más cautivante para ella.
.El rubio la encara seriamente, separando las piernas sobre la cama y relajando la postura; citar al niño era suficiente para ablandar el corazón del señor nervioso. Mientras tanto, Uraraka solo observaba cómo el regazo del hombre se veía atractivo en esa posición, necesitando contenerse para no ir atrás y terminar con su polla en la boca, aún más al verlo pronunciar un "vas a sufrir, chica" sin emitir sonido.
_Deja que el Kacchan se calme._Deku se acerca a ella, sonriendo. Colocó las manos en sus hombros y apretó levemente, como un masaje._Ven conmigo, te dejaré mojadita como tú merecías estar.
La mujer rápidamente acompaña al muchacho, esperando que él retire los objetos de la mesita y luego la acuesta sobre la superficie helada. Abrió sus piernas a Izuku casi automáticamente, flexionando sus rodillas, exponiéndose completamente a él; no estaba usando nada en su cuerpo más que el sostén y la minúscula falda que apenas tapaba parte del culo.
Deku se arrodilló, acariciando sus muslos internos y deslizándose el pulgar por los labios vaginales, esparciendo la breve lubricación por toda la región.
_ Sabes cuánto a papi le encanta jugar contigo, ¿verdad?_él habla, su voz suena profunda y lasciva._Eres tan sexy..._dice, bordeando la entrada de la intimidad con el dedo.
Uraraka mueve la cadera circularmente, intentando acercar su cuerpo al suyo, en el deseo de un toque más intenso y rápido. El hombre se inclina hacia la vagina y pasa la lengua por la hendidura húmeda, saboreando su néctar. La boca masculina succiona el área del clítoris, dejando la punta de los dientes inferiores rozar contra la piel sensible.
Los pelos de la chica se erizan, arqueando la columna por un momento. Ella percibe la sensación a través de un gemido frágil, corto, que vibra a través de la garganta. Apoyó su espalda sobre el vidrio de nuevo, humedeciendo sus labios.
._ Mi niña es tan sabrosa..._Midoriya susurra contra el coño empapado. El aire que escapa de su boca llega a ella con frialdad, provocando una sensación eléctrica en su vientre._¿Quieres que te meta un dedo, mochi?
_Sí, por favor..._la respuesta sale como una súplica mañosa.
Él sonríe, amando escucharla decir "por favor". Deslizó su dedo medio entre los pliegues y penetró en su interior, yendo tan lejos como pudo, insertando toda su longitud hasta llegar lo más profundo posible en su carne. Se sentía bien y agonizante al mismo tiempo. Por mucho que le gustaba tenerlo dentro de ella, Ochaco deseaba más, aún no se sentía completa ni satisfecha.
_Deku, pon uno más..._gimió, suspirando ansiosa.
.¿Más uno? Como quieras, cariño._retiró su dedo medio, uniéndolo a su dedo anular para volver a penetrar. La creciente lubricación permitía que sus dedos se deslizaran fácilmente por el espacio, sin tener que hacer mucho esfuerzo. Poco a poco, Uraraka logra escuchar los sonidos húmedos que resuenan desde su íntimo a causa de los movimientos allí realizados. El sonido la excita aún más, no pudiendo contener los gemidos._Mira el ruidito excitante que hace tu coño..._dice, aumentando un poco más el ritmo de las embestidas para que el sonido sea aún más audible.
_ Mierda, ya está bastante mojada..._Shoto suspira, mientras una de sus manos acaricia su propia polla._Tráemela, Izuku. No lo soportaré más.
Aunque quería seguir jugando con la castaña por más tiempo, Deku aceptó la petición de su amigo. La tomó en sus brazos y la llevó de nuevo al regazo del bicolor, posicionándola de la misma manera que antes. Ella levantó sus caderas, colocando su polla en su entrada y sentándose sobre ella, acunando la barra carnosa por completo.
Ochaco suelta un gruñido dengoso, cerrando los ojos ante tanto placer. Sintió una de sus manos en la nuca y la otra apretando la piel de su culo, acariciando. Finalmente estaba llena por algo más grande. Sus paredes internas presionan el pene masculino, ardiendo un poquito, acostumbrándose al tamaño como si fuera la primera vez.
Dios, eso se sentía tan bien...
Lo suficientemente bueno para inquietarla, con una inmensa voluntad de cabalgar intensamente para correrse luego y sentir la calidez del líquido de él escurriendo de su grieta. Con ese deseo incesante, ella sube y baja con presión, manteniendo los ojos cerrados y el labio inferior atrapado por los dientes al perder el aliento.
Sin embargo, ella va demasiado rápido y intenso. Si continúa así, sabe lo que va a pasar... Y luego ese dolor en la región de las rodillas y los cuádriceps volvió.
La joven suelta un gemido lamentable, algo como un cansancio mezclado la irritación, cesando los movimientos, pero manteniendo el miembro del muchacho en su interior.
_Qué pasa, mi princesa?_él pregunta al acariciar su rostro. Está cansada, ¿no?
Yo... Me duele las rodillas.
Ella agacha la cabeza, avergonzada. No era la primera vez que esto sucedía, pero era la primera que todos estaban juntos presenciando, y obviamente ellos no pierden la oportunidad de bromear con la situación.
_Ah, bebé... Todoroki murmuró y sonrió, tirando la cabeza hacia atrás mientras masajeaba la polla por dentro del pantalón desabrochado._No aguanta más? ¿Cuántas fueron? ¿Unas cinco rebotadas?
_ Tal vez menos._comentó Izuku, masturbándose igualmente._La maternidad te dejó flaquita, mochi...
Ochaco contiene una sonrisa, sintiendo las mejillas quemarse. Aunque estaba de espaldas a él, podía imaginar la expresión de burla en su rostro. Solo ese pensamiento fue capaz de hacer que su cuerpo ardiera como brasa.
_Pero es solo ella ir despacio._el bicolor dijo._El problema es que usted está muy afobada._sostuvo la barbilla de ella, riendo suavemente._Mi polla no va a ninguna parte. Puedes saltar sobre ella cuanto quieras.
La castaña asintió y poco a poco volvió a los movimientos. El ritmo lento no hizo que sus rodillas dolieran tanto, o el músculo de los cuádriceps ardiera como antes. Era bueno experimentar la extensión gruesa y larga siendo enterrada lentamente en su coño.
Podría continuar con esa sensación durante largos minutos, intentar controlar el orgasmo solo para permanecer conectada a ese hombre por más tiempo. Pero la velocidad se convirtió en una tortura para él.
3._Olvídalo, tengo que cogerte ahora._él cita impaciente. Shoto siempre sería el que más la mima en cualquier cosa, sin embargo, durante el sexo, la dulzura y el cuidado eran totalmente dejados de lado. El chico le apretó la cintura, haciéndola interrumpir sus movimientos y quedar con las caderas atrapada en el aire, solo a merced de las estocadas de él. Presionó los pies contra el suelo y la espalda en el sofá, estabilizando el cuerpo para embestir a la chica con velocidad y brutalidad.
Ochaco sintió su estómago envolver y el cuerpo estremecerse. Su ápice estaba tan cerca... Ella abrazó los hombros del bicolor y enterró el rostro en su cuello, sintiendo el glande del miembro golpear su núcleo gustosamente, golpeando en lleno su punto sensible y placentero. El aire escapó de sus pulmones con dificultad, especialmente después de que llegó el orgasmo, temblando de pies a cabeza. Apretó los labios, zumbando con la garganta un lloriqueo tierno cuando el líquido caliente llenó su interior.
Las manos de Shoto soltaron su cintura mientras se derrumbaba en el sofá y se pasaba los dedos por su cabello bicolor, cansado, también recuperándose de su clímax.
.Uraraka respiró hondo y feliz, desconectándose del hombre para acostarse a su lado, mientras presionaba ambas piernas en un intento de saciar esa excitación que aún permanecía en su cuerpo caliente.
Volteó la cara, observando a Deku allí cerca, sentado en la punta de la cama. Pudo notar los botones y el cierre del pantalón abiertos, la cabecita del palo reluciente en medio a la tela. Mientras Katsuki estaba sin camisa, exhibiendo aquel abdomen marcado y delicioso.
Ella abandonó el sofá, gateando por el piso hasta alcanzar la alfombra y finalmente acercarse a la cama. Se sentó sobre sus pantorrillas, mirando fijamente al verdoso con una carita angelical.
_Papi..._lo llamó. ¿Fóllame el coño ahora?
Midoriya inclinó los labios, sonriendo brillante para la chica. De los tres, Izuku era el más tierno... Bueno, cuando no estás usando la fuerza para cogerte hasta que no puedas más.
_Pidiendo así, papi no podría negar._murmuró, levantándose del colchón. Ochaco no espera ningún comando, solo se acuesta sobre la alfombra peluda y separa las piernas. Él se ajusta entre sus muslos, quedando encima del pequeño cuerpo femenino._Me parece tan bonito la forma en que nos abres las piernas en automático, sin pensarlo dos veces. rió.
Ella es una buena chica. Todoroki alega.
_ Está más para desesperada..._Bakugou bufó, y la mujer muerde la punta de su propio índice, sintiendo su íntimo pulsar con tales palabras.
_Entonces, ¿cómo va a ser, mi hermosa?_el verdoso atrajo sus ojos de vuelta para él._Usted quiere el papi follándote con fuerza o lento?
La respuesta a la pregunta está en la punta de su lengua, pero sería mejor cambiarla. La castaña sabía que él era más grande y que perdía el control más fácil cuando estaba cerca del orgasmo. Y aunque le dolía un poco, no quería arriesgarse a agotar la energía tan pronto.
._ Lento..._contestó. Él asiente positivamente con la cabeza, alejándose para retirar el resto de las piezas que cubren su cuerpo y volviendo entre sus piernas.
La punta de su polla roza su hendidura, acariciando el agujero mojado, melando su glande deliciosamente y forzándolo un poco hacia adentro. Ella suelta un gruñido bajo, incluso con esa pequeña cantidad fue suficiente para que sus paredes internas contrajeran al máximo, atrapando parte de la extensión ajena.
_ Maldición...él murmura al caer el cuello para atrás, entregado a la sensación delirante.
La cadera de la chica se mueve involuntariamente, tal vez una forma de llevar más de la longitud a su interior.
_ Deku, yo quiero todo._ella dice. La voz no suena frágil o baja como antes, pero audible, como si estuviera exigiendo._Mete todo.
Midoriya levanta la barbilla, mirándola con una de las cejas arqueadas. Eso fue realmente una orden? Él no piensa mucho en ello y simplemente lo hace. Su pene entra por completo, en un solo desliz. El ardor la hace comprimir los labios, pulsando su coño alrededor de aquel tamaño.
_ No la canses mucho, nerd._Katsuki advirtió._Yo todavía tengo que joder bien fuerte esa maldita.
_Fue ella quien lo pidió todo..._izuku respondió, sonriendo ladino.
Los gemidos de ella escapan con facilidad de la garganta a medida que él invierte un centímetro a la vez. Las penetraciones son lentas, pero certeras. En las duras estocadas que se ejercía, su cuerpo se balanceaba hacia atrás y su respiración hasta paralizaba algunos segundos.
Midoriya arregló la postura y la miró por encima, serio. Una de las manos sostenía su cintura como apoyo para las estocadas y la otra acariciaba su tronco. El dedo índice dibujó un camino desde el espacio entre sus pechos hasta el bajo vientre, donde enfocó sus ojos esmeraldas en los movimientos interesantes.
.
Levantó más sus piernas, sujetándolas por debajo de las rodillas, abriendo espacio y mostrando con nitidez su polla deslizándose hacia el coño.
_Mira, amor, como tu coñito se traga mi polla..._comentó sonriente, mientras miraba descaradamente para las intimidades conectadas. Agarró firmemente los glúteos de la mujer y hundió más en tu vagina._Está mojando todo, pervertida. Te dejaré bien abierta para Kacchan.
Los movimientos ganaron un poco más de ritmo, pero permanecieron profundos. No le gustaba comparar a los tres en la cama, pero el modo en que Deku se la follaba era diferente. Tal vez era debido a la pérdida de control cuando estás a punto de derramar toda tu mierda, la fuerza que hace al presionar tus muñecas contra la superficie en la que estás acomodada, o como ahora, cuando él le hace encarar su propia intimidad toda mojada y centelleante con la lubricación de ambos mientras la penetra sabroso.
El orgasmo no tarda en llegar para los dos. En los últimos segundos, un lloriqueo dengoso resuena de su garganta cuando Izuku acelera, tan bruto como Shoto fue anteriormente. Su líquido se mezcla con el tuyo, pero algunas gotas salpican en tu ingle en el momento en que deja tu interior para besarte con fervor.
Las lenguas chocan entre sí, mientras que las manos del chico sostienen sus mejillas sonrojadas. Los dientes mordisquean su labio inferior, la barbilla, descendiendo un rastro húmedo de besos por su cuello hasta llegar a los senos, haciéndola temblar.
_Fóllalos y vuelve a mí, mochi._dice entre besos, apretando los pechos atrapados por el sostén, que luego fue arrancado de su cuerpo y Deku apretó los senos con fuerza, provocando un gemido en ella. Se detiene y sostiene la mandíbula de la mujer, haciendo que sus miradas se encuentren. Prometa... susurró._Prométeme que dejarás que papi coma tu coño todo el día. Quiero oírlo.
Incluso con la mandíbula apretada, ella respondió:
_Lo prometo. Hoy papi se va a comer mi coño todo el día.
Él sonrió, de aquella manera linda e inocente que no coincidía con sus pensamientos degradantes.
Es toda tuya, Shoto.
La sonrisa engreída en la cara del bicolor provocó un soplido enojado en Bakugou, el cual sabía que aquello formaba parte de su castigo. ¡Se estaban enrollando a propósito!. El Todoroki dio unos golpecitos con la palma de la mano sobre el sofá mayor, llamándola.
Aún con las piernas vacilantes, ella va hasta el lugar indicado, ansiando sentir al muchacho nuevamente.
Cabeza abajo y culo arriba..._Shoto no se encaja por detrás de inmediato, se aleja del sofá y recoge la bolsa que trajo antes.
Ochaco levanta la cabeza para observarlo caminar de vuelta con el logo de la joyería estampado en el embalaje. Ansiosa por saber de qué se trata, tiene que aguantarse para no dejar la posición en que está y volverse hacia el chico.
Era posible escuchar el pequeño ruido del presente siendo abierto, de la probable caja que estaba guardada a ser desbloqueada. Pero fue solo cuando Todoroki levantó su postura, tirándola por la nuca, que la castaña pudo ver que se trataba de un collar.
Sus labios se abren ante tal belleza. La pieza era pesada, hecha enteramente de diamantes blancos. Sin embargo, aún conserva la delicadeza con sus tallos delgados que se unen formando un diseño único hasta que vuelven a la corriente.
Gustó? él la cuestiona.
La mujer no puede responder verbalmente, solo asiente con la cabeza. Ellos siempre le daban regalos caros, pero ese era, con toda certeza, el de mayor valor. Por eso, temía ni tener lugar para usar algo tan valioso y hermoso como esa joya.
_ Creo que voy a usarlo para ir a la panadería._bromeó, mientras Shoto cerraba el cordón alrededor de su cuello. El frío de las piedras delicadas hizo que sus pelos se erizaran al tocar su piel.
El chico se rió.
_... O, quizás, ir a la fiesta de negocios la próxima semana.
La castaña fue tomada por sorpresa por la sugerencia. A pesar de que he estado en esa relación con ellos durante cinco años, todo lo que pasa entre los cuatro se queda con los cuatro. Nadie sabe de ella, mucho menos de su madre o hija. Siempre ha sido así desde que los conoció, manteniéndose en el anonimato y lejos de los focos por seguridad, y ahora que hay un niño en medio, los cuidados se han vuelto aún más grandes. Y honestamente, ella nunca se molestó en aparecer.
_Fue una invitación, ángel._Bakugou reitera._Va a ser un día importante, y por eso queremos llevar a alguien importante con nosotros.
_Importante..._Uraraka repite la palabra, sintiendo el peso de su significado en ese contexto.
_ Claro que sí._el bicolor abraza su cuerpo, dejando besitos por su cuello._Tú siempre has sido importante para nosotros. Mucho. ¿Tenías duda de eso?
_ No, pero es que... yo no esperaba que quisieran llevarme fuera del cuarto._dijo, avergonzada.
_Eres demasiado buena para tenerla sola en la habitación._el comentario de Deku la deja aún más retraída.
Sus mejillas arden, duelen de tanto sonreír mediante el elogio.
_ Eso es verdad. _ Todoroki acuerdó._Usted es muy buena..._apretó su cintura, causando cosquillas._Muy obediente, muy hermosa... el rebozado de sus caderas era una consecuencia inmediata, quería tenerlo en su interior lo más rápido posible._Tú eres nuestra buena chica, ¿no?_susurró, inclinándose sobre el cuerpo ajeno para poder morder su hombro.
_Soy._suspiró. Sus manos circularon en sus nalgas, masajeando la carne, amenazando con apretarlas, pero no haciéndolo.
Y las chicas buenas no necesitan que las golpeen, ¿verdad?
Uraraka giró la cara, echando el lado izquierdo de la mejilla sobre el colchón y mirándolo de reojo. En su campo de visión podía ver a Bakugou todavía apoyado en la cabecera de la cama, con los brazos cruzados detrás de la cabeza y Midoriya estaba sentado en un sillón al otro lado, sin camisa y bebiendo.
_ Precisa._la respuesta de ella resuena audible para todos, con una risa traviesa al final.
Shoto levanta el tronco, sonriendo. Verla en esa posición era delirante. La mujer está totalmente expuesta, la única pieza que le queda en el cuerpo es la falda gode, pero al mismo tiempo, su aspecto parece tan delicado... Él sería capaz de dar todo lo que ella pida. Incluso palmaditas.
_¿De verdad necesitas?_alisó sus nalgas, dejando la primera bofetada en una de ellas y penetró su miembro a la vez en la intimidad, sin previo aviso.
_Shoto~..._ella gimió mañosa, estremeciéndose. Tal vez sea la posición, el frío de los diamantes contra su piel o la visión de un Bakugou mirándola seriamente, el hecho era que eso la dejaba tan excitada que fue imposible quedarse parada.
Movió su cadera hacia adelante y hacia atrás, meneando su culo, resbalando contra la pelvis masculina mientras anhelaba sentirlo más. Todoroki sonrió ladino, encontrando su prisa la cosa más bonita de observar. La forma en que ella se acercaba y se alejaba rápidamente, golpeando fuerte en su dirección, haciendo que sus nalgas rebotaran y temblaran con el impacto.
Mírate..._él farfulla, deslizando la mano por tu espalda hasta llegar a la cabeza._Cogiendo mi polla tan bien. No parece que se haya corrido dos veces en menos de una hora.
Uraraka permanece en movimiento, solo que esta vez ella colisiona con un poquito más de fuerza contra su cuerpo, como si estuviera obligándolo a asumir el control en su lugar. El bicolor entiende el mensaje, comenzando a meter su polla en el mismo ritmo apresurado que los demás anteriormente.
Shoto tiene una forma de follar que la deja desconcertada. Era asombroso lo cuidadoso que podía ser, a pesar de la velocidad o la fuerza, cómo podía golpear el punto exacto dentro de ella para volverla loca.
Mientras golpeaba su trasero unas cuantas veces más, el chico presionó su cara contra el colchón. La castaña puso los ojos en blanco, separando los labios para dejar escapar un poco de saliva al surgir la sensación de un tercer orgasmo inminente. El ruido de ambas pieles chocando constantemente llenaba la habitación, estimulándola aún más.
El interior de ella se contrajo tanto que hizo imposible para Todoroki sostener su ápice. Después de recuperar un poco el aliento, dejó el sofá y fue a buscar una botella de agua para aliviar la boca seca.
Ochaco permanece en la misma posición por unos segundos más, luego ella finalmente encuentra fuerzas para moverse y gatear hasta el chico rubio, necesitando también atenderlo. A pesar de que esto destruirá su cuerpo. Acostando al lado de él de boca abajo, la falda gode toda arrugada expone enteramente su culo. Katsuki observa la región, pero luego aparta la mirada, como si quisiera controlar sus impulsos salvajes.
_Papi._llamó su atención.
El rubio la encara, medio sin paciencia.
_¿Cuál es el problema?
Ella apoya la barbilla en la parte posterior de la mano sobre la almohada, devolviendo el contacto visual.
_¿Me vas a joder también?
Bakugou muerde el labio inferior ligeramente y levanta la ceja, desdeñando. ¿Si quiere? La polla dura dentro de los pantalones era la mejor respuesta a esa pregunta. Pero su orgullo deseaba cambiar la dinámica esta vez.
_ Quieres ser follada, princesita?_el tono de libertinaje era claro.
_Quiero, por favor.
Él se inclina hacia la mujer.
Entonces diles que se vayan.
Ochaco no extrañó. De hecho, ella prefería que fuera así. Con Shoto e Izuku fuera, podría dejar ver un lado de sí que quizás a los demás no les guste tanto. Además, las cosas serían mucho más intensas a solas.
La chica volvió su cara hacia los chicos.
_Quiero estar a solas con Kats.
No era una pregunta o una solicitud, era una orden.
_ Estás segura?_Shoto quiso saber._No necesitas quedarte con él, ¿recuerdas?
_ Pero yo quiero. Quiero ahora._ella dice con la voz más mansa. Puede ser?
Ellos no lo niegan. ¿Cómo podrían? Su chica era tan buena, siempre hacen lo que piden. Por lo tanto, los dos juntan sus cosas y dejan la habitación.
Cuando la puerta se cierra, Ochaco vuelve la mirada hacia el hombre, sonriendo orgullosa y presuntuosa. Bakugou también sonríe, admirando la forma fácil de cómo ella logró doblegar a esos chicos.
Ellos no pensaron dos veces._él resaltó Ese bastardo del medio a medio es un verdugo en la empresa, pero es solo usted pedir algo que él hace cualquier cosa.
_ Porque yo puedo._respondió, convencida.
Y te gusta eso, ¿no es así?_él acerca el rostro a ella._Le gusta ser mimada, ganar regalitos y llenar ese coño de mierda, cierto?_Uraraka no responde verbalmente, pero la sonrisa que intenta contener funciona como la réplica perfecta._Sí, te gusta._sonrió ladino, deslizando la mano por la espalda femenina hasta alcanzar la falda._Cuando llegué, ya estabas así..._apretó el tejido de la pieza entre los dedos.... lista para nosotros. Pensé que era para complacernos, pero ahora sé que es porque no eres más que una perra necesitada._rió grave, apretando repentinamente su trasero y haciéndola soltar un gemido._Ya llevó dos pollas y aún quiere el tercero. No te cansas, ¿verdad? Quiere quedarse rota hasta el final del día.
Ella presiona una pierna sobre la otra, buscando un alivio inmediato para aquel calor que se instala en su interior.
._ Pero no te preocupes, princesita..._se levantó de la cama para desnudarse._Papi te va a joder hasta que recuerdes a la pequeña zorra estúpida que eres._el pene erecto la hace salivar con la expectativa de sentirlo, como le había prometido antes. Ochaco hasta se pone de cuatro, pero Katsuki usa la fuerza para acostarla de vuelta en la cama, de espaldas a él._Te voy a comer de lado hoy.
Bakugou suspende la falda un poco más arriba, separando sus piernas para poder encajar cerca de la hendidura húmeda. Apretó su cintura cuando se colocó adentro, soltando un aire pesado contra la piel de su cuello, lo que causó un escalofrío delicioso en ella.
Uraraka apiló su trasero, murmurando bajito al tenerlo penetrando su vagina con ritmo. Terminó acostada boca abajo, su cuerpo sobre el suyo mientras una de sus piernas era sostenida por él, facilitando el acceso. Pero fue cuando él movió la cadera de cierta manera, que el pene escapó y un gruñido de reproche salió de su boca.
_Calma, mi ángel impaciente._la tranquiliza, encontrando divertido su desesperación._Voy a poner todo de nuevo, ¿de acuerdo?
La velocidad lenta de las estocadas la hace cerrar los ojos, aprovechando el momento. Respirando pausadamente, ella llena los pulmones de aire y libera todo con paciencia. Mientras su cabeza yace sobre uno de sus brazos, la mano libre del muchacho sube por su abdomen y se detiene sobre uno de sus pechos, apretándolo.
_Te gusta, bebé?_le susurra al oído, mordisqueando el lóbulo.__Claro que sí. Eres una perra insaciable._los dedos masculinos acarician la piel de la castaña, subiendo por la barriga y entre el espacio de los pechos, circulando con la punta del dedo, lo que la hizo desesperar.
_Aprieta._la chica pide, queriendo sentir aquella mano caliente envolver su seno.
El rubio sonrió, rodeando la zona esponjosa y deliciosa con la mano para presionar fuertemente. Él levanta el cuerpo, arrodillándose sobre el colchón mientras la joven yace de lado.
_ Joder... Si Shoto pudiera verte ahora, no creería que su princesa es una putita._se burló de ella. Girando su cuerpo, Katsuki agarra su cuello y lo aprieta ligeramente._Te encanta cuando hago esto... Tsk, tsk, parece que no eres la niña que él imaginaba ser._relajó los dedos en su garganta, y luego apretó nuevamente._Yo debería decirle? ¿Eh? ¿Qué él hará si lo descubre?_Ochaco no puede responderle. De hecho, apenas escucha lo que dice. Está tan entregada al acto que nada tiene sentido más que sus movimientos, entrando y saliendo, vagarosamente._Pero yo sé lo que voy a hacer..._él interrumpe las estocadas, abandonando su interior._Sienta en la cama.
Aunque insatisfecha por él haber parado las embestidas en su núcleo, Ochaco acató la orden. Se sentó sobre los talones hacia el rubio y levantó la mirada, observándolo masturbarse un par de veces hasta que lo oyó hacer otro pedido:
_ Abre la boquita._el líquido blanco golpea la lengua de la chica, manchando su barbilla, las mejillas y un poco de la nariz. Ella se traga lo que cayó en la boca, lamiendo alrededor y los dedos de él, los cuales corren por su cara para reunir toda la mierda y llevarla al lugar correcto._Eso, no desperdicia nada...
Uraraka humedece los labios al finalizar, pigarrea un poco con el sabor salado en la garganta. Después, inclina la cabeza hacia un lado, mirándolo fijamente.
Kats... pero yo no me corrí.
_ Hoy no._respondió, bien humorado._Quién sabe la próxima, cuando usted aprenda a no delatarme a los otros.
Y así, él se levanta de la cama, buscando sus ropas y caminando hacia la puerta. Ochaco se lanza contra el colchón, permaneciendo allí, acostada e insatisfecha por no haber conseguido obtener su mimo.
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