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Emputecida por proteger su matrimonio (1)

Emputecida por proteger su matrimonio (1)
Amaneció un nuevo día y María se dirigió a su trabajo de media jornada en una gestoría, tan solo de Lunes a Jueves y su marido se dirigió a su oficina, supervisó dos pequeñas obras que estaba construyendo, más tarde se reunió con el propietario del solar para anunciarle que en breve dispondría del dinero y paso la tarde repasando unos planos y el proyecto para el nuevo solar.
Cuando entraba la noche se dirigió a buscar a su mujer que aquella tarde tenía reunión de amigas, la recogió y llegando a su casa le entro un mensaje en el móvil, era un mensaje de Jefe.
¨Le enviaba una ubicación y una foto de una chica rubia, la anuncio como una de sus colaboradoras¨
Le mostró el mensaje a María y busco la ubicación era la estación del Ave, se dirigieron allí y esperaron en el parking, al cabo de un rato apareció una chica rubia, pablo se acerco a ella y le enseño el mensaje de Jefe, los dos se dirigieron al vehículo y la chica se sentó detrás.
- Tú debes ser María - le dijo la chica a forma de saludo - Yo soy karol y me envía Jefe para conoceros y hacer tratos.
María asintió con la cabeza y pablo condujo en silencio hasta su casa aparco en el parking subterráneo y subieron por el ascensor hasta el cuarto piso, Karol observo a María en silencio, la radiografió por encima del vestido y pudo ver su anatomía perfectamente, 1,65 de unos 67 kilos de peso y con el pelo corto y recogido, vestía una falda y llevaba unas botas, camisa de botones y un jersey, por encima se notaban sus tetas  erguidas y sus amplias caderas, Karol le enseño una foto que habían enviado mostrando su concha, María  la observo avergonzada.
- Tengo que comprobar que todo es cómo tiene que estar - dijo karol - ¡No os molestéis!
pablo y María hicieron un gesto de consentimiento, llegaron al piso y la puerta del ascensor se abrió y María metió las llaves para abrir la puerta del piso, entraron y karol paso al comedor miro las preciosa vistas que tenían de la ciudad soltó un silbido y se quito la chaqueta y la tiro encima de una silla, María pudo observarla ahora a ella, rubia teñida, sudamericana de unos 25 años, mas bajita que ella, pero también tetona y regordeta, no pudo dejar pasar el detalle de que sus labios eran carnosos y en su lengua tenía un piercing, pablo salió de la cocina con una botella de vino en la mano.
- ¿Te va el vino blanco? - le pregunto él y al obtener una respuesta afirmativa empezó a descorcharla.
María trajo tres copas y saco un bote de frutos secos, los tres se sentaron y empezaron a beber y hablar de cosas sin importancia, María preparo unas pizzas congeladas y eso es lo que hicieron de cena, luego recogieron la cocina y se volvieron a sentar, Karol se sentó al lado de María y pablo enfrente de ellas en una especie de sillón.
Karol saco su móvil y lo puso encima de la mesilla y activo el altavoz, después de unos tonos de llamada volvieron a reconocer la voz de Jefe
- ¡Si hemos llegado a este punto ésta todo correcto! - dijo Jefe
- ¡Todo ok! - apunto karol
- Os voy a poner las cosas muy claras, primero hemos de preparar a tu mujer, la van a follar bien follada mis dos colaboradores masculinos o sea la vamos a emputecer y cuando éste preparada podrá salir a atender clientes y ganar dinero como puta.
- ¿qué quieres decir con prepararla?
- Le vamos a follar la boquita, el chochito y el culito, el primer día lo haremos delante de ti, podrás ver como mis colaboradores la sodomizan y la hacen suya, ellos son los únicos que la podrán follar sin condón y correrse en sus agujeros, todos los demás incluido tú si vienes a verla solo podrán follarla con condón y pagando, hará tríos, lésbicos y  no podrá negarse a entrar con nadie que ponga plata y éste en condiciones.
- ¿Tengo que coger con cualquiera? - pregunto María.
- Tú ya no decidirás sobre tu cuerpo y cuando y con quien follas ¡eso sí! Con mis putas si alguien se pasa, lo pongo de patitas en la calle con la cara desfigurada.
-¿Hay límites? - pregunto pablo -
- Nadie ve a hacerle daño a tu mujer, otra cosa es que se la van a coger muchos tios y algunos con unas trancas enormes, no te digo que le duela la concha o el culo, pero tengo el lubricante por toneladas y protejo a todas mis putas.
-¿Y el tema del Bdsm? - insistió pablo.
- En mi casa no voy a obligar a ninguna puta a hacer Bdsm, si ella quiere hacerlo púes bien y si no púes nada que decir, pero te advierto que el Bdsm da mucha pasta y si lo que quieres es pagar pronto te aconsejo que lo penséis.
- ¿Tenéis alguna pregunta más sobre el tema? - soltó Karol.
- Solo podre ir de Jueves a Domingo - dijo María.
- ¡Tanto trabajas, tanto ganas, tanto rebajas la deuda! - dijo Jefe - es sencillo. Dicho esto queréis hablar de plata.
- ¿Cómo son los porcentajes? -pregunto pablo.
- Empezare por el tema de putita, la casa se lleva el 55% y tu mujer el 45%, nosotros nos encargamos de el tema webs, publicidad y fotos para la promoción,  su seguridad y etc…todo lo que tu mujer me entregue lo descontare de la deuda y cuando este saldada si quiere quedarse con nosotros bien y si no, se puede ir libremente.
- ¿Y el dinero? - pregunto él preocupado.
- Te entregaré 40.000€ y tú me devolverás 50.000€, cada tres meses te subo un 5% de intereses y si tú me devuelves el dinero de golpe me pagas un 10% de compensación, si estáis de acuerdo te doy la plata ahora mismo.
- ¡Si quieres contarlo! - dijo karol al sacar un sobre y dejarlo encima de la mesa.
Carlos abrió el sobre y vio una gran cantidad de billetes de 500 y 200€ sobrepeso el sobre y se quedo pensativo mirando a su mujer y consultándola con la mirada, ella le hizo un gesto positivo aún tapándose la cara con las manos.
- ¡Aceptamos! - dijo pablo guardando el sobre.
- Mañana os quiero en mi casa y empezaremos a iniciar a tu mujer, esta noche karol os dirá lo que ahí…. Y una última cosa, muy importante para que no se os ocurran cosas no deseadas para nuestro acuerdo ¡Soy un tipo del cuál es mejor tenerme como amigo que como enemigo!, seguido esto recito los nombres de los hermanos de pablo y los de María.
Ambos escucharon las palabras de Jefe atónitos, era una amenaza en toda regla y demostraba que los había espiado a conciencia, un escalofrío temeroso recorrió el cuerpo de María , Jefe colgó y pablo se levanto a guardar el sobre.
pablo volvió al comedor y vio cómo Karol le quitaba las botas y los calcetines a su mujer al tiempo que ella se sacaba las suyas y las tiraba a un lado, se acercó a María , le giro la cara y empezó a besarla en los labios que la cogieron por sorpresa y se quedo mirando a su marido que se sentó y observo la morbosa escena.
Karol se puso de rodillas encima del sofá y atrajo la cara de María  hacía ella y la acariciaba con las manos mientras la besaba en los labios y le metía la lengua en la boca,  María se quedo paralizada era la primera vez que una mujer la atacaba y encontró su lengua muy suave y sensual, se dejo llevar y colaboro sacando su lengua y morreando con Karol, bajo la atenta mirada de su marido.
- Ésta noche tú dormirás aquí en el sofá - le susurró karol a pablo -  Yo me llevare a tu mujer a la cama… ¡Y me la follare!
Karol giró otra vez la cara y busco la boca de María que ya se entregaba a su amante sin ningún pudor delante de su marido, karol la besaba en el cuello mientras le quitaba el jersey y la camisa ,María  se echaba hacia adelante para facilitar que le quitasen la ropa, sacaba la lengua y se entrelazaba con la de Karol que ya le desabrochaba el sujetador.
-¿Te gusta lo que te hago? - le susurró karol
- ¡Me éstas poniendo muy cachonda? - se sincero María
- ¡Supe que eres una guarra en cuanto te vi!
Karol le lamió los pezones y María  se echo hacia atrás placenteramente mientras soltaba un suspiró y karol le mordió el pezón dos veces y luego le pasaba la lengua y lo masajeaba y lo pellizcaba con los dedos Y eso provoco que María gimiese placenteramente.
- ¡Te voy a poner muy cachonda! - murmulló karol en tanto seguía trabajándole las tetas -¡Tú marido no sabe ponerte tan puta cómo te voy a poner yo!
pablo observaba incrédulo la cara de su mujer, de vez en cuando se cruzaban las miradas y ella estaba disfrutando, conocía esa mirada, notó como sufría una potente erección y se echo mano a la cremallera, tenía que aliviar la presión.
Karol bajo del sofá y se puso de rodillas delante de María , le quito la falda y luego las bragas, María se quedo en pelotas, karol la atrajo hacía ella por la cintura y le abrió las piernas como si fuese una gimnasta, pablo lo observo otra vez impresionado, no sabía que su mujer pudiese ser tan flexible cómo estaba demostrando, su concha quedo a la altura de la boca de karol pero lo acaricio con los dedos, María lanzaba fuertes suspiros y jadeos continuos, su excitación era evidente.
- ¡La guarra de tu mujer tiene el coñito mojadito! - le dijo karol girándose y mirándolo fijamente - ¡Esta deseando que le coma el coñito!
pablo era presa de una excitación enorme, ya tenía la pija en la mano y empezaba a hacerse una paja.
Karol enterró la cabeza entre las piernas de María y empezó a comerle el concha lentamente su lengua le recorría la raja y se paraba y la penetraba profundamente y luego le volvía a recorrer la raja otra vez, María se sujetaba las piernas y le temblaban las piernas y encogía los pies mientras gemía atronadoramente.
- ¡Tiene un coñito tan sabroso! - le dijo Karol a pablo que en aquel momento ya se hacía una paja frenéticamente.
- ¡Tu lengua me va a volver loca! - farfullo María entrecortadamente - ¡Cómo te notó el piercing!
- ¡Mira a tu marido que vea lo puta que te pones cuando te como el coñito! - le ordeno karol
María obedeció y miro a su marido que vio como se masturbaba, él observo la mirada de su mujer y como ella apartaba la mirada mientras sus pupilas le desaparecían tras sus parpados y los globos oculares se ponían en blanco, él había conseguido muy pocas veces hacerlo y sabía el clímax que estaba alcanzando.
Karol le lamio el clítoris con intensidad y lo mordió estirándolo con los dientes, a María  le pareció que le iban a arrancar el clítoris, la primera comida de coño que le estaba brindando una mujer era salvajemente gustosa.
- ¡Voy a hacer que se corra cómo una perra! - le dijo karol a pablo en el justo momento que el empezaba a eyacular y soltar semen por encima de la mesilla.
María soltó un grito gutural y empezó a temblar en el sofá, se quedo convulsionando un buen rato presa del orgasmo explosivo que había sufrido.
- ¡Cómo me he corrido! - balbuceo María extenuada y llevándose las manos a la cabeza.
Karol levanto a María cogiéndola de la mano y se fueron las dos a la habitación, volvieron con una almohada y una manta y karol obligo a pablo a estirarse en el sofá, sus manos tocaron la superficie mojada y viscosa eran los fluidos de la corrida de su mujer. Karol volvió al cabo de un rato y se acerco a pablo que estaba estirado
- ¡la guarra de tu mujer me pide que te deje aquí! - le susurró humillándolo - ¡Y que vaya a follarla!
Karol entro en la habitación y le abrió las piernas a maria y le metió dos dedos en la concha y empezó a meterlos y sacarlos, iba aumentando sus movimientos y los giraba como una tuerca y al sacarlos los abría estirándole  el coño.
 pablo escuchaba los gemidos de su mujer desde el comedor, nunca había sido tan escandalosa e incluso llego a temer por los vecinos.
- ¡Me voy a volver a correr! - anunciaba la puta de su mujer
- ¡Chilla guarra! - le vociferaba Karol - ¡Que tú marido oiga cómo te follo!
- ¡Me corro! - aullaba María  - ¡me corro otra vez!
Se escucho un grito descomunal y por un buen rato como María lloriqueaba diciendo palabras inconexas.
-¡Para ya! - alcanzo a escuchar pablo desde el comedor - ¡No estoy acostumbrada a correrme así!
- ¡Voy a hacer de ti una buena puta! - dijo karol en voz alta para que pablo la escuchara - ¡Te voy a volver muy marrana!
Karol le subió las piernas a María y su cabeza quedo apoyada en las sabanas y su coño a la altura de la boca de Karol y sus piernas colgaban por detrás de la espalda y comenzó a comerle otra vez la concha.
pablo escucho a su mujer gemir y gritar por otro buen rato, no podía comprender cómo estaba tanto rato teniendo sexo, al final oyó como se volvía a correr, escucho como unos pies descalzos pisaban por el suelo, era karol que venía a buscarlo.
- ¡Ven quiero que veas a tu mujer! - le dijo levantándolo del sofá
pablo entro en su habitación su mujer estaba estirada en la cama con la cara desencajada y una expresión que nunca había visto, se puso a su lado y se agarraron por las manos.
- ¡Pídele a esta chiquilla que no me coma más la concha! - le suplico su mujer - ¡Me va a volver loca! 
- ¡Cómo le chorrea a tu mujer el coñito cuando se corre! - le hizo saber karol - ¡ahora vete que vamos a hacer una tijera!
pablo volvió al sofá abatido, no podía asimilar lo que descubría de su mujer, las palabras de karol le martilleaban la cabeza, que a su mujer le chorreaba laconcha, si él nunca lo había conseguido y ver a su propia mujer tan puta y entregada a una desconocida, pronto volvió a escuchar cómo volvía a gemir cómo una loca y empezó a pensar que lo que había hecho era una mala idea.
continuara.....

1 comentarios - Emputecida por proteger su matrimonio (1)

Zeon25
Ufff esperando la otra partr