Mi tío siempre demostró un extraño interés pormí, todo el mundo siempre asumió que yo era su sobrino favorito, aunque esteinterés no siempre fue del mismo modo, sino que desde el momento en que comencéa hablar libremente de mi sexualidad en casa y presenté a mis dos novios a mifamilia, todo se hizo un poco más evidente en su trato hacia mí, aunque para miaún seguía siendo el trato preferencial de siempre.
Pasado algún tiempo de mi relación con ellosdos surgió la posibilidad de que ellos comenzaran a trabajar afuera, en viajesregulares de mayor o menor duración, por lo que con el paso del tiempo comencéa quedarme más y más solo, pero estábamos bien a pesar de eso y de que entreellos nunca habían podido resolver sus diferencias en relación a mí, al menosnunca de manera definitiva.
Mi tío en particular y toda mi familia en generalsabían de esta situación y cuando esto ocurría, quedarme solo, por lo generalme invitaban a quedarme en la casa o ellos venían al departamento en dondevivíamos los tres, ellos me dejaban a cargo a mí de todo el cuidado y yo hacíalo que más podía. Entonces, cuando pasaba algo por el estilo siempre mi tíoestaba presente de algún modo, si veníamos películas en la casa de mis padresvenia, si hacíamos una comida familiar él siempre estaba y en una noche en laque nos habíamos juntado todos comenzamos a tomar algo de vino, él se sentó ami lado en el sillón y me conversaba mientras veíamos la película todos juntos,se acercaba a mí y sutilmente rozaba mi pierna, mi vientre, en un momentoincluso se acercó a mi cuello pero yo me hice el tonto, claramente ya meparecía bastante sospechoso el tono de sus actitudes así que me levante al bañoy el me siguió, disimulando poco y nada la verdad.
Cuando nos encontramos solos en la antesala delbaño el me cerro el paso con su propio cuerpo y me dijo que yo le gustaba y quequería tenerme, me resulto extraño y en un primer momento me resistí a todo,pero cuando finalmente me beso no pude resistirme, su boca era perfecta y meolvide por completo que era mi tío, tal es así que luego de un momento en esasituación sentí la necesidad de acariciar su bulto por encima del pantalóncuando mi madre se aproximó a donde estábamos y sin darse cuenta de nada nospreguntó que pasaba que no volvíamos a ver la película, yo conteste rápidamenteque me dolía un poco la cabeza y que probablemente me iba a ir a dormir o, comomínimo acostarme por lo que subí rápidamente a mi habitación que quedaba en elsegundo piso mientras mi tío y mi madre volvían a la sala de estar para seguirviendo el filme.
Pasado unos pocos minutos, probablemente unosveinte, la puerta de mi cuarto sonó del lado de afuera y abrí, pensé que era mimadre trayéndome un medicamento para el dolor de cabeza, pero en realidad erami tío el que se había ofrecido. Tome la pastilla que me había traído y unsegundo después él me estaba besando nuevamente, me puso de espaldas y me besoel cuello apasionadamente mientras su mano se deslizaba primero dentro de mipantalón y luego en mis bragas, si…bragas. Mis pies se vencieron un poco,sinceramente aun me daba un poco de asco, pero la situación en si me fascinaba,supe que iba a pasar recién cuando me dijo al oído que no haga ruido mientrasbajaba mi pantalón y subía mi remera mientras me apoyaba sobre el escritorio demi habitación. Froto su pene por la línea de mi cola, pero no me penetro, sinoque me tomo por el cuello, me sentó en mi cama frente a su verga y me pidió quela tomara entre mis manos, simplemente para poder comenzar a lamerla de arribahacia abajo, acariciando con mi lengua sus testículos al final del recorrido yluego subir de nuevo. Su piel era hermosa, su aroma, su color, su autoridadconmigo era perfecta, literalmente me dominaba un poco más a cada segundo.
Abajo, las carcajadas por la película queestaban viendo era la pauta de que teníamos tiempo de sobra.
Me llevo contra la pared del closet y ahí, consu pene completamente lubricado por mi boca fue donde por primera vez entro enmí, tapo mi boca con sus manos porque si no se me habría salido un gemido quede todos modos hubiese sido perfecto para la situación, mis piernas se abrieronmás por simple instinto y la saliva que mi tío escupía en mi cola lubricaba aúnmás su pene para entrar en mí. Tocaba mi pene para seguir estimulándomemientras me la metía con violencia, pero con la delicadeza suficiente como paraque nadie se enterara ya que a él no le convenía para nada que así sucediera.Cogimos en el piso de mi habitación y también sobre la cama, cuando me puso encuatro sentí que entro por completo en mí y descargo por primera vez, cuando mecogió con la cola parada pero totalmente acostado en la cama sentí que pormomento se animó a envestirme con la suficiente fuerza como para que mi colasonara pero con cuidado para que eso no se escuchara o me hiciera gemir de más,él me decía que parecía una puta y en ese momento fue cuando descargo porsegunda vez, también dentro mío, en la cola.
Sinceramente por momentos no se contenía y yotenía que hacer lo que podía para hacerlo entrar en razón, por momentos inclusoyo tampoco podía aguantarlo dentro mío con toda su potencia, pero era unadelicia la situación en general, me sentía su prostituta y me encantaba.
Cuando termino por tercera vez me pidió hacerloen mi boca y yo no tenía ganas de negarme a nada, quería terminar porque yatodos se iban a dar cuenta de nuestra ausencia y me preocupaba entonces accedí,lo hizo y nos quedamos un ratito acostados en la cama, yo sobre su pechoconversando un rato desnudos. Fue raro pero lindo…no podíamos bañarnos así queintentamos disimular su transpiración y salió de mi habitación, yo quedéacostado, aparentemente nadie se dio cuenta de nada porque sentí como la nochetermino en calma mientras mi cuerpo, en la cama y a medio dormir pedía más delnéctar que mi tío me había compartido esa noche tan especial.
Pasado algún tiempo de mi relación con ellosdos surgió la posibilidad de que ellos comenzaran a trabajar afuera, en viajesregulares de mayor o menor duración, por lo que con el paso del tiempo comencéa quedarme más y más solo, pero estábamos bien a pesar de eso y de que entreellos nunca habían podido resolver sus diferencias en relación a mí, al menosnunca de manera definitiva.
Mi tío en particular y toda mi familia en generalsabían de esta situación y cuando esto ocurría, quedarme solo, por lo generalme invitaban a quedarme en la casa o ellos venían al departamento en dondevivíamos los tres, ellos me dejaban a cargo a mí de todo el cuidado y yo hacíalo que más podía. Entonces, cuando pasaba algo por el estilo siempre mi tíoestaba presente de algún modo, si veníamos películas en la casa de mis padresvenia, si hacíamos una comida familiar él siempre estaba y en una noche en laque nos habíamos juntado todos comenzamos a tomar algo de vino, él se sentó ami lado en el sillón y me conversaba mientras veíamos la película todos juntos,se acercaba a mí y sutilmente rozaba mi pierna, mi vientre, en un momentoincluso se acercó a mi cuello pero yo me hice el tonto, claramente ya meparecía bastante sospechoso el tono de sus actitudes así que me levante al bañoy el me siguió, disimulando poco y nada la verdad.
Cuando nos encontramos solos en la antesala delbaño el me cerro el paso con su propio cuerpo y me dijo que yo le gustaba y quequería tenerme, me resulto extraño y en un primer momento me resistí a todo,pero cuando finalmente me beso no pude resistirme, su boca era perfecta y meolvide por completo que era mi tío, tal es así que luego de un momento en esasituación sentí la necesidad de acariciar su bulto por encima del pantalóncuando mi madre se aproximó a donde estábamos y sin darse cuenta de nada nospreguntó que pasaba que no volvíamos a ver la película, yo conteste rápidamenteque me dolía un poco la cabeza y que probablemente me iba a ir a dormir o, comomínimo acostarme por lo que subí rápidamente a mi habitación que quedaba en elsegundo piso mientras mi tío y mi madre volvían a la sala de estar para seguirviendo el filme.
Pasado unos pocos minutos, probablemente unosveinte, la puerta de mi cuarto sonó del lado de afuera y abrí, pensé que era mimadre trayéndome un medicamento para el dolor de cabeza, pero en realidad erami tío el que se había ofrecido. Tome la pastilla que me había traído y unsegundo después él me estaba besando nuevamente, me puso de espaldas y me besoel cuello apasionadamente mientras su mano se deslizaba primero dentro de mipantalón y luego en mis bragas, si…bragas. Mis pies se vencieron un poco,sinceramente aun me daba un poco de asco, pero la situación en si me fascinaba,supe que iba a pasar recién cuando me dijo al oído que no haga ruido mientrasbajaba mi pantalón y subía mi remera mientras me apoyaba sobre el escritorio demi habitación. Froto su pene por la línea de mi cola, pero no me penetro, sinoque me tomo por el cuello, me sentó en mi cama frente a su verga y me pidió quela tomara entre mis manos, simplemente para poder comenzar a lamerla de arribahacia abajo, acariciando con mi lengua sus testículos al final del recorrido yluego subir de nuevo. Su piel era hermosa, su aroma, su color, su autoridadconmigo era perfecta, literalmente me dominaba un poco más a cada segundo.
Abajo, las carcajadas por la película queestaban viendo era la pauta de que teníamos tiempo de sobra.
Me llevo contra la pared del closet y ahí, consu pene completamente lubricado por mi boca fue donde por primera vez entro enmí, tapo mi boca con sus manos porque si no se me habría salido un gemido quede todos modos hubiese sido perfecto para la situación, mis piernas se abrieronmás por simple instinto y la saliva que mi tío escupía en mi cola lubricaba aúnmás su pene para entrar en mí. Tocaba mi pene para seguir estimulándomemientras me la metía con violencia, pero con la delicadeza suficiente como paraque nadie se enterara ya que a él no le convenía para nada que así sucediera.Cogimos en el piso de mi habitación y también sobre la cama, cuando me puso encuatro sentí que entro por completo en mí y descargo por primera vez, cuando mecogió con la cola parada pero totalmente acostado en la cama sentí que pormomento se animó a envestirme con la suficiente fuerza como para que mi colasonara pero con cuidado para que eso no se escuchara o me hiciera gemir de más,él me decía que parecía una puta y en ese momento fue cuando descargo porsegunda vez, también dentro mío, en la cola.
Sinceramente por momentos no se contenía y yotenía que hacer lo que podía para hacerlo entrar en razón, por momentos inclusoyo tampoco podía aguantarlo dentro mío con toda su potencia, pero era unadelicia la situación en general, me sentía su prostituta y me encantaba.
Cuando termino por tercera vez me pidió hacerloen mi boca y yo no tenía ganas de negarme a nada, quería terminar porque yatodos se iban a dar cuenta de nuestra ausencia y me preocupaba entonces accedí,lo hizo y nos quedamos un ratito acostados en la cama, yo sobre su pechoconversando un rato desnudos. Fue raro pero lindo…no podíamos bañarnos así queintentamos disimular su transpiración y salió de mi habitación, yo quedéacostado, aparentemente nadie se dio cuenta de nada porque sentí como la nochetermino en calma mientras mi cuerpo, en la cama y a medio dormir pedía más delnéctar que mi tío me había compartido esa noche tan especial.
1 comentarios - Volví y mi tío siempre me ha deseado