Me hizo gracia, cuando fui a buscar a Fede a futbol, el profe Martín me hizo un comentario que estaba en sintonía con lo que habíamos hablado con mi esposa.
-Que suerte que Fede quiso jugar futbol… -me dijo.- el sábado nos vemos me dijo en voz baja.
Ella se había pintado los ojos, con una línea que le hacía mas cara de gata, le dije que se veía hermosa, que estaba cada vez más excitante, el miércoles a la noche se puso una especie de short elastizado, los ojos pintados como una gata, y un sujetador calado blanco, aros redondos.
-Te gusta… es la vestimenta para el sábado… -dijo caminando por la pieza y mostrándose.
-Estas cada día más hermosa y mas fuerte…
-Que bueno que te guste… -se desnudo y vino a montarme echamos un polvo tranquilo, besándonos y acariciándonos mucho.
Cuando vino el sábado ella lo recibió en el departamento, le encantó como estaba vestida, se besaron un largo rato, enseguida él estaba desnudo, y la empezó a sobar a ella por todo el cuerpo le encantaba como el short se le metía en el culo, de espaldas a él, llevó su mano hacia atrás y empezó a acariciarle su pija. Ella se inclinaba un poco hacia adelante, él la pajeaba desde atrás y ella lo pajeaba a él. Estuvieron un rato así, ya escuchaba los primeros gemidos de ella, le bajó el shorcito que quedó entre sus muslos y se quedó acariciando su culo y pajeandola, su pija apoyada en sus glúteos, ella se acariciaba los pechos, volvió a llevar su mano hacia atrás y ahora también lo pajeaba a él, se sacó el short del todo, puso una pierna sobre la cama y la penetró así de pie, la tenía agarrada del cuello y de la cadera, gemía todo el tiempo sin parar.
-Pareces una gata ahora… -le dijo.
-Te gusta tu gata…
-Si bien puta como me gustan…
Sus pechos salían sobre el sujetador, ella giró su cuerpo hacia él y lo miraba acariciándole el pecho con su mano, la tiró en la cama y fue a cogerla aplastándola contra la cama, ella solo se reía, estaba encantada con la situación, ella se paró, me miró sonriendo,
-Tengo muchas sensaciones… -se quiso tranquilizar un rato y después se acomodó sobre él dándole la espalda, se movía sobre él que le manoseaba los pechos, me miraba con esa cara caliente, pintada como una gata, él se acercó más al borde de la cama y ella empezó a moverse sobre él, ahora estaba parada en el piso y se podía mover mejor, sus pechos se sacudían de una manera deliciosa, él le decía todo el tiempo si, seguí así. Después lo montó de frente, él se acomodó mejor sobre la cama, me encantaba como se movía su culito. Pararon un rato, él fue a la cocina, agarró una cerveza que yo había puesto en el freezer, nos llamó desde el living, quería que brindáramos por nuestro encuentro, brindamos los tres, ella se fue hacia el cuarto y se arrodilló en la cama esperándolo, fue desnudo hacia ella, se paró al lado de la cama, ella se acercó y lo beso, él le acariciaba la cola, ella fue bajando besándolo por el pecho, los abdominales, me miraba con cara de puta mientras le chupaba la panza y lo pajeaba con una mano,
-Te gusta verme con un hombre…?
-Si, sos tan puta…
Se arrodilló en el piso delante de él, le chupaba justo la pelvis arriba de su pija, estaba todo depilado, la pija de él apoyada en el hombro de ella, primero me miró a mi, después lo miraba fijamente a él mientras empezaba a jugar primero con la cabecita de su pija y luego chupándola toda, él se acostó en la cama, con las manos entrecruzadas detrás de la nuca, ella de pie se inclinó a chuparlo lo miraba a los ojos todo el tiempo mientras lo chupaba, ella se montó, él le sobaba el culo, la agarró y la guio hacia su entrada, empezó a gemir de nuevo profundamente, la cogió como siempre en todas las posiciones, él se paró y ella sentada en la cama lo chupaba, sin usar las manos, él tenía las suyas detrás de la espalda, la tomó de la nuca y le cogió la boca bien profundo como siempre, ella lo babeaba todo como siempre, la puso de costado en la cama, la penetró y con el dedo índice le cogía el culito, ella gemía como siempre, encantada, había traído un lubricante, le lubricó el culo, sacó su herramienta y la apoyó en la puerta de su culo, no creía que esa herramienta pudiera entrar, ella se quedó en silencio, no decía nada, no gemía, estaba esperando, atenta, el metió la cabeza, ella llevó su mano hacia atrás la apoyo en su muslo, le sacó la mano, ella la puso alrededor de su pija, ella se quejó un poco pero sonreía, no pudo terminar de meterla, enseguida se salió, la atrajo hacia el borde de la cama, la tomó de los muslos llevando las piernas al hombro, entró la cabeza pero enseguida se salió, no lograba penetrarla, se arrodilló y le chupo el culo un montón, ella tiró un poco más de lubricante, la acomodó de nuevo de costado en la cama y se arrodilló detrás de ella, la acomodó un poco, ella llevó su mano hacia atrás y la sacó, le dolía bastante, él se quedó caliente se acomodó sobre su cara y empezó a cogerle la boca hasta que se tensó llenándola, ella se pajeaba todo el tiempo mientras lo chupaba, él se fue a arreglar, vino a besarla, lo acompañe hacia la puerta, estuvimos un montón de tiempo haciéndolo sin hablar. Ninguno de los dos decía nada, cuando estaba por acabar le dije.
-Te va a terminar partiendo el culo con esa herramienta.
2 comentarios - El profe de futbol intenta anal, no lo logra...