No hay mal que por bien no venga (corto)

En ese tiempo tenía 26 años, había conocido a una mujer de unos 50 años y cogíamos a full. La conocí en un bar, intercambiamos teléfonos y seguimos hablando, esa misma noche me invitó a la casa, su marido no estaba y cogimos con tanta piel que lo hicimos varias veces. Tremenda la señora, te la paraba en dos segundos con solo tocarte, había mucha experiencia.
Una noche, comenzaban los primeros fríos del año pero yo estaba re caliente, mal. Cuando cogíamos no le avisaba que iba pero yo sabía en qué horarios estaba el marido, le agregaba algo de morbo. Me fui hasta la casa, me atendió pero estaba el marido yo no podía más y le pedí que me la chupara por lo menos, no quiso. Esperé varios minutos frente a la puerta esperando algo que no iba a suceder pero estaba muy caliente necesitaba coger o que me la chupara. 
Después de varios minutos me fui y para volver a mi casa pasé por un parque toda oscura, no se veía absolutamente nada. Escucho a lo lejos "pibe vení". No le di bola por miedo a que me robara y seguí. Pero la voz me seguía y me decía "frena que no voy a hacerte nada quiero hablar con vos sos muy lindo". La voz era de un hombre, seguí caminando cada vez más rápido pero también cada vez más rápido sentía que me seguía. Me dice "déjame que te la chupe, veni". Por mi cabeza solo pasaba la calentura y el miedo pero en un segundo frené y me di vuelta. Examiné al tipo, no parecía de mal aspecto (en lo poco que alcancé a ver). El hombre se agachó y buscó mi pija que se puso dura al toque. Me la chupó, me masturbó, me decía que estaba rica y linda. Más me excitaba y más me pedía leche. Al cabo de unos minutos acabé adentro de la boca del tipo. 
Me fui y me gustó.