Fuí testigo de como mi esposa me fue infiel con el hijo de mi vecino.
Soy Ernesto y conocí a mi esposa en la preparatoria, ya llevamos 15 años de relación. Yo soy alto 1.85mts, blanco 30 años; mi esposa Inés tiene 31 años y es delgada y baja de 1.63mts, preciosos ojos verdes y cabello negro, era imposible no enamorarse de ella. Vivimos por varios años en un departamento alquilado del centro pero la situación nos obligó a mudarnos a las afueras, fue entonces cuando mi amigo de infancia Paul, me dijo que la casa de al lado estaba a la venta y que debería verla. Fuimos y nos enamoramos de esa casa, pues era de dos pisos y patio amplio.
Paul, quién fue mi mejor amigo de infancia, era de 1.79mts, blanco y algo subido de peso, él estaba soltero y vivía con sus dos hijos, Sarita de 8 y Anthony, un chico de 16 años con una complexión atlética propia de su edad. La esposa los había abandonado por irse con otro tipo. Me pareció apropiado mudarme al lado de él, pues así le hacía compañía y extrañaba mucho los buenos momentos de jóvenes. Éramos muy unidos, incluso nos prestábamos a las chicas… Recuerdo que nos íbamos de fiesta en el carro de mi papá y terminábamos la noche cogiendo con señoritas que apenas conocíamos. Tuvimos una vida muy alocada de jóvenes. Pero ya éramos hombres de 30 años y no teníamos la misma vitalidad de antes.
Nos mudamos a la semana siguiente e Inés estaba muy emocionada, era una casa nueva y un vecindario nuevo, lejos de la bulliciosa ciudad y con mucho más espacio para criar niños, pues ella y yo ya estábamos planeando agrandar la familia. Mientras estábamos bajando las cajas del camión de mudanza, se nos acercó Paul y se ofreció a ayudarnos. No sé porque tuve la sensación de que solo lo hacía por mi esposa, pero nos ayudó con todo.
Desempacamos y esa misma noche compramos varias cajas de cerveza y empezamos a beber… era muy bueno volver a reunirnos y Paul se veía algo solo, pues en el vecindario vivían muchos viejos y casi no tenía amigos. Pasaron las 10pm, las 11pm, las 12md y la 1am y ya yo no aguantaba más. Mi esposa si estaba muy contenta y no paraba de hablar con Paul, en eso llegó Anthony y se nos unió.
¿Qué haces aquí tan tarde hijo?- preguntó Paul.
No tengo sueño y ustedes parecen estar divirtiéndose- Respondió Anthony.
No tengo sueño y ustedes parecen estar divirtiéndose- Respondió Anthony.
Yo ya no aguantaba el cansancio y me dormí en la silla. Dé repente despierto y ya no había nadie al lado mío, la música había parado y mi esposa no estaba. Me preocupé y empecé a buscar por la casa pero no la veía. En eso me dio por cruzar a la casa de mi amigo a ver si estaban allá.
Pero no los lograba ver bien porque estaba dentro de la casa, asique me moví y encontré una ventana que daba directo a ellos y vaya sorpresa me llevé.
Mi esposa estaba totalmente desnuda y ebria en el sofá… Paul estaba haciéndole sexo oral. Al ver esa escena me quedé frio porque jamás pensé que Inés me haría algo así.
Ví como Paul le abría las piernas y lamía muy desesperadamente su coño, como si hubiera estado mucho tiempo sin estar con una mujer… ella, aunque estaba ebria, se retorcía del placer y parecía estar gozándolo.
En eso Paul dice… «Ven hijo, prueba a una verdadera mujer»…. no lo podía creer, Anthony, el hijo de mi mejor amigo se bajaba los pantalones y sacaba una verga peluda que podía ser de 17cm y se la ponía en la boca a mi mujer.
Ella empezó a chupársela descontroladamente.
Chupa perra, chúpalo!- Decía Anthony.
Eso hijo, trátala como lo que es, una perra- Agregó Paul.
En eso, Paul se para y se quita también su pantaloneta y saca a relucir una verga de 19cm, bastante grande y los dos ponen a mamar a mi mejor al mismo tiempo. Yo aún seguía sin creer lo que estaba viendo. Y lo peor es que no me molestaba, y por algún extraño motivo empezaba a tener una erección.
Mi esposa tenía dos vergas en la boca y las chupaba con mucha emoción.
Paul le dijo a Anthony, «cógete el coño de esta perra» y obedeció, fue directo a su vagina, y le pasó la lengua antes de meterlo. El rosaba su glande de adolescente en la vagina de mi esposa, la mujer con la que yo estoy casado.
Primero le metió la cabeza poco a poco y luego de un solo empujón metió sus 17cm en mi mujer.
nés soltó un grito de placer que Paul calló metiéndole la verga en la boca. Anthony para ser un chico de 16 se veía que tenia mucha experiencia pues la embestía salvajemente como un amante experto.
En eso Anthony le dice al papá, «Voy a hacer gritar a estar zorra» y sin mas, metió su verga en el ano de mi mujer… ella se retorcía y no sabia si era dolor o placer. Yo nunca me había cogido a mi mujer por el culo y hoy un chico de 16 lo estaba haciendo. Anthony seguía embistiéndola mientras ella gemía y le chupaba la verga a mi mejor amigo.
Permiso hijo, ahora me toca a mi- Dijo Paul
Su verga era más grande pero su hijo ya había abierto lo suficiente a mi mujer… asique le entró fácilmente. Paul se cogía a mi esposa como un loco y Anthony la había puesto a chupársela de nuevo.
En eso se escuchó una pequeña voz… era Sarita, y le preguntó al papá. ¿Qué hacen? y él le contestó… ¡Cosas de hombres, vete a dormir!.
Se dio la media vuelta y se fue.
No puedo esperar a que crezca- Dijo Anthony refiriéndose a su hermanita.
Yo mismo la voy a estrenar, asique no la mires tanto- Dijo Paul.
Entre tanto seguían cogiéndose a mi esposa y vi como inesperadamente Inés soltó un quejido y sus jugos vaginales empezaron a salir como una cascada. No lo podía creer, ellos habían hecho venir a mi esposa, algo que yo había logrado muy pocas veces en los 15 años que llevábamos juntos.
En eso Paul paró y se la sacó y logré ver lo abierta que habían dejado a mi mujer de tanta verga, fue majestuoso.
Anthony se sentó en el sofá y pusieron mi mujer arriba de él, se la metió por la vagina y eso le dejó cancha libre a Paul de cogérsela por el culo. Yo seguía perplejo, pero bien cachondo, viendo ahora como le hacían una penetración doble a mi mujer.
Para ese momento Inés ya no se quejaba ni hacía ruidos, el alcohol la había dejado ya inconsciente, pero eso no detuvo a Paul, mu mejor amigo y a Anthony, su hijo, de seguir cogiéndosela.
Paul soltó un gran quejido y se la sacó del culo… ví entonces como le habia llenado el culo de leche a mi mujer.
Anthony seguía metiéndosela y también soltó un quejido. El hijo de mi mejor amigo se había venido dentro de mi mujer. La echaron a un lado, como si fuera un trapo sucio y se fueron a bañar.
Luego regresaron la vistieron y la trajeron nuevamente a mi patio dónde estábamos bebiendo desde el principio.
Yo corrí, me acomodé en la silla que estaba y me hice el dormido.
Llegaron y la sentaron en una silla… Paul se acercó a mi y me tocó el hombro.
Ernesto, Ernesto!… te quedaste dormido amigo, ya deberían irse a dormir. Son casi las 4am.
Yo haciéndome el soñoliento le contesté… ¿Me quedé dormido?, ahhh siempre me pasa. No soy tan fiestero como antes.
En eso Paul sonrió y se despidió….
Llevé a mi mujer a nuestra habitación y la desvestí… aun estaba llena de leche de mi amigo y su hijo.
Le hice el amor esa madrugada como nunca en la vida y se lo metí por el culo para probar eso que ya mis vecinos habían probado.
A la mañana siguiente, despertó y se quejó de dolores.
Ernesto!… me cogiste por el culo?- me exclamó
Si mi amor, disculpa, estaba algo borracho anoche- le respondí
Al parecer no recordaba nada de la salvaje culiada que le habían dado. Y yo jamás me borraría de la mente esa semejante imagen de como se cogieron a mi esposa.
Soy Ernesto y conocí a mi esposa en la preparatoria, ya llevamos 15 años de relación. Yo soy alto 1.85mts, blanco 30 años; mi esposa Inés tiene 31 años y es delgada y baja de 1.63mts, preciosos ojos verdes y cabello negro, era imposible no enamorarse de ella. Vivimos por varios años en un departamento alquilado del centro pero la situación nos obligó a mudarnos a las afueras, fue entonces cuando mi amigo de infancia Paul, me dijo que la casa de al lado estaba a la venta y que debería verla. Fuimos y nos enamoramos de esa casa, pues era de dos pisos y patio amplio.
Paul, quién fue mi mejor amigo de infancia, era de 1.79mts, blanco y algo subido de peso, él estaba soltero y vivía con sus dos hijos, Sarita de 8 y Anthony, un chico de 16 años con una complexión atlética propia de su edad. La esposa los había abandonado por irse con otro tipo. Me pareció apropiado mudarme al lado de él, pues así le hacía compañía y extrañaba mucho los buenos momentos de jóvenes. Éramos muy unidos, incluso nos prestábamos a las chicas… Recuerdo que nos íbamos de fiesta en el carro de mi papá y terminábamos la noche cogiendo con señoritas que apenas conocíamos. Tuvimos una vida muy alocada de jóvenes. Pero ya éramos hombres de 30 años y no teníamos la misma vitalidad de antes.
Nos mudamos a la semana siguiente e Inés estaba muy emocionada, era una casa nueva y un vecindario nuevo, lejos de la bulliciosa ciudad y con mucho más espacio para criar niños, pues ella y yo ya estábamos planeando agrandar la familia. Mientras estábamos bajando las cajas del camión de mudanza, se nos acercó Paul y se ofreció a ayudarnos. No sé porque tuve la sensación de que solo lo hacía por mi esposa, pero nos ayudó con todo.
Desempacamos y esa misma noche compramos varias cajas de cerveza y empezamos a beber… era muy bueno volver a reunirnos y Paul se veía algo solo, pues en el vecindario vivían muchos viejos y casi no tenía amigos. Pasaron las 10pm, las 11pm, las 12md y la 1am y ya yo no aguantaba más. Mi esposa si estaba muy contenta y no paraba de hablar con Paul, en eso llegó Anthony y se nos unió.
¿Qué haces aquí tan tarde hijo?- preguntó Paul.
No tengo sueño y ustedes parecen estar divirtiéndose- Respondió Anthony.
No tengo sueño y ustedes parecen estar divirtiéndose- Respondió Anthony.
Yo ya no aguantaba el cansancio y me dormí en la silla. Dé repente despierto y ya no había nadie al lado mío, la música había parado y mi esposa no estaba. Me preocupé y empecé a buscar por la casa pero no la veía. En eso me dio por cruzar a la casa de mi amigo a ver si estaban allá.
Pero no los lograba ver bien porque estaba dentro de la casa, asique me moví y encontré una ventana que daba directo a ellos y vaya sorpresa me llevé.
Mi esposa estaba totalmente desnuda y ebria en el sofá… Paul estaba haciéndole sexo oral. Al ver esa escena me quedé frio porque jamás pensé que Inés me haría algo así.
Ví como Paul le abría las piernas y lamía muy desesperadamente su coño, como si hubiera estado mucho tiempo sin estar con una mujer… ella, aunque estaba ebria, se retorcía del placer y parecía estar gozándolo.
En eso Paul dice… «Ven hijo, prueba a una verdadera mujer»…. no lo podía creer, Anthony, el hijo de mi mejor amigo se bajaba los pantalones y sacaba una verga peluda que podía ser de 17cm y se la ponía en la boca a mi mujer.
Ella empezó a chupársela descontroladamente.
Chupa perra, chúpalo!- Decía Anthony.
Eso hijo, trátala como lo que es, una perra- Agregó Paul.
En eso, Paul se para y se quita también su pantaloneta y saca a relucir una verga de 19cm, bastante grande y los dos ponen a mamar a mi mejor al mismo tiempo. Yo aún seguía sin creer lo que estaba viendo. Y lo peor es que no me molestaba, y por algún extraño motivo empezaba a tener una erección.
Mi esposa tenía dos vergas en la boca y las chupaba con mucha emoción.
Paul le dijo a Anthony, «cógete el coño de esta perra» y obedeció, fue directo a su vagina, y le pasó la lengua antes de meterlo. El rosaba su glande de adolescente en la vagina de mi esposa, la mujer con la que yo estoy casado.
Primero le metió la cabeza poco a poco y luego de un solo empujón metió sus 17cm en mi mujer.
nés soltó un grito de placer que Paul calló metiéndole la verga en la boca. Anthony para ser un chico de 16 se veía que tenia mucha experiencia pues la embestía salvajemente como un amante experto.
En eso Anthony le dice al papá, «Voy a hacer gritar a estar zorra» y sin mas, metió su verga en el ano de mi mujer… ella se retorcía y no sabia si era dolor o placer. Yo nunca me había cogido a mi mujer por el culo y hoy un chico de 16 lo estaba haciendo. Anthony seguía embistiéndola mientras ella gemía y le chupaba la verga a mi mejor amigo.
Permiso hijo, ahora me toca a mi- Dijo Paul
Su verga era más grande pero su hijo ya había abierto lo suficiente a mi mujer… asique le entró fácilmente. Paul se cogía a mi esposa como un loco y Anthony la había puesto a chupársela de nuevo.
En eso se escuchó una pequeña voz… era Sarita, y le preguntó al papá. ¿Qué hacen? y él le contestó… ¡Cosas de hombres, vete a dormir!.
Se dio la media vuelta y se fue.
No puedo esperar a que crezca- Dijo Anthony refiriéndose a su hermanita.
Yo mismo la voy a estrenar, asique no la mires tanto- Dijo Paul.
Entre tanto seguían cogiéndose a mi esposa y vi como inesperadamente Inés soltó un quejido y sus jugos vaginales empezaron a salir como una cascada. No lo podía creer, ellos habían hecho venir a mi esposa, algo que yo había logrado muy pocas veces en los 15 años que llevábamos juntos.
En eso Paul paró y se la sacó y logré ver lo abierta que habían dejado a mi mujer de tanta verga, fue majestuoso.
Anthony se sentó en el sofá y pusieron mi mujer arriba de él, se la metió por la vagina y eso le dejó cancha libre a Paul de cogérsela por el culo. Yo seguía perplejo, pero bien cachondo, viendo ahora como le hacían una penetración doble a mi mujer.
Para ese momento Inés ya no se quejaba ni hacía ruidos, el alcohol la había dejado ya inconsciente, pero eso no detuvo a Paul, mu mejor amigo y a Anthony, su hijo, de seguir cogiéndosela.
Paul soltó un gran quejido y se la sacó del culo… ví entonces como le habia llenado el culo de leche a mi mujer.
Anthony seguía metiéndosela y también soltó un quejido. El hijo de mi mejor amigo se había venido dentro de mi mujer. La echaron a un lado, como si fuera un trapo sucio y se fueron a bañar.
Luego regresaron la vistieron y la trajeron nuevamente a mi patio dónde estábamos bebiendo desde el principio.
Yo corrí, me acomodé en la silla que estaba y me hice el dormido.
Llegaron y la sentaron en una silla… Paul se acercó a mi y me tocó el hombro.
Ernesto, Ernesto!… te quedaste dormido amigo, ya deberían irse a dormir. Son casi las 4am.
Yo haciéndome el soñoliento le contesté… ¿Me quedé dormido?, ahhh siempre me pasa. No soy tan fiestero como antes.
En eso Paul sonrió y se despidió….
Llevé a mi mujer a nuestra habitación y la desvestí… aun estaba llena de leche de mi amigo y su hijo.
Le hice el amor esa madrugada como nunca en la vida y se lo metí por el culo para probar eso que ya mis vecinos habían probado.
A la mañana siguiente, despertó y se quejó de dolores.
Ernesto!… me cogiste por el culo?- me exclamó
Si mi amor, disculpa, estaba algo borracho anoche- le respondí
Al parecer no recordaba nada de la salvaje culiada que le habían dado. Y yo jamás me borraría de la mente esa semejante imagen de como se cogieron a mi esposa.
2 comentarios - Mi esposa infiel con mi mejor amigo y su hijo