You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Un rato en la plaza

Estás sentada en el banco de una plaza disfrutando de los primeros calores primaverales.
Hay mucha gente alrededor y los aparatos para hacer gimnasia que se pusieron de moda, están todos ocupados, las personas se van turnando, mientras uno descansa, el otro hace su serie de ejercicios.
Entre esas personas hay un grupo de jóvenes que tendrán entre 25 y 30 años, que por como lucen sus torsos desnudos, dejan en claro que se ejercitan todo el año, no como la mayoría que se acuerda en Septiembre que se acerca el verano.
Los 3 que forman ese grupo tienen marcados los músculos, y por la privacidad que te da tener puestos los lentes de sol, te permitís mirarlos con bastante atención.
Vos estás casada, y no tenés nada que reprocharle a tú matrimonio, pero, que mal hace dejar volar un poco la imaginación?
Si se presentara la oportunidad, qué te dejarías hacer, que les harías? Siempre tuviste la fantasía de hacer un trío, pero nunca te animaste ni siquiera a planteárselo a tú pareja con convencimiento. Siempre entre risas y forzada porque él te daba el pie, y no te dejaba en paz hasta que admitías tímidamente, que te gustaría, sólo para terminar aclarando que era una fantasía, y que en eso iba a quedar.
Pero ahora estabas sola con tus pensamientos, y estos iban por un camino que te daría vergüenza reconocer en voz alta. Porque te imaginabas rodeada por los 3, sintiendo como sus manos te recorrían, uno se ocupaba de tus pechos, otro de tú cola, otro te acariciaba sin un destino específico.
Tú pareja tenía la costumbre de decirte que le encantaba lo puta que eras en la cama, qué pensaría si en este momento pudiera entrar un segundo en tú cabeza? Si supiera que te imaginás arrodillada, rodeada por los miembros de esos 3 muchachos, chupando, acariciando, oliéndolos.
Qué te diría si pudiera ver la cara de puta que ponés, mientras imaginás que te penetran por todos lados, que te cogen hasta hacerte temblar las piernas, y te acaban sobre el cuerpo, dejándote sucia de semen, oliendo a sexo?
Y en ese momento se te dibuja una sonrisa en la cara, porque sabés bien que te diría:
- Tranquila, disfrutalo, sale con agua.

0 comentarios - Un rato en la plaza