Estaba pensando cuando mi hija nos denunció a mi y a todos los varones de nuestra familia, amigos, allegados, fue reciente que lo hizo y joder que hubo consecuencias...
Ella se desahogó con sus amigas: "entonces, mi papá y mi hermano mayor me han estado preparando" (tenemos una gran diferencia de edad, la verdad es que papá me lo hizo de bastante joven), y todo lo que sé es cómo darles placer y cómo abrir mis piernas, como la buena puta que soy y eso es todo lo que sé.
Hasta que empezó a hablar con sus compañeras de colegio y aquellas la alientan a ir a la policía a pesar de que ella les aseguraba que le gustaba cuando su papá y su hermano mayor la cojían sin piedad y hasta que quedaba inconsciente, así que confiaba en ellos.
De todas formas va la policía y un policía amable comienza a hablarle, preguntándole por su papá y su hermano mayor. Ella no le da importancia mientras le sigue contando cómo a su papá le gustaba darle sus pequeños agujeros a su hermano como regalo de cumpleaños, cómo ambos la inclinaban y le metían sus porongas cuando les daba la gana, cómo no se le permite usar ropa dentro de la casa.
Cómo su papá fue su primer y único hombre hasta que su hermano mayor regresó de la universidad. Cómo después de un tiempo comenzó a abrirse de piernas para los amigos de su papá y a ser usada como moneda corriente para favores y también a cambio de dinero. Cómo le encantaba que le llenaran los agujeros de esperma y cómo su papá le había prometido convertirla en mamá algún día.
Cuando se ofreció revelar al policía a través de una "denuncia testimonial", este se negó cortésmente y le dijo que mejor se fuera a casa, lo que hizo, aunque se sintió un poco decepcionada.
Pero al ir de regreso a su hogar, fue atacada en medio de la calle, le levantaron el vestido, le quitaron sus bragas, le entreabrieron las piernas o semiabiertas le quedaron, con los ojos cerrados a la fuerza por una tela y varios brazos la atacaron. Con una pija que le llenaba muy bien su boca. Sin embargo, no era la de su papá ni la de su hermano, los reconocería fácilmente, las de ellos y/o las familiares, pero gimió de todos modos porque se sentía tan bien.
Alguien se ríe mientras sus caderas se doblan mientras es penetrada contra natura.
"Pequeña puta", era una voz familiar, jadeante y feliz. "Ayer te divertiste burlándote de tu familia, de tu padre, de tu hermano y por defecto, de todos tus allegados, vecinos, amigos y conocidos. Ahora soy yo quien te viola con mis compañeros, ¿no? ¿Vas a gritar lobo, a tocar pito de nuevo en la estación policial o nos vas a dejar como las verdaderas víctimas que somos?"
Gimió más fuerte cuando recordó al policía, tan feliz de estar llenando sus pequeños agujeros, era tan grande y se sentía tan, pero tan bien...
"No eres una víctima, puta. Te encanta que te violen, te encanta que te fuercen con una verga, ¿Y sabes por qué?"
No podía hablar, estaba demasiado desesperada por servir a este hombre, para que se corra dentro de ella...
"Porque sabes lo que es ser un agujero, por debajo del hombre, por debajo de aquellos que son superiores a vos".
"Eres solo una concha, un culo y una boca, ¿no? Solo una funda de poronga para que me corra dentro" Exclamó su atacante
Ella también se corrió porque sabía que tenía razón.
No era nada más que sus agujeros.
Ella se desahogó con sus amigas: "entonces, mi papá y mi hermano mayor me han estado preparando" (tenemos una gran diferencia de edad, la verdad es que papá me lo hizo de bastante joven), y todo lo que sé es cómo darles placer y cómo abrir mis piernas, como la buena puta que soy y eso es todo lo que sé.
Hasta que empezó a hablar con sus compañeras de colegio y aquellas la alientan a ir a la policía a pesar de que ella les aseguraba que le gustaba cuando su papá y su hermano mayor la cojían sin piedad y hasta que quedaba inconsciente, así que confiaba en ellos.
De todas formas va la policía y un policía amable comienza a hablarle, preguntándole por su papá y su hermano mayor. Ella no le da importancia mientras le sigue contando cómo a su papá le gustaba darle sus pequeños agujeros a su hermano como regalo de cumpleaños, cómo ambos la inclinaban y le metían sus porongas cuando les daba la gana, cómo no se le permite usar ropa dentro de la casa.
Cómo su papá fue su primer y único hombre hasta que su hermano mayor regresó de la universidad. Cómo después de un tiempo comenzó a abrirse de piernas para los amigos de su papá y a ser usada como moneda corriente para favores y también a cambio de dinero. Cómo le encantaba que le llenaran los agujeros de esperma y cómo su papá le había prometido convertirla en mamá algún día.
Cuando se ofreció revelar al policía a través de una "denuncia testimonial", este se negó cortésmente y le dijo que mejor se fuera a casa, lo que hizo, aunque se sintió un poco decepcionada.
Pero al ir de regreso a su hogar, fue atacada en medio de la calle, le levantaron el vestido, le quitaron sus bragas, le entreabrieron las piernas o semiabiertas le quedaron, con los ojos cerrados a la fuerza por una tela y varios brazos la atacaron. Con una pija que le llenaba muy bien su boca. Sin embargo, no era la de su papá ni la de su hermano, los reconocería fácilmente, las de ellos y/o las familiares, pero gimió de todos modos porque se sentía tan bien.
Alguien se ríe mientras sus caderas se doblan mientras es penetrada contra natura.
"Pequeña puta", era una voz familiar, jadeante y feliz. "Ayer te divertiste burlándote de tu familia, de tu padre, de tu hermano y por defecto, de todos tus allegados, vecinos, amigos y conocidos. Ahora soy yo quien te viola con mis compañeros, ¿no? ¿Vas a gritar lobo, a tocar pito de nuevo en la estación policial o nos vas a dejar como las verdaderas víctimas que somos?"
Gimió más fuerte cuando recordó al policía, tan feliz de estar llenando sus pequeños agujeros, era tan grande y se sentía tan, pero tan bien...
"No eres una víctima, puta. Te encanta que te violen, te encanta que te fuercen con una verga, ¿Y sabes por qué?"
No podía hablar, estaba demasiado desesperada por servir a este hombre, para que se corra dentro de ella...
"Porque sabes lo que es ser un agujero, por debajo del hombre, por debajo de aquellos que son superiores a vos".
"Eres solo una concha, un culo y una boca, ¿no? Solo una funda de poronga para que me corra dentro" Exclamó su atacante
Ella también se corrió porque sabía que tenía razón.
No era nada más que sus agujeros.
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