Reviviendo el pasado (Porno en pareja)

Buenas, este es mi primer fotorrelato, recomiendo verlo cuando poringa no se caiga y las imágenes carguen, agradezco a todos los que mandan apoyo y a los que dejan puntos siempre, ojalá disfruten.








Con mi esposo no solemos ver porno juntos, pero si lo hacemos de vez en cuando, para ir calentando motores cuando la noche dispone a una noche de pasión. Mi nombre es Karen, soy alta, atractiva de cuerpo, no tengo mucho pecho pero tengo un culazo que lo opacaría de todas formas, llevo 32 años viva. Mi esposo, Rubén, es algo mayor, 37 años y no está nada mal, ni tan gordo ni tan flaco, llevamos un par de años casados, nos conocimos cuando cursaba el último año de enfermería, el era médico mientras hacía mi práctica, ahora que han pasado los años, el sexo se ha vuelto menos frecuente y algo menos intenso que antes pero no es que no lo hagamos, el porno suele ayudar también a veces.

Solemos ver de todo, generalmente porno "normal", vainilla, nada tan fuera de lo común, esta vez mi esposo elegía y puso un compilado de blowjob, deepthroat o algo así.



 




Nada fuera del otro mundo, nada que no haya visto antes, luego comenzaron a salir otro tipo de escenas:







Yo estaba muy mojada, mi esposo se dió cuenta porque ambos nos tocabamos el uno al otro, por lo mismo yo también pude notar lo duro que él estaba.
R: Estás muy mojadita, te gusta esto?
K: Si, un poquito.
R: Un poquito? Linda estás empapada -me estaba tocando muy bien el hdp.
K: Y tu estás muy duro, creo que a ti te calienta más que a mi.
Seguían saliendo escenas obscenas de esa porno, volvimos a ver la pantalla, ahora era casi todo interracial:






R: Estarías con un negro?-me preguntó nerviosamente
K: Quien dice que no lo he hecho?- Le sonreí con malicia y sentí el espasmo de su pene en mi mano
R: De verdad?
K: Si, tuve un ex antes de ti, Mark.
R: Y es cierto lo que dicen?
K: Si te refieres a que todos los negros la tienen grande no creo que sea verdad, solo algunos probablemente.
R: Mark la tenía grande?
K: De verdad quieres saber?-lo miré a los ojos, le seguía haciendo una paja lenta pero potente.
R: Uuuf mierda no lo sé, si, dime.
K: La tenía parecida a la de la escena de ahora.- Miró a la pantalla.



R: mierda, de verdad? no te puedo imaginar con una verga así.
K: jaja yo tampoco podía creerlo en su momento, pero es verdad, aunque te recomiendo que no imagines a tu esposa de esa forma.
R: Demasiado tarde.
K: jaja nooo, te lo estás imaginando?- no pudo responderme, comenzó a jadear y correrse en  mi mano muy fuerte, creo que hace tiempo no se iba tan fuerte.
K: hijo de puta te fuiste mucho.
R: Si, me calentaste mucho, no sabía que habías estado con un negro.
K: Bueno normal, no es algo que vaya cantando al aire.
R: Tendrás que contarme más mañana, ahora vamos a dormir.
K: Tu puedes dormir hdp, te fuiste y me dejaste sin coger, ahora tendrás que esperar que yo me vaya también.
Puse otro video, necesitaba recordar como era follar así.






Empecé a masturbarme muy duro con mi esposo al lado, el solo veia como me tocaba frenéticamente, se escuchaba claramente el sonido de mis fluidos al roce de mis dedos, de vez en cuando veia a mi esposo, me calentaba que viera como me masturbo viendo vergas negras grandes, mi atención se alternaba entre ver el video, mi esposo y las memorias que venian a mi cabeza cuando cerraba los ojos.



Recordar el pasado me tenía al borde del orgasmo, mierda, Mark, que bien cogía, era muy feliz con mi esposo pero había una cosa que era distinta:





Quizás más de una cosa era distinta:





Amo a mi esposo y odio comparar a las personas, pero no podía evitarlo:



De verdad que odio comparar, pero me calienta hacerlo, no me gusta esta parte de mi, pero:



Dicen que el tamaño no importa y normalmente es así pero quien no lo haya experimentado no sabe lo distinto que es, dios ojalá me follara Mark de nuevo, ese pensamiento fue suficiente para que empezara a correrme, al terminar veo que mi esposo también se estaba masturbando.

K: Te estabas pajeando viendome?
R: Si, te veías muy sexy, no pude evitarlo.- Acerqué mi mano hasta él y comencé una paja con buen ritmo, noté que estaba a punto de irse.
K: Ah si? Te estabas pajeando mientras tu esposa se imaginaba una verga negra, eso es un poco de cornudo de mierda no crees?
R: Mieeerda, me voy, me voy linda, me voy, mieeeerda.- Me manchó la mano por segunda vez esa noche.



K: Jajaja, que bueno que lo hayas disfrutado lindo, podemos repetir otro día, ahora si podemos dormir.

Había sido una experiencia extraña, pensé que lo de mi ex lo iba a molestar de alguna forma y aunque él no lo sabía, ese es el tipo de porno que normalmente veo cuando estoy sola, no esperaba que a él le fuera a calentar tanto o más que a mi, me alegraba y tenía ganas de repetir.

Rubén al parecer también quedó con ganas de repetir porque pasados los días llegó con un regalo que disfrutamos en la siguiente sesión y las que vendrían después de esa.






Continuará...