Mi mamá le hace una paja a mi bully.

Desde aquel día, Matias me había dejado de molestar, aunque de vez en cuando me insultaba ya no me agredia físicamente. Esto hacía que me sintiera mas tranquilo, pero saber que esto era gracias al sacrificio de mi mamá me generaba un sentimiento de culpa.



Por su parte, mi mamá continuaba con su rutina de besarse con mi bully, lo hacía casi a diario con algunas excepciones cómo cuándo mi mamá tenía mucho trabajo, también cuando Matias faltaba o había feriados. Yo los espiaba casi todos los días, la cercanía entre ambos cada vez era mas corta y los besos eran mas intensos.



Mama: "Te volviste muy bueno besándo"

Matias: "Todo es gracias a usted. Es muy buena enseñando jaja"



Dejaron de darse pequeños besos a besos largos e intensos. Mi mamá abrazaba a Matias mientras lo besaba, Matias por su parte aprovechaba la diferencia de altura para tocar los pechos de mi mamá por encima de la ropa, a ella no parecía molestarle por lo que Matias la tocaba sin miedo y con mucha confianza.

Cuándo terminaban de besarse mi bully era el primero en irse, mi mamá se quedaba unos momentos mas para que no se sospechara, también se acomodaba la ropa y yo podía ver la sonrisa tonta que tenía sobre la cara, además de sus pechos donde se podía ver sus pezones erectos aun cuándo llevaba el uniforme.


Un día, la profesora nos pidió hacer grupo de dos para realizar una maqueta sobre un volcán. Yo pensaba hacer el trabajo con mi amigo, que también vive cerca de mi casa, estaba por pedirselo cuándo Matias se acerca y me pide que hagamos equipo, no esperaba que me lo pidiera y sintiéndome intimidado no me quedo de otra que aceptar. Obviamente, el trabajo lo haríamos en mi casa.
Le hablé a mi mamá sobre eso, y cuándo le dije que Matias vendría a la casa se rostro cambio y se puso notoriamente nerviosa.

Mamá: "Ah, bueno... parece que ya se llevan mejor, me alegro hijo."

Terminamos de comer en silencio. Nos íbamos a reunir un sábado, le dije que viniera por la tarde y después de terminar de comer alguien toco la puerta.

Mamá: "Seguí comiendo, yo voy"

Mi mamá se ofreció a abrir la puerta. Ella parecía mas entusiasmada que yo, llevaba una vestimenta diferente a otros días, llevaba ropa mas provocativa y podía asumir que no llevaba sostén. Yo me quedé en la mesa, no podía escuchar sus voces por lo que temía de lo que podrían estar haciendo.
Después de unos momentos, mi mamá apareció con mi bully a un lado de ella, estaban bastante juntos y por las expresiones que hacía mi mamá podía asumir que le estaba tocando el culo.

Mi mamá nos dejo solo y comenzamos a hacer el trabajo, prácticamente lo estaba haciendo todo yo y Matias hacía una que otra cosa. Normalmente mi mamá no se aparecería y me dejaría trabajar tranquilo, pero ahora que estaba mi bully, mi mamá se pasaba a cada rato por la cocina y en cada ocasión aprovechaba para agacharse y dejar ver su enorme culo, el cabron de mi bully no disimulaba ni un poco y le miraba todo el ojete, incluso llego a nalguearla pero mi mamá simplemente se río y no le dijo nada.

Nos faltaba material y no tenía en casa, le dije a Matias que fuéramos a comprar pero el me dijo que no quería ir, que yo fuera solo.

Al final termine yendo yo solo, me fastidio un poco pero no me quedaba de otra. Al final el negocio al que quería ir estaba cerrado, termine yendo a otro que estaba un poco mas lejos, cuándo compre todo me asegure de volver rápido a casa.
La puerta estaba abierta por lo que simplemente entre, deje las cosas en la cocina donde hacíamos el proyecto y Matias no se encontraba cerca, pensé que había ido al baño así que fui hasta ahí para asegurarme.

Yo: No esta aquí...

Por curiosidad, me acerqué a la pieza de mi mamá y al querer tocar la puerta pude ver que estaba cerrada, me incline para ver por el agujero de la cerradura y ahí los vi a ambos.

Mi mamá estaba sentada en la cama con las tetas al aire, sus grandes aureolas y pezones erectos eran completamente visibles. Matias descansaba su cabeza sobre el regazo de mi mamá mientras le chupaba las tetas, cómo si quisiera sacarle algo de leche.



Mamá: "¿Te gusta bebé?"

Matias: "Mmh...."

Mi mamá le hablaba como si fuera un bebé mientras le acariciaba la pija con su mano. Matias le chupaba y mordia los pezones, podía ver la expresión de dolor y placer en la cara de mi mamá.

Mamá: "Mmh... así bebé... así..~"

Por cómo hablaba y se expresaba, podía notar que mi mamá estaba disfrutando bastante. Matias parecía disfrutar también ya que su pija estaba cada vez mas grande, mi mamá también le hacía mas rápido la paja.



Mamá: "Estas bien duro bebé... ¿Te pusiste asi por mami?"

Después de unos momentos, Matias termino por correrse y dejando salir mucha leche. Mi mamá se llevo la mano a la boca para limpiar el resto de semen que le había quedado, el resto había caído sobre el abdomen de Matias.
Parecía que habían terminado, mi bully estaba satisfecho con la paja que mi mamá le había echó, el se levanto y mi mamá le limpió el semen que tenía. Yo me fui de ahí volviendo a la cocina.

No podía creer que mi mamá había echo eso, después de un rato Matias volvió a la cocina y se veía muy contento.

Me dio la excusa de que había ido al baño, claramente era una mentira. Terminamos el proyecto y el se fue a su casa, se despidió de mi mamá y ella hizo lo mismo, yo trate de fingir que no sabía nada.