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Compendio II
😅
¡Hola a todos!
Mi mejor amigo me pidió si podía escribir yo sobre nuestro segundo trío, porque él tiene que hacer unos informes para su trabajo.
😒
“Si quieres, te aprovecho de enseñar a ocupar el generador de imágenes. A lo mejor, eso te entretiene más.”
Así que, con eso, me convenció.
😍
Pues bueno.
Para el día de la madre, la pasamos súper con Emma.
Pero ahora, igual como que era riesgoso hacerlo para el décimo cumpleaños de las gemelas.
:/
Así que una noche, mientras me hacía la colita, me explicó su plan.
😩 😲
Mi mejor amigo me estaba dando súper duro por la cola, mientras me describía la profesora pechugona de Bastián, lo que me recontra prendió un mundo.
Él ya llevaba un ritmo increíble cuando me culeaba y yo sentía que su enorme cosa estaba a punto de explotar en cualquier momento.
😋
Le pedí que me diera más duro todavía, porque la idea de volver a compartirlo me prendía caleta.
“¡Vamos! ¡Más duro! ¡Más duro! ¡Rómpeme el culo, mi amor!” le gritaba a mi esposo tan emputecida, que él quería que le bajara el volumen, porque le preocupaba que nos pillaran nuestras hijas.
😅
La cosa fue que me dejé ir con la culeada de mi vida, porque encontré que la estaba pasando mejor que las noches que yo me masturbaba con mi huevito vibrador y me metía el consolador por el trasero, que siempre me dejaba con ganas de más, porque no daba la talla de mi mejor amigo.
😫 😖
Y mientras me masajeaba como loca la pepita, le dije a mi marido:
“¡Ay, mi amor! ¡No aguanto más! ¡Vente adentro, porfa! ¡Lléname la colita con tu leche, por favor!”
😵 😲
En esos momentos, sentía un tremendo morbo de lo que íbamos a hacer. Era algo que nunca habíamos hecho antes.
Pero mi mejor amigo sabe ponerme archi recontra caliente.
😖😲
“¿Estás segura,ruiseñor?” Me pidió todavía con voz tierna, aunque sintiera que me estaba recontra llenando los intestinos con su cosa enorme.
“¡Sí! ¡Dámela toda!” Le imploré caliente hasta la médula.
Y mi chico se vino en mí por litros, sujetándome la cintura recontra fuerte.
💦 💦 💦 💦
Yo gemía, lloraba y me palpitaban los ojos, sintiendo cómo mi mejor amigo me llenaba y rellenaba con sus tiros ardientes de semen.
Después de descansar un poquito, mi mejor amigo sacó su enorme cosa hinchada y me acarició la colita, mientras que yo sentía sus juguitos escurrir calientes de mí.
Para entonces, ya me había convencido con la idea de hacer el trío en la fiesta de las niñas.
😈
Era morboso, riesgoso…
Pero mi mejor amigo me aseguró que era posible.
Y si algo he aprendido de él en estos años de casada y ser su amiga, es confiar ciegamente en él.
😍 😍
Mi única demanda, eso sí, fue que mi mejor amigo me volviera a romper la cola…
Algo que alegremente, me complació.
XD
😩 😲 😩 😲
Empecé a gemir súper fuerte, porque mi esposo me estaba dando con toda la furia.
Mientras tanto, yo me masturbaba intensamente la conchita hasta que me bajó el feroz orgasmo. Yo gritaba, gemía y me sacudía entera, mientras su delicioso pene se enterraba enterito en mi colita.
😵 😲 😵 😲
¡Lo amé tanto, tanto, tanto!
Porque me puso en modo putita a mil por ciento.
XD
Pero ya, el resto de la semana, la pasamos súper.
Porque como se tira a una de las mamis de las compañeras de Bastián por las mañanas, a la profe pechugona por las tardes y a mí, me da duro por las noches, recapitulando todo, me anda trayendo fresca como lechuga.
😆
Y el plan de mi mejor amigo era súper inteligente.
Porque para que funcionara todo, la clave era que los niños se tenían que cansar, para que no nos interrumpieran mientras la pasábamos bien.
Así que, por eso, arrendó varios castillos inflables, limpió súper bien la piscina y ajustó el sistema de sonido a la tele.
😮
Pero el gran problema es que las gemelas no son muy sociables, por el Asperger de mi pequeña señorita, así que no se juntan mucho con sus compañeros de curso.
😕
Por lo que mi mejor amigo, súper capo, se le ocurrió hablarle a Bastiáncito para pedirle si “nos prestaba a sus amigas” para la fiesta de cumpleaños, algo que el chiquitito hizo con gusto.
;)
Así que imagínense cómo estaba yo: por fin, conocería a todas las putitas que se come mi marido en el colegio.
😈
El día de la fiesta, todos teníamos claro qué hacer.
Yo me quedé ordenando las decoraciones afuera y recibiendo a los invitados.
La mamá de Bastiáncito y la “enorme y sexy yegua” de su pareja se quedaron ordenando adentro de la casa.
Y mi mejor amigo, en la cocina, preparando las cositas ricas para comer.
😍
La primera invitada en llegar fue la “putita refinada”, esposa del consejero del alcalde.
0_0
O sea, imagínense mi cara, cuando veo una mina que parece salida de pasarela de modelos, con un pelo intenso color negro, incluso mejor cuidado que el que tenía Lizzie, enmarcándole la cara perfectamente; unos labios esponjosos, pintados en carmesí intenso, y unos ojazos color café oscuro súper coquetos.
😱
Y eso que no les cuento del cuello para abajo todavía.
0o0
O sea, para sus 32 años, la mina se gasta sus buenas tetas naturales: El vestido negro y escotado se las demarcaba recontra clarito. Pero el vestido le quedaba tan ajustado, que se le marcaba toda la cintura y revelaba un tremendo culazo redondo, que, para más remate todavía, le destacaba sus piernas largas y entonadas.
😳
Y la hijita, igual de linda que la mamá…
“¡Hola, Isabella! ¡Es un gusto de conocerte! Mi nombre es Marisol. Soy la esposa del padre de Bastián.¡Por favor, ponte a gusto!” le pedí yo súper educada.
Ella me miró de pies a cabeza, como midiéndome…
😰
“Los niños la están pasando bien en el castillo inflable. Mi marido me dijo que eras dueña de casa y que estás casada con el consejero del alcalde. ¡Qué impresionante!” Le dije, tratando de sacarle conversa.
A su chiquitita se le encendieron los ojos cuando dije del castillo inflable, pero su mamá no la soltaba todavía.
“¡Sí, gracias por invitarnos!” Me respondió, dándome la mano al fin con una sonrisa falsa. “Y sí, estoy casada con el consejero del alcalde. Es un hombre muy ocupado y por eso, no pudo venir hoy. ¿Dónde está tu esposo?”
Aunque la mina era un carajo como mujer, sentí en el pecho un tremendo orgullo, súper feliz que mi marido fuera capaz de cogerse a una mujeraza tan bonita como ella.
😤
“Él está adentro, preparando los bocadillos. ¿Te puedo ofrecer algo para comer o para beber?” Le ofrecí.
A la muy puta, se le encendió la sonrisa cuando le dije que mi mejor amigo estaba adentro…
“Una copa de vino blanco me caería bien, ¡Gracias!” me respondió, por fin soltando a su chiquitita, que salió disparada a los juegos.
😓
“¡Uy, creo que no tenemos! Pero por favor, acompáñame a la cocina. Mi esposo debe saber si hay o no.” Le dije, sintiendo mi pepita palpitar.
A ella, se le iluminaron más los ojos y la sonrisa, al saber que vería a mi esposo…
😈
Pero cuando llegamos, mi marido le dejó claro que no teníamos tragos, porque la fiesta estaba pensada para niños, algo que no le borró la sonrisa, porque se quedaría acompañándolo a solas…
Pero bueno, yo sabía que no iba a pasar nada con ella, de todas formas.
😆
Cuando volví a salir, me llevé otra increíble sorpresa…
0o0
Afuera, una mujer despampanante miraba a todos lados, toda confundida.
😍
Lo que más me encantó fue su vestido.
Era un vestido escotado de una pieza color verde, que contrastaba excelentemente con el color de su piel y le destacaba su figura imponente de reloj de arena, además de llamar la atención a sus pechos perfectos, que se veían rellenitos y redondos. Por debajo, la falda les llegaba hasta encima de las rodillas, revelando unas piernas bien formadas y unos tacones con puro estilo.
“¡Hola, Aisha! ¡Mi nombre es Marisol! ¡Qué gusto es conocerte! ¡Te ves despampanante esta tarde!” Le saludé, al verla tan confundida. “Y esta niñita debe ser Sophie, ¿No? Mi marido me ha hablado mucho de ustedes.
😟
Aunque pensé que sería igual de pesadita que la anterior, la verdad es que es una mujer muy simpática, porque me respondió cordial a mi saludo, mirándome con unos cautivadores ojos verdes, sonriéndome con unos labios carnosos y coquetos, una piel morena increíble y sexy y todo esto, enmarcado por su moderno corte de pelo rubio.
Pero su figura curvilínea se destacaba caleta por su delgada cintura y generosas caderas, acentuando su enorme pechera y unas nalgas voluptuosas.
😳
“¡Hola, Marisol!¡Muchas gracias! Eres muy amable. Y sí, esta es mi linda hija, Sophie.” Me respondió con una voz bastante agradable y cálida.
La niñita, preciosa como la mamá, me saludó con una reverencia.
0o0
“¡Muchas gracias, señora! Su jardín se ve muy lindo.” Me dijo la niñita.
Yo, obvio que orgullosa por mi cerezo…
😤
“¿Te puedo ayudar?” Me preguntó Aisha, muy servicial.
:D
Y la conversación la llevamos súper bien. Hablamos de la familia, de nuestros pasatiempos y de nuestros trabajos. De verdad, sentí que le caí bien y nos sentíamos cómodas la una con la otra…
Hasta que llegó la cuarta invitada…
😍
Mi corazón se paró cuando la vi llegar.
Mis mejillas se encendieron terriblemente, recordando todos esos momentos placenteros de la semana anterior.
Traté de no mirarla, pretendiendo que andaba ocupada, porque sentía que perdería el hilo de la conversación…
Pero mi corazón palpitaba como loco cuando se acercó a nosotros.
💞
Se veía muy linda. Sus preciosos ojitos color castaños brillaban también de la emoción, mientras que sus mejillas delgadas y rosas y sus labios carnosos sonrosados me contagiaba con su sonrisa preciosa.
Su cabellera rubia, en cola de caballo, caía pasando los hombros, destacando su linda figura. Iba vestida con una humilde falda de mezclilla que le envolvía su cintura y una blusa blanca que se acomodaba perfectamente sobre sus lindísimos pechos, cubriéndose del frío con una chaqueta rosada súper delgada.
Mientras que Karen me saludaba, Aisha miró a su amiga cordialmente. Aunque las 2 tenían su propio cuento con mi esposo, podía ver que había un respeto entre ellas.
Pero ver a Emma ahí, en medio de la celebración, me llenó de una alegría tremenda.
“Hola, Emma. Qué bueno es volver a verte.” Le dije, abrazándola fuertemente, sintiendo sus blanditos pechos chocar con los míos y luchar con todas mis fuerzas por besarla en la mejilla y no en sus labios.
😍
“Hola, Marisol. ¿Cómo estás? También te he extrañado mucho.” Me respondió, oliendo mi piel mientras nos abrazábamos.
😊
Estaba igual de colorada que yo…
(Capaz que igual de mojadita por abajo XD)
Y tratamos de llevar una conversación normal, para disimular frente a Aisha.
😅
Pero a ratos, Emma y yo nos quedábamos mirando, con nuestros pensamientos perdidos en esa apasionada noche que compartimos la semana pasada y la ansiedad de volver a repetirla luego…
Hasta que llegó la “guinda de la torta” …
😳
Mi marido no me había mentido cuando me dijo lo bonita que era.
Ver a esa voluptuosa mujer me impresionó terriblemente, con su piel blanquecina como la leche brillando gentilmente bajo el sol otoñal; sus cabellos rizados le caían como una cascada pelirroja torrentosa, resaltando su bonita cara. Usaba unos lentes elegantes, que le daban un aire intelectual a su apariencia encantadora.
Pero eran sus amplios pechos que se destacaban por sobre todo bajo esa blusa blanca, exponiendo una cantidad generosa de escote y disimulando su atención con un chaleco de lana que la protegía del frío. Por abajo, una falda color crema hasta las rodillas le complementaba su cintura levemente más delgada que la mía (Jacintito me hace comer muchas galletas… XD), cubriendo su colita regordeta.
Me sentí instantáneamente atraída a ella, porque al igual que yo, compartimos la profesión de la docencia, y estaba ansiosa de poder hablar con ella por primera vez.
“¡Cheryl!” Le llamé, tratando de calmar mi ansiedad. “¡Qué bueno es finalmente conocerte! Mi nombre es Marisol, mi esposo me habló mucho, mucho, mucho de ti y tenía que venir y presentarme ante ti.”
Le ofrecí mi mano, con una sonrisa que me desbordaba la cara…
Y ella me devolvió con el mismo gesto.
“¡Me da tanto gusto en conocerte, Marisol!” Me respondió en una voz suave y melodiosa. “He escuchado tantas cosas maravillosas de ti conversando con tu esposo.”
😍
Les prometo que sentí una atracción mutua entre nosotros…
O sea, las 2 sabíamos que esa noche, sí o sí, la pasaríamos juntas, porque para ella, sería el “trío de práctica” antes de meterse con su mejor amiga y mi marido.
Pero no por eso, ninguna de las 2 nos aguantábamos las ganas de lo que nos esperaba esa increíble noche.
😉
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1 comentarios - De profesora a profesora… (I)
Espero pronto su desarrollo