Cartas de un admirador parte 2

Ya ha pasado un mes desde que no he recibido ninguna carta de mi admirador, he llegado ha creer que podría ser mi jefe, por qué justamente hace un mes salió de viaje fuera del país y no he sabido nada de el, justo estoy pensando en eso cuando mi teléfono celular suena sacándome de mi maravilloso sueño, son mis compañeros de trabajo que me están esperando para ir a tomarnos unos tragos a un nuevo bar que acaban de inagurar, tomo mis cosas y me marcho, no sin antes mirar por última vez la oficina de mi jefe ausente. Ya llevamos como 4 horas en este bar que al parecer es de lujo, la verdad me encuentro al tome de alcoholizada, pero se me quita un poco lo borracha cuando el mesero llega y me entrega una nota doblada, está escrita en una servilleta de color rojo, mi corazón y siento me cara sonrojarse, comienzo ha leer la nota,- creo que no eres una niña muy bien portada así que tendré que castigarte por verte tan sensual, quisiera matar a esos que se te acercaron he invitaron ha bailar, esos que pusieron tu mano en tu cintura y que con todo el descaro del mundo la comenzaron ha deslizar ha tu trasero, leer eso de alguna forma me ha puesto muy excitada, así que mejor me decido mar, salgo de aquel bar con tanta dificultad por tanta gente que hay en el lugar, cuando por fin pude salir, pero de un momento ha otro me topo con una dura y suave pared, cuando levanto mi rostro puedo ver ha mi guapo y 5 años más joven de mi jefe el cual me mira con cara de casi juraría celos, cuando bajo mi vista a dónde el miraba me doy cuenta que hoy vengo demasiado descubierta y no puedo evitar sonrojarme

Quiero darle una explicación pero el no me lo permite cuando soy casi arrastrada hasta su auto, el desconsiderado maneja como loco, cuando estoy por bajar me doy cuenta que estamos en su departamento, estoy por marcharme cuando esté me carga cuál saco de papas, subimos al elevador, para este punto me doy cuenta de que mi jefe comenzó ha acariciar mi trasero quiero bajarme y decirle algo cuando abre la puerta de su departamento y me arroja contra el sillón y comenzar ha quitarse la corbata, el saco y desabotona su camisa, este se sienta y con un ágil movimiento y sin que reaccione me encuentro recostada en sus piernas, comienza ha subir mi falda dejándole ha su vista y alcance mi trasero,

Siento que mis mejillas son tos jitomates, entonces es cuando todo empeoró, pude sentir como la palma de su mano es adorada en mi nalga derecha, pude sentir mucho dolor, yo creo que hasta su mano se marco en mi trasero, acto seguido la comienza ha acariciar, me comienzo ha excitar cuando otra vez su mano vuelve ha impactar con esa misma fuerza pero ahora el dolor no es igual, es menor y la vuelve ha a acariciar, este aco lo realiza como por 15 minutos, ya no es dolor lo que siento es placer, mis reniegos de dolor son remplazados por gemidos y jadeos de placer, mis pezones están duros, rígidos, firmes y excitados, y mis muslos están bañados por mis fluidos vaginales, ahora me levanta de sus piernas y me coloca en una silla, no me da tiempo de reaccionar cuando la encuentro mis manos a espaldas de la silla y mis piernas abiertas de par en par, el se inca inclina su rostro puedo sentir la respiración en mi vagina, haciendo que la excitación aumente aún más, re retira un poco y desliza sutilmente su dedo índice y medio, por la tela húmeda que cubre mi vagina, este acto hace que mi espalda se arquee y mi boca emita un largo suspiro.