El caso es que la promesa de chupada que me hizo Lili no se pudo cumplir porque no encontramos lugar en el tugurio, se hacía tarde y volvían sonrientes de la pista mi Euge con el Adrián.
Pedimos un trago para despedirnos, Lili me susurró que la llamara el martes que quería cumplir lo que prometió, los terminamos y con Euge nos fuimos, ella con una sonrisa que mostraba lo bien que lo había pasado con Adrián.
Lo que pasó entre ese momento y la llamada de Lili (a final ella me llamó...) no tuvo mayor importancia .
Me pidió que fuera a un depto que yo no conocía a la siete de la tarde ("tengo que cumplir la promesa"),que fuera puntual, y que en todo momento la llamara Natalia...
Cuando llegué al sitio donde me había convocado (un departamento muy discreto, contrafrente en alguno de los edificios de la ciudad), me encontré con una situación absolutamente surrealista, muy de principios del siglo XX: mi amiga vestida con muchísima elegancia, pero dominante, autoritaria, como una madama, y tres "babes" treintañeras, (como mi Euge), mostrando muchísima piel y montadas en tacos de vértigo, pareciendo pupilas de un burdel, pero a la vez sugiriendo educación, distinción, calidad, nivel...
Me presentó a las chicas como Martina (para que se las representen con pelo castaño, apenas pasando los hombros), Luciana (otra castaña, con unos ojos deslumbrantes, grises...) y Silvana, rubiecita también de pelo largo.
Una vez presentadas las chicas, nos encerramos en la habitación, donde arrancó "Natalia"
-¿Que tal la mercadería? Todas maestras, mamás, y muyyyy putas, menos Silvana, que recién está empezando. Hoy vuelve a su casa por primera vez en su vida cogida en un solo día por tres o cuatro tipos.Es su auténtico debut, aunque ella ya se crea puta. Le va a doler todo...y pronto Euge va a estar con ellas.... hacete a la idea.
Después se arrodilló, me pidió que en todo momento la tratara de Nati o de puta, me sacó la pija y la saludó con un "hola mi amor, podés hacerme lo que quieras", que después super era la frase de cabecera del negocio.
Y empezó a chuparme como nunca me lo habían hecho...
Pedimos un trago para despedirnos, Lili me susurró que la llamara el martes que quería cumplir lo que prometió, los terminamos y con Euge nos fuimos, ella con una sonrisa que mostraba lo bien que lo había pasado con Adrián.
Lo que pasó entre ese momento y la llamada de Lili (a final ella me llamó...) no tuvo mayor importancia .
Me pidió que fuera a un depto que yo no conocía a la siete de la tarde ("tengo que cumplir la promesa"),que fuera puntual, y que en todo momento la llamara Natalia...
Cuando llegué al sitio donde me había convocado (un departamento muy discreto, contrafrente en alguno de los edificios de la ciudad), me encontré con una situación absolutamente surrealista, muy de principios del siglo XX: mi amiga vestida con muchísima elegancia, pero dominante, autoritaria, como una madama, y tres "babes" treintañeras, (como mi Euge), mostrando muchísima piel y montadas en tacos de vértigo, pareciendo pupilas de un burdel, pero a la vez sugiriendo educación, distinción, calidad, nivel...
Me presentó a las chicas como Martina (para que se las representen con pelo castaño, apenas pasando los hombros), Luciana (otra castaña, con unos ojos deslumbrantes, grises...) y Silvana, rubiecita también de pelo largo.
Una vez presentadas las chicas, nos encerramos en la habitación, donde arrancó "Natalia"
-¿Que tal la mercadería? Todas maestras, mamás, y muyyyy putas, menos Silvana, que recién está empezando. Hoy vuelve a su casa por primera vez en su vida cogida en un solo día por tres o cuatro tipos.Es su auténtico debut, aunque ella ya se crea puta. Le va a doler todo...y pronto Euge va a estar con ellas.... hacete a la idea.
Después se arrodilló, me pidió que en todo momento la tratara de Nati o de puta, me sacó la pija y la saludó con un "hola mi amor, podés hacerme lo que quieras", que después super era la frase de cabecera del negocio.
Y empezó a chuparme como nunca me lo habían hecho...
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