Conocí a Jessica hace mas de 10 años cuando era compañera de prepa de mi hermana, yo soy mayor que ella por 3 años y siempre la vi re linda y sexy pero hasta ahí. El tiempo pasó y ambos salimos a estudiar a diferentes ciudades, por mas de 10 años no volví a saber de ella, hasta que ya casado regresé a la pequeña ciudad donde crecí, ahora con dos hijos y esposa. El reencuentro con Jessi fue casual, al llevar a mi hijo mayor al jardín de niños vi que ella era maestra en ese lugar, nos reconocimos al instante y me dió un abrazo muy efusivo, mas de lo que yo esperaba pues nunca fuimos tan cercanos, a penas y conocidos, me saqué mucho de onda pero tampoco le di importancia y todo continuó normal.
Unos meses después se organizó un día de actividades para los niños en un campo bastante grande, el sol y las actividades fueron agotadoras, yo como siempre iba solo, pues mi esposa es muy antisocial y ademas padece de ansiedad, ella es feliz en casa sin salir ni asomar la nariz siquiera al mundo. El caso es que casi al final de la jornada con los niños, me encontré con Jessi y nos sentamos a platicar, todo era bastante básico como lo cansados que estábamos o el clima del día, hasta que ella dijo: mataría por un trago! a lo que yo le contesté que yo traía algo de mezcal en una licorera, ella volteó a verme con cara de pícara y me dijo que lo sacara. Yo corrí al carro haciendo changuitos para encontrar el mezcal porque no estaba 100% seguro de traerlo, gracias al destino lo encontré y compartimos casi a escondidas unos buenos tragos, cuando se terminó se levantó y me dijo: me hiciste el día, te debo un favorsote mientras me tocaba la mejilla. Todo cambió desde ese día, pues cada vez que la veía en la escuela ella me sonreía y de vez en cuando me guiñaba el ojo, un día yo estaba muy cerca de ella y en cuanto me vió tan cerca se sonrojó y casi grita, me dio mucha risa y a ella también pero nos aguantamos por obvias razones.
Así pasó el resto del ciclo escolar y cuando llegó la graduación yo fui contratado para tomar fotos de los alumnos graduados ya que me dedico a hacer fotografía, la naturaleza del evento me hizo estar arriba del teatro y fue ahí cuando pude notar de cerca el hermoso cuerpo de Jessi, ella iba muy bien arreglada con un vestido muy entallado pero nada vulgar, pude apreciar sus hermosas piernas durante largo rato pues la estatura de los enanos me hacía estar en cuclillas para lograr buenas tomas. Casi por terminar el evento yo estaba muy concentrado admirando las piernas de Jessi, creí que estaba siendo cuidadoso pero ella alcanzó a notar que la veía, me puse algo nervioso pero ella se sonrió delicadamente. Al terminar el evento me despedí de los directivos y cuando ya iba saliendo por uno de los jardines escucho una voz llamándome, era Jessi que me decía adiós desde lejos, me regresé para despedirme de ella y antes de que yo pudiera decir una palabra, ella me dijo: te caché viéndome, no puedes ser mas discreto? Le pedí una disculpa y me justifiqué con un piropo por lo bien que se veía. Hubo un silencio incomodo y ella me dijo: van a ser unas vacaciones largas sin verte. Luego nos podemos encontrar por ahí, le dije. Menso si yo vivo en Santa Clara (un pueblito a media hora de distancia). Ah pues si un día me doy una escapada puede que te vea, le contesté. Vas a necesitar mi número del cel. me dijo sonriendo, intercambiamos teléfonos y nos despedimos muy tranquilos.
Duré varios días sin dejar de pensar en ella, al principio no dejaba de ver sus fotos de facebook, después vinieron las pajas y por último me decidí a ir. Antes de salir rumbo a su pueblo le escribí que andaba haciendo unas fotos por sus rumbos (mentira) y que si ella andaba con tiempo, me contestó que si y salí volado para allá, me pasó la ubicación de su casa y al llegar ella salió rápido y se subió de una al auto. Me dijo por donde conducir y llegamos a un mirador con parking, eran como las 4 pm y había algo de gente rondando por ahí. Le dije que desde la clausura no dejaba de pensar en lo hermosa y buena que se veía a lo que ella contestó: no es necesario ese cortejo para que pase algo entre nosotros, yo tengo novio, pero tu y yo gustamos y si eso es razón suficiente para ti podemos comernos con mucha discreción. Le contaste a alguien sobre el mezcal del campamento? me preguntó, por supuesto que no, le dije con seguridad. ya vez? en donde cabe un secreto puede caber cualquier cosa. Inmediatamente nos besamos primero tranquilamente, pero en pocos minutos se puso mas intenso el ambiente, al tratar de meterle mano me la detuvo y quitándose me dijo, mejor conduce. Llegamos a un motel de paso y en unos minutos ya estábamos besándonos y fajando intenso, después vino esta conversación:
ella: aprovecha, porque de esto no hay todos los días, si tienes una fantasía es el momento.
yo: tu tienes alguna? (entendí que era lo que ella estaba buscando)
-si pero no estoy lista
-si no me la dices es improbable que se te cumpla
-ni siquiera se la he dicho a mi novio
-con justa razón, a el lo ves todo el tiempo y tal vez la pena te detenga, lo que pase aqui se queda aqui, se guardar secretos, recuerdas?
-jajaja ok pero me da mucha pena
-ahora tengo mucha curiosidad
-siempre he fantaseado con orinar a alguien.
Yo me quedé helado y no quise demostrar mi asombro, comencé a desvestirla y a besarla por todos lados, "hoy es tu día de suerte" le dije al oido y pude sentir como se le enchinaba la piel, la llevé de la mano y nos metimos al baño, me senté en el inodoro y le dije que sentara encima de mi dandome la espalda, comencé a tocarle los pecho y la conchita que ya tenía muy húmeda. "oriname! le dije y soltó un gemido que no pudo controlar, al volver a tocarle las tetas pude sentir que sus pezones estaban muy duros y supe que ibamos por buen camino. Pude sentir que estaba muy tensa y pasaban los minutos y no pasaba nada, ante el pánico de que se cancelara la misión le jale el cabello hacia atrás y le dije con voz firme: oriname pendeja, es una orden! y le rasguñe los muslos con una intensidad media, ella comenzó a mover la cadera muy cachonda y en cuanto le toqué la concha comenzó a orinar lentamente, después se convirtió en un buen chorro potente que podía tocar y sentir tibio, comencé a esparcir sus orines por sus piernas y abdomen y ella ya gemía sin control. Cuando terminó me susurró: cógeme cabrón! nos levantamos y pide ver su cara completamente extasiada, sus ojos entrecerrados daban señal que estaba valiendo la pena cada segundo que pasaba. La llevé a la cama y la tiré boca arriba, le comencé a lamer los pies llenos de meados y se arqueó de placer, subí por sus muslos con mordiditas inofensivas y pude sentir como le temblaban las piernas y me ella jalandose el cabello me dijo, cógeme por favor, ya no aguanto más. Le levanté las piernas y la penetré sin consideración, estaba hirviendo por dentro, no pude controlar el ritmo de las embestidas y teníamos una velocidad increible y constante, sentí que me venía y se la saqué sin avisar, la voltee y le dije que parara el culo, le puse una almohada en la panza y sin mas le comencé a lamer la concha que estaba hecha un mar de fluidos, le abrí las nalgas y al verle el ano tal olvidado no dudé en darle una lamida con chupetón incluido, ella lanzó un grito tremendo, agarró otra almohada para taparse la cara y gemir a gusto. Le di la mejor comida de cola que haya hecho yo en mi vida, después me incorporé y la volví a penetrar en esa posición, le pasé mi brazo por el cuello y comencé a darle lentamente mientras le daba besos muy tiernos en la mejilla, volvió la velocidad y a los pocos minutos paró el culo y se quedó inmovil, unos gemidos descontrolados y ya como de animal fueron la señal de que el orgasmo estaba cerca, no paré de bombear ya agarrandole la cola con las manos, sentí como de nuevo la piel se le ponia chinita y un grito final ya casi con llanto inundó el lugar, me vine dentro de ella sin que me importara nada ya (tengo vasectomía) la nalguee varias veces y pude ver como sus nalgas se tornaban coloradas. Estuvimos tendidos por mucho tiempo, me dijo a penas susurrando que era lo que siempre había soñado, nos besamos por una hora aproximadamente, nos bañamos y nos fuimos. No duramos mucho tiempo en el auto, sabíamos que aquello era solo sexo y nada mas, bueno en este caso, algo de locura también.
Unos meses después se organizó un día de actividades para los niños en un campo bastante grande, el sol y las actividades fueron agotadoras, yo como siempre iba solo, pues mi esposa es muy antisocial y ademas padece de ansiedad, ella es feliz en casa sin salir ni asomar la nariz siquiera al mundo. El caso es que casi al final de la jornada con los niños, me encontré con Jessi y nos sentamos a platicar, todo era bastante básico como lo cansados que estábamos o el clima del día, hasta que ella dijo: mataría por un trago! a lo que yo le contesté que yo traía algo de mezcal en una licorera, ella volteó a verme con cara de pícara y me dijo que lo sacara. Yo corrí al carro haciendo changuitos para encontrar el mezcal porque no estaba 100% seguro de traerlo, gracias al destino lo encontré y compartimos casi a escondidas unos buenos tragos, cuando se terminó se levantó y me dijo: me hiciste el día, te debo un favorsote mientras me tocaba la mejilla. Todo cambió desde ese día, pues cada vez que la veía en la escuela ella me sonreía y de vez en cuando me guiñaba el ojo, un día yo estaba muy cerca de ella y en cuanto me vió tan cerca se sonrojó y casi grita, me dio mucha risa y a ella también pero nos aguantamos por obvias razones.
Así pasó el resto del ciclo escolar y cuando llegó la graduación yo fui contratado para tomar fotos de los alumnos graduados ya que me dedico a hacer fotografía, la naturaleza del evento me hizo estar arriba del teatro y fue ahí cuando pude notar de cerca el hermoso cuerpo de Jessi, ella iba muy bien arreglada con un vestido muy entallado pero nada vulgar, pude apreciar sus hermosas piernas durante largo rato pues la estatura de los enanos me hacía estar en cuclillas para lograr buenas tomas. Casi por terminar el evento yo estaba muy concentrado admirando las piernas de Jessi, creí que estaba siendo cuidadoso pero ella alcanzó a notar que la veía, me puse algo nervioso pero ella se sonrió delicadamente. Al terminar el evento me despedí de los directivos y cuando ya iba saliendo por uno de los jardines escucho una voz llamándome, era Jessi que me decía adiós desde lejos, me regresé para despedirme de ella y antes de que yo pudiera decir una palabra, ella me dijo: te caché viéndome, no puedes ser mas discreto? Le pedí una disculpa y me justifiqué con un piropo por lo bien que se veía. Hubo un silencio incomodo y ella me dijo: van a ser unas vacaciones largas sin verte. Luego nos podemos encontrar por ahí, le dije. Menso si yo vivo en Santa Clara (un pueblito a media hora de distancia). Ah pues si un día me doy una escapada puede que te vea, le contesté. Vas a necesitar mi número del cel. me dijo sonriendo, intercambiamos teléfonos y nos despedimos muy tranquilos.
Duré varios días sin dejar de pensar en ella, al principio no dejaba de ver sus fotos de facebook, después vinieron las pajas y por último me decidí a ir. Antes de salir rumbo a su pueblo le escribí que andaba haciendo unas fotos por sus rumbos (mentira) y que si ella andaba con tiempo, me contestó que si y salí volado para allá, me pasó la ubicación de su casa y al llegar ella salió rápido y se subió de una al auto. Me dijo por donde conducir y llegamos a un mirador con parking, eran como las 4 pm y había algo de gente rondando por ahí. Le dije que desde la clausura no dejaba de pensar en lo hermosa y buena que se veía a lo que ella contestó: no es necesario ese cortejo para que pase algo entre nosotros, yo tengo novio, pero tu y yo gustamos y si eso es razón suficiente para ti podemos comernos con mucha discreción. Le contaste a alguien sobre el mezcal del campamento? me preguntó, por supuesto que no, le dije con seguridad. ya vez? en donde cabe un secreto puede caber cualquier cosa. Inmediatamente nos besamos primero tranquilamente, pero en pocos minutos se puso mas intenso el ambiente, al tratar de meterle mano me la detuvo y quitándose me dijo, mejor conduce. Llegamos a un motel de paso y en unos minutos ya estábamos besándonos y fajando intenso, después vino esta conversación:
ella: aprovecha, porque de esto no hay todos los días, si tienes una fantasía es el momento.
yo: tu tienes alguna? (entendí que era lo que ella estaba buscando)
-si pero no estoy lista
-si no me la dices es improbable que se te cumpla
-ni siquiera se la he dicho a mi novio
-con justa razón, a el lo ves todo el tiempo y tal vez la pena te detenga, lo que pase aqui se queda aqui, se guardar secretos, recuerdas?
-jajaja ok pero me da mucha pena
-ahora tengo mucha curiosidad
-siempre he fantaseado con orinar a alguien.
Yo me quedé helado y no quise demostrar mi asombro, comencé a desvestirla y a besarla por todos lados, "hoy es tu día de suerte" le dije al oido y pude sentir como se le enchinaba la piel, la llevé de la mano y nos metimos al baño, me senté en el inodoro y le dije que sentara encima de mi dandome la espalda, comencé a tocarle los pecho y la conchita que ya tenía muy húmeda. "oriname! le dije y soltó un gemido que no pudo controlar, al volver a tocarle las tetas pude sentir que sus pezones estaban muy duros y supe que ibamos por buen camino. Pude sentir que estaba muy tensa y pasaban los minutos y no pasaba nada, ante el pánico de que se cancelara la misión le jale el cabello hacia atrás y le dije con voz firme: oriname pendeja, es una orden! y le rasguñe los muslos con una intensidad media, ella comenzó a mover la cadera muy cachonda y en cuanto le toqué la concha comenzó a orinar lentamente, después se convirtió en un buen chorro potente que podía tocar y sentir tibio, comencé a esparcir sus orines por sus piernas y abdomen y ella ya gemía sin control. Cuando terminó me susurró: cógeme cabrón! nos levantamos y pide ver su cara completamente extasiada, sus ojos entrecerrados daban señal que estaba valiendo la pena cada segundo que pasaba. La llevé a la cama y la tiré boca arriba, le comencé a lamer los pies llenos de meados y se arqueó de placer, subí por sus muslos con mordiditas inofensivas y pude sentir como le temblaban las piernas y me ella jalandose el cabello me dijo, cógeme por favor, ya no aguanto más. Le levanté las piernas y la penetré sin consideración, estaba hirviendo por dentro, no pude controlar el ritmo de las embestidas y teníamos una velocidad increible y constante, sentí que me venía y se la saqué sin avisar, la voltee y le dije que parara el culo, le puse una almohada en la panza y sin mas le comencé a lamer la concha que estaba hecha un mar de fluidos, le abrí las nalgas y al verle el ano tal olvidado no dudé en darle una lamida con chupetón incluido, ella lanzó un grito tremendo, agarró otra almohada para taparse la cara y gemir a gusto. Le di la mejor comida de cola que haya hecho yo en mi vida, después me incorporé y la volví a penetrar en esa posición, le pasé mi brazo por el cuello y comencé a darle lentamente mientras le daba besos muy tiernos en la mejilla, volvió la velocidad y a los pocos minutos paró el culo y se quedó inmovil, unos gemidos descontrolados y ya como de animal fueron la señal de que el orgasmo estaba cerca, no paré de bombear ya agarrandole la cola con las manos, sentí como de nuevo la piel se le ponia chinita y un grito final ya casi con llanto inundó el lugar, me vine dentro de ella sin que me importara nada ya (tengo vasectomía) la nalguee varias veces y pude ver como sus nalgas se tornaban coloradas. Estuvimos tendidos por mucho tiempo, me dijo a penas susurrando que era lo que siempre había soñado, nos besamos por una hora aproximadamente, nos bañamos y nos fuimos. No duramos mucho tiempo en el auto, sabíamos que aquello era solo sexo y nada mas, bueno en este caso, algo de locura también.
1 comentarios - Jessi la fetiche P1